Rogativas
De lunes a miércoles, los «antiguos» rezamos las Rogativas o Letanías menores. La liberación total de la Liturgia Antigua por el Romano Pontífice Benedicto XVI, ha posibilitado que las nuevas generaciones conozcan el rico y amplio tesoro litúrgico de la Iglesia.
Cuenta Dom Gaspar Lefebvre que:
A consecuencia de las calamidades públicas que padeció en el siglo V la diócesis de Vienne, en el Delfinado, san Mamerto estableció una procesión solemne de penitencia los días que preceden a la fiesta de la Ascensión. Una prescripción del concilio de Orleáns, de 511, extendió este uso a toda Francia y pronto se generalizó en toda la Iglesia.
El canto de las letanías ha dado nombre a estos tres días de oraciones públicas; pero en Roma, donde ya existía una procesión semejante el 25 de abril, las Rogativas fueron llamadas Letanías menores y la procesión del 25 de abril, Letanías mayores.