444 - ONU: ARGENTINA, BRASIL Y CHILE IMPULSAN EL ABORTO
ONU: ARGENTINA, BRASIL Y CHILE IMPULSAN EL ABORTO
Fuentes: Propias; C-Fam, New York, 31-08-01; Pro-Life Infonet, 28-08-01; Washington Post, 28-08 y 29-08-01; The New York Times, 29-08-01; SPUC, Londres, 30-08-01
Por Salvador Arguedas
El 31 de agosto, en las Naciones Unidas, las negociaciones para consensuar el documento final para la sesión especial de la Asamblea General de la ONU sobre la Infancia (que se desarrollará del 19 al 21 de este mes), se interrumpieron porque los países latinoamericanos, insisten que el documento final incluya el aborto. Estos países renunciando a numerosos compromisos, siguen apoyando los términos "servicios de salud reproductiva" y "cuidados obstétricos de emergencia" para los adolescentes, palabras usadas para disfrazar el odioso término "aborto".
La frase "servicios de salud reproductiva" es el "código" internacional con que se denomina al aborto. Una forma de promover el aborto entre los adolescentes sin mencionarlo por su nombre.
La táctica, conocida desde hace años, salió claramente a la luz en junio pasado, en uno de los encuentros preparatorios para esta Cumbre, cuando ante una pregunta directa sobre el contenido de la frase, un diplomático de Canadá confirmó que "servicios de salud reproductiva" comprendían el acceso al aborto: "Por supuesto que lo incluye", dijo, "aunque aborrezco usar esa palabra; pero incluyen el aborto".
A pesar de esta confesión de parte, durante los encuentros de esta semana, todos los países latinoamericanos, continuaron negando que los llamados "servicios" abarcaran el aborto, así como lo que parece ser una nueva clave para denominarlo: "cuidados obstétricos de emergencia".
La delegación de Estados Unidos propuso una hacer salvedad: si era cierto que los "servicios de salud reproductiva" no incluían el aborto, que esto se consignara claramente en el documento. Lamentablemente los países de Hispanoamérica también rechazaron esta propuesta.
De acuerdo a los observadores, la postura de los países de latinoamericanos marca un inquietante cambio en sus políticas. Sus diplomáticos, -que ahora negocian como en un bloque, llamado Grupo Río-, representan a gobiernos de naciones cuya población es en su inmensa mayoría católica, que tienen en general legislaciones que defienden la vida humana, pero ahora aparecen apoyando la expansión mundial del aborto. Muchos se preguntan, ¿cuáles son las razones para que el Grupo Río defienda una posición que contradice las propias leyes de los países que lo integran?.
Algunos especulan que se trata de una condición de los países desarrollados, que ejercen presiones económicas sobre el Grupo. A principios de este año, por ejemplo, los países escandinavos, amenazaron con suspender su ayuda a Nicaragua, hasta que ese país adoptara la definición de "género" de la Unión Europea.
Otros sugieren que los diplomáticos latinoamericanos están promoviendo el aborto en la ONU, como un medio para forzar a sus propios países a que lo despenalicen, lo cual sería gravísimo, pues indicaría que la diplomacia ha caído bajo el "colonialismo ideológico" de la internacional del aborto.
Por parte de Argentina, influiría también el esfuerzo del gobierno del Dr. de la Rúa de distinguirse del gobierno anterior.
Sea lo que sea, lo cierto es que los países de la región, traban las negociaciones en la ONU perjudicando a la población infantil del planeta. El documento para la Cumbre del próximo 19 de septiembre, debe establecer los objetivos para el bienestar de la niñez en salud y educación. La postura de los representantes latinoamericanos, en especial de los gobiernos "progresistas" de Argentina, Chile y Brasil, frena el acuerdo internacional sobre las reales necesidades de la infancia. ¿Cuál es el interés de incluir el aborto disfrazado de "salud reproductiva" y "cuidados obstétricos de emergencia" entre los objetivos?.
Por supuesto que nada bueno se debe esperar con respecto a otro tema crucial, en el que se engloba lo dicho hasta ahora: el levantamiento de las reservas a los tratados de derechos humanos exigido por la ONU en documento para esta Cumbre, sobre el que hemos advertido muchas veces. Levantar esas reservas significa, por ejemplo para Argentina, que no sólo desertaría de defender la vida humana desde la concepción, sino que renuncia a defender la patria potestad -el derecho de los padres a la educación de sus hijos, sobre todo en materias relacionadas con la sexualidad-, y además, ya no quedaría claro que este país entiende como familia sólo la unión de hombre y mujer ordenada a la procreación, lo que abre la puerta a cualquier interpretación aberrante del término y, por lo tanto, de la institución familiar.
Los países latinoamericanos se caracterizaban en estas conferencias internacionales por su postura a favor de la vida y la familia, ahora con la elección de George Bush -cuando tendrían el apoyo que antes les faltó-, el grupo pro-vida en las Naciones Unidas, está conformado solamente por los Estados Unidos, la Santa Sede, Polonia y los países Islámicos, (vid. New York Times, 29-08-01).
Siempre de contramano, cuando Estados Unidos está dispuesto a evitar la escala internacional del aborto, América Latina claudica. La alianza del Grupo Río-Unión Europea, amenaza los acuerdos que realmente beneficiarían a la población infantil del mundo.
Las negociaciones rotas hace dos días, continuarán en otra ronda de encuentros que serán programados para la semana próxima. FIN, 2-09-01