(SIC) La presidenta de Manos Unidas, Myriam García Abrisqueta, ha dado a conocer las líneas básicas de esta campaña y ha hecho un recorrido por los acontecimientos del año 2011, marcado por la crisis económica y el recorte en los fondos públicos destinados a la cooperación, que puede dar al traste con muchos de los avances conseguidos en los últimos años.
Además, ha presentado hoy su Campaña LIII, “La salud derecho de todos: ¡Actúa!”, en la que trabajará para reclamar, y dar a conocer entre la sociedad española, la lucha contra el Sida, la malaria y otras enfermedades. Además, ha hecho referencia a la emergencia alimentaria que se extiende por África y a la situación de Haití, dos años después del terremoto. Se apuntan algunos de los puntos principales del discurso de Myriam García Abrisqueta.
Crisis económica
- La crisis económica y financiera que afecta al mundo occidental, ha llevado a muchos países a recortar en partidas presupuestarias que a muchos deben parecer superfluas, pero de las que depende la vida de millones de personas.
- La crisis mundial afecta con mayor crudeza a los más desfavorecidos.
- Los pobres, los de aquí y los de allá, no pueden ser las víctimas de nuestros consumos desmedidos, de nuestros excesos financieros, de nuestras faltas de previsión, de regulación o de acción; no pueden ser víctimas de las ganancias fáciles y de la falta de valores.
Reducción de la Ayuda Oficial al Desarrollo
- Pedimos a las instituciones públicas que mantengan sus compromisos en esta materia, buscando otras alternativas de ahorro para superar la actual coyuntura económica del país.
- Esta crisis no puede ser una excusa para eludir nuestra responsabilidad y compromiso con los más pobres de la tierra y con los que sufren a causa de la injusticia de la falta de oportunidades.
- La AOD española debe destinarse exclusivamente a la erradicación de la pobreza y no estar condicionada por otros intereses económicos o geoestratégicos.
Resultados económicos provisionales de 2011
- Los ingresos totales ascendieron a 51,7 millones de euros, de los cuales un 82% procede del sector privado, que ha tenido un leve incremento del 0,7% comparado con el año 2010.
- Los fondos provenientes del sector público (Cooperación descentralizada: diputaciones, ayuntamientos y comunidades autónomas y AECID, el 18% del total) recibidos por Manos Unidas, los que han descendido un 14,5% por ciento.
Socios y colaboradores
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La base social (90.515 socios en 2011) está, según reflejan estos datos, muy consolidada lo que permite, a pesar de los malos tiempos, que mantengamos una estabilidad económica y un ritmo de trabajo constante.
Haití
- Manos Unidas, desde 2010, ha apoyado en el país caribeño proyectos por importe de 5.110.701 euros, de los cuales parte han salido de los fondos propios de la organización.
- De los 4.600 millones de dólares prometidos por las naciones donantes en 2010 y 2011, sólo se ha entregado un 43 por ciento. Así es muy difícil que el país salga adelante.
Cuerno de África
- No dejamos de preguntarnos cómo es posible que gobiernos y organismos internacionales no actúen antes en situaciones previsibles y prevenibles.
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Hasta el momento, se han mandado ya 928.506 euros, repartidos en dieciocho proyectos de emergencia: Somalia (7); Etiopía (9) y Kenia (2).
La campaña de Manos Unidas en 2012
En cuanto a la campaña del año 2012, la presidenta de Manos Unidas señaló que ésta no va a incidir sólo en el Sida o la malaria, que siguen causando millones de muertos cada año, sino también en otras muchas enfermedades, como la tuberculosis u otras de origen tropical, que afectan a 1.000 millones de personas en el mundo.
Manos Unidas va a luchar contra esos males y contra la pobreza y la falta de recursos básicos, que llevan a la muerte a millones de personas, porque el derecho a la salud, recogido y proclamado hasta la saciedad por la declaración de los Derechos del Hombre, y por constituciones y cartas magnas, no puede ni debe ser sólo un derecho para los países más ricos. El derecho a vivir es inherente al ser humano, sea cual sea su situación social, nacionalidad o lugar de residencia.
Seguiremos trabajando por lograr un cambio en la situación de desamparo en la que se encuentran millones de personas, porque el ser humano nos importa.
Seble Balcha
La presidenta de Manos Unidas cedió, posteriormente, la palabra a la doctora Seble Balcha. Médico etíope, que se licenció en Medicina en Cuba, en 1994 y que, en mayo de 2008, empezó a trabajar en diferentes departamentos del Hospital General Rural de Gambo, donde, además, coordina los cursos de Medicina Tropical.
La doctora Balcha hizo una presentación del Hospital de Gambo que se mantiene gracias a la ayuda de organizaciones internacionales como Manos Unidas y se detuvo a explicar las carencias a las que debe hacer frente este centro hospitalario que atiende a diario a unas 300 pacientes llegados de numerosas localidades de los alrededores. Gambo es el único hospital de referencia para unas 95.000 personas y debe superar cada día dificultades como los cortes de luz, la falta de acceso a las telecomunicaciones, o lo reducido de su plantilla médica.
Además, la médico etíope enumeró las enfermedades más comunes que se atienden en Gambo (tuberculosis, enfermedades respiratorias, malaria, malnutrición…) e hizo notar que la pobreza, la distancia y la falta de educación, muchas veces llevan a que estos enfermos lleguen al hospital con la enfermedad tan avanzada que es casi imposible hacer algo por ello.
Alicia Vacas
La misionera Alicia Vacas, enfermera, que desde octubre de 2008, trabaja con comunidades beduinas en el desierto de Judea, colaborando en proyectos de desarrollo de y autoafirmación de los campamentos beduinos y como voluntaria con la organización israelí Médicos por los Derechos Humanos, denunció el desamparo en que se encuentra parte de la población en Cisjordania, donde no es la pobreza la que impide la población acceder a su derecho a la sanidad, sino otros condicionantes de carácter político, social, económico y cultural.
Los impedimentos que para el desplazamiento de la población supone el muro, los controles, las zanjas, los cortes en las carreteras…, para un enfermo de las comunidades con las que trabaja la hermana Vacas son cuestión de vida o muerte. La emergencia para un enfermo en Cisjordania no existe, asegura. Los trámites para atender en un hospital de Israel a los casos que se consideran urgentes, pueden tardar entre 4 ó 5 días.
Además, la misionera comboniana se refirió al centro sanitario en el que colabora, junto a la organización israelí Médicos por los Derechos Humanos, que ha recibido el apoyo de Manos Unidas, y en el que reciben inmigrantes procedentes, sobre todo, de Eritrea y Sudán, que narran el calvario que supone caer en manos de las redes de traficantes de personas en el desierto del Sinaí (tortura, violaciones…).