El éxito de la JMJ 2011 no será el que muchos dicen
El que esto escribe ha leído, en más de una ocasión, que las Jornadas Mundiales de la Juventud que creó, desarrolló y popularizó el beato Juan Pablo II son ocasión, más que de expresión de fe, de diversión de una juventud tan alocada como la que no es creyente e, incluso, antro de promiscuidad y de todas las perversiones que uno pueda imaginar.
Al parecer, la juventud que acude a ellas lo hace más que por creencias, por ver si cae algo en el saco de la mundanidad.
Ya falta poco, muy poco, para que en agosto de este 2011 se lleve a cabo la Jornada Mundial de la Juventud anunciada por Benedicto XVI el 20 de julio de 2008 cuando asistía a la anterior Jornada celebrada en Australia.
Pues al que esto escribe le parece que la juventud que vendrá a Madrid seguramente tenga en mente otra cosa muy distinta a la que insinúan y dicen los agoreros del Mal.
Por ejemplo, es posible que sigan lo que dijo Benedicto XVI dijo en el Discurso durante la vigilia de oración de la Jornada Mundial de la Juventud en Australia (19.07.2008) cuando dijo:
“Ya sabéis que nuestro testimonio cristiano es una ofrenda a un mundo que, en muchos aspectos, es frágil. La unidad de la creación de Dios se debilita por heridas profundas cuando las relaciones sociales se rompen, o el espíritu humano se encuentra casi completamente aplastado por la explotación o el abuso de las personas. De hecho, la sociedad contemporánea sufre un proceso de fragmentación por culpa de un modo de pensar que por su naturaleza tiene una visión reducida, porque descuida completamente el horizonte de la verdad, de la verdad sobre Dios y sobre nosotros. Por su naturaleza, el relativismo no es capaz de ver el cuadro en su totalidad. Ignora los principios mismos que nos hacen capaces de vivir y de crecer en la unidad, en el orden y en la armonía”.
Por tanto, lo que pasará en tal Jornada Mundial será algo parecido a esto:
1.-Testimonio cristiano
Dado por los jóvenes en sus vidas y en sus circunstancias personales.
2.-No descuidarán el horizonte de la Verdad
No entregarse al mundo de forma y manera que lo que, de verdad, importa (la verdad) se les olvide y no puedan dar testimonio de ella. Darán testimonio de la Verdad.
3.-No olvidar Quien es Dios
Tendrán, siempre, presente, que Dios, como creador suyo, espera que se le tenga presente en sus vidas y en sus circunstancias personales.
4.-No se dejarán vencer por el relativismo
Resulta fundamental para unas personas que tienen toda la vida por delante, no dejarse caer en los brazos de lo que dice que todo vale porque, en verdad, es la única manera de que nada valga.
5.-Fomentarán la unidad cristiana en contra de la destrucción de la misma.
No actuarán de manera que parezca que pretendan terminar con la unidad querida por Cristo y que el beato Juan Pablo II defendiera en su Carta Encíclica “Ut unum sint” (“¡Ut unum sint! La llamada a la unidad de los cristianos, que el Concilio Ecuménico Vaticano II ha renovado con tan vehemente anhelo, resuena con fuerza cada vez mayor en el corazón de los creyentes”, dice en su Introducción)
Y, para que no se olviden estos puntos que son, esencialmente, básicos para comprender el verdadero papel que la juventud ha de llevar a cabo, el Cardenal Antonio María Rouco Varela, anfitrión de la próxima JMJ-Madrid 2011, al poco tiempo de tener conocimiento oficial de tal evento dijo algo (3.08.2008) que es de todo punto importante para saber qué ha pasado hasta ahora en otras Jornadas Mundiales de la Juventud y, claro, lo que se espera de la que se celebre en España:
“Los frutos: de conversión, de opciones vocacionales por el sacerdocio y la vida consagrada, de los compromisos de vida apostólica, entregada al bien integral de los demás, han sido incontables. ¡Sólo Dios los sabe! ¿Y quién puede medir y valorar el impacto producido por esos actos de testimonio y profesión de la fe cristiana, expresados en los grandes momentos de las Jornadas presididos por el Papa, rodeado de los Obispos de toda la Iglesia, en la población de las ciudades y en las sociedades de los países que los acogían? En cualquier caso, el comportamiento de los centenares de miles y, en algunas ocasiones, de los millones de jóvenes participantes, de una finura espiritual y de una calidad humana extraordinarias, sorprendió y admiró a la opinión pública ¡No sólo era posible otra juventud sino que ésta estaba y está germinando en la Iglesia y en el mundo!”
Vemos, pues,
1.-Frutos de conversión.
2.-Opciones vocacionales por el sacerdocio.
3.-Opciones vocacionales por la vida consagrada.
4.-Compromisos de vida apostólica.
Suele ser, por lo general, el resultado de la celebración de una Jornada Mundial de la Juventud y será, seguramente, lo que pase en Madrid, en agosto próximo, cuando el Santo Padre se dirija a los jóvenes allí presentes y al resto del mundo para proponerles algo tan viejo como el Evangelio pero tan nuevo, a la vez.
Otros, sin embargo, seguirán malmetiendo tanto en contra de la organización de la JMJ (que si cuesta tanto dinero, que si la crisis económica, que el Estado no debería participar de ninguna de las maneras, que si esto y que si lo otro…) o, también, en contra de lo que supone, de empuje para la fe de una juventud la celebración de una Jornada Mundial dedicada, especialmente, a ella.
Pero, aparte de los de siempre, es de esperar que el Espíritu Santo no deje de soplar esos días en los corazones de muchos jóvenes que acudirán a la capital del oso y del madroño a decir que creen en Jesucristo y que son, sobre todo, la juventud de la Iglesia católica, el futuro de la misma.
Y los demás… que sigan ladrando porque ya sabemos lo que eso significa sobre cabalgar.
Eleuterio Fernández Guzmán
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14 comentarios
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EFG
Me parece bastante injusto lo que Ud. ha escrito acerca de JMJ (y, a lo que parece, de todas ellas) No sé si es que Ud. ha participado en alguna de ellas o habla de oído.
Yo las veo desde fuera y, siendo bastante lo que se puede leer y ver no me parece que el diagnóstico suyo sea acertado del todo. Si bien es cierto que todo se debe al beato Juan Pablo II y que, no lo pongo en duda, alguno o muchos jóvenes acudan allí por otras razones que no sean espirituales, me parece que lo correcto ha de ser otra forma de hacer las cosas (por parte de los jóvenes) y, seguro, que lo bueno también abunda en Madrid el próximo agosto.
También le digo que lo de Iesu Communio es, aún, más injusto.
¿se encuentra ya bien? ¿ha dejado de vomitar? ¿le traigo una manzanilla? ¿o mejor una tila?
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EFG
Déjelo, de todas formas, es lo que piensa mucha gente y es mejor que se sepa lo que se opina para, dentro de lo posible, desmentirlo.
Así mismo el éxito o no del encuentro de este año en Madrid -como de los encuentros anteriores- no dependerá tanto del número de asistentes, ni de las guirnaldas y las crónicas periodísticas en directo que estarán presentes, sino por los frutos futuros espirituales. Y dado el ambiente de extremado rechazo institucional y mediático en España a este tipo de eventos religiosos, pues de seguro que tales frutos serán muchos y muy auténticos.
Ni se imagina Satanás el bien que hace aullando entre la gente valiente. Por eso dice también nuestro Santo Padre Benedicto XVI el "¡no tengáis miedo!". De esta forma venceremos el mal con la sobreabundancia del Bien.
Y los demás que ladren o aullen, que cada cual haga lo que sabe hacer y lo haga con mayor intensidad.
¡Todos con el Papa! (jóvenes y no tan jóvenes)
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EFG
No voy a negar que pueda haber de todo... entre tantos jóvenes los puede haber algo despistados. Pero, al fin y al cabo se trata de impresiones particulares y muy personales. Seguramente, en aquel encuentro juvenil muchos otros jóvenes se fueron muy edificados espiritualmente.
Y, en cuanto a lo de los kikos... qué quiere que le diga, es bien cierto que hay personas que no pueden soportar, por flaqueza espiritual, el comportarmiento de los movimientos que en la Iglesia católica existen. Lo digo por la exigencia espiritual. Y yo me incluyo entre tales personas pero, en verdad, eso no quiere decir lo que no quiere decir.
Dudo mucho que estos jovenes de "blue jems" se metan la tira de años en un inhospito seminario.
La JMJ en Madrid es para mayor Gloria de Rouco Varela.
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EFG
Claro, y supongo yo que el Santo Padre nada tendrá que decir a los jóvenes sobre su propia vida.
Por otra parte si quiere integrarse en el mundo contemporáneo debería de dejar que las nuevas teologías marquen el rumbo de la nave.
Lo que es un sinsentido es defender ideas del siglo I de manera chachi y moderna.
¡¡Más teología de la liberación y diálogo interreligioso y menos moral!!
Mi propuesta es que en lugar de una celebración eucarística (¡que son repetitivas, señores!) se celebrará un coloquio en donde líderes religiosos mostrarán como al final todos creemos lo mismo un Ente superior utilizado como modelo para crear los distintos credos.
Y para esta época de crisis recordar el mensaje revolucionario y anticapitalista, que no comunista, que Jesús defendió.
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EFG
Me parece que su opción es válida en cuanto representa una forma de pensar. No voy a entrar ahora en la teología de la liberación porque al respecto hay ya mucho dicho.
Ahora bien, es un lugar, a veces, común, decir que Jesucristo era anticapitalista cuando, en realidad, su visión del mundo no era tan simplificadora. Lo que él entendía es que, habiendo ricos (es absurdo pensar que no los habrá nunca) lo que importaba no era la riqueza sino la utilización de la misma, pues no es igual un rico avarioso que otro que utiliza el dinero en bien ajeno. Y eso es lo importante, no que existan personas con mucho dinero y otras con muy poco o nada.
Pero, al menos, hay que tener un respeto por todas las personas que andamos preparando estas jornadas, sobretodo para los jóvenes que están currando para que las jmj sean un éxito.
Aun así, hay que recordar que son las J.M. de la JUVENTUD. Así que dejemos trabajar a los jóvenes que es su fiesta. Y confiemos mas en ellos que no todos son como los pintan "los otros".
Realmente tenemos una buena cantera y hay que mimarla mucho.
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EFG
Tiene Ud. toda la razón. Gracias por su trabajo.
Dado que sólo me ha respondido a las dos últimas líneas de mi comentario ¿ha de entenderse que se adhiere a la otra (parte) de mis afirmaciones?.
Por otro lado no estaría mal que aportará más razones de apoyo a lo que no es más que una burda apología del americanismo.
En las JMJ todo lo cutre, rídiculo, bobo...que representa la cultura useña se da cita.
Yo no quiero una Iglesia imitadora del Imperio
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EFG
"La Iglesia debería de dejar de montar estos circos.
Por otra parte si quiere integrarse en el mundo contemporáneo debería de dejar que las nuevas teologías marquen el rumbo de la nave.
Lo que es un sinsentido es defender ideas del siglo I de manera chachi y moderna."
No estoy de acuerdo con esto. Las ideas, las mismas que se defienden en el siglo I hay que defenderlas de acuerdo a los tiempos que corren. Ahora bien, sin desvirtuarlas o adaptarlas al mundo.
La Iglesia católica, por otra parte, está más que integrada en el mundo.
Por otra parte, al respecto del apoyo que Ud. pide se demuestre, lo que dijo el beato Juan Pablo II me parece más que suficiente:
"Carta de Juan Pablo II
CARTA CON MOTIVO DEL SEMINARIO DE ESTUDIO SOBRE LAS JMJ (resumen)
Ante todo ¿cómo no dar gracias a Dios por los numerosos frutos que, a distintos niveles, han brotado de las Jornadas Mundiales de la Juventud? Desde el primer encuentro, celebrado en la Plaza de San Pedro el Domingo de Ramos de 1986, se ha consolidado una tradición que alterna, de año en año, un encuentro mundial y otro diocesano, subrayando el indispensable dinamismo del compromiso apostólico de los jóvenes, tanto en la dimensión local como universal.
Las Jornadas, acogiendo una iniciativa propuesta por los mismos jóvenes, han nacido del deseo de ofrecerles significativos «momentos de pausa» en la constante peregrinación de la fe, que se alimenta también mediante el encuentro con los coetáneos de otros Países y el intercambio de las propias experiencias.
La finalidad principal de las Jornadas es la de colocar a Jesucristo en el centro de la fe y de la vida de cada joven, para que sea el punto de referencia constante y la luz verdadera de cada iniciativa y da toda tarea educativa de las nuevas generaciones. Es el «estribillo» de cada Jornada Mundial. Y todas juntas, a lo largo de este decenio, aparecen como una continua y apremiante invitación a fundamentar la vida y la fe sobre la roca que es Cristo.
2. Por este motivo los jóvenes son invitados periódicamente a hacerse peregrinos por los caminos del mundo. En ellos la Iglesia se ve a sí misma y su misión entre los hijos de los hombres; con ellos acoge los desafíos del futuro, consciente de que toda la humanidad necesita una renovada juventud del espíritu. Esta peregrinación del pueblo joven construye puentes de fraternidad y de esperanza entre los continentes, los pueblos y las culturas. Es un camino siempre en movimiento. Como la vida. Como la juventud.
Con el paso de los años se ha demostrado que las Jornadas de la Juventud no son ritos convencionales, sino acontecimientos providenciales, ocasiones para que los jóvenes profesen y proclamen cada vez con más alegría su fe en Cristo. Estando juntos pueden interrogarse sobre las aspiraciones más profundas, experimentar la comunión con la Iglesia, comprometerse con la urgente tarea de la nueva evangelización. De esta forma se dan la mano, formando un gran corro de amistad, uniendo los colores de la piel y de las banderas nacionales, la diversidad de las culturas y de las experiencias, en la adhesión de fe en el Señor resucitado.
3. (...) Los distintos momentos de que consta una Jornada Mundial constituyen en su globalidad una forma de vasta catequesis, un anuncio del camino de conversión a Cristo, a partir de la experiencia y de los interrogantes profundos de la vida cotidiana de los destinatarios. La Palabra de Dios es el centro, la reflexión catequética el instrumento, la oración el alimento, la comunicación y el diálogo el estilo. En una Jornada Mundial el joven puede vivir una fuerte experiencia de fe y de comunión, que le ayudará a afrontar las preguntas más profundas de la existencia y a asumir responsablemente el propio lugar en la sociedad y en la comunidad eclesial.(...)
4. Durante los inolvidables Encuentros Mundiales, frecuentemente me ha impresionado el amor alegre y espontáneo de los jóvenes hacia Dios y hacia la Iglesia. Han contado historias de sufrimiento por el Evangelio, de obstáculos aparentemente infranqueables superados con la ayuda divina; han hablado de su angustia frente a un mundo atormentado por la desesperación, el cinismo y los conflictos. Después de cada Encuentro, he sentido más vivo el deseo de alabar a Dios que revela a los jóvenes los secretos de su Reino. (...)
¿Cómo no leer en su participación masiva, disponible y entusiasta la petición constante de que les acompañemos en la peregrinación de fe, en el viaje que realizan respondiendo a la gracia de Dios que actúa en sus corazones?
Con su entusiasmo y su exuberante energía, los jóvenes piden que se les anime a ser «protagonistas de la evangelización y artífices de la renovación social». De esta forma los jóvenes, en quienes la Iglesia reconoce su juventud de Esposa de Cristo, no sólo son evangelizados, sino que ellos mismos se transforman en evangelizadores llevando el Evangelio a sus coetáneos, incluso a los que están alejados de la Iglesia y a los que todavía no han oído hablar de la Buena Noticia.
Vaticano, 8 de mayo de 1996 "
Claro, que para esto no hay que estar mediatizado por una ideología.
No se pero al celibato religioso pienso que le queda un cafe. Yo a mis hijas no les recomendaria que se metieran a monjas.
El cardenal Martini en su ultimo ESTAMOS TODOS EN LA MISMA BARCA que ya el titulo dice mucho...deja claro que la triste "vida comunitaria" de solteros religiosos, aunque nunca se perdera "como carisma" hoy ya es cosa del pasado. Martini propone la ordenacion de hombres casados de probada fe e incluso deja la puerta abierta para la formacion de nuevas y dinamicas comunidades cristianas no se "solteros" sino de parejas de hombre y mujer que viven y trabajan en la vida real.
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EFG
Ya sabemos como es el cardenal Martini. Además, el café que, al parecer le queda al celibato sacerdotal, a mí me parece que es un café largo y no corto.
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EFG
Pues eso es a lo que yo quiero referirme. Todo no es fiesta (como, si además, el aspecto festivo no fuera propio del cristiano)sino otras muchas cosas. Y el Espíritu que sople donde quiera...
Hay que dar paso a gente joven, Ratzinger y Rouco Varela hacen mas mal que bien.
La confusion y el caos se produce cuando lo viejo no acaba de morir y lo nuevo no termina de nacer.
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EFG
POR ALUSIONES GENERALES
Me parece a mí que Ud. desconoce el funcionamiento de las JMJ. No sólo hablan, cuando hablan, personas de edad avanzada que, además, son una riqueza que no podemos ni debemos olvidar ni perder. También hablan otras muchas personas de mucha menor edad. Entre ellos, los mismos jóvenes.
Me parece que ver, en la edad, un impedimiento, es no reconocer la sabiduría acumulada en los años. El mismo Benedicto XVI es una buena prueba de eso. Refutarlo es, francamente, ridículo.
Ejemplo el himno oficial de las jmj es muy hermoso pero poco apropiado para jóvenes. Estos, los jóvenes, se manifiestan y tras la avalancha de comentarios negativos en la red... himno nuevo.
A los jóvenes se les tiene en cuenta, al menos para esto.
Aun así, un poquitito si estoy de acuerdo contigo.
Las JMJ, a pesar de que el formato no nos guste a muchos, están muy bien, el trasfondo puede ser muy bueno y sin duda lo será: jóvenes de todo el mundo presididos por el Papa. Qué bien.
Creo que lo que a muchos nos molesta y algunos no saben enfocar bien, no es tanto el jolgorio de las JMJ, sino el contexto histórico eclesial en el que se realizan.
Siguiendo la línea que expone el P. Iraburu en algunas de sus entradas, yo me sitúo en la línea de los reformadores que miran más bien hacia las cosas que están mal y hay que arreglar. Las JMJ son uno de los exponentes coloridos de lo eclesialmente correcto, de los que dicen, "bueno, las cosas van como van, pero dentro de lo que cabe van bien, y millones de jóvenes van a venir a acompañar al Papa, etc." Ojalá traiga muchos frutos buenos para muchas personas, pero no están ahí las soluciones.
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