Las ventajas de tener una Confraternidad de Madres Cristianas en la parroquia
El 1 de mayo de 1850, Louise Josson de Bilhem, la mujer de un oficial de la corte francesa, fundó la Confraternidad de Madres Cristianas (una organización católica) [enlace en inglés], que obtuvo la aprobación de obispos y se ha extendido por todo el mundo. Hoy en día existen seis Archiconfraternidades de Madres Cristianas en Paris (Francia), Roma (Italia), Regensburg o Ratisbona (Alemania), Cracovia (Polonia), Einsiedeln (Suiza) y Pittsburgh (EE.UU.).
A pesar de haber participado en actividades parroquiales a lo largo de los años, he sido muy reticente a unirme a organizaciones parroquiales y nunca lo había hecho, quizá por la frecuencia con la que me he estado mudando, quizá por tardar en discernir si esa fuera la Voluntad del Señor. Pero, cuando se reestableció una Confraternidad de Madres Cristianas el año pasado en una parroquia local, decidí unirme y no me arrepiento nada de haberlo hecho. Todo lo contrario, recomiendo de todo corazón que se establezcan más Confraternidades de Madres Cristianas por todo el mundo.