Opus Dei y el 'Camino' errado
El domingo 1 de febrero, en la noche oscura, se dieron a conocer los premios Goya que vienen a ser como los Oscar españoles pero a lo cutre.
Era de esperar (porque de tal fauna nada bueno se puede pensar) que alguno de los premios lo obtuviera una película de título equívoco “Camino” (pues, evidentemente, juega con el nombre de la protagonista y, además, con el libro del mismo título de San Josemaría, fundador del Opus Dei)
Y, como de lo que se trata en tal película es de zaherir a la Obra de Dios pues a ello se dedicaron todas las personas que, de una manera o de otra, tienen relación con tal hediondo ejemplo de mal comportamiento.
Dos declaraciones saltan a la vista como ejemplo de cómo es posible, sin conocer el tema del que se habla, meter, tanto, la pata.
Jaime Roures, que es director general de Mediapro (productora de la película) y, además, jefazo de la tele-basura llamada “La Sexta” tuvo a bien afirmar, al recoger el premio a la “mejor” (¿?) película, por ‘Camino’ que “Para amargarnos tenemos al Opus Dei. Los sentimientos de culpa que nos inculcan de pequeños no son fáciles de erradicar (cuando somos mayores)”.
Con esto demuestra, bien a las claras, que debe tener alguna especie de trauma infantil del que no ha podido librarse pero que, sin duda, lo han convertido en un burdo y ridículo nuevo rico contento de haberse conocido (y lo conocido es tan poca cosa y de tan baja estofa…)
Por otra parte, cuando se presentó la película “Camino” escribí un artículo sobre la relación entre el Opus Dei, Alexia y Fesser. Dije que “Por otra parte, la familia de Alexia se ha visto obligada a emitir dos comunicados en los que hace frente a la película en cuestión porque, en primer lugar, no ha habido “relación, colaboración o participación de ninguna clase con el director, guionista, productor o cualquier otra parte responsable de tal ficción”. Por si esto fuera poco, tampoco ha sido capaz de atender (quien corresponda) la petición de la familia de que se retirara “El texto con que daba fin a su ficción” y que decía ‘A la memoria de Alexia González Barros, fallecida en Pamplona, en 1985 y actualmente en proceso de beatificación’.
Y es que, en verdad, donde no hay voluntad de rectificar el error, el error aún es mayor, aunque aquí, lo que parece que hay es empecinamiento crítico".Y así seguimos, con tan aberrante (por desviada) actuación, porque, cuando se llega a decir que le debe su película a “Muchos testimonios de personas atrapadas en una institución injustamente llamada Opus Dei” es que nada ha cambiado ni, tampoco, se quiere cambiar.
Pues, la verdad, es que si Javier Fesser cree que el nombre de Obra de Dios está injustamente puesto es que, sin duda, desconoce la espiritualidad de la creación de San Josemaría, no le importa lo más mínimo lo que significa y, lo que es peor, vive en el mundo de la mentira y el engaño.
Aunque esto, en realidad, era de esperar porque la miseria moral y encarnizamiento injusto siempre viene de parte de aquellos que, no pudiendo hacer otro tipo de daño, se ensañan de tal manera con los buenos.
Pero lo mejor (que es peor) es el titular de la noticia: “’Camino’ arrasa en los premios Goya y ajusta cuentas con el Opus Dei”
¿Qué cuentas se tenían que ajustar?
Seguramente las que tienen, en el “debe” de su actuación, aquellos que, de forma negligente y torticera manipulan las cosas a su antojo laicista y las llevan por un camino bastante errado.
…
Hoy, 6 de febrero de 2009, sigue ejerciendo el sacerdocio y la docencia el autor de este artículo.
17 comentarios
Cuando oí hablar por primera vez de la película "Camino", un escalofrío me recorrió el cuerpo. Y es que, ¿qué se podía esperar de los titiriteros de la subvención y la sopa boba?
La verdad es que, tras meditarlo mucho y consultarlo con algún sacerdote de la Obra, decidí ir a verla. La tergiversación del espíritu del Opus Dei era manifiesta.
Yo soy miembro de la Obra de Dios y en la película se refleja un "modus operandi" que no tiene nada que ver con la actividad real de lo fundado por San Josemaría.
Como ya he dicho, los tipejos de la ceja y del no a la guerra (cuando les conviene) representan a esa España atontada y alineada con el gobierno que les mantiene sin trabajar. Y, claro está, todo aquello que represente libertad les repugna y los seguirán atacando con todas sus fuerzas.
Yo ya decidí hace mucho tiempo no volver a ver cine español hasta que los tiorrillos y tiorrillas que se mueven en ese mundo dejen de hacer un uso político partidista y sesgado de su "influencia" social.
+ CREDO IN UNUM DEUM
Pego el enlace de un video muy interesante y simpático sobre espiritualidad del OD
http://www.opusdei.es/art.php?p=31865
Os gustará
Por desgracia, parece que nada bueno puede esperarse de tales tiriteros.
Gracias por el enlace. Está muy bien y dice mucho para aquellas personas que tienen, del Opus Dei, un sentido algo, bastante, equivocado.
Exactamente igual que Ud. pienso. En todo.
En verdad, la tergiversación de la película es bastante grave porque la realidad es muy otra.
Yo fui feliz en el colegio y en la escuela... no tenía con quién jugar en casa. Y el uniforme a ciertas edades, oscuro con cuello blanco almidonado y, en según dónde, con capa y sombrero (no era de mi caso el sombrero y la capa) era de lo más relumbrón y elegante. Sin embargo estoy muy de acuerdo con tus abuelos que cumplieron con su deber (me pone al mil lo del "derecho") de educar a sus hijas de la forma que les pareció más adecuada. En esa época no era frecuente que las niñas supieran otro idioma ni fueran a conciertos ni nada de eso... y no siempre el ambiente de colegio era el mejor. recuerdo, con dolor y pena, la falta de respeto y urbanidad de las niñas del colegio de monjas, mucho peor urbanizadas que las de la escuela estatal a la que también fui. Por aquella época podía pensarse que muchos padres enviaban a sus hijas a colegios religiosos para darse pisto.
Como siempre, la educación, los valores se recibían en casa.
Es el reconocimiento a una propuesta arriesgada que ha debido sobreponerse a innumerables detractores. Nunca es recomendable despertar la ira divina. Pero si su alegato contra el Opus Dei le condena a arder en el infierno, las llamas deberán derretir la media docena de Goyas que se lleva.
Es gratificante y alentador ver que hay gente que, por lo menos respeta unos valores y no se deja adormilar por la masonería que campa a sus anchas por España.
+ Que Dios le bendiga
No creo que haya que borrar tus comentarios. Cada cual puede pensar y decir lo que crea conveniente.
De todas formas, no eres tú la única persona que piensa como has escrito porque cierto es lo que dice y, seguro, muchos padres hacían eso de enviar a sus hijas a colegios religiosos para darse cierta importancia.
Sin embargo, ahora, creo yo que hacer eso es, simplemente, querer sobrevivir a la crisis espiritual por la que pasamos.
Yo no sé a qué le llevará, espiritualmente hablando, lo que ha hecho Javier Fesser. Lo que sí sé es que humanamente ha estado mal lo llevado a cabo y, también espero, una consecuencia humana: por ejemplo, el desprecio hacia su película que, creo, ha tenido.
Uno de los puntos que me llama la atención es el ataque al Opus Dei, del cual no formo parte, para bien o para mal. Si la Iglesia y el Mundo no asumen esa espiritualidad ( concretada en el Vaticano II), estamos apañados. Es decir, fritos. Vale. Lo de nuestra admirada o admirable linda Alexia lo comentaré después. Vale bis.
Perdónalos porque no saben lo que hacen ( o quizá sí).
Bueno yo tampoco, no soy un modelo de nada, pero déjame ir a tu escuela. ¿Sí? Yo si quiero salvarme, y de la mejor manera posible, pero necesito mucha ayuda, como mucho quisque. Vale.
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