Qué pesados
Cada vez que el papa viene a nuestro país tenemos que oír, querámoslo o no, todo tipo de quejas. Quizá sea inevitable, pero que sea inevitable no quiere decir que sea justo, máxime teniendo en cuenta que esos lamentos no se oyen a propósito de otros eventos – deportivos, culturales o del tipo que sea – que tienen lugar en España.
El “mantra” más repetido es el coste de la visita. Como se ha olvidado que “no solo de pan vive el hombre”, todo tiende a medirse en términos de dinero. No importa que el papa pueda dar una palabra de orientación a los jóvenes. No, eso no es valorado. Que los muchachos se olviden de la distinción entre el bien y del mal, entre la verdad y la mentira, y que se conviertan en esponjas dedicadas a absorber alcohol los fines de semana es asumido con una pasividad absoluta, como si se tratase de una ley física similar a la de la gravedad, como un hecho cargado con el fatalismo de lo inevitable.
Pues bien, se ha explicado hasta la saciedad que la JMJ la pagan, en su mayor parte, los que asisten a ella y, en un porcentaje menor, las empresas patrocinadoras. El Estado se ocupará de la seguridad, como en cualquier otro acontecimiento de similar envergadura. A la vez, no se puede negar que para Madrid y para la imagen de España en el mundo constituye una ocasión privilegiada de promoción.
No resulta frecuente oír que en el Parlamento o en otras instancias se pregunte sobre el coste de limpiar de residuos una playa, una plaza o una calle después de un botellón. Tampoco nadie se ha llevado las manos a la cabeza calculando el gasto del “día del orgullo gay”, de la presencia de los “indignados” en la Puerta del Sol, o de la celebración de la victoria de España en los mundiales de fútbol de Sudáfrica. Y no todos los ciudadanos son aficionados al fútbol, ni a otras cosas que no son fútbol.
Decía el cardenal Rouco que las críticas “ sirven para estimularnos a ser mejores y explicarnos mejor". Tiene razón. Siempre hay que esforzarse por ser mejores y por explicarse del mejor modo. Pero no podemos olvidar un principio: no se puede querer contentar a quienes desean estar siempre descontentos. Llega un momento en el que ese intento resulta vano e imposible. Da lo mismo lo que se diga, da igual tener argumentos o carecer de ellos; con algunas personas discutir es como hablar con una pared: solo un loco se empeñaría en hacerlo.
Creo que lo mejor es celebrar con paz, tranquilidad y alegría la JMJ. Y quien se altere, que tome una tila. También los católicos somos ciudadanos, también los católicos pagamos impuestos, también los católicos tenemos derechos. No tenemos que ir pidiendo disculpas por ser lo que somos, implorando temerosamente que los sanedrines de turno nos perdonen la vida.
Tampoco falta el plañidero llanto de las “beatas” de turno. Las “beatas” de turno salen con Somalia: “¡Que el papa vaya a Somalia!”, dicen, con ese aire falso y beatorro que las caracteriza – a ellas y a ellos - . De sobra sabemos que no está Somalia para visitas papales y que si a Benedicto XVI se le ocurriese poner un pie en ese martirizado país, ellas, las “beatas falsas”, serían las primeras – y los primeros – en alzar un grito de protesta.
No les importan, como no le importaban a Judas, los pobres. Lo suyo es fastidiar, dar la lata, molestar. Se divierten así, sin moverse por supuesto de la comodidad de sus poltronas de “engagés” de boquilla.
Guillermo Juan Morado.
33 comentarios
La mayor sarta de tópicos, frases hechas, lugares comunes, dichos, chismes, cotilleos componen el almacén ideológico de esta gente, ¡ojo, persuadidos de que tienen que salvar a la sociedad!.
engagés=enrrabietados
GJM. A ver, ser "universitario" no significa más que haber pasado por una Universidad. De toda la vida, las mayores barbaridades las han dicho los hombres de cultura. Y hoy es universitario cualquiera. No garantiza nada. Para pensar bien lo más importante es rectitud moral y sentido común. Un sabio degenerado solo reviste el mal con apariencia de lógica.
GJM. No, no estoy "idignado". Un poco harto, sí, pero vamos... que no merece la pena ni indignarse ni hartarse. Al día siguiente de que el papa se vaya a Roma quedarán los frutos de santidad, de encuentro con la gracia de Dios. Lo demás, una anécdota.
Se lee y se escucha de todo entre los detractores de esta visita.
Las razones económicas se siguen esgrimiendo a pesar de todo lo que se ha explicado. Y, cuando alguno, por lerdo que sea, acaba de entender que más dinero público se llevan los sindicatos con un 4% de afiliación o los acontecimientos deportivos más peregrinos, no falta quien tenga la ocurrencia de decir que el Papa no debe venir porque mata muchos cátaros, (pobrecitos cátaros, cuánto intelectual se preocupa por ellos) y porque quemó a Miguel Servet (lo prometo: lo he leído a un comenatrista hoy mismo).
Pero hoy ha acabado de darme la puntilla clicar en un sitio web donde alguien, ni recuerdo quién, pedía que el papa se fuese a Somalia a... ¿a que´?
Ay, sí, esos farieseos, esos judas, qué asquito con tanta falsedad, No les importan, como no le importaban a Judas, los pobres. Lo suyo es fastidiar, dar la lata, molestar. Se divierten así, sin moverse por supuesto de la comodidad de sus poltronas de “engagés” de boquilla
Lo de los cátaros es muy "New Age".
Opino que, lamentablemente, además de la pérdida de fe, hay una penosa pérdida de capacidad de pensar (y de argumentar).
Todo eso me impulsa cada vez más a orar y a permanecer en sintonía con la JMJ y con el Papa (aunque esté lejos). Creo que va a ser un gran momento de esperanza, y un soplo fresco de racionalidad, de fe y de Espíritu Santo.
La preparación previa, resolver los últimos inconvenientes y problemillas con soluciones inesperadas, fruto de la oración de muchas almas. Lógico que estén despistados y no entiendan nada de nada.
Pero para ellos tambien habrá frutos que algunos no querrán reconocer, pero que en su fuero interno les renovará de alguna manera que solo el Señor sabe.
Para la gente que sólo entiende el idioma del dinero, hablarle en otro lenguaje es inútil.
Un grupo de profesionales del canal de television catolico peruano Pax TV ha ido a la JMJ para hacer una serie de documentales. Si quieren seguir lo que estan haciendo, aqui:
http://paxtv.org/blogs/jmj2011/
Viva Juan Pablo I el papa de los pobres!
Aun asi ire a las celebraciones un saludo enorme
GJM. No es todo tal como dice, pero bueno...
Cuando es España se invita a políticos extranjeros, eso tiene un coste, también las Olimpiadas el gobierno derrochó mucho dinero, para estos actos
http://www.elimparcial.es/nacional/un-no-olimpico-88532.html
Los costes de actos públicos, más numerosos a lo largo del año en España, supera muchísimo más que los gastos de la JMJ.
Muchos sabemos, que estos gastos no se retira de las arcas monetarias, sino del sacrificio generoso de los fieles católicos, de su propio ahorro personal, de sus propios bolsillos, para una causa digna y honrada y caritativa.
Así se financia:
http://www.elconfidencial.com/espana/2011/08/09/asi-se-financia-la-visita-del-papa-desde-copones-ciberfinanciados-a-la-venta-online-de-caramelos-82505/
El problema auténtico, según pienso yo, es que no quieren que el Papa venga a España.
Cuando vienen mandatarios islámicos, también eso tiene un coste. También cuando invitan a un político, gobernante de otro país a pasar un tiempo de vacaciones, yates, paseo en barco, etc,
Cuando subencionan, este gobiernos a organizaciones sectarias, libertinas, no se oyen tanto las protestas, ni dicen que harán desfiles para impider tales maldades. No se quejan los malvados porque tienen relación con la maldad. Los malvados se quejan contra lo que es bueno y edificante como es la próxima visita del Santo Padre.
No pueden soportar la vida del Evangelio,
Según el periódico el mundo, esta visita dejará en beneficio en España 100 millones de euros, por lo tanto, son excusas sin sentido los de aquellos que se quejan, temiendo que le van a quitar dinero.
Pero estos no son los verdaderos beneficios, sino el regalo que el Señor nos hará a los españoles en esta visita del Papa, de esos hermanos y hermanas que se reunirán en Madrid, porque es el Espíritu Santo quien los reúne. Es la juventud sana, la juventud de Dios, de toda edad,
Es lo que temen los que rechazan a Cristo y a su Evangelio, los que aman la vida del pecado que es la corrupción y la muerte.
Esos enemigos de nuestra fe, no analizan los costes inútiles, que no proceden de los valores cristianos, no analizan lo absurdo ya que tienen su vida en lo absurdo.
Se ponen alerta para impedir el bien, pues ellos colaboran con el Maligno para seguir extendiendo sus trabajos perversos: "aborto", "ley de educación", "pornografía como otra manera de educación a los jóvenes", y toda clase de iniquidades, que los españoles honrados no quieren colaborar en esos tipos de gastos y costes, pero que los políticos españoles les arrebatan su dinero, para hacer lo que no deben.
Pero no todos los políticos son perversos y sucios.
También los hay generosos como el que leemos en esta noticia:
http://www.diariodesevilla.es/article/sevilla/1039912/alcalde/y/su/equipo/pagaran/sus/bolsillos/los/gastos/viaje/madrid.html
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Los que actualmente se quejan están tan acostumbrados a vivir en una vida sin Dios, qué solamente al oír de Dios, del Evangelio, que viene el Papa, le rechinan los dientes de pura maldad que llevan en el corazón.
¿Es que no se dan cuenta que una vida sin Dios arrastra al fracaso? lo estamos viendo en España. Aquellos "indignados" era unicamente un nombre para lo que se esconde detras de esas palabras, al descubrirse lo que había detrás, y son delincuentes. No se indignan contra el mal, pues el mal son ellos mismos. Desprecian a la policía, a los comerciantes, y sobre todo, hacen desfiles para jactarse de su propia maldad.
¡Son unos incorregibles incurables! ¡Qué pesados!
GJM. Bueno, entre los "indignados" habrá de todo.
>>>Cuando en las fiestas de San Fermin, salen los toros determinados días corriendo por las calles. Hay personas que alquilan sus balcones a otras personas, por una cantidad alta de dinero, es mucho. Los que lo alquilan no tienen reparo en pagar esas cantidades tan altas, otros vecinos que no tienen balcones, no se le oye sus protestas, son actos no espirituales ni religiosos esas carreras por las calles.
>>>Por otra parte, hay personas que compran en importantes encuentros deportivos de fútbol entradas para luego venderla incluso, si no me equivoco, hasta más de 500 euros, y esto es muy frecuente en todo el año. ¿Quién se queja de estos absurdos?
Y muchos más costes, que cuando no es para anunciar el Evangelio como viene el Santo Padre, para confirmarnos en nuestra fe. Y viene porque el mismo Dios lo trae a España, y la Juventud sana así lo quiere también.
Por eso, decía, que la quejas es contra Dios, contra el Evangelio, contra la visita del Bienaventurado Benedicto XVI.
El camino del Señor está lleno de vida, de alegría, pero no debemos luego olvidar una vez que el Santo Padre, regrese al Vaticano. A partir de este entonces, debemos perseverar con la mirada y nuestro corazón en Dios. Como han hecho muchísimos otros que ahora están consagrados al Señor, como sacerdotes, religiosos, religiosas y viven conforme al Corazón de Cristo Jesús, esto es vida.
Las cosas que no se hacen por Dios, terminan mal, las que se hacen por amor a Dios, hay muchísima ganancia, refiriéndolo en el sentido espiritual.
Los malvados que temen perder lo material, terminan perdiéndose así mismo con todas sus rabietas y pataleos y gritos.
GJM. Obviamente, usted no la paga. Eso lo sabe cualquiera.
Ante ciertas personas lo único que cabe hacer es evitar su trato, o reducirlo al mínimo si no es posible eludirlos. A veces, cuando éstos provocan situaciones más graves que son dañinas y de las que no podemos salir, uno debe optar por la vía más dura y de mayor desgaste: hay que doblegarles. No queda otra. Lo malo es que si ello se prolonga acaba uno agotado y haciendo cosas que detesta, lo cual tiene consecuencias inevitables para la vida interior e incluso exterior.
Dice una vieja canción de Pí de la Serra que si los h. de p. volasen, no veríamos el sol. En ciertas ocasiones, es verdad.
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Pues sí, Eduardo. A veces que pienao que eso es de las tres o cuatro cosas más importante que he aprendido en mi vida, aunque me haya llevado años aprenderlo.
Viene muy al caso del que tratamos, pero también para cualquier ámbito de la vida.
Y el título va a haber que pasarse día tras día repitiéndolo: ¡qué pesados! Otro que no paga un duro y sigue insistiendo en que él no paga... que sí, que bueno, que vale, que ya lo sabemos, que no pagas, que no seas pesado...
http://www.catholiceducation.org/articles/civilization/cc0349.htm
En su "Reflexiones sobre la Revolución Francesa", publicado en 1790, Burke, protestante, preguntó a los franceses, "por el estilo general de las últimas publicaciones de todo tipo, se podría llegar a creer que el clero en Francia son una especie de monstruos , una composición horrible de superstición, ignorancia, pereza, fraude, avaricia y tiranía. Pero, ¿es esto cierto? "
En 1790, Burke respondió su pregunta con estas palabras: "No escucho con mucha credulidad cuando hablan mal de los que van a saquear. Sospecho que los vicios se inventan o exageran cuando el beneficio que se busca es su castigo."
Ayer tuve un debate cortés, pero duro, con el amigo Fredense por mis opiniones sobre la categoría humana y moral de los ferroviarios españoles. Mi opinión, por pura experiencia personal, no puede ser peor. A Fredense le dolió un tanto, pues él, cosa que desconocía, había sido durante muchos años ferroviario, como lo era ahora un hermano suyo. Bueno, como signo de reparación por lo que dije, y sabiendo que de nada me servirá, pues para pesados los ferroviarios, aquí copio un poema muy conocido de Bertolt Brecht, "Carbón para Mike". Para Fredense y su hermano, y para todos los ferroviarios de buen corazón, que seguro que haberlos haylos:
"Me han contado que en Ohio,
a comienzos del siglo,
vivía en Bidwell una mujer,
Mary McCoy, viuda de un guardavía
llamado Mike McCoy, en plena miseria.
Pero cada noche, desde los trenes ensordecedores de la Wheeling Railroad,
los guardafrenos arrojaban un trozo de carbón
por encima de la tapia del huerto de patatas
gritando al pasar con voz ronca:
"¡Para Mike!"
Y cada noche, cuando el trozo de carbón para Mike
golpeaba en la pared posterior de la chabola,
la vieja se levantaba, se ponía,
soñolienta, la falda, y guardaba el trozo de carbón,
regalo de los guardafrenos a Mike, muerto
pero no olvidado.
Se levantaba tan temprano y ocultaba
sus regalos a los ojos de la gente,
para que los guardafrenos no tuvieran dificultades
con la Wheeling Railroad.
Este poema está dedicado a los compañeros del guardafrenos McCoy
(muerto por tener los pulmones demasiado débiles
en los trenes carboneros de Ohio)
en señal de solidaridad."
Es muy cierto lo que dices, Eduardo, pero el problema es que el internet es muy amplio, y un nino bautizado de doce anos puede leer "la tonteria" y si no lee una contra-respuesta sensata y de sentido comun, se va a quedar con esa "tonteria" sumado a mas "tonterias" que hay en internet. Yo sostengo que es necesario responder esas "tonterias", no por quien lo dice, que seguramente es un necio, sino por quien lo lee y no tiene tanta formacion como los comentaristas de este blog.
No te canses, Yolanda, de responder tonterias en facebook o cualquier otro lugar de internet. El sentido comun ha sido secuestrado y hay que rescatarlo. Vale la pena el esfuerzo por un solo bautizado.
Quien sabe si el Senor te diga en el juicio final y publico: "Estaba confundido y tu me ayudaste".
Saludos
Es una siembra de odio estudiada y planificada. Por si se presenta la oportunidad tener ellos preparados de nuevo lo que todos sabemos.
Esperemos que al Amor venza al mal. Hay que rezar mucho, y actuar con inteligencia. Dios le bendiga.
Y solo montan insultantes campañas de insultos y agresiones a los católicos comprometidos.
Seguid así Cdim, volved de nuevo a repetir lo mismo y verás como acabamos nosotros o nuestros hijos.
Esta es una tierra católica, es nuestra identidad más profunda, la de la gran mayoría de españoles y no vamos a renunciar jamás a ello.
Si pasas de cristiano a "indignado" sales perdiendo, el compromiso social del cristiano lo marca Xto. a través de su Iglesia, no las ocurrencias de cualesquiera, que empiezan, dando ejemplo, ocupando lúgares públicos y adueñándose de lo que no les pertenece, como compromiso "cristiano" no está muy bien que digamos.
La respuesta es simple, paga el servicio (agua, luz, gas, etc.) el que lo contrata, por lo que el exceso de consumo se sufraga mediante aportaciones fijadas,y, apunta esto:todo asistente sufraga los gastos de su bolsillo.
Las familias que hospedan a los asistentes ya han empezado a pagar, de su bolsillo, el extraconsumo de luz, gas (los chicos/as se duchan), combustible del coche (hay que acercarlos al lugar de concentración diocesana previo a Madrid),etc.
Al final todas las cuentas salen y unas más y otros menos, hemos contribuido al encuentro, ya lo sacaremos de otra cosa. bendito sea Dios que nos permitió contribuir, mínimamente a su gloria, bendito sea ahora y siempre.
A pesar de mis obligados "39 añitos", como lectora habitual del blog que sigo siendo, en "mis épocas" no había JMJ. Ahora participo de la ilusión de mi hija que se va el martes para Madrid junto con otros catequistas y el grupo de recién confirmados de la parroquia. Supongo que yo me pegaré a la televisión y al ordenta para no perderme ni una sola sílaba de las que pronuncie el Santo Padre.....oirle me engancha totalmente.
Debe de ser una gozada poder expresar libremente tu amor a Dios, junto con otras personas de tu edad, haciéndolo todos en el mismo idioma aunque externamente suene a francés, chino o español. Cuando tenía menos años que hoy, ya que joven sigo siendo jejejeje, la frase estrella que tenía que escuchar repetidas veces era ¡¡¡pero tu qué andas yendo a Misa.....éso ya no se lleva!!!
Lo mismo que es una gozada poder expresarse tranquilamente así en un blog como éste.
Voltaire decía algo así en su discurso sobre la tolerancia: "No estoy de acuerdo con usted pero luchare para que pueda decir sus ideas".
Yo señores de la Iglesia no estoy de acuerdo con ustedes en casi nada pero por la libertad de expresión y de culto, esta vez y las que considere necesarias, luchare para que tengan su derecho de demostración y reunión a la vez que cada vez que vea en sus filas un pequeño ápice de intolerancia lo perseguiré de igual forma.
Gracias por su comentario.
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