"Non mea voluntas": el Libro.

Doy gracias a Dios por usted, pido en oración que nos ayude a seguir fieles a la fe y enseñanzas de la Iglesia de Cristo, que nos consuele y nos de abundancia de gracias y dones para vivir entregados a El.
Cuando rezo por la Iglesia, siento que Dios nos da abundancia de bendiciones y medios, pero que no sabemos utilizar para protegernos de los enemigos… La noticia de su libro es providencia de Dios. Así nos ayuda a seguir animados y esperando en El.

Para que hubiese una verdadera muerte de la Iglesia pienso que debería extinguirse la sucesión apostólica, de modo que no quedase un solo Obispo válidamente consagrado en todo el mundo.

Aunque capaz que no hace falta tanto, porque los Ortodoxos, por ejemplo, tienen ordenación episcopal válida, pero no tienen sucesión apostólica formal, sino solamente material.

En el primer caso, como sólo un Obispo puede ordenar a otro Obispo, no hay resurrección de la Iglesia posible, salvo que el Señor baje de nuevo al mundo para fundar la Iglesia otra vez.

En el segundo caso se plantea el problema de la legitimidad. Es de prever que van a aparecer cuarenta grupos distintos diciendo que son la verdadera continuidad con la Iglesia Católica, como si ahora lo dijese alguno de los Patriarcas ortodoxos, y porqué este y no aquel otro.

Y ni eso, porque en ambos casos habría resultado que el dogma de la indefectibilidad de la Iglesia habría resultado falso, y con él, toda la fe católica, obviamente.

Lo verdaderamente grandioso y sobrenatural de la Iglesia es precisamente lo contrario: que permanece en el ser que Cristo le dio al fundarla, hasta que Él venga por segunda vez.

Véase por ejemplo la Constitución "Pastor Aeternus" del Concilio Vaticano I:

"Pero, con el fin de que el mismo episcopado fuese uno e indiviso y de que, por la mutua coherencia del ministerio sacerdotal, la multitud de los creyentes conservara la unidad de fe y de comunión, instituyó en San Pedro, al que había antepuesto a los demás Apóstoles, un perpetuo principio de una y otra unidad, y un fundamento visible, sobre cuya fortaleza se construyese un templo eterno, y la altura de la Iglesia, que había de alcanzar el Cielo, se levantase sobre la firmeza de esta fe."

Y también:

"Lo que Cristo Señor [ ... ] instituyó en el Apóstol San Pedro para perpetua salud y bien perenne de la Iglesia, es necesario que, por obra del mismo Sefior, dure perpetuamente en la Iglesia, la cual, fundada sobre la piedra, tiene que permanecer firme hasta la consumación de los siglos".

Una iglesia que tuviese que ser reconstruida por nosotros ya no sería la Iglesia de Cristo.

Así que, como creo que dijo Unamuno del cristianismo, agonizará todo lo que haga falta, pero morir, nunca.

Saludos cordiales.





Creo que mucha gente, católica cien por cien, dan por hecho que las Palabras de Cristo, todas, se cumplen siempre, por sí mismas, o porque sí. Y no hay tal.
Muchas de sus Palabras son CONDICIONALES: las condiciona a nuestra conducta personal: a que las acojamos o las rechacemos: esa es la LIBERTAD que nos ha CONCEDIDO, aún asumiendo Él, por decisión propia, "el riesgo de nuestra libertad".
Por poner algunos ejemplos: "Si no os convertís, todos pereceréis igualmente". "Nínive, será destruida". Y el ejemplo más claro: si no se admite -y se hace propia- la Salvación obrada por Cristo, que de suyo es eficaz, sobreabundante y universal, ésta no se hace operativa en las almas que la rechazan, voluntariamente.
En relación con la Iglesia, ocurre exactamente lo mismo.
Con esto no quiero decir que la Iglesia vaya a desaparecer. Pero que está sufriendo una Pasión que, de suyo, aboca a la muerte, esto me parece evidente. Que Cristo "está al venir", sea esto lo que vaya a ser, no contradice lo anterior. Y, aún viniendo, siempre quiere contar con el Pueblo Fiel: sin él, no va a hacer nada, pues, da la impresión, de que no está en sus planes SUTITUIRNOS: nunca lo ha hecho.

Padre José Luis, en hora buena llega su libro para que nos demos cuenta de la necesidad de permanecer fieles y firmes en Cristo. Felicidades, bendiciones y gracias. Ahora a por el tercero.
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21.06.1963. Giovanni Montini era electo Papa. Y, al respecto, había escrito: «…Espero que todos crean cuando digo que no sólo nunca aspiré como ni siquiera formulé la hipótesis de ser elegido para este formidable oficio…»
1968. En una conversación en el turbulento 1968 con el escritor francés Jean Guitton, su amigo, el Papa confiaba: «…Yo tuve el terror y el éxtasis de haber sido elegido…»
21.06.1972. El terror y el éxtasis, escrito de Pablo VI: Tal vez el Señor me haya llamado a este servicio no para que tome ninguna actitud,o para que gobierne y salve a la Iglesia de sus dificultades,sino para que sufra algo por la Iglesia y quede claro que es Él, y nadie más, quien la guía y quien la salva.
29.06.1972. Pablo VI tiene la clara impresión de que existe algo de profundo y de negativo que aflige a la Iglesia crecientemente: el camino de la secularización y la falta de unidad interna. El papa Pablo VI escribió una carta que hasta 2018 no vió la luz, cuando el contenido es revelado en el libro «La barca di Paolo» («La barca de Pablo»), del sacerdote Leonardo Sapienza, regente de la Casa Pontificia.

El Papa escribe inquieto: «…Diríamos que, por alguna rendija misteriosa – no, no es misteriosa; por alguna rendija, el humo de Satanás entró en el templo de Dios. Hay duda, incertidumbre, problemática, inquietud, insatisfacción, confrontación». «Ya no se confía en la Iglesia. Se confía en el primer profeta pagano que vemos que nos habla en algún periódico, para correr detrás de él y preguntarle si tiene la fórmula para la vida verdadera. Entró, repito, la duda en nuestra conciencia. Y entró por las ventanas que debían estar abiertas a la luz: la ciencia».

Postconcilio: «…Se creía que, tras el Concilio, vendrían días soleados para la historia de la Iglesia. Vinieron, sin embargo, días de nubes, de tempestad, de oscuridad, de búsqueda, de incertidumbre… Intentamos cavar abismos en lugar de taparlos…» ¿Cómo se ha podido llegar a esta situación?

La respuesta de Pablo VI es clara y neta: «Una potencia hostil ha intervenido. Su nombre es el diablo, ese ser misterioso del que San Pedro habla en su primera Carta. ¿Cuántas veces, en el Evangelio, Cristo nos habla de este enemigo de los hombres?». Y el Papa precisa: «Nosotros creemos que un ser preternatural ha venido al mundo precisamente para turbar la paz, para ahogar los frutos del Concilio ecuménico, y para impedir a la Iglesia cantar su alegría por haber retomado plenamente conciencia de ella misma».

¿Dónde está el problema? En la presencia de Satanás en la Iglesia. Por ello, el Papa consagró una entera catequesis a la presencia activa de Satanás en la Iglesia (cfr Audiencia general, 15 de noviembre de 1972).

vatican.va/content/paul-vi/es/audiences/1972/documents/hf_p-vi_aud_19721115.html

Pablo VI subrayó la dimensión universal de la cuestión: ¿Cuáles son hoy las necesidades mayores de la Iglesia? La respuesta del Papa es clara: No os suene como simplista, o justamente como supersticiosa e irreal nuestra respuesta; una de las necesidades mayores es la defensa de aquel mal que llamamos Demonio.

Pablo VI recuerda la enseñanza universal de la Iglesia sobre la presencia en el mundo «de un ser viviente, espiritual, pervertido y pervertidor, realidad terrible, misteriosa y temible». Después, refiriéndose a algunas publicaciones recientes (en una de las cuales un profesor de exégesis invitaba a los cristianos a «liquidar al diablo»), Pablo VI afirmaba que «se separan de la enseñanza de la Biblia y de la Iglesia los que se niegan a reconocer la existencia del diablo, o los que lo consideran un principio autónomo que no tiene, como todas las criaturas, su origen en Dios; y también los que lo explican como una pseudorealidad, una invención del espíritu para personificar las causas desconocidas de nuestros males».

«Nosotros sabemos -prosiguió Pablo VI- que este ser oscuro y perturbador existe verdaderamente y que está actuando de continuo con una astucia traidora. Es el enemigo oculto que siembra el error y la desgracia en la historia de la humanidad.»

«Es el seductor pérfido y taimado que sabe insinuarse en nosotros por los sentidos, la imaginación, la concupiscencia, la lógica utópica, las relaciones sociales desordenadas, para introducir en nuestros actos desviaciones muy nocivas y que, sin embargo, parecen corresponder a nuestras estructuras físicas o psíquicas o a nuestras aspiraciones profundas.»

Satanás sabe insinuarse... para introducir... Estas expresiones, ¿no recuerdan a las del león rugiente de San Pedro que ronda, buscando a quien devorar? El diablo no espera a ser invitado para presentarse, más bien impone su presencia con una habilidad infinita.

El Papa evocó también el papel de Satanás en la vida de Cristo. Jesús calificó al diablo de «príncipe de este mundo» tres veces a lo largo de su ministerio, tan grande es el poder de Satanás sobre los hombres.

Es gravemente pesada la carga del Vicario de Cristo, porque es la carga del pastor llamado a dar la vida por sus ovejas. Oremos por el Papa y por la Iglesia, bajo las nubes de la tempestad.
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Sigamos siendo católicos, no perdamos la esperanza y demos razones de ella en la Promesa de Nuestro Señor Jesucristo de la vida eterna siguiéndole a Él cumpliendo Sus Mandamientos y enseñanzas (Doctrina católica). Y tenemos a Su Madre:

"Al Final Mi Inmaculado Corazón Triunfará". Triunfar significa ganar una batalla.

La Virgen Santísima nos habla en Fátima de una batalla que se libra en estos tiempos que incluye la perdida generalizada de la fe (la Gran Apostásía), perdida de muchas almas, guerras, destrucción, pero después de todo la peor guerra es la de la perdida de la fe, pues el Señor nos dice: “no tengan miedo a los que matan el cuerpo, sino a los que matan el alma”. La peor muerte es la del alma que pierde la fe, se aleja de Dios, de su amor y sus mandatos, se hunde en una vida de pecado, corriendo el riesgo de la condenación eterna, la muerte eterna: la separación eterna del Amor de Dios.

La Virgen Santísima en esta gran batalla que libramos hoy, batalla a la que el Santo Padre Juan Pablo II, le llama la cultura de la muerte, que no solo incluye la destrucción de la vida humana, sino también la destrucción del alma, nos ofrece su Corazón como refugio seguro, pero a la vez, nos indica que en estos tiempos en particular, Dios ha querido que el triunfo sea adquirido por Ella: “dile a todo el mundo, que grandes gracias vienen a través del Corazón Inmaculado de María” y “que Dios ha confiado al Inmaculado Corazón, la paz y la conversión del mundo”.(Beata Jacinta). Cuando Lucia, pregunta a Jesús, por qué la conversión de Rusia será fruto de la Consagración de esta al Inmaculado Corazón, el Señor respondió: Porque quiero que se vea claro que ese triunfo es del Inmaculado Corazón de María y así se extienda el culto y la devoción al Inmaculado Corazón junto a la devoción a Mi Sagrado Corazón".

¿Por qué la Santísima Virgen batalla contra el mal?

Desde el inicio de las Escrituras (Genesis 3) hasta el final (en Apocalipsis 12), se nos revela a la Santísima Virgen en enemistad y en batalla contra Satanás, sus secuaces y sus obras.

Genesís 3,15- “Enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu linaje y su linaje: él te pisará la cabeza, mientras acechas tu su calcañar”. Apocalipsis 12: “un gran señal apareció en el cielo: una mujer vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza.... Apareció otra señal: un dragón rojo..... quiere devorar a su Hijo en cuanto naciera.... Y la mujer huyo al desierto... El dragón persiguió a la mujer, pero se le dieron a la mujer las dos alas del águila grande para volar al desierto.... Entonces despechado contra la mujer, se fue a hacer la guerra al resto de sus hijos, los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús”.

"Si le sirve a alguien, aunque solo sea un alma, para ir al Señor como lo único necesario en su propia vida, ya me siento pagado. Y con creces".

A mi me sirven y me han reconciliado con San Josemaría.
Y Si Padre, cuando mi alma, mi entendimiento, se rebela por lo que ocurre en el mundo y aún en la misma Obra, [se ha incorporado a los planes de la Onu, ya no incluyen la ley natural en sus escuelas de derecho, despiden de sus universidades a profesores que no "entienden" la innovación y el cambio climático engañoso que difunde la ONU, y a profesores que no se vacunan, obligan a sus profesores a comulgar en la mano, ya no hablan de la verdad,hablan de identidad cristiana pero no la relacionan con la verdad] , es entonces cuando sus escritos me reconfortan y me unen nuevamente a San Josemaría

Gracias Padre José Luis.
Su predicación a mí, particularmente me ha devuelto la paz de saber que usted mantiene vigente el pensamiento original de San Josemaría.
Y eso, en momentos difíciles, ¡sostiene!





Reza por mí. Muchísimas gracias.

Estimado padre,
Si le sirve de algo, le diré que le sigo de vez en cuando y que le apoyo en su labor y entrega. A decir verdad yo veo las cosas ligeramente distintas. La jerarquía bastante tiene a veces con la gestión. Por eso su papel, y el de otros como usted, es imprescindible, porque no tienen cargos que condicionen su testimonio y su denuncia.
En el espíritu de Cristo Resucitado, le envío un saludo.




Te agradezco tu buena intención. Pero reducir la misión de la Jerarquía es "la gestión", y con eso ya van 'desbordaos', pues me da como q No. Jesucristo no los escoge y no los "Ordena" para eso, sino para seguirle y hacer entre los hombres lo mismo q ha hecho Él: servir, y dar la vida por las ovejas. El q vea q no puede, o q le supera o q no está dispuesto, existe algo q se llama pedir la baja. O así.

No he visto la portada del libro, pero supongo que usted se refiere a la fachada de la Pasión de la Sagrada Familia, que no es la catedral de Barcelona.





Sí, a la Fachada de la Pasión de la Sagrada Familia. Gracias por tu puntualización.

Si la Iglesia no perece es porque nuestro Señor Jesucristo, así lo dispuso, más infiltración es imposible. Un abrazo.




Es posible más infiltración. Y la va a haber. Que no haya más y peor depende de la Fidelidad de los hijos de Dios en su Iglesia hoy: o sea, de nosotros.

Creo que estamos en la Iglesia como el sueño de las dos columnas de san Juan Bosco.
Las naves atacantes estan dentro y fuera de la Iglesia.
Algunas naves se han quedado en la retaguardia, incapaces de enfrentarse al mal, pero siendo fieles y esperando a que acampe el temporal. Estas son las que al final se unen a la gran nave, pero cuando ya ésta ha atravesado el espacio entre las dos columnas de la Eucaristía y la de la Santísima Virgen Maria, y se encuentra a salvo.
En un momento se cuenta que en la nave de la Iglesia se produce un gran socavón, que es arreglado rapidamente, también que el Papa es herido y luego por otro ataque muere, inmediatamente surge otro Papa que es el que va a amarrar la nave de la Iglesia a las dos columnas.
En ese momento, las naves atacantes perecen y se destruyen unas a otras.
Pero en medio de la zozobra, y pase lo que pase, es fundamental confiar en Dios, pues sin su permiso nada puede ocurrir, y la promesa de que las fuerzas del infierno no prevalecerán, no esta sujeta al comportamiento de la mayoría de las personas, ya lo deja claro el Apocalipsis que habrá un resto fiel, que no llevará la marca de la bestia, y que es su Iglesia, la de Jesucristo.




Que las fuerzas del infierno no prevalecerán, no significa que no haya gente que se condene, porque hay gente que se condena. Y mucha. Antes, ahora, después y para siempre.

Es que ningun obispo de la catolica España haya puesto su firma al documento en contra del "Sinodo" aleman

D. Jose Luis:
¿Cuál es la mejor manera de actuar en el caso de que un sacerdote no quiera dar la comunión en la boca ?

Gracias.






Con tu libertad d hijo d Dios en su Iglesia. Y con la prudencia q debe caracterizarte.

Ahora, gran parte de la Jerarquía, con las honrosas expeciones que hay en todas partes, se han dedicado a hacer de salteadores, de ladrones y de mercenarios; que no es que hayan huído al ver el lobo: es que lo han llamado para que se cebase en las ovejas. Y han hecho estragos. Y solo quedan ya un pequeño resto.

LOS JANSENISTAS ESCRIBIAN COMO UD PADRE.

Se creían los únicos iluminados, y hablaban mal de los Pastores de la Iglesia.

10:16 qui vos audit me audit et qui vos spernit me spernit qui autem me spernit spernit eum qui me misit






Quédate muy tranquilo, q no soy jansenista, ni lo pretendo. Personalmente, no escribo nada q no esté en los dichos y hechos d toda esa gente q te preocupa; ni contesto y/o contrastó todo eso con la Palabra d Dios.
Si no sabes lo q está pasando, o no lo valoras, o crees q no va contigo, o q ya lo arreglará el tiempo... me da q tienes un problema si tú, apoyado en la cita a la q te agarras estás d acuerdo con la ordenación d sras. o srtas, el problema lo tienes tú, y no yo.
Podría seguir, pero no lo estimo necesario.

Padre, me parece que está apuntando mal.

No he leído que la inmensa mayoría de los Obispos esté de acuerdo con la ordenación de mujeres, o que proponga herejías, o doctrinas peligrosas. Yo ni lo dije ni estoy de acuerdo con algo ya zanjado por el Papa San Juan Pablo II.

Puede haber algunos, pero Ud. plantea que la Iglesia es una ciudad tomada por dentro por sus pastores. Ud. está afirmando que los Maestros yPastores son TODOS JUDAS. En su cenáculo los malos son los once y el solitario y único es el bueno

Con su criterio NADIE VA AQUERER ENTRAR EN UNA COMNIDAD DE LOBOS, con lo cual mata la predicación. ¿ Cómo va a poder predicar las bondades de la Iglesia si Ud. dice que es una comunidad de lobos que se manducan el redil entero?

Así mismo, Ud. también caería en la volteada, pues ¿ Porqué un no creyenye sería convencido por Ud. de que SU BANDO o pequeño grupo posee la verdad, si Ud. muestra que la Iglesia es un nido de alimañas?

Son una contradictio in terminis.

El ataque y desprecio de la jerarquía, como dice clara y contundentemente Nuestro Señor, es despreciarlo a El.


Que Dios nos ilumine







Que Dios nos ilumine: ¡faltaría más! Sin Él, todo lo nuestro es pura filfa. Pero después de pedirle su Luz, hemos de aplicarnos lo que Él mismo nos dice también: que hemos de ver, oír y entender: en caso contrario, estamos a merced de los lobos, entregaditos.
Respecto a la mayoría de la Jerarquía, unos se pasan de bando, como Judas. Otros, ante los desatinos de estos, callan como muertos; y hacen tanto o más daño que los primeros. Y solo un muy pequeño número -hablo de España, fundamentalmente, pero es extensible a todas las naciones, antes católicas, del mundo occidental-, se atreven a ir contra esta deriva... que ha desertizado naciones enteras.
¿O acaso España, por ejemplo, te sigue pareciendo católica? ¿Y Europa? ¿Y el mundo occidental?
Donde está habiendo un resurgir católico, también en contra de parte de su Jerarquía, es en EEUU. Y en Francia, como un movimiento desde abajo, desde el pueblo fiel...,al margen y en contra de su Jerarquía; que, en el mejor de los casos, se ha subido a este carro.
Tú mismo, Juan. Que cada uno se autoengaña como quiere y con lo que quiere. Si tú quieres decir que todo va fenomenalmente bien, pues es tu problema. No el mío, te lo aseguro.
El desprecio a la Jerarquía solo se da cuando esta habla desde Dios y hacia Dios: cuando habla en sentido contrario, o "se distrae" y "se refugia" en Cáritas, decirlo, denunciarlo, explicarlo y combatirlo, desde Dios y hacia Dios, no es despreciarLe, sino todo lo contrario: escríbeselo a los Jerarcas que conozcas.
Con todo, y para que te quedes tranquilo sabiendo que te equivocas, te copio: "Antes, la copa se estaba llenando, ahora está rebosando. Muchos cardenales, obispos y sacerdotes van camino de la perdición y con ellos llevan a muchas almas. Meditad en la Pasión del Señor y haced caso a Nuestro Señor y no le ofendáis más, que ya está muy ofendido" [Palabras de los Mensajes de Garabandal y Fátima]. ¿Te suena lo que cardenales, obispos y sacerdotes? ¿Y lo de 'muchos'? Pues eso.
Te copio además del P. Pío: (Creerán, quizá) "cuando sea demasiado tarde..." [Se refiere a las apariciones de Garabandal, precisamente rechazadas por ¡la Jerarquía! Que no por el pueblo fiel, que sigue yendo allí.
Así van -y así están- las cosas de la Iglesia. Si no lo ves, o si no crees ni lo que ves, y te quedas en el "buenismo" que choca frontalmente con la realidad, tienes un grave problema.

Padre Aberasturi, usted trabaja y reza denodadamente para que el que lleva el timón de la Iglesia de Jesús para nuestra salvación no lo abandone.







Muchísimas gracias por tus palabras. Reza x mi.

Padre: Voy a comprar su libro. Lo que más me ha hecho sufrir en los últimos 9 años es el silencio y la aparente complicidad de la Obra de Dios. Gracias a Dios, sigo de la mano de San Josemaría, pero como si fuera en una celda dentro de mi propio corazón. Trato de leer solo lo que él escribió y he leído bastante! Porque lo que me llega ahora es una puñalada cada vez que nombran al señor que ocupa la cátedra de San Pedro en este momento. Rezo por usted y le suplico que rece usted por mí. Nuestro Padre sigue velando por nosotros.

Padre yo me guío por los Maestros que Dios ha puesto, no por las apariciones.
Es muy fácil fundar las desobediencias en apariciones o dichos de santos.
Los protestantes, Husitas, Lolardos, Jansenistas , anglicanos y otras de esas hierbas, las fundaban en Palabras mucho más certeras e importantes que las meras apariciones privadas, EN LAS SAGRADAS ESCRITURAS

Siempre hay una excusa para desobedecer.

Ahora los tradicionalistas, de monárquicos han devenido populistas e invocan las fuerzas de abajo.

No Padre, si quieren ser desobedientes sean sinceros y digan abiertamente que se pasan de las jerarquías que no les gustan. Es un libre examen que se hace sobre las jerarquías. Obedezco al que me place y que toca mis campanillas..

Cosas veredes Sancho que farán fablar las piedras.
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Y para montarse las cosas como a uno le da la gana, sobra hasta el mismo Jesús. Por cierto: Fátima no es una revelación privada: es la Virgen María q se ha aparecido. Y lo mismo en Garabandal...
Pero, como dicen en Aragón: "para tí la perra gorga" (de cuando las habia, claro).

Como hizo Jesús en el huerto de los olivos, todos los días rezo por la unidad de la iglesia, he visto tantos desatinos.
Compraré su libro, siempre estoy con los que son tan fieles como Ud.
Dios le bendiga y le premie.




Muchísimas gracias, Marina. Y reza por mí.

Enhorabuena por el libro. Sigo sus artículos. He adquirido el libro para leerlos con calma y profundizar sobre ellos. Valió la pena, don José Luis. Recuerdo muy bien su primera misa, no era más que un chaval de 15 años. Y lo recuerdopor la presencia gozosa y atenta de su madre a su lado en el besamanos posterior, y por la presencia de la mía, ya muy enferma, que lo vivió con gran alegría y gozo. Murió al mes y medio. Fue una de sus últimas alegrías antes de irse al cielo. Y pensar que este sacerdote ha hecho tanto bien! Deo gratias. Por muchos años.

Juan:
Dices que no te guías en apariciones.

No te has dado cuenta del gobierno y providencia de Dios?

Cada una de las Apariciones autorizadas por la Iglesia, advierten sobre un peligro y dan un claro mensaje respecto a una situación concreta.

En Guadalupe se aparece a un indígena ya cristianizado para anunciar el advenimiento de la fe y la formación de la identidad cristiana: "No estoy yo aquí, que soy tu Madre".
En Grabandal advierte sobre el concilio Vaticano II: "Muchos sacerdotes van por el mal camino"
En Fátima advierte sobre "Rusia y sus errores se esparcirán por el mundo"

Es como si nos dijera el cielo que en la Iglesia ya no se le escucha y elige a quienes sí le escucharán....

Si solo escuchas a los que les dices "Maestros", corres el peligro de no entender el gobierno y providencia divina. Uno se refiere al plan trazado por Dios manifestado en la Revelación, y otro se refiere al diaro acontecer en donde aplican las "Apariciones autorizadas por la Iglesia".

El hecho de que la promesa de Cristo sobre la indefectibilidad de la Iglesia incluya nuestra cooperación libre no la convierte en una promesa condicional, salvo en el sentido de que Dios sabe desde la Eternidad, porque así lo ha dispuesto además, que la condición, la cooperación libre de los hombres, se va a dar.

Dios no puede estar en ultima instancia condicionado por la creatura, y si tiene Voluntades condicionales, depende en definitiva de Él mismo que la condición se dé o no se dé, sea por vía de causalidad o por vía de permisión.

Dios es el Señor de la historia y también de nuestras libertades. No está esperando a constatar en el futuro si efectivamente la Iglesia le es fiel hasta el fin o no.

Dice Santo Tomás en Ia, q. 19, a. 6:

"(...) si alguna causa particular falla por su efecto, esto sucede por la existencia de alguna otra causa particular que lo impide, y que está sometida a la causa universal. Por eso, ningún efecto puede darse fuera del orden de la causa universal. (...)
Así, pues, como la voluntad de Dios es la causa universal de todas las cosas, es imposible que la voluntad de Dios no consiga su efecto. Por eso, lo que parece escaparse de la voluntad divina en un orden, entra dentro de ella en otro. Por ejemplo, el pecador, en cuanto tal, pecando se aleja de la voluntad divina, y entra en el orden de la voluntad divina al ser castigado por su justicia."

Y también

"La causa primera puede ver impedido su efecto por fallar la causa segunda cuando no es la causa primera universal, en la que están contenidas todas las demás causas; pues ningún efecto escapa al control de la causa primera universal. Y esto es lo que sucede con la voluntad de Dios, como ya se dijo."

Y es claro que Santo Tomás no niega nuestro libre albedrío. Por el contrario, entre esas causa que no escapan al control de la Causa Primera universal están las voluntades libres de los hombres.

Así hay que entender las palabras del Señor: "El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán".

Por eso es que Nuestro Señor pudo prometer que las puertas del Infierno no prevalecerían sobre la Iglesia, y que Él estaría con los Apóstoles y sus sucesores hasta el fin del mundo.

Saludos cordiales.





Y por eso puede amenazar, y con "fiereza" incluso..., y no cumplir su amenaza, pues los hombres se han convertido y hecho penitencia: y Dios perdona. Y por eso también, puede escoger Doce Apóstoles, y uno traicionarle, con todas las connotaciones personales del sujeto que se quieran. Y por eso también esa misma traición es el instrumento del que se vale Cristo para Redimirnos. Y por eso, aun siendo ésta Universal y Sobreabundante, las almas caen en el Infierno a chorros.
Todo es así: un ten con ten entre Dios y el hombre, porque ha querido Dios correr el "riesgo" de nuestra libertad, con todas sus consecuencias: también la de la Condenación Eterna. Porque la única "causa", aún siendo "causa segunda", por la que Dios se "deja derrotar" en este mundo -como dicen en Aragón: "para ti la perra gorda"- es la voluntad humana. Una derrota que no es tal, pero que sí es en parte, porque la Palabra del Juicio Particular y Final es siempre de Dios. Y es DEFINITIVA.