Gracias, Miliki… ¡Hasta pronto!
“Encuentra el tiempo de pensar, encuentra el tiempo de rezar, encuentra el tiempo de reír.” Madre Teresa de Calcuta
Independientemente de la edad que tengan, las personas a las que quieres y admiras siempre mueren demasiado pronto.
Esto es lo que me ocurre con Emilio Aragón, Miliki. Una maravillosa persona que junto al resto de Los Payasos de la tele, Gaby, Fofó, y Miliki, a los que años después se les unieron sus respectivos hijos Fofito, Milikito y Rody, marcaron la infancia de muchos de los que ahora pasamos de los cuarenta, y nos hicieron creer en la bondad del ser humano con sus vidas, sus chistes y sus canciones.
Hace tan solo unas horas este entrañable payaso se ha reunido con sus hermanos en la casa del Padre Eterno. Y estoy segura, o por lo menos quiero imaginármelo así, estarán haciendo lo que mejor saben hacer: crear ilusión y provocar la risa a los niños en el cielo. Hoy quiero recordarlos de un modo muy especial.
Recuerdo unas líneas que le escribí hace unos años a mi hijo pequeño cuando repasábamos las tablas de multiplicar con las canciones de Miliki. Decía así:
Cuando yo era pequeña, hace tan sólo unos pocos años, salían unos payasos por la televisión que divertían a los niños y que todas las tardes empezaban su programa con la misma pregunta: “¿Cómo están ustedeeees?”. Y siempre obtenían la misma respuesta: “¡Bieeeen!”.
Todos les conocíamos por Los Payasos de la tele . Gaby, Fofó, y Miliki, a los que años después se les unieron Fofito, Milikito y Rody.
A la vuelta del colegio me sentaba delante de la televisión en blanco y negro anhelando oír las primeras notas de aquella canción: “Había una vez un circo, que alegraba siempre el corazón…”. Y mientras devoraba un trozo de pan con chocolate ─en aquella época no teníamos crema de cacao─, me entretenía con Miliki, el payaso de la gorra a cuadros, acompañado de su acordeón, y Fofó, su compañero de travesuras, con las que desesperaban al serio y responsable Gabi.
Gracias a sus historias y canciones lograron que varias generaciones de niños quisiéramos y creyéramos en las personas y en el mundo. Un mundo mejor, lleno de alegría, de optimismo y sentido del humor. En definitiva, un mundo lleno de paz.
De todas sus canciones, hay una que recuerdo de manera especial, El Barquito de cáscara de nuez, que navega mar adentro, lejos, muy lejos, para llegar… ¡a los mares del sur! :
Un barquito de cáscara de nuez,
adornado con velas de papel,
se hizo hoy a la mar para lejos llevar
gotitas doradas de miel.Un mosquito sin miedo va en él
muy seguro de ser buen timonel.
Y subiendo y bajando las olas
el barquito ya se fue.Navegar sin temor
en el mar es lo mejor,
no hay razón de ponerse a temblar.
Y si viene negra tempestad
reír y remar y cantar.Navegar sin temor,
en el mar es lo mejor.
Y si el cielo está muy azul,
el barquito va contento por los mares lejanos del Sur.Un barquito de cáscara de nuez,
adornado con velas de papel,
se hizo hoy a la mar para lejos llevar
gotitas doradas de miel.Un mosquito sin miedo va en él
muy seguro de ser buen timonel.
Y subiendo y bajando las olas
el barquito ya se fue.Navegar sin temor
en el mar es lo mejor,
no hay razón de ponerse a temblar.
Y si viene negra tempestad
reír y remar y cantar.Navegar sin temor
en el mar es lo mejor.
Y si el cielo está muy azul,
el barquito va contento por
los mares lejanos del Sur.
Tengo que confesarte que muchos de aquellos niños que tuvimos la suerte de crecer como niños, descubrimos con estos payasos, nuestros amigos más entrañables, que la risa es vida , y la vida es un circo. “Un maravilloso circo- como decía Miliki-, donde a diario vivimos experiencias maravillosas o terroríficas pero al fín y al cabo experiencias ”.
Hace cinco años, muchos de aquellos niños que tuvimos la suerte de crecer como niños, nos emocionamos al escuchar que la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión había otorgado, ¡por fin!,a Miliki el “Premio Toda una vida”, “en reconocimiento a su trayectoria profesional, y a la labor televisiva y educativa desarrollada, con los más pequeños de la casa”.
Nuestro payaso por antonomasia se empeño en demostrarnos, día tras día, que la risa es un privilegio humano. De hecho, ¿no es cierto que cuando sentimos alegría y la expresamos con sonrisas, nos volvemos mucho más amables, comprensivos y tolerantes? ¿Y no es más cierto aún que, si vemos la vida con optimismo, podremos navegar sin temor “si viene negra tempestad” porque “un mosquito sin miedo va en él muy seguro de ser buen timonel”?
Alguien escribió:“Si los hombres nos acostumbramos a sonreír con más frecuencia, y a ser más sencillos, la humanidad se sentirá mejor y más feliz. Sonreír siempre y sonreír a todos; porque todos esperan nuestra sonrisa y todos necesitan de ella; nosotros somos los primeros en necesitarla para sentirnos mejores, más optimistas, más tiernos de corazón.
Sonreír al niño travieso y molesto, sonreír al anciano solitario y pesado, sonreír al amigo inoportuno, sonreír al vecino cargoso, sonreír al cartero, al conductor de autobús, a la panadera… sonreír a todos, para hacerlos mejores y ser mejores”.
Por este motivo, te aconsejo: ¡Pon una sonrisa en tu vida! En el mundo que nos ha tocado vivir, en el mundo que construimos diariamente, sobra dolor y tristeza y faltan grandes dosis de alegría.
Es más, la sonrisa, el buen humor, saber reírse de uno mismo… es reflejo de la alegría interior, de la satisfacción por las cosas bien hechas, por la seguridad de sentirte querido por Dios.
La alegría viene sin buscarla. Saber que siempre hay Alguien que te ama, ¿no es motivo suficiente para ir lanzando por donde vayas miles de sonrisas?
Para que no pierdas nunca la sonrisa te aconsejo esta Oración del Payaso de Menchu Soler que leí hace algún tiempo en un semanario. Te gustará.
Señor:
Soy un trasto, pero te quiero,
te quiero terriblemente, locamente, que es
la única manera que tengo yo de amar,
porque, ¡sólo soy un payaso!Ya hace años que salí de tus manos,
pronto, quizá, llegará el día en que
volveré a Ti…Mi alforja está vacía, mis flores
mustias y descoloridas
sólo mi corazón está intacto…Me espanta mi pobreza,
pero me consuela tu ternura.Estoy ante Ti como un
cantarillo roto, pero con mi
mismo barro puedes hacer
otro a tu gusto…Señor:
¿Qué te diré cuando me pidas
cuentas? Te diré que mi vida,
humanamente, ha sido
un fallo, que he volado
muy bajo.Señor:
Acepta la ofrenda de este atardecer…
Mi vida, como una flauta, está llena
de agujeros…
pero tómala en tus manos divinas.Que tu música pase
a través de mí y llegue
hasta mis hermanos
los hombres, que sea
para ellos ritmo y melodía
que acompañe su caminar,
alegría sencilla
de sus pasos cansados…
Gracias Miliki…
¡Hasta pronto!
20 comentarios
Nada. Mirarle a los ojos y sonreírle.
Él conoce mejor que nadie -incluso que tú misma- toda tu vida.
: )
Así que vaya lo uno por lo otro.
No se puede pedir a los abuelos responsabilidades por lo que hace sus hijos adultos cuarentones.
Muchas veces tenía a Dios en la boca, y no era para blasfemar.
Ojalá que Dios en su infinita misericordía lo tenga en la patria celeste a la que todos anhelamos llegar, y que los niños "no-natos" que esta sociedad ha asesinado a millones estén hoy sonrientes con las ocurrencias simpáticas y nada ofensivas de este gran PAYASO.
Dale, Señor, el descanso eterno, y brille para el la luz perpetua.
D.E.P. Amén.
Desconocemos si ha logrado usted reproducirse con alguna señora pero esperamos que en tal caso, su hijo en un futuro no atraque un banco o robe en el cepillo de una Iglesia porque entonces tendrá que usted confesarse como un culpable en la comisaría más cercana.
No sea ceporro, por Dios, no sea ceporro.
Dios lo tenga junto a El y descanse en paz.
Pienso que una persona como Miliki que siempre hizo sonreír a los niños con humor totalmente blanco, sin meterse con nadie e irradiando siempre alegría a los demás, debe tener todo el respeto, al menos de los que nos llamamos cristianos.
infoCATÓLICA ...
creo que se entiende ¿no?
Quedan muy simpáticos y originales, sin duda, pero me pregunto si la familia Aragón entiende realmente el significado de estos temas. No sé yo si es muy apropiado rogar una sonrisa por el alma de ningún difunto. En el fondo, no es más que volver al tema de los funerales modernos y buenistas, en los que se prescinde del purgatorio, infierno... y todas esas cosas antiguas.
Algunos, que os llamáis "católicos" y "cristianos", me parece que os habéis olvidado que un cristiano vive la vida con alegría:
“Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito, estad alegres. El Señor está cerca.” (S. Pablo. Filipenses 4, 4.5)
O sea S. Pablo nos pide vivir la vida alegres porque somos cristianos, porque anhelamos la vida eterna, que es la inmensa alegría, por eso para los primeros cristianos -(fíjate, Raúl, más antiguos que las "cosas" que tu dices)- llamaban al momento de la muerte "dies natalis". De hecho el mismo S. Pablo dice que "morir es con mucho lo mejor".
Así que mejor vivir alegres, y con sonrisas en los labios.
Te respondo simplemente recordando algunos de los principios y orientaciones dados por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos sobre la piedad popular y la liturgia:
"La Iglesia, por otra parte, en su oración de sufragio por las almas de los difuntos, implora la vida eterna no sólo para los discípulos de Cristo muertos en su paz, sino también para todos los difuntos, cuya fe sólo Dios ha conocido.
Sentido de los sufragios
251. En la muerte, el justo se encuentra con Dios, que lo llama a sí para hacerle partícipe de la vida divina. Pero nadie puede ser recibido en la amistad e intimidad de Dios si antes no se ha purificado de las consecuencias personales de todas sus culpas. "La Iglesia llama Purgatorio a esta purificación final de los elegidos, que es completamente distinta del castigo de los condenados. La Iglesia ha formulado la doctrina de la fe relativa al Purgatorio sobre todo en los Concilios de Florencia y de Trento".
De aquí viene la piadosa costumbre de ofrecer sufragios por las almas del Purgatorio, que son una súplica insistente a Dios para que tenga misericordia de los fieles difuntos, los purifique con el fuego de su caridad y los introduzca en el Reino de la luz y de la vida.
Los sufragios son una expresión cultual de la fe en la Comunión de los Santos. Así, "la Iglesia que peregrina, desde los primeros tiempos del cristianismo tuvo perfecto conocimiento de esta comunión de todo el Cuerpo Místico de Jesucristo, y así conservó con gran piedad el recuerdo de los difuntos, y ofreció sufragios por ellos, "porque santo y saludable es el pensamiento de orar por los difuntos para que queden libres de sus pecados" (2 Mac 12,46)". Estos sufragios son, en primer lugar, la celebración del sacrificio eucarístico, y después, otras expresiones de piedad como oraciones, limosnas, obras de misericordia e indulgencias aplicadas en favor de las almas de los difuntos".
Pero oye, el que quiera, que siga con las sonrisas. Que quedan más modernas, sin duda.
O es que, según ud. ¿Cristo nos ha traído solo para celebrar liturgias y nada más? o nos ha traído también para amar al enemigo, para servir a los que nos necesitan, para tener caridad con los hermanos ... vamos por favor, no mezcle las cosas, no las mezcle ... y por favor, sonría y sea feliz, Cristo le ha prometido la vida eterna, es para estar contentos.
Con la mejor de las intenciones, y sin advertirlo, podemos emplear un lenguaje herético.
Miguel Ángel: la disyuntiva "o liturgia, o amar al enemigo y estar alegres" es falaz y empobrecedora, muy característica del modernismo eclesial. Amar a Dios y al prójimo, estar alegres y felices por ser hijos de Dios (y bendito aquel al que las payasadas de Miliki le arrancaron sonrisas y alegría, el Señor se lo tendrá en cuenta al payaso sin duda) Y TAMBIÉN ORAR POR EL ETERNO DESCANSO DE SU ALMA.
Creyendo salvaguardar su gloria terrenal, que es pasajera, desalentamos las oraciones y misas que pueden ser importantes para su gloria celestial, que es eterna. No confundamos.
Por cierto, de todos los familiares que subieron a leer y fueron muchos,sólo Rita Irasema se inclinó antes ante el altar.
Todo esto aconteció en la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe,en Madrid.
Si puedo además de rezar o escribir esto,hacer algo más ,que alguien me lo indique ,por favor.
Lo que he dejado bien claro es lo que dice Mateo 9,13:
"Id, pues, a aprender qué significa aquello de: Misericordia quiero, que no sacrificio.", o sea que actuemos NOSOTROS con misericordia, y que no pongamos por encima del amor al enemigo y la misericordia las liturgias, ni tampoco por debajo.
A ver si dejáis de manipular las palabras para llevarlas a vuestro terreno, aprenderos vosotros bien lo que dice Jesús en ese capítulo 9 de San Mateo.
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