Eneagrama: una técnica esotérica y pseudocientífica (y III)
SU PSEUDOCIENTISMO
El Instituto Español de Programacion Neurolingüística (PNL) afirma que: “El Eneagrama es la ciencia de la identificación de las personalidades y características propias -lo que en PNL llamamos “mapa"-; la PNL, por su parte, es la ciencia del cambio de esos “mapas".” (6)
Y Ouspensky dice en su obra: “De una manera completamente general, se debe comprender que el eneagrama es un símbolo universal. Toda ciencia tiene su lugar en el eneagrama, y puede ser interpretada gracias a él.” (7)
Si dice ser un método de diagnóstico del comportamiento humano, y a su vez terapia para la corrección de los comportamientos erróneos, entonces debería poder demostrar sus efectos empíricamente.
El conocimiento científico se resume en tres cualidades: general, social y legal. El general donde la validez de la experiencia es que pueda repetirse y nutrirse de conocimientos generales y no individuales. No está demostrado que el eneagrama sea efectivo. El social “donde se define que tal conocimiento pueda ser comunicado, de modo tal que en principio se halle a disposición de cualquiera con la capacidad y el empeño necesarios para averiguarlo. Esta característica es la que distingue a la ciencia (tal como la conocemos en Occidente) de los conocimientos que integran las doctrinas esotéricas, como el yoga o el zen. Los cultores de estas líneas de pensamiento sostienen comúnmente que ciertas verdades de gran importancia no pueden ser expresadas o comunicadas por medio del lenguaje: uno llega a ellas mediante cierta forma de iluminación, o destello de conocimiento, y lo único que puede hacer el maestro es poner al discípulo en las condiciones propicias para que en su espíritu se produzca ese destello. Y la cualidad legal, que son las leyes que integran las ciencias, y la aplicación práctica de las ciencias que constituyen la técnica. Una ciencia es una agrupación de conocimientos científicos organizados entre sí sistemáticamente, de tal forma que unos se infieran o demuestren a partir de otros” (8)
Para ser una teoría científica necesitaría que dicha técnica haya sido o pueda ser comprobada, revisada y o publicada y que su metodología sea normalizada por criterios de la ciencia, es decir, que posea reproducibilidad, falsabilidad y corroboración.