Un joven estadounidense muere en Perú por consumo ritual de ayahuasca

Un curandero peruano confesó recientemente haber enterrado el cuerpo de un joven norteamericano de 18 años, quien murió en una sesión ritual de consumo de un poderoso alucinógeno de la selva, la ayahuasca, según informaba días atrás la agencia Associated Press.

José Manuel Pineda, de 58 años, quien se hacía llamar “Maestro Mancoluto” y administraba un albergue de retiro espiritual en la ciudad de Puerto Maldonado, en la región selvática de Madre de Dios (Perú), le dijo a la policía que se excedió en la cantidad de ayahuasca administrada a Kyle Nolan y éste murió, indicó a la AP el técnico Ramiro Ramírez, de la Policía de Puerto Maldonado.

Luego, con ayuda de su asistente, de nacionalidad alemana, y un carpintero peruano trabajador del albergue, enterró el cuerpo en un terreno aledaño de sembríos y denunció su desaparición, confesó Pineda el pasado 11 de septiembre al ser interrogado por la policía. Tanto Pineda como el asistente, Florian Schmatz, de 32 años, y el carpintero, Luis Enrique Mondragon, de 33, están detenidos.

“El día 22 (de agosto) por la noche tuvieron esa sesión de ayahuasca y (Nolan) amaneció muerto para el 23. Entonces (dijo que) para no comprometer la imagen del albergue, lo entierran fuera en una chacra que queda alrededor”, dijo Ramírez. Con las indicaciones de Pineda, la policía halló el 11 de septiembre el cuerpo de Nolan.

Detalles del caso

El joven había llegado a Puerto Maldonado, a 860 kilómetros al este de Lima, el 17 de agosto pasado y el 27, al no retornar a su país, su madre, Ingeborg Eswalo, reportó su desaparición y viajó a Perú para buscar noticias de su hijo.

Ramírez dijo que según Eswalo, Kyle había llegado a Madre de Dios para someterse a un tratamiento con ayahuasca a fin de superar su adicción a las drogas. La ayahuasca es un poderoso alucinógeno usado por los curanderos en terapias diversas para personas con problemas emocionales y otros, como la drogadicción. El albergue que dirigía Pineda, de nombre “Shimbre Shamanic Center”, ofrecía sus servicios a través de Internet.

Según leemos en Perú 21, ante los intensos interrogatorios realizados por la Policía, Pineda Vargas reveló que sepultó al extranjero en unos matorrales alejados del centro de retiro espiritual, ubicado en la comunidad nativa Tres Islas, a 9 kilómetros de la ciudad de Puerto Maldonado. Según las primeras investigaciones, el joven, que pagó mil 200 dólares por la sesión con ayahuasca, habría muerto luego de que el chamán le diera de beber el brebaje en exceso.

Pineda Vargas ha dicho en su defensa que él no mató al extranjero, sino que lo encontró muerto en unos matorrales y decidió esconder el cuerpo para evitar que se desprestigie su local. Sin embargo, llama la atención de la Policía que el chamán no haya denunciado el hecho y, por el contrario, que haya declarado que el joven turista había abandonado solo el albergue. Además, durante el interrogatorio, Pineda reconoció que quemó la ropa y las pertenencias del muchacho para evitar dejar pistas de su paradero.

Ingresan en la cárcel

Al final los tres acusados fueron internados de manera preventiva en el penal San Francisco de Asís, después de que el fiscal Baltazar Anco de Souza, de la Primera Fiscalía Penal Corporativa de Tambopata, realizara tal requerimiento, acusándolos de la muerte del joven norteamericano, tal como afirma Inforegión.

Según informa la agencia Andina, el fiscal refirió que, existiendo fundados y graves elementos de convicción de un concurso real de delitos, la pena a imponerse sería superior a los cuatro años de cárcel.

En el diario La República leemos que, para Eduardo Gastelumendi Dargent, psiquiatra especialista en ayahuasca, una dosis letal de este brebaje correspondería a 60 o 70 tomas, incluyendo la posibilidad de consumo de drogas o farmacos de la persona que se somete al ritual; uno de esos motivos pudo causar la muerte del joven Kyle Nolan.

Así se publicitaba en Internet

En la página web de la Organización Internacional de Chamanes y Curanderos del Perú (OICCP), todavía hoy puede leerse el siguiente texto publicitario del chamán detenido:

“Maestro José Pineda Vargas (su nombre de familia es “MANCOLUTO", como es conocido entre los chamanes) - máximo poseedor de los conocimientos del sistema Bancotauri, fundador y fiscal de la Organización “Apus Inka” - es chaman de primer nivel desde su infancia y eximio en su conocimiento de la metafísica superior y en el desarrollo de los siete sentidos. Su enseñanza va más allá de la razón humana y de cualquier filosofía. Su descendencia remonta a los habitantes de la civilización Chavín.

Muchos sistemas filosóficos ven al ego como algo negativo. Si las personas abrieran sus mentes y sus sentidos, se darían cuenta de que un poco de ego no es negativo. Por tener un cuerpo físico, el ser humano no es perfecto y siempre tiene algo de negatividad. Sin ego esa negatividad es todavía mayor, porque así hay más confusión, principalmente si uno toma la ausencia de ego como iluminación y lo vuelve una filosofía. No tener ego lleva a un conformismo donde uno queda satisfecho con lo que ya sabe, quitándole la fuerza para llegar a un entendimiento más profundo y redescubrir conocimiento perdido en el tiempo.

“Shimbre” es el nombre del centro chamánico del Maestro Mancoluto en Madre de Dios (selva-sur del Perú), cerca a las fronteras con Brasil y Bolivia, a 16 km de la ciudad de Puerto Maldonado.

Esas iniciaciones consisten en dietas, preparación psicológica y conversaciones de preguntas y respuestas con el Maestro en los días siguientes a las ceremonias. Las respuestas del Maestro jamás son filosóficas, tecnológicas o académicas. Ese proceso es muchas veces duro o fuerte, pero de esa manera poco a poco se desarrolla la mente y se llega a una profundidad de conocimiento. La finalidad es ayudar a las personas a enfrentar su propio futuro y preparar al ser humano para el futuro de la humanidad, que actualmente se encuentra en total desequilibrio y confusión.

Mucha gente va por propia cuenta a albergues en Puerto Maldonado donde se ofrecen ceremonias de San Pedro y Ayahuasca, pero las personas encargadas de esas ceremonias son cuando mucho principiantes, y mayormente son los dueños de tales lugares quienes ganan dinero con eso.

Lo que se describe aquí no se trata de un “tour” de ceremonias, sino que de una iniciación con determinadas reglas y procedimientos. El tiempo de esa iniciación varía (12 días, 15 días, 20 días, 1 mes…), generalmente con ceremonias ínterdiarias. Hay varias opciones de alojamiento. Las instalaciones de Shimbre cuentan con diversas casas, bungalows, plataformas para carpas, cocina, comedor, área de descanso, biblioteca y baños y duchas privados o compartidos. En los días entre las ceremonias.

El alojamiento es en carpas. En los días entre las ceremonias los participantes comen lo que se prepara en el mismo sitio. Para los que deseen, también se hacen caminatas por selva virgen, visitas a la ciudad de Puerto Maldonado y paseos en diferentes sitios de la región”
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