Casaldáliga y Asociación de Teólogos/as Juan XXIII: progres reunidos, S.L.
En septiembre tienen por costumbre reunirse los miembros de la denominada “Asociación de Teólogos y Teólogas Juan XXIII” (!Qué culpa tendrá aquel gran Papa¡) para tratar algún tema: el de este año es “Cristianismo y Laicidad” que vendrá muy bien para conocer qué piensan las personas que, desde tal Asociación, dinamitan (o tratan de hacerlo) la doctrina católica desde sus posturas, digamos, colaterales, a la misma.
Teniendo como causa tal reunión, Pedro Casaldáliga, que fuera obispo de Sao Félix do Araguaia (y ahora lo es, lógicamente, emérito) ha tenido a bien dirigirse, sobre la misma, con unas declaraciones que ha recogido José Manuel Vidal en Religión Digital, que continúa con su costumbre de promocionar todo lo que sea, o parezca, contrario a la doctrina de la Iglesia católica y a la ortodoxia.
Algunos de los puntos que resulta importante destacar, de Casaldáliga, son los siguientes:
1.-“La separación real entre Religión y Estado” en “nuestra España de la nunca superada Cristiandad” y por una Iglesia “sin privilegios", que sea instancia de paz, de humanización y de encarnación“.
Francamente, no sé yo qué Iglesia católica cree que hay en España. Cualquiera sabe que la separación entre la misma y el Estado es tan grande que, no es que esté separada sino que, yendo más allá de tal separación el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero y sus adláteres políticos y religiosos lo que quieren es, simplemente, que desaparezca la Esposa de Cristo de la vida pública en la que, a la fuerza y por obligación ha de constar y estar.
2.-El denominado “obispo de los pobres” se siente “muy cerca en el compromiso y en la comunión” con el Congreso que celebran los Teólogos/as de la Asociación Juan XXIII porque lo califica como “fiel, estimulante y, al mismo tiempo, sospechoso, para quienes no es posible aceptar en Teología, en Iglesia, en sociedad, voces diferentes y libres“.
Además, cree Casaldáliga, que el Congreso al que se refiere, “es una afirmación, serena y persistente, de ese derecho a vivir de un modo adulto nuestra vocación humana y cristiana“.
De ninguna de las maneras es posible aceptar esto que dice.
Aquí lo que pasa es que tiene una tendencia grave a confundir lo que es voz diferente y libre con voz disidente y libertaria. Cada cual se alinea donde tiene por conveniente alinearse pero eso no quiere decir que seamos incapaces de distinguir lo que es una cosa y la otra y, sobre todo, dónde se sitúa cada cual.
3.-Además, se despide haciendo una profesión de su sentido de la fe: “Cerca en el compromiso y en la comunión, abrazo a todos y todas en la Esperanza inclaudicable de un Otro Mundo Posible“.
Ahí está, precisamente, el meollo, por decirlo así, de todo el mensaje de Casaldáliga: Otro Mundo Posible.
Parece que las personas partidarias de la Teología de la Liberación (como es el caso) no se conforman con el mundo religioso que hay. Ellos/as quieren otro mundo en el que triunfen sus ideas sobre la relación del hombre con Dios que no son, precisamente, las que deben triunfar porque ya hay unas que nos sirven, a la perfección, para relacionarnos unas personas con otras, unos principios, unos valores, una forma de ser…
Pero eso, a ellos/as no les gusta. Y por eso, mezclándolo todo con la política, hacen lo que hacen y dicen lo que dicen.
Sin embargo, el artículo de hoy no va referido, en exclusiva, a Pedro Casaldáliga (porque tendría que volver a repetir lo ya dicho en este tipo de persona y materia) sino que quiere ir un poco más allá.
Y esto lo digo porque creo yo, modestamente, que aquí importa (independientemente de las opiniones personales de Casaldáliga) la tal Asociación de Teólogos/as Juan XXIII.
Recoge el evangelista Mateo que Jesús, en una ocasión, dijo a sus discípulos lo siguiente que, precisamente, viene al caso:
“Un árbol bueno no puede producir frutos malos, ni un árbol malo, producir frutos buenos ” (Mt 7:18)
Pero, acto seguido, añadió:
“Al árbol que no produce frutos buenos se lo corta y se lo arroja al fuego. Por sus frutos, entonces, ustedes los reconocerán” (Mt 7:19-20)
Aquí, ¿Podemos decir que la Asociación de Teólogos/as Juan XXIII es árbol bueno o malo? y por tanto, ¿Dará frutos buenos o malos? y, entonces, ¿Qué sentido tendría, según los frutos, el apoyo de Pedro Casaldáliga a tal Asociación?
Algunas cosas dichas por tal Asociación (en cuanto organización) o alguno de sus miembros, son las siguientes:
1.-El 15 de octubre de 2007, se recogía, en Redes Cristianas lo siguiente dicho por Julio Lois, presidente de la tal Asociación: “El Vaticano debería desaparecer”. Esto es, claro, una afirmación, bastante sospechosa que dice mucho de un determinado tipo de pensamiento.
2.-El 8 de enero de 2008, se recogía, en Redes Cristianas, una Declaración de la Junta Directiva de la Asociación de Teólogos/as Juan XXIII relacionada con la celebración sobre la Familia que se celebró el 30 de diciembre anterior (2007) y en el que manifiestan una serie de pensamientos muy de acuerdo a los suyos pero muy alejados de la realidad.
3.-El 4 de febrero de 2008 (es decir, algo más de un mes antes de las últimas elecciones generales del 9 de marzo pasado), se recogía, en Redes Cristianas una Declaración de la Junta Directiva de la Asociación de Teólogos/as Juan XXIII relacionada con la Nota de la Comisión permanente de la Conferencia Episcopal Española, sobre las elecciones generales a celebrar, Declaración en la cual se pueden entender muchos comportamientos tanto de unos (Redes Cristianas) como de otros (Teólogos/as de la Asociación Juan XXIII) pues aquí no parece que haya demasiada separación entre Estado (el de izquierdas) y la Iglesia católica.
Leyendo esto a lo que aquí se ha hecho referencia, puede apreciarse, a la perfección, que siempre son las mismas personas, las mismas páginas internáuticas y los mismos pensamientos los que se expresan.
Diferencia entre unos y otros: cero
Novedad: ninguna
Aportaciones positivas: escasas y, a veces, torcidas.
Futuro inmediato: el biológico de sus miembros (y, por esto, que sean, aún, muchos años; una cosa es una cosa y otra es otra, porque el tiempo de arrepentimiento no caduca).
Y, aunque podría haber seguido durante un buen rato escribiendo sobre los desafueros dichos por la Asociación de Teólogos/as Juan XXIII como tal, por alguno de sus miembros o por el propio Pedro Casaldáliga, creo que es, ya, suficiente por hoy porque, seguramente, darán más que hablar.
No les queda otra porque frutos, lo que se dice frutos, pocos han recogido que sean buenos a no ser que sean en el campo contrario, en el de la separación y la discusión inútil.
Por eso los conocemos. Para su desgracia.
7 comentarios
En una convivencia de un grupo llamado "Misión Obrera", a la que asistí, este Julio Lois dio conferencias y a mi me cogió aparte para convencerme de que la resurrección de la carne es algo "literario" no real, que esto lo aceptaban todos los teólogos hoy en día, que había que entender qué era lo que significaba la carne. No sé por qué lo hizo si yo no me pronuncié ni antes ni después, y gracias a Dios ni me moví un ápice de la fe de la Iglesia. Pero allí presidiamos la eucaristía por turnos , hombres y mujeres, algunas religiosas, y las lecturas eran textos de lucha de clases y Nicaragua era lo más de lo más.
Todavía le pregunto al Señor cómo caí por allí.
Esto que Ud. dice es, creo yo, demasiado grave.
El hecho de que se utilicen textos relacionados con la lucha de clases y sobre la Nicaragua de ya sabemos quién es de una gravedad, digamos, de grado 7.
Sin embargo, que se pueda sembrar al cizaña de la duda sobre, por ejemplo, la resurrección, es de una gravedad que supera, con mucho el grado 10 porque resulta que se establece algo que, según es conocido, si no es real de nada vale nuestra fe porque la misma se asienta, más que nada, en al Resurrección de Cristo.
Además, si como dice Ud. "presidían" la Eucaristía, es decir, hacían las labores de sacerdotes quienes no lo eran y quienes no podían, la cosa es bastante más grave de lo que yo mismo creo que, en verdad, me muevo en lo obvio pero no puedo llegar más állá de lo que puedo conocer.
Desde este humilde blog pido, por favor, que las personas que tengan conocimiento de abusos cometidos contra la Eucaristía (es decir, que conozcan, personalmente, casos en los cuales, por ejemplo, la preside alguien que no está autorizado para hacerlo o se abusa de la Santa Misa de alguna forma) o, también, puedan aportar hechos y actos contrarios a cualquier otro Sacramento, me lo comuniquen, personalmente, al siguiente correo electrónico: [email protected], para tratar de dar a conocer, de la forma más discreta posible (es decir, total) en cuanto a persona que así lo comunique, en una nueva categoría que podríamos llamar "Abusos Sacramentos" todo lo que se pueda producir en contra de los Sacramentos.
Muchas gracias.
No obstante la ideología que sustenta tanto a una como a otra es, esencialmente, la misma.
Exactamente, sin la resurrección nuestra fe es vana. Pero sabemos que no es vana porque la resurrección fue un episodio real, cierto.
Eso no nos lo va a quitar nadie por más laicista que sea.
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