Juan Daniel Escobar: “las sectas responden a la falta de afectividad y a la pérdida de lo espiritual”
En abril de 2013 se dio a conocer en los medios de comunicación de Chile el caso de la “secta de Colliguay”, una de las noticias más estremecedoras de la última década. Sin embargo, no se trata de un fenómeno nuevo.
A principios de la década de los 90, la proliferación de las sectas alrededor del mundo conmocionaba a la opinión pública: noticias sobre rituales, crímenes y suicidios colectivos era todo lo que se sabía de estas herméticas agrupaciones, causando gran preocupación en la sociedad chilena.
Se trata de un tema árido del cual poco se sabe por la naturaleza de estos grupos. Sin embargo, esto no fue impedimento para que un equipo de académicos de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) decidiera investigar el fenómeno, convirtiéndose en pioneros en el campo a nivel nacional. Así lo cuenta la propia universidad en su página web.
La dificultad de la definición
El académico de la Facultad de Teología de la PUCV, Juan Daniel Escobar, es especialista en sectas. Es miembro también de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), y asegura que llegar a una definición de ellas, que sea universalmente aceptada por todos, es prácticamente imposible, debido a la complejidad del fenómeno.