Familia en misión en Japón (IV): mientras nosotros morimos
He recibido estas líneas de Fernando, que, como recordarán, se encuentra con su familia de misión en Japón. En ellas muestra su sufrimiento por la situación de rechazo del Camino Neocatecumenal por parte de muchos obispos japoneses.
Quizá lo que más me llama la atención es su forma de ver ese grave problema, junto con los demás sufrimientos y dificultades de la misión, como algo que está, de alguna forma, dentro del plan de Dios.
…………………………………………………………
Queridos hermanos, escribo esto ante las noticias aparecidas estos últimos días, que recogen la profunda división entre la mayor parte de la conferencia episcopal japonesa y el Camino Neocatecumenal, y ya que de forma providencial mi vida se ve involucrada en esta misión a la que mi familia y yo fuimos enviados por el actual Papa, con la consigna tan cristiana de anunciar a Cristo y éste crucificado y resucitado. Quiero decir que los problemas-sufrimientos que nos tocan los hemos ofrecido y los seguimos ofreciendo según lo que dice la Escritura: “el que pierda su vida por mí, la encontrará” y “mientras nosotros morimos, el mundo recibe la vida…”
Ya experimentamos problemas desde el principio: desde que supimos que, de forma providencial, Dios dispuso que viniéramos a Japón, hasta que por fin, después de 3 años, pudimos entrar en este país. Imaginad la espera, con 6 hijos creciendo, como es natural, en la incertidumbre de lo que sería de su vida, y nosotros aportándoles estabilidad a una situación de lo más desestabilizadora. En ese tiempo, nació nuestro sexto hijo, mientras que el mayor entraba en los trece años (edad poco recomendable para semejante cambio de vida). En fin, lo pasamos muy mal, pero, como ya contamos, Dios nos sostuvo en la lucha, a pesar de las persecuciones incluso entre los propios cristianos. Así vinimos como misioneros, para ayudar a la Iglesia en Japón y, sobre todo, para dar testimonio de lo que su Santidad nos mando predicar.
Os podría decir que, realmente, si pones tu vida en manos de Dios, Él no permanece ajeno. He vivido momentos duros: mi madre es viuda y, en el tiempo que llevo aquí, se ha debilitado mucho por una artrosis degenerativa. Además, ella cuida de mis dos hermanos, enfermos con una gravísima enfermedad como es la distrofia.
Al dejar mi negocio (como me temía, ya que a las empresas grandes sólo les interesa el dinero), la concesión que tenía de marcas muy importantes fue rescindida sin causa justificable alguna. Sin embargo, escrutando la Palabra de Dios, que siempre nos precede, escuché: “no puedes servir a dos señores, a Dios y al dinero“. Por eso, cuando el gerente me preguntó: ¿Por qué estas en Japón y cuándo vuelves?, conteste que Dios dispuso que viniera y a Él le corresponde disponer mi vuelta, pues a Él sirvo y Cristo es mi Señor. Pareció encantado y me dijo que se alegraba que hubiera gente que considerase que el dinero no está por encima de la felicidad, pero a las dos horas en mi negocio de Madrid recibíamos buró-fax rescindiendo el contrato y alegando falsedades para librarse de indemnización alguna. Os aseguro que había mucho dinero en juego, pero, como también dice la Escritura: “al que te quite la túnica dale también el manto y no se lo reclames…”
Estos son tropiezos que Dios permite para escrutar el corazón: “Un corazón contrito y humillado tú no lo desprecias” y creed que en la misión, más de una vez por gracia de Dios, así me he visto.
Por otro lado, quiero recordar también a tantos hermanos en Misión que nos han precedido. Entre ellos Félix, ya fallecido y podría decirse que por decisión propia, ya que, después de un cáncer y para ser semilla de la nueva evangelización, fue con su mujer de las primeras familias que llegaron aquí y realmente dio su vida, aceptado primero y sufriendo después el rechazo por vivir el celo apostólico. También quiero recordar a las familias que permanecen sufriendo ahora este rechazo, además de los problemas parecidos a mi testimonio, así como los propios de vivir en tierra extraña.
Nos han ayudado mucho varios presbíteros y seminaristas. No quiero olvidar a un jesuita que acogió esta misión hace mas de 30 años y que ha sido relegado y marginado por sus hermanos de aquí por el pecado de haber recibido esta misión y, durante un tiempo, haber dirigido el seminario Redemptoris Mater (seminario misionero diocesano, creado por el Camino Neocatecumenal), además de que, en mi opinión personal, despierta celos y envidias por su celo apostólico. Doy fe de que, gracias a su perseverancia, cientos de japoneses han reconstruido sus matrimonios y sus familias (no os hacéis idea de lo destruidas que están aquí las relaciones familiares), otros han salido del alcohol, de las drogas o de la mafia: milagros auténticos.
Desgraciadamente, aquí en Japón muchas parroquias ya no se pueden atender por falta de curas y lo que se hace es venderlas para sacar dinero e ir concentrándolas, mientras que en algunas se tienen celebraciones de la Palabra, presididas por laicos que reparten la comunión. En medio de esa situación, se rechaza el seminario Redemptoris Mater, cuyo único delito es dar presbíteros a las diócesis, sin exigir que tengan comunidades neocatecumenales en las parroquias a las que son enviados. Sin embargo, tampoco así son aceptados.
El resultado es que, por un lado, ves como Cristo deja de ser anunciado y, por otro, la sangría de cristianos cada día aumenta más.
A los que no aceptan el Camino Neocatecumenal dentro de la Iglesia como un don para esta generación, yo les diría lo mismo que Cristo: “Al menos creed en las obras…“ Por eso he querido dar mi testimonio: Yo mismo, si no me hubiera encontrado con Cristo y su Iglesia en este Camino, renovando casi a diario este encuentro, tendría ahora un matrimonio roto y muchos de mis hijos no existirían. Tampoco sería capaz de salir este domingo, si Dios quiere, al Nagai Park junto con hermanos japoneses, a anunciar la mejor noticia que jamás se pudo dar y se dará sobre la faz de la tierra: que Cristo murió y está resucitado para la salvación de todos los hombres.
En cuanto a los que dudan tanto sobre lo acertado de la evangelización, quisiera recordar otra vez las ultimas palabras que el mártir japonés San Pablo Miki dirigió a sus verdugos:”Al llegar este momento no creerá ninguno de vosotros que me voy a apartar de la verdad. Pues bien os aseguro que no hay mas camino de salvación que el de los cristianos…” Si a este hombre, por vivir la fe, le arrebataron su vida, qué menos que al Camino Neocatecumenal le llamen sectario.
Todo está en manos de Dios y ésta es su misión. A Él me abandono y todo para su mayor gloria. Pido disculpas por la extensión y, tal vez, la falta de concreción, así como de sintaxis. No soy más que un siervo inútil. La paz
26 comentarios
"Dios dispuso que viniéramos a Japón"
"algo que está, de alguna forma, dentro del plan de Dios"
"Dios dispuso que viniera"
¿De dónde procede esa certeza de que es el mimísimo Dios quien traza los planes del CNC y de esta familia para irse a Japón a hacer este particular tipo de misión?
Gracias a Dios, la Iglesia cree en el Camino Neocatecumenal y cree en los seminarios Redemptoris Mater. Si finalmente y por ahora decidiera que se cierre ese seminario en Japón, en otro lado se abrirá. Pido por vosotros, por vuestra familia y las demás que sufrís por ello, que el Señor fortalezca más y más la fe y el amor que ya habéis demostrado como confesores de Cristo. Aunque no os dejaran predicar, estais dando impresionante testimonio del poder de la gracia. También te agradezco lo que nos cuentas del P. jesuita que acogió el Seminario allí, y pido por los Jesuitas y los obispos de Japón. El Señor se marcho ascendiendo al Cielo donde reina sentado a la derecha del Padre. Y se quedó con nosotros. El Señor que nos dijo que no seríamos nosotros menos que él sabía lo que habría de pasar, en Japón, en Europa, en Hispanoamérica, en EEUU. Y la Virgen María os cuidará siempre, como siempre hizo con todos sus hijos. Bajo tu amparo nos acogemos... Un abrazo muy agradecido. Seguid contando.
Creo que has entendido lo que dice Fernando de una forma erróneamente restrictiva, quizá por la falta de contexto.
No se trata de pensar que Dios traza los planes del CN o de esta familia en particular porque sean distintos.
Más bien se trata de reconocer que Dios tiene un plan para cada uno de nosotros y todo lo que sucede en tu vida y en la mía es parte de ese plan o, como se suele decir en el Camino, de la Historia de Salvación que Dios tiene contigo. Para los cristianos, no existen las casualidades: todo sucede para el bien de los que aman a Dios.
Además, cuando la Iglesia (a través del Papa, de un obispo, del párroco de tu parroquia o de un simple catequista) te encomienda una misión, por humilde que sea, es Dios mismo quien te envía y te da el Espíritu Santo para llevar a cabo esa misión. Relee los Hechos de los Apóstoles y verás que esto se ha entendido muy bien en la Iglesia desde sus orígenes.
LO que me parecía de las palabras de Fernando es que no se trata de un reconocimiento a posteriori, de un "caer en la cuenta" del paln de Dios y cómo se va cumpliendo en tu vida. Sino de que a él se le ocurrre una idea de futuro y la encuentra inmediatamente inspirada por Dios. Lo veía muy aventurado y arriesgado, Pero bueno, la relación con Dios es tan íntima en cada persona que, salvo evidentes casos de patologías iluminadas, no tengo nada que oponerle, si me lo explicas como lo has hecho. No lo había entendido así. Gracias (de verdad, eh, que supongo que a estas alturas sí notas cuando lo digo de verdad de la buena y cuando sí que llevo una cierta ironía, que no es ahora el caso)
En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos, y los envió de dos en dos delante de sí, a todas las ciudades y sitios a donde él había de ir. Y les dijo: La mies es mucha, y los obreros pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies. Id; mirad que os envío como corderos en medio de lobos. No llevéis bolsa, ni alforja, ni sandalias. Y no saludéis a nadie en el camino. En la casa en que entréis, decid primero: "Paz a esta casa." Y si hubiere allí un hijo de paz, vuestra paz reposará sobre él; si no, se volverá a vosotros. Permaneced en la misma casa, comiendo y bebiendo lo que tengan, porque el obrero merece su salario. No vayáis de casa en casa. En la ciudad en que entréis y os reciban, comed lo que os pongan; curad los enfermos que haya en ella, y decidles: "El Reino de Dios está cerca de vosotros." En la ciudad en que entréis y no os reciban, salid a sus plazas y decid: "Hasta el polvo de vuestra ciudad que se nos ha pegado a los pies, os lo sacudimos. Pero sabed, con todo, que el Reino de Dios está cerca." Os digo que en aquel Día habrá menos rigor para Sodoma que para aquella ciudad.
Es increible como el Demonio se nos mete hasta el fondo. Que debe más hacer un cristiano para ser reconozido por sus hermanos. Pobres obispos nipones, pues su juicio será más severo de los que han ido mansa y humildemente mandados por la iglesia a hacer la primera orden del mismisimo cristo "Id y anunciad el evangelio hasta el fin del mundo..."
Porque lo hacemos todo tan dificil si servir en la viña es tan facil.
Animo hermanos en Cristo pues grande será vuestra recompensa en los cielos.
Un abrazo, de otra familia numerosa aquí en España.
En mi Comunidad hay matrimonios jóvenes, muy jóvenes (más jóvenes que yo, que tengo 26 años y me caso en un año) que están "levantados" para misiones como estas o similares, para lo que Dios quiera y disponga, básicamente. Son un testimonio impresionante, las familias en misión, gente que pierde su vida por el Evangelio. Si se estuvieran buscando a sí mismos, entendería que alguien dudara, pero, cuando "quieren" (es un decir) perder la vida por el Evangelio, como dudan de ellos??
La Paz con todos vosotros.
P.D.: veo que no habéis sacado ninguna noticia de la "Misión Joven" que hemos hecho en Murcia, donde hemos tenido una persecución mediática bastante perversa... Pero es lo que toca. La Paz.
Mi familia está dispuesta a salir,pero de momento el Señor nos quiere aquí....en el espíritu y unida a Teresita de Lisieux,patrona de las misiones que nunca abandonó su convento,ofrecemos nuestras oraciones por los que sois incomprendidos..a imagen de Nuestro Señor del que jamás entendieron la Misiòn que cumplía.LA PAZ
Un sacerdote muy sabio me dijo una vez y yo lo repito todo lo que puedo: "La Cruz fructifica todo lo que toca." Cuando el cristiano se da entero a la obra de Dios, le está dando el "SI" de María a la Cruz. La Sagrada Familia experimentó la escasez, el rechazo, el exilio, el desprecio y finalmente con la muerte de San José, separación.
Pero mira los frutos que nos dieron: primero Cristo mismo, María Santísima, el Evangelio, la Eucaristía y la Iglesia. Todo ello es "dar" para nuestra salvación. Esta familia experimenta dolores justamente porque el fruto de su sacrificio será tan magnífico como duros han sido los sacrificios.
"Los que llorando siembran sus semillas
Riendo cosecharán sus gavillas"
Si el Obispo no los admite, paciencia. Estar´n mejor en otro lado.
La obediencia da fuerza.
Quisiera hacer llegar esto a esa familia que admiro. La voluntad de Dios en un católico también se ve mediante sus pastores. Y a se les hará la luz.
Ha faltado poner el artículo de otgro blogger de Infocatolica. Andrés Beltramo
El Camino Neocatecumenal, una piedra en el zapato
Puede leerse aquí, con todos sus comentarios:
http://infocatolica.com/blog/sacroprofano.php/1012281218-el-camino-neocatecumenal-una
Me impresiona Fernando con su fe sincera y por encima de cualquier otra cosa (perdió mucho dinero por amar más a Cristo).
Nunca, y vuelvo a repetirlo, nunca entenderé a los cristianos que persiguen a otros cristianos, porque persiguen al mismo Cristo como hicieron los judíos. Si persigues a Cristo no eres cristiano.
Y me encanta todo lo que dice este cristiano y cuando dice: A los que no aceptan el Camino Neocatecumenal dentro de la Iglesia como un don para esta generación, yo les diría lo mismo que Cristo: “Al menos creed en las obras…“. Siempre me han impresionado estas pala bras de Cristo.
Yo como dice Luis Fernando: con el papa ahora y siempre. Porque él es el garante de la unidad del Cuerpo de Cristo.
Que bueno que el Papa decidio que no se cerrara el camino.
Dios provee!
Sera mejor adecuarse a estas formas yo por mi parte ya me integre a una comunidad jaja animo como se dice por estos lares.
Dejar un comentario
