Una secta de EE.UU. escondió a unas niñas en bidones de plástico
Lund es un lugar olvidado. Tiene tres calles sin asfaltar y un solo residente. En sus alrededores viven 20 personas en un ratio de 25 kilómetros. Ubicada en medio del desierto de Utah (EE.UU.), esta zona aislada, deprimida y abandonada está alejada de la ley. Así comienza la noticia que ha publicado el diario español El País, firmada por Nicolás Alonso.
Quizás por eso John Alvin Coltharp (a la derecha de la foto) eligió el rancho de una secta (Caballeros del Filo de Cristal, un cisma del mormonismo) para secuestrar a sus cuatro hijos (en el centro de la foto) después de una disputa con su ex mujer sobre la custodia de los pequeños.
Las dos hijas, de cuatro y ocho años de edad, fueron descubiertas esta semana, recluidas en dos bidones de plástico de 200 litros, en los que estuvieron durante más de 24 horas sin comida ni bebida, sometidas a gélidas temperaturas. Los dos hijos aparecieron horas antes en el interior de una vivienda cercana. El padre y otro hombre han sido detenidos.
No era la primera vez. En septiembre, Coltharp, de 33 años, ya desapareció con sus cuatro hijos justo antes de que su esposa Micha Soble pidiera el divorcio. La mujer, que se casó a los 16 años, pidió una orden de alejamiento y la custodia de los pequeños por miedo a que sufrieran “daños inmediatos e irreparables”.