«La Virgen del Olvido, Triunfo y Misericordias». II

Muy felizmente, el pasado sábado, 4 de enero, tuvimos la anunciada Jornada dedicada a nuestra Madre la Virgen del Olvido, Triunfo y Misericordias. Y fue un triunfo de la Señora. Total. La Iglesia casi llena, muchas confesiones -auriculares y secretas-, rezo del Santo Rosario, con comentarios de Introducción a los Misterios, de sor Patrocinio. Todo esto mientras estaba el Santísimo Expuesto a la veneración y adoración de los fieles.

A las 20,00 pm la Santa Misa, acompalada por tres jóvenes violinistas, chicas las tres, que estuvieron fenomenal y dieron realce a toda la Ceremonia. Las Concepcionistas Franciscanas cantaron “divinamente": sor Patrocinio estará muy contenta. Al final de la Misa, cantaron la Salve a la Virgen del Olvido; y acabamos todo con la adoración al Niño Jesús.

Una tarde muy feliz. La gente que asistió, extraordinaria: incluso vino gente de fuera de Madrid; por ejemplo, una familia con seis hijos, que vino de Pozuelo, creo recordar. 

Todo fue un exultar llenos de alegría, muy unidos a la Santísima Virgen y a su Hijo, Jesús.

Y ahora viene, después de dar gracias a Dios por medio de su Madre Santísima, dar continuidad a todo esto. Es el nuevo reto que queremos emprender.

Para ello, a partir del próximo sábado, 11 de enero, vamos a tener Exposición Solemne del Santísimo Sacramento, desde las 17,00 pm hasta las 19,45 en que, tras la Bendición, lo recogeremos. Antes, a las 19,15 rezaremos el Santo Rosario. Y a las 20,00 la Santa Misa.

A lo largo de la tarde, tiempo de Adoración y Oración personal, además de atención de confesiones en el confesonario. Y este mismo plan lo vamos a tener, Dios mediante, TODOS los sábados de este Año Nuevo, hasta el verano. En verano, veremos qué se puede hacer y que no, y lo anunciaremos con tiempo.

Vamos a convertir la Iglesia de las Concepcionistas Franciscanas en un remanso de paz, de silencio -"el portero de la vida interior"-, de “estar” con la Virgen y con su Hijo para hablarles, para escucharles, para pedirles, para descansar y encontrar Luz, Alivio, Esperanza y Fortaleza.

Todo está abierto para invitar al que quiera honrar a su Madre, y al Señor. Confiamos en vosotros. Y Ella, y Él, también, por supuesto.

De Maria numquam satis!

Laus Deo!