La palabra del Domingo - 12 de julio de 2009 - Los fue enviando
Mc 6, 7-13. Los fue enviando.
7 Y llama a los Doce y comenzó a enviarlos de dos en dos, dándoles poder sobre los espíritus inmundos. 8 Les ordenó que nada tomasen para el camino, fuera de un bastón: ni pan, ni alforja, ni calderilla en la faja; 9 sino: «Calzados con sandalias y no vistáis dos túnicas.»
10 Y les dijo: «Cuando entréis en una casa, quedaos en ella hasta marchar de allí.11 Si algún lugar no os recibe y no os escuchan, marchaos de allí sacudiendo el polvo de la planta de vuestros pies, en testimonio contra ellos.» 12 Y, yéndose de allí, predicaron que se convirtieran; 13 expulsaban a muchos demonios, y ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban.
COMENTARIO
Enviados
1.-Este texto del evangelista Marcos nos pone en la pista de muchas realidades espirituales que Jesús comunicó a sus discípulos.
2.-En primer lugar, el poder que Cristo tenía sobre los espíritus malos también se lo transmite a ellos. Era, por así decirlo, una forma de entregarles parte de lo que Él tenía; era, pues, una prueba de confianza.
3.-Pero el Hijo de Dios sabía que, como dijera en otra ocasión, el trabajador bien merece su salario. Sus enviados, como trabajadores de la mies del Señor, encontrarían su sustento cuando fuera conveniente.
4.-Nada que llevar. Sólo algo con lo que apoyarse: un bastón. Pero del resto de pertenencias propias de alguien que va de un lado para otro (alforja, dinero…) nada de nada. Extraño era aquello.
5.-Sin embargo, sus discípulos confiaron. Y lo hicieron porque el mensaje de la Buena Noticia, la llegada y anuncio del Reino de Dios era más que suficiente.
6.-Dos actitudes tenían que tener: en aquellos lugares donde eran recibidos y aquellos en los que no eran, precisamente, bien recibidos.
7.-En el primer caso, podían predicar y quedar en la casa que los acogía porque habían entendido, sus moradores, que aquellos enviados eran los enviados de Dios. La paz estaría con ellos, sin duda.
8.-En el segundo caso, hasta el polvo de los pies tenían que sacudirse indicando que ni aquello tan mísero lo querían de un lugar donde no los habían acogido y, al menos, habían querido escuchar el mensaje que llevaban de parte de Jesús: nada querían… pues nada esperaban de ellos.
9.-Así, dice Marcos, que, efectivamente, partieron de donde Jesús los había enviado y predicaron buscando la conversión de sus contemporáneos en la seguridad de que llevaban la Verdad en sus labios y, también, en los recuerdos que los unían al Enviado de Dios.
10.-Y se cumplió lo que Cristo les había dicho: expulsaron demonios… señal del poder que les había dado; curaban enfermos al ungirlos con aceite…
11.-Así, sus discípulos confiaron en la palabra de Su Maestro y se entregaron a llevar la Palabra de Dios, el testimonio de su conocimiento del Cristo, a aquellas gentes que desconocían la Buena Nueva.
12.-Entonces… a cada cual de nosotros también se nos pide que hagamos otro tanto. En nuestra vida ordinaria, en nuestro cotidiano hacer… transmitir la Palabra de Dios, la doctrina de Cristo…
ORACIÓN
Padre Dios; ayúdanos a no olvidar que también somos transmisores de Tu Palabra y a llevarla, en la medida de nuestras posibilidades, al mundo.
Gracias, Señor, por poder transmitir esto
El texto bíblico ha sido tomado de la Biblia de Jerusalem.
4 comentarios
Pues... la verdad, no sé la razón por la cual los envió de dos en dos. A lo mejor era para uno socorriera a otro en caso de necesidad. O, también, para que uno pudiera dar testimonio del otro ante testigos de lo que decían.
De todas formas, creo que lo importante, en este caso,es saber que nosotros también somos enviados a transmitir la Palabra de Dios según nuestras mismas posibilidades.
Y, también, según nuestros propios talentos.
Pues yo me alegro mucho de eso. Seguramente más que coincidir él conmigo lo habré hecho yo con él. A veces,el Espíritu tiene tales cosas...
Un saludo.
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