(251-c) El aborto es diabólico
–Hoy, 28 de diciembre, recordamos en la liturgia la matanza de las Santos Inocentes.
–Una matanza continuada hoy por medio de la legalización del aborto, que lo multiplica enormemente.
El diablo es mentiroso y homicida. Así lo afirma Jesús en una predicación a los judíos. Viendo la hostilidad con que le escuchan, hace en público esta declaración: «¿Por qué no reconocéis mi lenguaje? Porque no podéis escuchar mi palabra. Vosotros sois de vuestro padre el diablo y queréis cumplir los deseos de vuestro padre. Él es homicida desde el principio y no se mantuvo en la verdad porque no hay verdad en él. Cuando dice la mentira, habla de lo suyo, porque es mentiroso y padre de la mentira» (Jn 8,43-44).
El diablo en el aborto miente y mata.
El diablo miente primero. A todos los hombres, gobiernos, partidos políticos, intelectuales, legisladores, que en mayor o menor grado están bajo su influjo, les hace creer y difundir diversas mentiras. El aborto es un derecho de la mujer. Un derecho inalienable, que el Estado debe asegurar y financiar en su ejercicio. La mujer tiene derecho a disponer de su propio cuerpo, y ese derecho incluye el de abortar. El ente concebido en el seno de la mujer es un ser viviente, pero no consta que sea un ser humano. La ley moral cristiana está vigente para los cristianos, pero no puede imponerse a toda una nación, en la que muchos no son cristianos. Una ley abortista es aceptable si es menos permisiva que otra peor, antes vigente o establecida en otras naciones. El aborto es una exigencia de la paz social. Y no puede ser evitado por una mejora en la atención a la mujer embarazada, ni tampoco por una facilitación legal de la adopción. Ante el daño fisico o psicológico que puede en determinadas circunstancias sufrir una mujer a causa de su embarazo, su derecho a la salud ha de prevalecer sobre el derecho que el feto tiene a vivir, a que no lo maten.
El diablo mata después. La mentira hace legal y moralmente lícito el homicidio. En España, a partir de la ley abortista de 1985 hasta la ley de 2010, se produjeron 1.600.000 abortos legales, que en el 97% de los casos eran justificados por el daño psicológico previsible en la madre –mejor dicho, en la mujer–. En 2001, en números redondos, los abortos anuales eran ya 70.000. Y la cifra fue aumentando en los años siguientes: 2002 (77.000), 2003 (80.000), 2004 (85.000), 2005 (92.000), 2006 (102.000), 2007 (112.000), 2008 (115.000), 2009 (111.000), 2010 (113.000). En la ley de 2010 se declara «el derecho al aborto», y ya los abortos no son exigidos por riesgo de la salud de la mujer, sino que en un 90% de los casos, por simple petición suya: es un derecho, asegurado y financiado por el Estado. Los abortos en 2011 son (118.000) y en 2012 (112.000). Y hay que hacer notar que en todos estos años las cifras han sido similares cuando al frente del Gobierno nacional o de las diversas Autonomías estaban políticos socialistas o populares. Por otra parte, la generalización de la píldora postcoital y de otros modos abortistas similares va haciendo prácticamente imposible la contabilización estadística de los abortos.
La ley abortista proyectada para 2014 vuelve a permitir el aborto ante el riesgo físico o psicológico de la mujer. Siendo este supuesto en un 97% de los casos el «justificante» durante muchos años de esa enorme cifra de abortos en la nación, todo hace pensar que la matanza de los inocentes continuará más o menos igual en los próximos años. Las autoridades políticas que entonces hubieran podido evitar un fraude de ley que era evidente y habitual –certificados falsos de médicos deshonestos–, no lo hicieron. Y como son ellos mismos los que habrán de aplicar la ley abortista de 2014, lo más probable es que tampoco ahora evitarán el fraude de ley, y seguirá la matanza. No es éste «un juicio temerario». Ya sabemos lo que de ellos se puede esperar.
Toda ley abortista, sea de plazos o de supuestos, es diabólica, porque es mentirosa y homicida, ya que autoriza el homicidio en el aborto. Dios nuestro Señor, Creador de los hombres y del universo, ordena: «no matarás». Y el diablo, enemigo del Creador y de la creación, dice al hombre: «sabe Dios que el día que comáis de él [del árbol prohibido por Dios] se os abrirán los ojos, y seréis como Dios en el conocimiento del bien y del mal». Es decir, vosotros mismos decidiréis qué es lo bueno y qué lo malo (Gén 3,5).
El diablo, enemigo del hombre, es mentiroso y homicida, y lleva a la muerte y al infierno. Jesucristo, el Salvador del hombre, es la verdad y la vida, y lleva a la vida y al cielo.
José María Iraburu, sacerdote
Índice de Reforma o apostasía
34 comentarios
A algunos en la Iglesia no les entra eso en la cabeza. Y por eso aplauden lo que no se puede aplaudir. Es penoso.
Lo que voy a decir ya lo sabemos todos, pero los católicos no podemos conformarnos con un cambio de la ley, si no un cambio en las conciencias y las personas. Jesús nos envió a cambiar el mundo, no las leyes. A eso debemos aspirar, a cambiar el mundo.
A seguir argumentando, manifestarnos y por supuesto y lo más importante, seguir orando, "sin mi, nada podéis".
Nada de cambios legislativos, los cristianos queremos la salvación de las almas, esa es nuestra misión a la que somos llamados y a la que no tenemos que renunciar.
Feliz Navidad y Feliz Año Nuevo.
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JMI.-Bueno, se entiende. Jesús nos envió al mundo a cambiar los espíritus, pero también las leyes, en lo posible, claro, haciendo leyes justas y benéficas.
El "progreso" material, el "confort", la tecnología y todo eso tan visible, que despierta tanto "optimismo", no es lo esencial de una civilización.
Lo esencial de esta civilización es su corrupción moral, manifestada de mil modos, y de manera particularmente diabólica en el asesinato del aborto.
Por eso sabemos que esta "generación perversa" tiene sus días contados.
Porque Dios existe.
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JMI.-"La maldad da muerte al malvado" (Salmo 33,22).
Los que promueven el aborto, no son capaces en realidad, de amputarse las manos o los pies, o arrancarse los ojos, deberían pensarlo, porque es eso y mucho más los destrozos que comenten a los no nacidos, los destrozan, y ahí anda el diablo, para que hagan lo que quieran, ¿qué hacen con los rectos destrozados del no nacido?
Los que pretenden el aborto, ¿será porque no han experimentado la amargura del aborto? /////////////////////////////////// EDITADO
A las mujeres, la sociedad laicista, son engañadas de tal forma, que quedan convencidas, las víctimas, que el aborto es un derecho, pero en realidad, no existe tal derecho. Es un derecho, que miles de víctimas fueran a campos de experimentación nazi.
Las consecuencias salen luego, y lo cuentan las mismas personas que un día defendieron el aborto, y llegaron a abortar, noches sin dormir, oyen el llanto de la criatura destrozada, enfermedades físicas y hasta morales, se dice, que ha habido quien se ha suicidado. Pero esto no deben saberlo nadie, según el deseo de los mal intencionados.
Las personas deberían saber escuchar a Santa Madre Iglesia Católica, ya que hay mucha ganancia saludable en todos los sentidos.
Desde los políticos que hacen la ley,los médicos y el resto de los servicios sanitarios que la ejecutan,el Juez que no condena, el fiscal que no persigue, el periodista que justifica...etc...etc hasta cada uno de los ciudadanos de un país que hacen como que "no ven" o "no saben" hay graves responsabilidades morales.Unos pecan por acción, otros por omisión, muchos, la mayoría, incluso entre los que nos llamamos católicos pecamos por silencio. Supongo que la responsabilidad individual es imposible establecerla.
Posiblemente esa responsabilidad, sobre todo en la parte de abajo del sistema se atenúa mucho:
Miedos a perder empleo por denunciar las malas prácticas de Jefes, otras muchas veces, porque la misma ley criminal no da tregua o deja poco margen a la objección de conciencia o a buscar salidas que dejen a salvo la misma:
Pienso en el Juez : No puede en ningún estado de Derecho objetar en la aplicación de la ley o condenar lo que no condena la ley. El fiscal o la policia no puede perseguir lo que la ley impide perseguir. Así la ley permite actuar duramente contra el "robaperas" y apenas deja margen para actuar contra la maquinaria criminal abortista.
La objección de conciencia es admisible en ciertos casos, pero cada vez está más limitada.
Desde el que mira a otro lado en silencio, hasta el jefe del Estado que firma y sanciona hay graves responsabilidades objetivas.
¿Qué puedo hacer yo contra este holocausto legalizado?
"¿Qué hiciste tú frente a estos crímenes horrendos?"
Terrible pregunta que nos podrá hacer el Juez supremo el día del juicio.
Es muy dificil no dejarse llevar por el asfixiante ambiente paganizado y criminal de alrededor y caer, a veces, en el silencio, otras en la desesperanza,otras en el egoismo ...etc
Cuando el crimen, lo antinatural y el vicio ha pasado a ser la virtud, lo permitido e incluso lo obligado y por otro lado, actuar de una manera natural y en la virtud te convierte en sospechoso y puede poner en peligro el pan de los hijos, la promoción profesional, o incluso, la libertad, lo mas sencillo es callar y mirar hacia otro lado.
Esa es mi duda ¿Qué puedo hacer yo, ciudadano de a pie, Juez, político, médico, sanitario, sacerdote, profesor,...etc para no poner en peligro mi salvación en un asunto, como el holocausto del aborto, que desde mi punto de vista es tan gravísimo (basta mirar las abrumadoras cifras de la muerte)?
Gloria in excelsis Deo
Toda ley tiene una carga pedagógica inherente. Por eso, si tenemos la posibilidad de acabar con leyes malas, hagámoslo. Es una tarea de los seglares, evidentemente, pero los pastores deben animar y apoyar a las opciones políticas que se dedican a tan necesario fin.
Hago una propuesta de rezar un rosario cada 28 de Diciembre por los niños abortados, por los niños no nacidos, especialmente por los que quieren abortar, por las madres que "deciden" el mal, para que decidan el bien, por que la sociedad tome conciencia de la perversidad del aborto y de que es absolutamente inadmisible.
Digo un rosario, aparte del que o de los que cada cual rece cada día.
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JMI.-Y otro rosario por las mujeres que abortan y por cuantos/as les inducen o ayudan o realizan el aborto.
Un compañero espera su tercer¡¡ hijo :
Comentarios reales (diabólicos) de una oficina cualquiera:
"tiene a su mujer como una coneja"
" no sabran lo que son los condones"
"yo con el primero me hice ya la vasectomía"
"ya nos va a j.. el cuadrante otra vez con los días de paternidad"
"Este no sabe lo que hace"
"Que se j.. y no se queje si no llega a fin de mes"
"Ahora toca pagarle de mi nomina los descuentos en los viajes"
"Que aborte"
"Serán del Opus"
"te acompaño en el sentimiento"
"Se le acabó la vida"
"este se cree el Urdangarín"
...etc...etc
La sangría demográfica y el problema del aborto es sólo un problema de leyes y políticos?
El diablo ha hecho su trabajo excelentemente.
(Recordemos que el diablo,perdió la gracia, pero no la inteligencia angelical)
Gloria in excelsis Deo
Hace unos dos años vi en tv al periodista Alfonso Rojo, que no es católico (que yo sepa), decir que lo que estamos haciendo con aborto lo acabaremos pagando caro toda la sociedad. Y es que es patente para cualquier persona, creyente o no, que el aborto es el asesinato de un ser humano y que esta carnicería constante destruirá nuestra sociedad, a parte de las vidas y amas que se deja por el camino.
"Ésa ya no figura más como "Casada", ahora tiene ESTADO CIVIL : Embarazada"
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JMI.-Efectivamente, lo que dice usted es muy simple.
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JMI.-En muchos pecados que cometemos la culpa se reparte entre NOSOTROS mismos y el AMBIENTE que nos rodea (familia, presiones, exigencias, seducción, amenaza, etc.). Y lo mismo le pasa a la mujer que aborta. Cada caso es diferente: unos mujeres podrán tener mucha CULPA personal; otras serán más bien VÍCTIMAS de presiones de la familia, del que las embarazó, etc.
En mi artículo no entro en esta repartición de culpas, cuánto le toca a la mujer, cuánto al novio o esposo, cuánto a los padres, cuanto a las vecinas, etc. En cada caso es diferente. Hay casos en que la mujer aborta rechazando los consejos de su familia y todos los medios de ayuda que se le ofrecen: quiere abortar y aborta. Y hay casos (más frecuentes) en que el consejo, la exigencia, del varón gestante, de la familia, el desamparo social-laboral, un cúmulo de circunstancias gravemente adversas le empuja al aborto. Todos los casos son distintos. Y en todos los casos el aborto es "un crimen abominable" (Vaticano II), diabólico. Un homicidio.
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JMI.-Evangelizar, comunicar a la gente "un corazón nuevo", es lo principal, por supuesto. A eso justamente nos dedicamos los curas. Pero ignorar que las leyes buenas favorece mucho el bien y las leyes criminales favorecen mucho el mal es un grueso error. El aborto se ha multiplicado por 100 cuando las leyes y el Estado, financiándolo, lo han facilitado. Ése es un dato. Un dato real. No es ideología.
SI! ! O TAL VEZ, temen algunos ser COMPLICES DE ESTE OMICIDIO? ? ?
Hmm m. . ESTO SI QUE DUELE HE? ? ?
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JMI.-No se preocupe. Nos preguntamos eso y más cosas todavía.
No creo que haya habido nunca una sociedad tan perversa en que desde los mismos gobiernos se dicten "leyes" que faciliten y aprueben el crimen contra los más inocentes.
Es una sociedad endemoniada y abyecta la que promulga tales leyes.
El demonio es hoy en día y más que nunca el príncipe de este mundo.
Un saludo muy afectuoso Padre.
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JMI.-Sí, pero ojo. A Cristo le ha sido dato "todo poder en el cielo y en la tierra", y como decimos (¿creyéndolo?) a cada rato: "VIVE Y REINA por los siglos de los siglos. Amén".
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JMI.-En el mismo InfoCatólica hay muchos estudios sobre el tema. Arriba a la derecha, en la portada, en la ventanita de búsqueda, ponga ABORTO y le saldrán montón de artículos.
No deberían olvidar estos católicos que, aunque no seamos de este mundo estamos en este mundo hasta que Dios nos llame. Quedarse mirando las cosas que pasen y atender al llamado, por ejemplo, "voto útil" porque viene la izquierda o algo parecido no va a ninguna parte. No va a ninguna parte porque con esta supuesta "derecha" que ahora gobierna en España las cosas no es que vayan a seguir igual sino que irán a peor porque muchos se conformarán como si lo hecho ahora con el aborto fuera lo mejor que se puede hacer cuando lo mejor habría sido hacer desaparecer, de raíz, cualquiera legislación abortiva.
Y el Diablo, Satanás, Satán, como sabemos, es el Príncipe de este mundo y a muchos les gusta tanto el mundo como el Principe...
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JMI.-Sí, pero ojo. A Cristo le ha sido dato "todo poder en el cielo y en la tierra", y como decimos (¿creyéndolo?) a cada rato: "VIVE Y REINA por los siglos de los siglos. Amén".
Aquí no tose nadie sin permiso de nuestro Señor Jesucristo. No hay en el mundo un gramo más de mal de lo que Él, en su gobierno providente como Rey, permite. Y todo el bien que hay en el mundo, mucho, todo procede de Él, de su influjo, de su gracia, que ilumina y mueve a los buenos, haciendo posible que sean buenos.
Y a estas alturas de la película, confío en muy pocas personas, por no decir que en nadie, ¡que más quisiera yo!, pero tengo por norma creer a mi Santa Madre Iglesia. Por eso lo de llamar al demonio príncipe de este mundo. Pero como en usted confío plenamente, estaré dispuesta con todo gusto a cambiar de opinión.
Un saludo afectuoso y que Dios lo bendiga.
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JMI.-San Juan: "El mundo entero está puesto bajo el Maligno" (1Jn 5,19), que es quien influye en todos los malos del mundo: "quien comete pecado ése es del diablo" (1Jn 3,8); es el "príncipe de este mundo" (Jn 12,31; 14,30; 16,11). San Pablo: "es el dios de este mundo" (2Cor 4,4).
Es "el Enemigo" que siembra cizaña en el trigo del campo del Señor en este mundo. Pero aunque su poder sea tan grande, infinitamente mayor es de Dios omniponente y providente. No puede hacer más mal que lo que Dios permita, que lo que Cristo Rey permita, en vista a bienes mayores (Rm 8,28).
Cuando Cristo vuelva en gloria y majestad y poder irresistible, todo quedará finalmente sujeto a Él, y por Él a Dios.
El aborto es un asesinato con agravantes:
-Los padres matan a sus hijos.
-Lo hacen cuando éstos están en una indefensión absoluta.
-Lo hacen cuando más les necesitan.
-Lo hacen sabiendo que no van a arrostrar consecuencias penales.
-Lo hacen sin tener que ver el resultado de su crimen.
-Médicos, enfermeros, empresarios,accionistas...se lucran con la matanza.
Y eso de que "siempre lo ha habido"... claro, y siempre asesinatos y violaciones, y por ahora nadie pide que se legalicen. El día que se legalice el infanticidio o la pederastia (no me parece imposible), veremos cómo lo que hoy en día escandaliza y es poco frecuente, empieza a serlo más.
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JMI.-Muy de acuerdo.
El día que se legalicen esos males y se enseñen en las escuelas como posibilidad perfectamente lícita, no escandalizarán y se multiplicarán por cien. Los Centros que se especialicen en infanticidios serán financiados por el Estado, es decir, por los contribuyentes.
Dicho sea de paso. Erradiquemos, al menos en nuestro uso, el término "Clínicas" abortistas. Hablemos de "Centros abortistas", "Abortorios", "Mataderos" o lo que sea; pero nunca Clínicas. El término es de origen médico-sanante: klinikós, que visita al que guarda cama; klínê, cama. Y los abortos no tienen nada que ver con eso.
He comentado, en alguna ocasión, que estoy en contra del aborto no solo por 1 motivo, sino por 2:
1) Porque es un pecado mortal que atenta contra el 5º Mandamiento de la Ley de Dios.
2) Porque, desde mi punto de vista, se origina, con el aborto, una causa que puede desencadenar en un efecto muy similar en nosotros mismos.
También he comentado, en alguna ocasión, que considero que Orígenes no es un hereje aunque así se estigmatizará como tal en el canon número 11 del II Concilio de Constantinopla. A todas luces, el Concilio no estuvo en plena comunión con el Papa Virgilio y fue el Emperador Justiniano el que se impuso. Las controversias fueron tantas y tan rocambolescas que estoy seguro que en honor a la Sagrada Verdad algún día la Iglesia Católica esclarecerá desde el análisis imparcial de los hechos si este Concilio ante los Ojos de Dios puede ser válido o no. Si es necesario, incluso ex-cathedra por el Santo Padre.
Estoy completamente de acuerdo en que el diablo es mentiroso y homicida y que mata después, con el fin de que el apego al instinto sexual (que sólo es superado por el de supervivencia) esté siempre al acecho para desviarnos de Dios. Por ello, la Sagrada Familia nos indica el Camino a seguir que es la Concepción Inmaculada; y hoy en día desde la medicina es posible la fecundación, como todos sabemos, sin necesidad del acto conyugal; algo que se va acercando, en cierto sentido y aunque sea de lejos, a la concepción sin el coito...
También hay que tener presente, en este tema, para un análisis en profundidad, la vertiente del aborto espontáneo. Parece ser que hay entre un 10 y un 20 por 100 de abortos espontáneos. Desde mi punto de vista esto queda perfectamente circunscrito en el motivo número 2 que antes he escrito:
¿Qué sentido tiene que en el momento de la concepción Dios cree un alma si Él sabe perfectamente que va a morir de forma espontánea (en ese 10 o 20 por 100 de embarazos)?.
Bueno, luego, unido a esto, está el tema de los niños muertos sin Bautismo. Si bien el punto 1261 del Catecismo, para mi tiene mucho sentido (en la línea de lo que he comentado) y expresa:”... nos permite confiar que haya un camino de salvación....” Desde mi punto de vista, no tengo ninguna duda, de cuál es este camino de salvación... y creo que no es necesario ser más explícito.
Desde la preexistencia de las almas, que significa que Dios creó al ser humano el sexto día y que descansó el séptimo (como bien expresa el Génesis) y ¡no! que sigue creando, sin descansar, almas en el momento de la concepción, el planteamiento del aborto tiene un enfoque en el que el motivo expuesto con el número 2 adquiere pleno sentido.
Hay muchos interrogantes, que considerando este punto número 2, tienen unas respuestas que desde nuestra capacidad de pensar adquieren un planteamiento que habría que reconsiderar. El siglo VI (y concretamente y sobre todo, los años del Emperador Justiniano) desde mi punto de vista, fue una etapa muy oscura en la Iglesia Católica y es necesaria una reflexión muy profunda para discernir en honor, a la Sagrada Verdad, si Orígenes fue o no fue un hereje.
Ánimo y un abrazo.
Porque el aborto es espeluznante por sí mismo, naturalmente hablando, y diabólico en términos sobrenaturales.
Quienes lo cometen han de mantenerse bien engañaditos, no sea cosa que se piensen algunos de esos puntos y se liguen un síndrome post aborto por el resto de sus días.
Estoy de acuerdo, pero para que los motores de búsqueda puedan hallar su artículo u otros, quizás habría que usar el término o las denominaciones más comunes. En este caso, por ejemplo, "...en los centros abortistas [mal llamadas también clínicas abortistas]...": de esta manera, el motor de búsqueda encuentra el artículo tanto por centros abortistas y por clínicas abortistas, o mejor aún, clínicas del aborto.
Más aún: al aborto se lo esconde bajo los términos IVE o interrupción voluntaria del embarazo. Para evitar que los artículos referentes al aborto, o bien, para conseguir que el artículo sobre el aborto también sera recogido cuando se busca IVE, se debería de poner en todo artículo sobre el aborto una etiqueta:
"el aborto en centros abortistas [llamado también la interrupción del embarazo en clínicas del aborto]".
Así, el motor de búsqueda encuentra el artículo tanto por "aborto", "clínicas aborto", e "interrupción voluntaria embarazo".
En el caso del aborto, la dominación que ejerce sobre el alma tentada es estremecedora. Es terrible hasta qué punto puede llegar a desnaturalizar el alma humana para que desee algo tan aberrante a su naturaleza. Lo que Satán provoca siempre es ante todo delirio, desvío, perversión, aberración, es decir, alejamiento del ser que somos. Y cuanto mayor es el grado del mismo, mayor el mal que causa. El aborto es uno de los confines de la maldad satánica más extrema.
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JMI.-Así es. Siempre la Iglesia, desde el principio, lo ha visto con especial horror. Siendo así que era relativamente frecuente en el mundo de Roma y Grecia.
Lo que necesitamos es obedecer a Cristo.
Las leyes penales, para aplicarse, necesitan de la concurrencia de dos requisitos; uno legal y otro sociológico. Por una parte la conducta debe encontrarse en el código penal, debido al principio de legalidad fuerte del derecho criminal. Por otra parte, las conductas tipificadas como delito no se van a aplicar sin que la sociedad considere al aborto como una amenaza para su convivencia pacífica.
Así, durante el franquismo y después, estando penalizado el aborto, no se perseguía, el ministerio fiscal no incoaba, los jueces desestimaban, y cuando (raras veces) se iba adelante con el procedimiento, cuando se llegaba al Tribunal Supremo, éste reconocía situación de necesidad.
Ahora es inconcebible, por más que las leyes se cambien, que una mujer sea condenada por abortar; antes machacarán día y noche los medios de comunicación al juez, y el CGPJ le expulsará de la carrera judicial con razón o sin ella, recibiendo una declaración de condena del congreso de los diputados.
Por todo esto es estéril luchar contra el aborto usando la ley penal, si la sociedad es anticristiana como es hoy.
¿Cómo se lucha y vence al aborto? Usted es un sacerdote honesto y fiel, usted hace su trabajo y sermonea, pero no siempre es así; muchos sacerdotes nunca señalan que una actitud es pecado y si no se corrige la conducta, el camino es el infierno.
Por eso muchas muchachas se extravían desde pequeñas, ya que nadie les avisó de los frutos macabros de muerte que conllevaría su deshonestidad. Por eso me parece una sutil hipocresía que personas que son responsables de la pérdida de la fe en el pueblo cristiano, luego vayan pidiendo cárcel para los pecadores, cuando antes está prevenir que curar.
Yo si fuera legislador, permitiría el aborto, pero fomentaría la familia desde los colegios, enseñando a los niños la ley natural, y lo horrible moralmente que es el aborto, pero sin castigar con prisión si la sociedad no lo considera necesario.
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JMI.-No se trata de contraponer y tener que elegir entre PREDICAR la recta moral natural y cristiana y establecer LEYES PENALES que castiguen los delitos, en este caso nada menos que el homicidio (más de cien mil homicidios anuales).
La ley proyectada para 2014 no penaliza, como Ud. sugiere, a las mujeres que abortan, sino a quienes producen el aborto.
Por otra parte, el principio que usted expone (quitemos la ley y prediquemos el espíritu bueno que evita el delito) no se sostiene, porque aplicado a tantas otras cuestiones hace patente su falsedad (no penalicemos el robo: prediquemos y eduquemos en el respeto a la propiedad ajena, etc.), y llevaría el caos criminal a la sociedad.
Predicación-enseñanza y acción de las leyes han de ir juntas, y así ha sido en la historia de la humanidad civilizada.
Este año que está a punto de acabar, ha sido un año difícil y desgraciado para mí, aunque hace muchos años que no recuerdo uno feliz. Además he perdido a una criatura muy querida para mí.
No. No tengo nada que celebrar en este fin de año.
Pero les deseo a usted Padre, y a todos los demás blogueros y comentaristas, que el año próximo les venga lleno de felicidad y FE.
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JMI.-Recemos una Avemaría todos los que leemos este mensaje para que la Virgen María, que nos dio como Madre estando Jesús en la Cruz, y es Consoladora de los afligidos, ayude a esta persona y a su familia.
Y tan tranquilos...
Y de esa manera caracterizada, cada alma será vista y ha de convivir por toda la Eternidad, en la universal convivencia de todas las almas habidas, con Dios y con todas las demás almas habidas. Por ello, parece del máximo interés el que cada quien procuremos comportarnos, respecto al aborto, con el mayor sentido de responsabilidad –pues ésta ha de ser eterna–.
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