Una ventana a la Tierra Media – El todo de Tolkien: 4. Relatos cortos

Resultado de imagen de JRR TOLKIEN

Es verdad que cuando se habla de un autor tan consagrado como es J.R.R. Tolkien enseguida le vienen a uno obras de todos conocidas como son El SilmarillionEl Hobbit y, ¡cómo no!, El Señor de los Anillos que debe ser uno de los títulos de la literatura universal más repetidos desde que consiguió publicarlo allá por los años muy pasados del siglo que pasó, el XX. 

Sin embargo, como es sabido por todos aquellos que se hayan llevado a los ojos y al corazón lo dejado por escrito por el profesor de Oxford, algo más que tales obras escribió el buen hombre. Y estamos, por eso mismo, más que agradecidos. 

En este caso no nos referimos ni a los Cuentos inconclusos ni Hoja, de Niggle ni a cualquier otra que también puede llevar el apellido de “corta” sino a tres en concreto que, por su significado, nos parece importante reseñar aunque bien sabemos que cualquiera de las demás podría estar aquí a la perfección.

  

Pues bien, nosotros nos referimos a estas obras: 

-Egidio, el granjero de Ham, 

-Las aventuras de Tom Bombadil y, por fin, 

-El herrero de Wootton Mayor.

  

En fin… no se puede decir que se trate de poca cosa sino de mucha y más que mucha pues cada una de ellas se enmarca en el mundo creado, para la literatura, por J.R.R. Tolkien y, como podemos imaginar, vale más que mucho la pena saliéndonos, por así decirlo, de lo que tiene relación, de forma estricta, con la Tierra Media. 

Egidio, el granjero de Ham: J. R. R. Tolkien: Un Tolkien distinto -  Fabulantes

Pues bien, si hablamos de Egidio… no es poco decir que nos cuenta el caso de un granjero un poco especial. Y es que no es poco serlo si se enfrenta a un dragón, de nombre Crisófilax. 

Resulta sintomático de avance social que el humilde granjero llegue a rivalizar con el rey. Y sí, podemos decir que esta obra, aunque entre en juego un dragón, no por eso está más cercana a la Tierra Media que a lo referido al ciclo artúrico de Malory (Thomas), autor inglés, del siglo XV, de La muerte de Arturo que, como algo que puede tener ribetes míticos, tanto tuvo que gustar a Tolkien. 

Ciertamente esta obra, por su publicación en 1949, es bien cierto que podría considerarse un anticipo de lo que luego serían las obras puramente épicas de Tolkien. 

Si lo hacemos de Tom Bombadil, y sabiendo que este personaje, que aparece en varias obras de nuestro autor, es más bien misterioso y dado a explicaciones acerca de su ser por muchos de sus lectores, no es poco cierto que el poema que lleva su nombre l escribió Tolkien para sus hijos pero acabó siendo una canción que interpretaban los hobbits.

 

Tom Bombadil bien puede representar a la naturaleza y tanto es así que los Elfos lo tenían por la encarnación de la energía vital del bosque. 

Es verdad que aunque Bombadil tiene su poema no por eso deja de aparecer, por ejemplo, en El Señor de los Anillos en su primera parte (La Compañía del Anillo) cuando los hobbits (Frodo y los que le acompañan) se encuentran con tan simpar personaje en su caminar hacia Rivendel. 

Todo un misterio este Tom Bombadil… 

J.R.R. Tolkien - Tom Bombadils Lied - YouTube

Y si, por último, nos referimos al herrero, escrito este cuento cuando Tolkien tiene ya setenta años, no es poco cierto que la edad tuvo mucho que ver con el tono del mismo. 

Esto último lo decimos porque la profundidad y oscuridad de la historia del que era de Wootton Mayor, es la propia de alguien que ya ha avanzado mucho en la vida y, a lo mejor, ve las cosas desde otro punto de vista. 

El caso es que Tolkien escribe esta obra cuando le proponen el prefacio de los cuentos de hadas que escribió, a su vez, George MacDonald. Y es que debió creer que era la mejor manera de introducir un tema como ése. 

ChrysophylaxCreates - La Gran Tarta de El herrero de Wootton Mayor – El  Anillo Único

Pues bien, el autor de El herrero de Wootton Mayor muestra aquí, digamos, las amplias formas de su repertorio. Y queremos decir con eso que trata temas como la magia, el deber, el destino, la corrupción et alii. Y nada nos extraña esto pues son los que dominaba a la perfección. Ahora bien, aquí ya trata esto de una forma más profunda y reflexiva pues la fecha de su publicación, allá por el año 1967 del siglo pasado, cogía a Tolkien con una edad, aunque no muy avanzada, sí muy caminada… 

Estas obras son, como decimos, sólo algunas de las que podríamos encuadrar en el apartado de “Relatos cortos” pero no podemos dejar de reconocer que vienen la mar de bien para profundizar en la obra de un autor que, como fue J.R.R. Tolkien (y es, pues sigue vivo en sus palabras) se tuvo que dejar hasta su último aliento en cada una de ellas.

  

Eleuterio Fernández Guzmán- Erkenbrand de Edhellond

Todavía no hay comentarios

Dejar un comentario



No se aceptan los comentarios ajenos al tema, sin sentido, repetidos o que contengan publicidad o spam. Tampoco comentarios insultantes, blasfemos o que inciten a la violencia, discriminación o a cualesquiera otros actos contrarios a la legislación española, así como aquéllos que contengan ataques o insultos a los otros comentaristas, a los bloggers o al Director.

Los comentarios no reflejan la opinión de InfoCatólica, sino la de los comentaristas. InfoCatólica se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere que no se ajusten a estas normas.