"La Iglesia no puede decir lo que es o no familia" (por la progrez eclesial)
En el caso que nos ocupa -decir lo que es o no es familia-, si fuese verdad que la Iglesia Católica -o cualquier otra “iglesita", incluida la “neoprogrésica"-, se arrogase el poder determinar y decir “lo que es la familia", estaría cometiendo un grave error: vamos, “fuera de tiesto total".
Que es la acusación que desde las páginas de RD, las del “veneno mortal", le lanza un tal Fernando Vidal, que no sé quién es. Y el otro Vidal, el “veneno mortal” antes aludido, babea con estas afirmaciones y otras parecidas; y se refocila publicándolas.
Se les cumple a todos estos -tambièn a sus teloneros y a sus mantenedores-, aquello tan conocido de san Pedro: el perro vuelve a su vomito y la cerda lavada a revolcarse en el cieno (2 Pe 2, 22).
El problema monumental -aunque “sarna con gusto no pica"-, que tiene la progrez eclesial es que acusa a la Iglesia Católica de lo que Esta ni hace ni dice. Vamos que la progrez siempre se echa al monte, porque allí vive, tan a gusto, como las fieras más salvajes, para “robar y matar": como buenos “salteadores” y convencidos y bien pagados “mercenarios".
Porque, vamos a ver, almas de cántaro, ¿cuándo y dónde ha pretendido “eso” la Iglesia Santa? Nunca, ni en ningún lado. O pasarme las citas, por fa.
Lo que hace la Iglesia Católica -y lo hace porque lo debe hacer: es su Vocación y Misión, recibida del mismo Jesucristo, su Dios y Señor-, es recordarle a todo el mundo -primero a sus hijos; a ellos se debe en primer lugar, incluso cuando estos la desprecian y combaten-, lo que Dios -¡sí: lo que Dios, y nadie más que Él!- ha instituido y ha dejado meridianamente claro desde las primeras páginas del Génesis.
Primero: que nos crea “hombre” y “mujer", “varón” y hembra". Por una tan sencilla y elemental razón: que solo desde esa REALIDAD -dos SEXOS, masculino y femenino-, puede haber PROCREACIÓN, que es la VOCACIÓN a la que llama a la inmensa mayoría de sus hijos en su Iglesia en medio del mundo: Creced y multiplicaos y henchid la tierra.
Segundo: por esto Dios proclama a los cuatro vientos, dejándolo hasta por escrito para que no se pierda ni a nadie se le despiste el tema: Dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne. Más redondo, y más claro, imposible.
Resumiendo: lo que la Iglesia Católica hace -y pretende- al RECORDAR estas cosas es, precisamente, que: lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre; como afirmará el mismo Jesucristo, cuando se remite “al principio” -lo recogido en el Génesis-, y le recuerda al personal que tenía delante estas cosas tan elementales. Vamos: que no hemos de meter ahí nuestras sucias manos, por pecadoras, como primer motivo, aunque hay más.
Cosas “elementales"…, excepto para la progrez, que “ni oye, ni ve, ni entiende". Se han corrompido y, por tanto, se han anulado a sí mismos de ese modo tan brutal y absoluto, por haberse entregado, en cuerpo y alma, a las IDEOLOGÍAS más repugnantes que existen.
NO es la Iglesia quien “se inventa” el modo genuino de lo que es la FAMILIA: su REALIDAD, sí o sí. Es DIOS quien lo “inventa”. Y Quien nos enseña, como buen Padre, de qué va la cosa.
Por contra: SÍ es esta PROGREZ eclesial -mezquina, mendaz y vendida-, la que, arrastrándose por el cieno de la mentira, pretende “inventarse", contra la establecido por Dios mismo -a estos no se les pone por delante ni siquiera Dios-, lo que quieren que sea “la familia” -para dejar de serlo, precisamente-, y sus “aficiones” más inmundas.
Esto sí es un “error", un “inmenso error", como pretenden acusar y acusan, en esas cizañeras (por lo evangélico), y calumniadoras páginas (por lo moral, simpliciter), a la Iglesia. De la que no se sienten hijos.
Les pasa lo que a los fariseos: “¡Nosotros somos hijos de Abrahám!”, pretenden “argumentar", contra Jesús. Y el Señor los pone en su sitio.
No entienden -no están por admitir-, que la Iglesia diga públicamente que “no tiene poder para bendecir el pecado”. O, como ha dicho también respecto a la pretendida “ordenación” de señoritas o señoras: “no se siente con poder para hacer algo distinto a lo que ha hecho el mismo Señor”. Insisto: que lo entiende cualquiera que no esté IDEOLOGIZADO hasta el tuétano.
Y, claro: se revuelven como fieras contra Ella: “¡todavía se atreve a seguir hablando!”. “¡A por ella, y con toda la artillería!”. Y, así, están sacando personal a manifestar su “rebelión".
Por cierto: no me da ninguna pena lo de los trepecientos “sacerdotes” que han dicho que van a seguir bendiciendo a quien les dé la gana.
Por una buenísima razón: que estos tiempos, a propósito de estas y otras cosas, son tiempos para DEFINIRSE, según la definición que nos ha dejado reglada el mismo Jesucristo: El que no está conmigo está contra Mi. Que también lo entiende cualquiera…, menos las vacas y sus émulos.
A estos les pasa lo mismo que a Judas, cuando María, seis dias antes de la Pascua, tomando un frasco de nardo purísimo, y muy caro, ungió los pies de Jesús y los secó con sus cabellos.(Jn 12, 3); besándoselos, además, con devoción y auténtica adoración.
Lo valoró con ojo experto el tal Judas, cuando “se rasgó las vestiduras” denunciando hipócritamente el “despilfarro” de la hermana de Lázaro y Marta: “¿Por qué no se ha vendido este perfume por trescientos denarios y se ha dado a los pobres?”(Jn 12, 5). Indignado por demás, oyes.
La verdad es que a san Juan, que es el que narra esta escena, “se le hinchan las narices” con el autor del exabrupto, y “se le va la pluma” -por nosotros, le dice el Señor que lo ponga tal cual-, y escribe: Pero no decía esto porque le preocuparan los pobres, sino porque era ladrón; y como tenía la bolsa, se llevaba lo que echaban en ella (Jn 12, 6). Que también lo entiende todo el mundo, creo.
¡Ya está bien de aguantar y callar ante esta gentuza! . Y no se calla san Juan, claro; y bien que lo escribe y define, poniéndole en su sitio: en la basura.
Porque uno se define hablando, o callando, al respecto de lo que está pasando. Y la gente sabe así a qué carta quedarse: si todo es como nos han enseñado desde siempre, perfecto. Lo “nuevo” sin ton ni son: “¡no, gracias!".
¡Todos estos tienen suerte de que los obispos católicos no sean ayatolás! Bueno, algunos no parecen ni obispos católicos, por supuesto, tal como funcionan: estos últimos son los que están más lejos de esa categoría. Pero, aunque no quieran, también les toca definirse; y con mayor razón y cargo de conciencia que los meros sacerdotes, por poner un poner.
Por eso hablan y escriben estos tíos contra la Iglesia y su Doctrina: porque saben que sus “legítimos pastores” no van a mover ni un dedo: ni por la misma Iglesia ni, mucho menos, por ellos.
“Están locos estos romanos”, que diría el clásico. ¡Y más “perdidicos” que los del sanedrín de la época!. Por algo pretenden erigirse en el “nuevo” y “único” sanedrín: el único con derecho a decirle a Jesús lo que puede y no puede decir. Y si no se aviene, pues ya sabe, y que se atenga a las consecuencias: ¡Crucifícale, crucifícale!
Así pretenden hacer con la Iglesia -y con los eclesiásticos: con los bien definidos y posicionados-: o se calla, o la crucifican. Y en eso están.
Y ahí nos tienen que encontrar a los hijos de Dios en su Iglesia en medio del mundo: dando la BATALLA, porque la época de callar -si es que ha habido alguna en la que ha estado legitimado callar-, desde luego no es esta en la que el HOY de la IGLESIA somos los que estamos.
Si no, no somos: porque no estamos… aunque nos creamos que estamos. Y perdón por si a alguien le parece un galimatías lo que acabo de escribir.
“Van daos”, que dicen por Aragón, los de la progrez eclesial.
Y a seguir rezando: cada día que pasa hace más falta, y nos es más urgente y necesario hacerlo.
18 comentarios
Los que no se doblegan.
Así que la Iglesia católica no inventó nada, siempre lo mismo en todas las geografías desde los albores de la civilización, entre sociedades politeístas, monoteístas e incluso entre sociedades ateas como la cubana castrista, o soviética.
Pero ahora la progrez cultural o teológica se quieren arrogar el poder para determinar lo que es familia, acusando a los demás de querer "imponer" su propio concepto.
Leyendo sus referencias busqué la página Rd y al tal vidal. Descubrí a quienes se refiere. No conocia el sitio.
Si tengo que describirlo diré que es una hediondez que emana de la impureza.
No deberían comentaristas asiduos de info empezar a corregir a través de comentarios tantas desviaciones?
Bendiciones Padre!
Todo lo que sale de la compañía huele a carroña....
Quizá no sea todo, en mi opinión: pero las cosas, ciertamente, están como están.
Quieren cambiar la moral y las costumbres. Tienen tendencias socializadoras, innovadoras en aspectos de la vida social.
El socialismo de hoy es tecnocrático de las grandes empresas en internet. El mejor amigo de los políticos es el dueño de estas empresas. Son siameses. Por eso, se dice que esas empresas funcionan como, o son, públicas.
Es un socialismo corporativo que impone sus intereses y reformas en pro de sus objetivos eugenésicos. Ataca a las familias y al catolicismo.
"El que no está conmigo, está contra Mi".
Gracias, D. Jose Luis, por animarnos a definirnos en estos tiempos recios.
Recemos para que el Señor nos enseñe a pelear esta batalla. El tiempo apremia!!!
Hace unos días discutía de cosas parecidas con un hermano. En mi parroquia el sacerdote acababa de abrir una brecha que será difícil volver a cerrar, pues no se acobardó para sembrar confusión pero acaso no tenga el mismo arrojo para deshacer entuertos. Sus palabras oscuras fueron la excusa perfecta para que una parte de la feligresía creyera que tenía perdonados sus pecados por el simple hecho de hacer una especie de examen de conciencia comunitario y así muchos se acercaron a comulgar imagino que con sus cargas a cuestas. Que no les dió la absolución el sacerdote (y aunque lo hubiera hecho no cambiaría nada) pero su forma de expresarse hacía fácil entenderlo así.
En casa después lo hablaba con un hermano, el cual, me dijo, hubiese acudido también de haberlo sabido, pues porqué, decía, tenemos que contarle nuestros pecados a otro hombre, mucho mejor a Dios, y después de un tema se pasó a otro hasta llegar a las mujeres, las cuáles deberían poder decir misa, etc, etc.
Llegados a este punto yo le dije que porqué quería misas ya que si no necesitamos el sacramento de la penitencia porqué sí el de la Eucaristía, si la confesión no nos sirve porqué la misa sí, mejor, si estamos en ese plan, nos confesamos con Dios, oramos cada uno a Dios como nos parezca, y ya no hacen falta ni sacerdotes, ni sacerdotisas, ni iglesia, ni nada. Eso sí, cuando el Justo venga a impartir justicia ya sabremos lo que nos espera, aquello de "os lo aseguro, no os conozco", nos va calzar como un guante, pues el Señor no vino al mundo a dar la vida por nuestra salvación de la forma más horrenda para que nosotros acabemos despreciando todas sus enseñanzas y su sacrificio.
Y es que hoy parece que hay muchos dispuestos a suplantar a Dios, que se quite Él que ya me pongo yo (que soy más listo).
Sí, tenemos que dar la batalla y rezar. Para que se salve quien se pueda salvar y que estas personas caigan de su pedestal y vuelvan a acoger la fe que nos transmitieron nuestros antepasados, que tontos no eran.
También por nuestros obispos, que entiendan que también para ellos ha llegado su hora.
Un saludo y unamos nuestros sufrimientos a la Pasión de Cristo. Que Dios nos perdone.
2. Hoy día es válido diferentes verdades para distintos señores.
3. Ya no es sólo que la persona inteligente es movida por un fin, pues al rechazar la propia naturaleza va al tun tun voluntarista de sustituir a Dios por sí mismo.
4. Pero, la realidad es más tozuda e inequívoca, pues ante los hechos no valen los argumentos voluntaristas, ni los votos, ni lo que yo quiero. La realidad es objetiva, me guste o no me guste.
5. Del orden de la Cristiandad se está pasando, por lo civil y por lo eclesiástico, salvo excepciones, al desorden bárbaro de la dinastía de la democracia de la Libertad sin Dios y la Legalidad sin fe en Cristo y sin la razón.
6. La razón, la ciencia, el sentido común, la lógica y la fe humana nada puede contra quien ya tiene sus ideas pre y post establecidas -así no pueden confundirle los hechos- amparadas por leyes positivas "democráticas". Pues la Verdad ha sido democratizada y los gobiernos "democráticos" cumplen la tesis marxista de las clases y la verdad la tienen los grupos de opinion mayoritarios de "su verdad". Así, en "democracia" la verdad objetiva se salta a la torera la razón, la ciencia, el sentido común, la lógica y la fe humana de nuestros antepasados dando como verdad válida la que se vota democráticamente. De modo que, la familia natural si la mayoría vota que no es así, entre varón y varona, sino que es natural la familia monoparental, ... poliparental o vaya Ud. a saber el tun tun voluntarista del momento (delfín y mujer; estación de tren y hombre); que los animales tienen derecho con objeto de abortar y eutasianar al hombre porque son iguales -una acumulación de células-; etc. estamos en el mundo al revés, como en Bob Esponja: desorden bárbaro de la dinastía de la democracia de la Libertad sin Dios y la Legalidad sin fe en Cristo y sin la razón.
7. Los católicos verdaderos debemos alumbrar y sazonar en la universalidad de la Verdad, peregrinando por el Camino que nos ha enseñado el Maestro celestial y dando razones de nuestra esperanza en la Vida.
Se aplica a estos pretendidos "progres" lo de Sto. Tomás de Aquino:
"Cursus celerrimus, SED PRAETER VIAM" (= Carrera aceleradísima, PERO FUERA DEL CAMINO).
¿Y nadie los llama al orden? ¿No hay que "confirmar a los hermanos" (Lc 22, 32), cuando andan errando tan descaradamente?
Me da que no has pasado del título, y así es imposible, Pepe. Lo explico perfectamente, porque lo hago recogiendo la Revelación: de este modo, es imposible equivocarse.
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