18.07.13

El rostro de los hombres

El rostro de los hombresMucho antes de analizar asuntos más complicados, creo que una de las cosas que hacen que me resulte imposible no creer en Dios es el rostro de las personas. Esos rostros, siempre diferentes, que reflejan innumerables historias distintas, cada una de ellas mucho más rica e interesante que la mejor de las novelas que puedan escribirse, como decía Papini. Es decir, una sobreabundancia tal de ser y de sentido que sólo puede venir de Dios, porque supera con creces nuestra misma imaginación.

En ese sentido, me ha alegrado que el título del último libro publicado por Vita Brevis sea El rostro de los hombres, escrito por Alejandro Sanz Peinado. Y me alegra más aún que los relatos que incluye reflejen tan bien esa sobreabundancia que tienen las historias de personas particulares.

¿De qué trata este libro? Cuando la literatura es buena, no es fácil resumirla. Es como si te pidieran que resumieras la vida misma o una montaña: No se puede, no se puede.

Leer más... »

15.07.13

Cristianos tristes como el demonio

AcediaLas peores tentaciones son aquellas que ni siquiera notamos. Cuando sabemos que estamos tentados, podemos luchar por evitar caer en la tentación, pero cuando somos incapaces de reconocer el mal como mal, estamos perdidos. Ni siquiera nos daremos cuenta de que estamos haciendo mal, con lo cual será muy difícil o incluso imposible que consigamos evitarlo.

Hoy traigo al blog unas líneas de un doctor de la Iglesia que me han llamado la atención en ese sentido. San Francisco de Sales habla de dos tentaciones. Una de ellas es bastante común y los cristianos la conocemos bien. Caemos en ella, pero cuando lo hacemos, sabemos que estamos cayendo en la tentación y, con la gracia de Dios nos arrepentimos. La otra tentación es más sutil, menos evidente, y en eso reside su fuerza.

Leer más... »

5.07.13

Libros que harán que el verano haya merecido la pena

Lectura vacaciones 2Cuántos veranos han pasado en nuestra vida sin pena ni gloria, quedando en el olvido apenas llegamos, más cansados que nunca, al fin de las vacaciones. Nada hay más triste que mirar hacia atrás y ver cuánto tiempo perdimos, ese tiempo precioso que no se puede recuperar.

Este verano puede ser diferente. Puede ser un tiempo de gracia, en el que avancemos en el camino hacia el cielo, además de descansar tranquilamente si Dios quiere. ¿Cómo? Eso ya es cosa de cada lector y su confesor, así que yo me limitaré a sugerir algunos libros cuya lectura, sin duda alguna, contribuirá a que el verano haya merecido la pena.

Leer más... »

1.07.13

¿Tiene importancia la doctrina?

Henri de LubacEl otro día, intentaba explicarle a un lector ateo algo que a menudo sorprende a quienes llegan por primera vez a InfoCatólica: la importancia que se da aquí a mantener la doctrina católica tal como es y a rechazar las versiones heterodoxas de la misma. Es algo que, para muchos, resulta difícil de entender. Y no es extraño, en una época en la que se sostiene como dogma implícito que todo tiempo pasado fue peor y el mismo adjetivo “heterodoxo” tiene, en principio, connotaciones positivas, aferrarse a algo que tiene dos mil años de antigüedad parece absurdo.

En ese contexto, explicaba al lector ateo y antiguo cristiano que, desgraciadamente, es bastante probable que lo que le enseñaron como fe católica no fuese la fe católica. Muchísimas personas se han encontrado con una fe adulterada presentada como auténtica y, frecuentemente, han rechazado esa fe y se han alejado del catolicismo… con mucha razón, porque lo que rechazaban, en efecto, nada tenía de divino, sino que era una construcción humana, como todas las heterodoxias.

Leer más... »

27.06.13

¿Dios no existe porque el infierno no puede existir?

Portada TIME infiernoEn uno de los posts anteriores, un lector del blog, Gringo, ha puesto un comentario interesante. Como está algo enterrado por los 275 comentarios anteriores, voy a responder a él en este nuevo artículo.

El comentario en cuestión dice así:

“No, Dios no obliga a nadie amarlo… pero si no lo amas te manda al infierno. Y encima se supone que Dios te ama aunque tú no lo ames, pero si no le correspondes te manda al infierno. Al final Dios trae al mundo a las personas (porque todos venimos al mundo por voluntad de Dios ¿o no?), para que vivan unas pocas décadas en este valle de lágrimas, y para después hacerles pasar a algunos toda la eternidad en el llanto y rechinar de dientes. Y te dicen que Dios te ama.

Y eso es así aunque algunos no lo queráis admitir porque no os entra en la cabeza las contradicciones en las que os han educado desde pequeñitos. Dios te ama, aunque tú no le ames, pero te puede condenar al peor de los castigos para siempre, porque tú no le has amado, aunque él te ama. De locos”.

Leer más... »