Los dos carteles del día de la Iglesia diocesana



El próximo domingo se celebra el Día de la Iglesia diocesana, campaña de concienciación económica que en Cataluña también se conoce con el nombre de “Germanor”. Como cada año se colocan carteles en las parroquias y se reparten sobres para la que los católicos hagan su aportación.

El cartel de la campaña aparentemente es el mismo para toda España, pero si uno se fija bien se dará cuenta de que no es exactamente igual.

Lógicamente los carteles en Cataluña están en catalán, y remarco únicamente en catalán, no se ha hecho un sólo cartel en castellano, ni siquiera para las parroquias que tienen mayoría de fieles castellanoparlantes.

Pero este detalle no es el único, lo más escandaloso es el “cambiazo” que se ha pegado a la fotografía del cartel. El contenido es el mismo, el Santo Padre Benedicto XVI rodeado de jóvenes, pero no es la misma foto. ¿El motivo? Pues que en el cartel para fuera de Cataluña aparece una bandera de España y esto es considerado como una blasfemia, pecado mortal, injuria a la soberana nación catalana. Así que han cambiado la fotografía y su conciencia nacionalista ha quedado tranquila.

Hasta aquí una “catalanada” más de nuestros responsables económicos de la Iglesia en Cataluña, pero la realidad es caprichosa, y aunque ellos no quieren saber nada de España, cuando uno repasa las cuentas por ejemplo del arzobispado de Barcelona, se da cuenta de que la partida más alta de ingresos es la que llega de la Conferencia Episcopal ESPAÑOLA, como consecuencia de la Declaración de la Renta, y que se distribuye a las diócesis de acuerdo con el número de sacerdotes, no de acuerdo con el número de cruces marcadas ya que como todo el mundo sabe la proporción en Cataluña es muy baja.

Pues bien, el dinero que llega de Madrid es superior al que se recauda de todas las parroquias de la diócesis, incluso sumando la colecta del próximo domingo. Porque cada parroquia está obligada a entregar mensualmente al obispado entre un 30 y un 40% de sus ingresos (según el tipo de parroquia), pues la suma de todo ese dineral incluyendo la colecta del próximo domingo que va íntegra al obispado no supera la aportación que viene de la capital de ESPAÑA.

Por si esto no fuera suficiente n.s.b.a. cardenal Martínez Sistach delante de todos los periodistas y consciente que los ingresos de las parroquias son demasiado bajos como consecuencia de la nefasta pastoral realizada en estas últimas décadas, se le ocurre hablar de que los católicos deberían pagar una especie de “diezmo” para sostener a la Iglesia.

Se le tendría que hacer entender a nuestro querido arzobispo que con diezmo o sin diezmo, si no se cambia el estilo de dirigir esta diócesis, la situación económica continuará siendo ruinosa, y lo que es peor, no sólo económicamente, sino sobre todo espiritualmente. Mientras la práctica religiosa baja generalizadamente, exceptuando unas cuantas parroquias donde casualmente hay sacerdotes fieles a la doctrina católica y al Santo Padre, a nuestro cardenal sólo se le ocurre hablar del diezmo, porqué así al menos económicamente no tendría problemas temporalmente. Los otros datos, los de participación en los sacramentos, las vocaciones, los jóvenes, etc… esos parece que no le interesan.

Antoninus Pius

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