La constatación de un hecho

El fallo del Tribunal Supremo, que niega el derecho de los padres a la objeción de conciencia frente a la asignatura Educación para la Ciudadanía, nos permite constatar varios hechos:

1º.- En España no hay Democracia. Algo evidente y patente, tan claro como la luz del día. Primero, porque no hay división de poderes (ejecutivo, legislativo y judicial), sino un solo poder y división de funciones; segundo, porque el pueblo no elige a sus representantes.

2º.- Los españoles viven bajo un poder oligárquico: los partidos políticos han sustraído la voluntad popular.

3º.- Por lo que se conoce hasta ahora, a los padres no les asiste el derecho a la objeción de conciencia frente a la asignatura de Educación para la Ciudadanía; a su vez, reconoce que las autoridades administrativas o escolares no pueden imponer criterios morales. Los contenidos de las asignaturas deben tomar como referencia los valores constitucionales. Es decir, las autoridades no pueden imponer criterios morales, pero sí los constitucionales. Áteme esa mosca por el rabo.

Lo que no se aclara, a modo de arcano es:

- Qué es un valor.

- Cómo se actúa según un valor.

- Por qué los valores constitucionales son buenos, más a más, cuando son contradictorios entre sí. Por ejemplo, la Constitución garantiza el derecho a la vida, sin embargo, se permite matar a los niños no nacidos.

4º.- El Tribunal Supremo expresa que no cabe objeción a las asignaturas establecidas por una Ley Orgánica de Educación. Está claro, ya que de esta forma se podría objetar a las Matemáticas. Sin embargo, los padres objetan la asignatura por los contenidos, por la imposición moral. Las dos cosas van unidas. Sin embargo el Supremo las separa, como si en vez de aplicar el derecho fueran unos sofistas. Curioso. Quizás es la única forma que han encontrado de pasar por encima del derecho fundamental de los padres a educar a sus hijos.

Quizás sería el momento de dar un paso adelante, donde los obispos, colegios católicos y los padres, se opusiesen en bloque a la asignatura de marras, pero esto, hoy en día es un imposible, especialmente mientras los miembros de la FERE sigan instalados en la prebenda y la sinecura de las subvenciones – que poco alcanza, por lo que se venden por un plato de lentejas -, y en la traición a la doctrina.

Es cierto que no se ha perdido todo. Que haya habido siete magistrados que se han opuesto a la componenda es un signo de resistencia – desde luego, el que no se consuela es porque no quiere -, pero aun así, la situación no es nada halagüeña, especialmente para las familias que tengan a sus hijos en colegios públicos. Vendrán mal dadas, pero no hay que desfallecer, ni caer en la desesperanza.

La victoria será nuestra.

10 comentarios

  
Álvaro
En casa hace tiempo que empezamos a usar la Constitución Española de 1978 para envolver los bocadillos del almuerzo. Nos sabía mal tenerla ahí parada sin un uso digno.
28/01/09 11:24 PM
  
JCA
Álvaro:
Ojo, que podéis intoxicaros.
28/01/09 11:31 PM
  
Eduardo Jariod
Isaac, suscribo punto por punto el contenido de tu artículo. Y yo me pregunto ahora: ¿qué hará la Iglesia? Y yo me respondo: Nada.
28/01/09 11:43 PM
  
JMMCBXVI
Excelente resumen de la cuestión. Todos estos males nos sobrevienen porque como pueblo de Dios más "pueblo" que "de Dios", tenemos lo que, como colectivo tibio, nos merecemos. Y lo trágico por la resistencia demasiado débil es que ni siquiera es una cuestión exlcusivamente "católica". Un ejemplo histórico más de craso totalitarismo ideológico del que se avergonzarán las futuras generaciones, eso sí, las que hayan podido salvarse de ser adoctrinados de manera tan vil... Adelante, ¡claro que la victoria será los que amamos la libertad! ¡Siempre hay esperanza!
29/01/09 12:09 AM
  
maltés
IGE:

Es ud. una de esas personas a las que la ideología le nubla la razón.
Le vengo leyendo desde hace tiempo y me da pena que encauce el debate sobre la objeción a EpC por esos derroteros tan burdos y simplones.
No me decepcione hombre. Ya sabemos que aquí no cambiamos de opinión ni a tiros, pero exponer ideas siempre viene bien.
A ver:
1)¿Que no hay división de poderes?
Vale que con la disciplina de partido a la hora de votar, el legislativo es una extensión del ejecutivo.
Pero si los jueces son marionetas de los políticos ya me dirá ud. por qué el TSJA le tiró un jarro de agua fría a Manolo Cháves.
Y por qué tienen acojonado a Zp con la amenaza de huelga en toda España.

2)De acuerdo con que los partidos políticos sustraen la voluntad popular (lo bueno de su cabreo es que reparte estopa por igual, ya veo que los progres ya no tienen el monopolio de la culpa).
Pero en el caso de EpC no veo yo, ni nadie, que la voluntad popular sea objetar, a menos que sólo se escuche la COPE y se lea ReL.
O que la voluntad popular sean 50.000 personas de entre 45 millones.

3)La objeción de conciencia es algo muy serio, y las leyes españolas y de cualquier país, sólo la admiten cuando está en juego la vida humana.
Entiendo que un soldado se niegue a formar parte de un pelotón de ejecución o que un médico tenga reparos a practicar un aborto o una eutanasia.
Pero esto ya es demasiado.
Las excusas de la posible manipulación de los niños son como el chiste dibujado en su artículo, eso mismo, un chiste.
Me gustaría que me dijese qué contenidos de EpC son incompatibles con lo que ud. le enseñaría a sus hijos.
Supongo que les enseñará que la homosexualidad es un pecado (y hasta puede que les enseñe que es una enfermedad) pero también les enseñará a repetarlos como manda el catecismo ¿O no?.
También les enseñará que de las distintas religiones la católica es la única y verdadera, pero que gasear judíos o apalear moros está muy feo ¿Verdad?
4)No me creo que no conozca la Constitución.
No mezcle churras con merinas. El art. 15 consagra el derecho a la vida.
Pero ud. sabe que el aborto no es un derecho constitucional, sino un delito despenalizado en algunos casos, ergo no hay contradicción. Si acaso ud. puede decir que la Ley de despenalización del aborto del año 1985 es anticonstitucional.
Y desde luego no deja de ser cómico que precisamente uds., los defensores de la familia, ahora vengan con que no se sabe qué es un "valor".
Esa me la guardo y me la apunto. Ya verá la próxima vez que lea un artículo sobre los "valores familiares".
29/01/09 1:25 AM
  
Pedro
Maltés parece un troll a sueldo que deja su cagadita por todos los blogs que le llevan la contraria a la progresía estatal intentando descentrar el tema del post.
29/01/09 9:40 AM
  
maltés
PEDRO:
¿Por qué no aportas tus comentarios al artículo del blog como hago yo, en lugar de insultar?
Efectivamente un troll es alguien que intenta reventar un blog desviando la atención del tema tratado. Y si te has tomado la molestia de leer mi comentario, este trata del asunto en cuestión.
Así que lo más parecido a un troll que hay por aquí eres tú.
29/01/09 10:14 AM
  
Álvaro
Uy! cómo están los ánimos. Gracias JCA, efectivamente desde hace un tiempo a esta parte el pan se nos ha vuelto correoso, el atún se queda seco, el jamón se sala en cuestión de minutos, el queso se convierte en aceite, el paté sabe a tierra ... lo mejor será que volvamos al tradicional papel de aluminio y dejemos la Constitución para cuando se friega el suelo, no pisarlo.
29/01/09 10:27 AM
  
Luis R.
Maltes, solamente a ti la ideologia no te nubla la razon, ?verdad?. Eres superior, y desde tu superioridad vienes a aburrirnos con tus enumeraciones, que no aportan nada.

Tu si que eres burdo y simplon.

Deja de dartelas de ecuanime y razonable; Listillo.

30/01/09 6:23 AM
  
Isaac García Expósito
Maltés:

1.- No entiendo la pregunta, ni su razonamiento. El TSJA no ha echado ni agua fría ni caliente. Si hay algún juez díscolo, por llamarlo de alguna manera, el TS revocará su sentencia, como así ha sido.

2.- Los partidos han hurtado la voluntad del pueblo en el punto y hora de que nuestro sistema electoral no es mayoritario. Los ciudadanos no votan a sus representantes, sino a un partido. No hay forma de delimitar la responsabilidad de los políticos.

Por otro lado, en España se han pronunciado en contra todos los objetores a dicha asignatura, que quieren hacer valer sus derechos. ¿Cuántos a favor?

Además, el bien y el mal no se determina por el número.

3.- Efectivamente, está en juego la vida humana en una de sus partes: la moral.

La asignatura queda inhabilitada desde el momento en el que el Estado se erige como creador de moral. Luego todos los contenidos vienen viciados desde el inicio.

4.- Es contradictorio. Si el derecho a la vida es inalienable, no se puede despenalizar en la práctica un delito que va en contra de un principio general.

Por ejemplo, si admitiéramos que en algún caso las leyes de la aritmética diesen soluciones erróneas, caería toda la aritmética con ella.

5º.- ¿Qué es un valor?
30/01/09 9:53 AM

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