Los pastorcitos de Fátima
Se ha escrito mucho sobre Fátima, muchas veces bien y otras no tanto. Todo en consonancia con la multitud de fieles que tiene esta devoción mariana, entre los que me encuentro. Se cuentan por millones el número de devotos que visitan cada año el Santuario de Nuestra Señora del Rosario en Fátima. Y este libro, Los pastorcitos de Fátima, de Manuel F. Silva, sacerdote portugués, que ahora publica la editorial San Román tiene una serie de características que le hacen muy recomendable.
En primer lugar, y la más importante, era el libro preferido de Sor Lucia. Esto es lo que cuenta su autor: “Cuando se publicó la primera edición de Pastorinhos de Fátima, envié un ejemplar a Sor Lucia al Carmelo de Coímbra. El provincial de los Carmelitas, y confesor del Carmelo de Coímbra, Fray Pedro Ferreira, me dijo que existen fotografías en las que se ve a Sor Lucia leyendo el libro. Como objeto personal de Sor Lucia fue recogido por el Tribunal, al abrirse el proceso canónico de beatificación y canonización, como así lo exige la norma. Queriendo conservar este recuerdo, la priora manifestó el deseo de tener un nuevo ejemplar del libro, que le fue enviado de inmediato. Al envío del nuevo ejemplar contestó con una carta, de la que extraigo el párrafo siguiente:
«Sor Lucia no escribió notas en el libro, pero lo leyó varias veces y dijo que era el que más se ajustaba a la verdad. Como siempre lo tuvo en su celda, quisimos que estuviera en la réplica de la celda que se hizo en el Memorial de Sor Lucia y por eso nos quedamos con él en la biblioteca de la comunidad. Y, una vez más, quedo muy agradecida por el regalo».
En segundo lugar, es un libro que se centra en la principal de lo ocurrido en 1917; es decir, transmite fielmente el mensaje de Fátima. Con un estilo sencillo el autor, utilizando los textos más importante, entre ellos todos los escritos de Lucia, transmite lo que la Virgen dijo, quiso y quiere, que se puede resumir en estas tres palabras: oración, penitencia y conversión.
Y en tercer lugar, y no es el menor de sus méritos, el autor ha impregnado cada una de sus páginas con el relato de la vida santa de los tres Pastorcitos, de manera que los hojas de este libro palpitan santidad en estado químicamente puro, porque en el interior de estas tres criaturas no había historia, solo alma y Espíritu Santo, al que fueron heroicamente dóciles, lo que en más de un relato emociona hasta ponernos un nudo en la garganta. Sí, el Cielo eligió a estos tres niños para transmitirnos un mensaje a todos los cristianos, pero la Señora del Cielo quería que nos trasladaran este mensaje no como meros pregoneros, sino que nos trasmitieran ese mensaje avalado con el ejemplo de sus vidas, que es el de todo imposible que dejen indiferentes al lector.
Javier Paredes
14 comentarios
Y me pareció muy oportuna la recopilación de algunos testimonios -neutros y objetivos, sin excitación religiosa alguna- de algunos testigos acerca del gran milagro del sol del 13 de Octubre de 1.917.
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