(Zenit/InfoCatólica) Falta solamente el reconocimiento de uno de estos milagros por los médicos de la Congregación de la Causa de los Santos, para que el pontífice polaco sea elevado a los altares.
«Los tiempos pueden ser muy breves», aseguró el cardenal, que precisó haber tenido las informaciones hace algunos meses, cuando «en mérito a las curaciones científicamente inexplicables», atribuibles a la intercesión del papa, la Congregación vaticana estaba estudiando unos tres o cuatro «para evaluar el más sólido y poder conformarse mejor a los criterios de juicio·.
«Las curaciones –dijo– son evaluadas por una junta de siete médicos, miembros de un organismo científico interno, más bien severo, que tienen la tarea de examinar cada detalles. Son tan rígidos y meticulosos que por ejemplo, prefieren no pronunciarse si una enfermedad fue curada con terapias que en casos similares se mostraron efectivas».
«Los siete médicos de la junta tienen que estar de acuerdo en que se trata de un hecho inexplicable desde el punto de vista humano y científico». Es justamente el equipo médico quien decide si se trata de un milagro o menos, afirmó Re.
Una vez obtenido el placet, debe decidir la Comisión de los cardenales y obispos, que juzga »solamente si el milagro fue obtenido por la intercesión» del candidato a la gloria de los altares. Después se necesita la aprobación definitiva del Papa, y entonces «se puede proceder enseguida definiendo la fecha y el período más adecuado» dijo.