Apoteosis en Sevilla
Multitudinaria Misa de Angelis en Sevilla. Alrededor de 400 personas se congregaron ayer en la Parroquia de San Bernardo para asistir a la Misa oficiada por el padre Gilles Wach.
Los tres sacerdotes, ataviados con sus bonetes romanos, trajeron a Sevilla lo mejor de la liturgia católica, el usus antiquor, la liturgia de tantos y tantos santos y beatos, la liturgia del Beato Fray Diego de Cádiz, del padre Tarín, de Santa Ángela de la Cruz, del padre Padilla, del Beato Marcelo Spínola, de San Antonio María Claret y de tantos y tantos santos y beatos vinculados a la ciudad de Sevilla.
Sevilla, Roma triunfante en ánimo y nobleza, respondió a la voluntad del Romano Pontífice, Benedicto XVI como sabe hacerlo. La Misa se desarrolló con gran boato, magnificencia y piedad. Durante la consagración el silencio fue absoluto, hasta la Iglesia de San Bernardo se arrodilló cuando Gilles Wach alzó el Cuerpo de Cristo. Dicen algunos, que incluso la imagen de San Bernardo que corona el Altar Mayor, y las imágenes de los Santos Obispos, San Leandro y San Isidoro, así como la de la Santísima Virgen del Refugio lo hicieron: la Iglesia Universal celebrando el Santo Sacrificio de la Misa.
La participación en la Eucaristía fue masiva, tanta gente fue a recibir la Comunión que hasta alguno de los sacerdotes que asistían a la Misa se tuvo que revestir para distribuir la Sagrada Hostia.
Para terminar, canto de la Salve a la Virgen y procesión final. Los miembros de la Asociación no podían contener la alegría. Había sido un éxito.
A continuación la conferencia del padre Wach sobre Summorum Pontificum. Wach expuso espléndidamente el significado del Motu Proprio – texto legislativo no abierto al diálogo – y lo que el Santo Padre quería con dicho documento.
Felicidades a la Asociación Una Voce por la organización y por el trabajo que viene desarrollando en Sevilla. El fin, desde luego lo merece.
Ad maiorem Dei gloriam.
P.S. No quería pasar la ocasión de decir que ayer tuvimos la ocasión – mi mujer y yo -de conocer en persona – antes sólo lo conocía cibernéticamente – a Bruno y a su simpática esposa. Los cuatro, pasamos una velada muy agradable. Bruno y su mujer son unas bellísimas personas.La pena fue que, por las circunstancias, no los pudimos atender como se merecían. Queda en nuestro debe.
13 comentarios
Pues sencillamente porque los sacerdotes no eran españoles, y creo que no los tienen. Y la asociación Una Voce, hasta donde yo sé, no dispone de un fondo de bonetes para ponerlos en la cabeza de los celebrantes. Estaría bien, pero no es así. Sí utilizaron elementos típicamente españoles, e incluso locales, en lo provisto por la asociación y la parroquia: el "cuello" en las dalmáticas, los ciriales en vez de candelabros en los ceriferarios...
PD. ¿Habeis hecho "ecumenismo" Bruno e Isaac y familias... con los cantos, me refiero?
El sacerdote tenia una voz bajita, un poco aflautada, exactamente lo que no recomiendan en cualquier curso de oratoria.
En el momento de la consagración Dios estuvo allí, con nosotros, en realidad fue el único protagonista.
¡Que gran fuerza es la del Señor!, no necesita boato, grandes escenarios, sacerdotes importantes.
Solol Tú Señor que no escogiste ni a sabios, ni a ricos (ni a personas importantes).
Mira, a quienes asistimos a la Misa Tradicional, nos gustaría que llegara el momento en el que se celebrara con la normalidad con que se celebró la Misa a la que tú asististe... pero los obispos españoles desoyen el 'motu proprio' del Papa y tenemos que suplicar que se nos conceda el favor (derecho nuestro según Benedicto XVI) de una Misa. Hay diócesis donde no se permite la celebración, pese a las peticiones, ¿lo sabías? Para una vez que se puede celebrar, déjanos que lo hagamos con toda la solemnidad que podemos.
Y si quieres venir, descubrirás que Dios también está con nosotros. Y quizás encuentres un poco de humildad.
Faltaba un maestro de ceremonias para coordinar a los ministros.
Los comentarios están cerrados para esta publicación.