San Pablo tendiendo puentes
El Papa Francisco señaló el otro día cómo San Pablo construía puentes hacia los idólatras en su famoso discurso en el areópago de Atenas y lo encomió como “un ejemplo extraordinario de inculturación del mensaje de la fe”, que anunciaba sin atacar, “haciéndose pontífice, constructor de puentes”. Bien es cierto que el resultado fue que la gran mayoría se rieron del Apóstol cuando habló de algo políticamente incorrecto, como la resurrección de Cristo, pero, como recuerda con gozo San Lucas, “algunos se adhirieron a él y creyeron; entre ellos Dionisio, el Areopagita, y una mujer llamada Damaris, y otros con ellos”. Hay que reconocer que esa alegría triunfante de Lucas por los primeros conversos atenienses suena un poco proselitista y quizá alguien habría tenido que corregirle: “Señor Evangelista, evangelización sí, proselitismo no”, pero, en fin, eran otros tiempos.
Me ha parecido, sin embargo, muy buena la idea del Papa de señalar a San Pablo como ejemplo de la manera en que hay que tender puentes con los idólatras y la sociedad moderna, evangelizando sin “hostilidad”, así que he buscado otros textos en que el Apóstol habla de ese tema. Voy a traer al blog el primero que he encontrado, de la carta a los Romanos, para edificación de los lectores:
“No me avergüenzo del Evangelio, que es poder de Dios para la salvación de todo el que cree, del judío primero, pero también del griego, porque en él se revela la justicia de Dios, de fe en fe, según está escrito: ‘El justo por la fe vivirá’.
En efecto, la ira de Dios se manifiesta desde el cielo sobre toda impiedad e injusticia de los hombres, que aprisionan la verdad con la injusticia. Pues lo cognoscible de Dios es manifiesto entre ellos, ya que Dios se lo manifestó; porque desde la creación del mundo los atributos invisibles de Dios, tanto su eterno poder como su divinidad, se dejan ver a la inteligencia a través de las criaturas. De manera que son inexcusables, por cuanto, conociendo a Dios, no le glorificaron como a Dios ni le dieron gracias, sino que se entontecieron en sus razonamientos, viniendo a oscurecerse su insensato corazón; y alardeando de sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible por la semejanza de la imagen del humano corruptible, y de aves, cuadrúpedos y reptiles.
Por esto los entregó Dios a los deseos de su corazón, a la impureza, conque deshonran sus propios cuerpos, pues cambiaron la verdad de Dios por la mentira, y adoraron y sirvieron a la criatura en lugar del Creador, que es bendito por los siglos, amén”.
No pongo lo que sigue, porque explotarían los medidores de incorrección política. Baste decir que he buscado a ver si más adelante hablaba de hacer ídolos, postrarse ante ellos, introducirlos en el culto cristiano y cantar a la Pachamama, pero en mi versión de la carta no sale nada de eso. En cualquier caso, me ha quedado muy claro lo que significa “crear puentes”, “dialogar” e “inculturar con delicadeza” para San Pablo. A partir de ahora, voy a seguir su ejemplo siempre que pueda.
57 comentarios
Es lo que pasa. Que empieza uno a quitar y se queda con las tapas.
El cuadro de Buda con una velita encendida está apoyado en el alfeizar de la ventana, razón por la cual siempre que entro lo bajo y lo pongo mirando de cara a la pared, no en un gesto de desprecio sino de respeto. No me parece bien que el líder espiritual de millones de personas, por el que yo no siento nada especial, acabe allí supongo que porque el dueño piensa que una especie de laxante en el caso de estreñimiento.
Esto no se arregla tendiendo puentes, se arregla con sentido común que es la base de la filosofía realista del Aquinate. Es menos ultrajante dinamitar una estatua de Buda que colocarlo en un vertedero por feminista que sea éste (cualquier día me cuelo de extranjis en el servicio de caballeros a ver si también hay otro).
El lugar de la pachamama no es una iglesia ni el de Buda un servicio público.
«Condenamos todo recurso a la violencia, al proselitismo, al fanatismo en nombre de la religión. Nosotros creemos firmemente que las relaciones entre los cristianos, en todas sus manifestaciones, deben estar caracterizadas por la honestidad, la prudencia y el conocimiento de los problemas en cuestión».
Declaración Común del Papa Juan Pablo II y de su Beatitud Christodulos, Arzobispo de Atenas y de toda Grecia desde la Bema (Podio) de San Pablo, el Apóstol de los Gentiles, en el Areópago de Atenas, 4 Mayo de 2001.
Puentes hay para que pasemos todos. El que quiera pagar (y pueda) por el de peaje, pues bendito sea. El destino es común: tus umbrales, Jerusalén. Entrar, ya veremos. Pero puentes, será por puentes. Puentes y pontífices. Pontificar y dejarse.
"Antes digo que lo que los gentiles sacrifican, a los demonios lo sacrifican, y no a Dios; y no quiero que vosotros os hagáis partícipes con los demonios."
Saludos cordiales.
Dios está fuera del tiempo y el espacio, el hombre no, así que su mensaje debe tomar las dimensiones humanas, pero de todas las palabras que pudieran usarse, "inculturación" parece ser una de las mas desafortunadas.
Y si se refiere solamente a labor evangelizadora, sugiero que lean la manera en que se evangelizó mi patria: la misma imagen que nos regaló "la morenita del Tepeyac" es una de las mejores muestras de como el mensaje divino toma realidades humanas.
No sé si lo anterior será el tan denostado proselitismo, pero la realidad es que ha sido lo que han hecho los cristianos desde el principio hasta nuestros tiempos (a costa muchas veces de sus vidas). Es evidente que en esos tiempos, los ejemplos a seguir eran eran los de San Pablo, San Bonifacio o San Francisco Javier.
Pero hoy...¡oh tempora, oh mores! En nuestro tiempo, el pastor que con mayor profundidad ha hablado del proselitismo -aparte de algunas cosas dichas por el Santo Padre- ha sido el Arzobispo de Tánger, que señala, entre otras lindezas que:
"como cristiano y arzobispo lo que más me interesa, es que un musulmán sea un buen musulmán, que para malos cristianos ya bastamos nosotros”.
Si San Pablo hubiera seguido ese consejo con la excusa de que tenía un aguijón pecaminoso que no le dejaba tranquilo (2 Cor. 12,7), Dios sabe en qué miseria espiritual nos encontraríamos hoy los que vemos en en Cristo la salvación absoluta para nuestra vida y para la de todo el mundo.
Se puede entender a los dioses olímpicos griegos como símbolos culturales, pero no como dioses; se puede entender que la imagen de la Virgen de Guadalupe es un códice que leyeron los tlacuilos de la época, lo que no se entiende es que dijera nada sobre los dioses aztecas. Y no lo dijo, como puede comprobar cualquiera que lea el Nican Mopohua.
Es decir, Los dioses dejaron de ser dioses y ahí está el quid de la cuestión, no en la lengua, los símbolos o la vestimenta.
Lo que vimos en el Sínodo de mala memoria no fue una aportación cultural sino pura y dura idolatría. Y la idolatría no es puente sino abismo.
Después de las Apariciones los indios se convirtieron a miles porque entendieron el mensaje, pero el mensaje no hacía mención alguna a sus antiguas creencias.
La pachamama de turno para los aztecas era Coatlicue, pero nadie confundió a la Virgen de Guadalupe con ella. Tenían muchos dioses, pero no mencionó a ninguno, se limitó a decir que era la Virgen María y dio señales de que estaba embarazada utilizando las cintas negras que cuelgan de su muñeca y el signo de ollin en el vestido a la altura del vientre, que para ellos significaba centro y movimiento. Entendieron enseguida que era la Madre de Dios, tal cual predicaban los frailes y se convirtieron. Siglos después muchos de los indios de esa zona fueron cristeros y murieron al grito de ¡Viva Cristo Rey!
Si a eso se le llama inculturación estoy de acuerdo, pero mucho me temo que no es eso.
En cuanto a los griegos del areópago acabaron llamándose Juan Crisóstomo o Gregorio de Nacianzo.
Basta leer los Hechos para ver cómo se relacionaban los cristianos con las religiones paganas (atiéndase por ejemplo al Motín de Éfeso y su diosa Artmisa), cómo eran las relaciones con los judíos (a los cuales San Pablo daba prioridad en la predicación, pero si rechazaban el Evangelio se volvía hacia los gentiles) y cómo eran las relaciones con los primeros herejes (cristianos separados; los sarmientos separados de la vid se secan y solo valen para el fuego)
Sería una pena que las tristes aberraciones que hemos visto las últimas semanas nos llevaran a una reacción injusta contra la buena "inculturación".
El papa tiene razón en que la actitud de San Pablo en Atenas es acertada: observando cómo era la religiosidad de los atenienses busca un punto común a partir del cual empezar la predicación del evangelio. Pero es evidente también dónde está la diferencia entre lo del Aerópago y la escena del 4 de octubre. San Pablo no parece hacer ni amago de reverenciar dioses paganos.
He leído hace poco las cartas de San Francisco Javier desde el Japón. Como hombre culto y sensible apreció desde el primer momento la fascinante cultura japonesa y se aplicó en examinar sus prácticas religiosas. Sin embargo planteó su evangelización en gran parte sobre la denuncia de los errores y la ineficacia de sus cultos, de manera que se acreditó bastante ante muchos japoneses que por entonces ya se mostraban algo escépticos y que protestaban por la forma en que los bonzos explotaban el miedo y la superstición de la gente. Eso también es inculturación.
En definitiva creo que el esfuerzo en el acercamiento cultural es necesario, como también es bueno el conocimiento y aprecio de otras religiones en lo que valen (subrayo: "en lo que valen") pero no tiene nada que ver con la asunción de creencias y cultos paganos, que es en lo que están cayendo estos modernos la REPAM.
"El problema con lo del discernimiento es que no se trata de una palabra hueca"
Estoy de acuerdo con Parmandil. El discernimiento, bien entendido, no es más que aquello que dice San Pablo: examinadlo todo y quedaos con lo bueno. Hoy es más necesario que nunca.
Yo, ingenuo de mí, pensé al comienzo de este pontificado que un Papa jesuita conseguiría extender por la Iglesia ese don de discernimiento que de forma tan maravillosa tenía San Ignacio (su explicación de la diferencia entre los efectos que notaba en sí mismo de los libros de caballerías y los libros religiosos es magnífica, por ejemplo). Desgraciadamente, yo diría que nunca se ha hablado tanto de discernimiento... pero nunca se ha discernido (cristianamente) tan poco como ahora.
Habrá que seguir rezando (y discerniendo).
A mi juicio, la diferencia está en tener o no tener fe. Los apóstoles y los santos tenían fe y sabían que esa fe era lo único que podía salvar a los paganos: por eso, como San Pablo, se hacían todo a todo para ganar, fuera como fuese, a algunos.
Hoy, en cambio, tantísimos católicos, incluidos clérigos, apenas tienen fe (o no tienen fe en absoluto) y, por ello, están encantados de encontrar cualquier excusa, sea cultural o del tipo que sea, para no predicar la fe a los paganos.
El problema no está en la inculturación (que tiende a producirse automáticamente cuando hay evangelización, como decía Palas hablando de México), sino en la falta de fe.
De manera que solo es posible la conversión, pero no estados intermedios. Un babalao de la Regla de Ochá por mucho que le llame Yemanyá a la Virgen de la Caridad del Cobre no es católico, precisamente porque la Virgen de la Caridad del Cobre solo puede ser la Virgen María y ninguna otra cosa. Los cultos sincréticos son una peste de la que hay que huir y ahora resulta que son "puentes", pero las orillas de ese río no admiten puentes. La imagen del puente, ahora tan de moda, en este caso es fatal.
Eso es lo que aparece en la historia de los conversos, los hay que dan el salto muy rápido y los hay que se toman su tiempo, pero acaban dándolo.
Nezahualcóyotl murió unos 40 años antes de la llegada de los españoles, pero si hubiera conocido el Cristianismo tal vez habría encontrado la respuesta a lo que estaba buscando, preguntándose constantemente sobre el destino de los mortales: "¿no hay nada más? ¿sólo polvo, sólo gusanos seremos? ¿qué hay más allá?" Y a él no le servían ninguno de las muchas deidades que tenía el panteón azteca como contestación a sus preguntas.
Pablo observa la cultura y observa el ambiente de Atenas «desde una mirada contemplativa»..
"Pablo elige la mirada que lo lleva a abrir una brecha entre el Evangelio y el mundo pagano. En el corazón de una de las instituciones más famosas del mundo antiguo, el Areópago, realiza un ejemplo extraordinario de inculturación del mensaje de la fe."
Pablo fue ciudadano romano, de cultura grecolatina, hablaba griego además de hebreo, y algo de latín.
Atenas, ciudad griega, era de cultura grecolatina, como Pablo.
Si Pablo y Atenas compartían la misma cultura, entonces, ¿A qué inculturación se refiere el Santo Padre?.
"Por eso Dios los entregó a pasiones despreciables: sus mujeres trocaron las relaciones naturales por aquellas contrarias a la naturaleza; y los hombres, abandonando igualmente la relación natural con la mujer, se abrasaron en el apetito mutuo, sometiéndose a la desviación unos hombres con otros hombres, que recibían en sí mismos el debido pago por su extravío. Y, como no tuvieron a bien tener de Dios cabal conocimiento, entrególos Dios en manos de una mentalidad réproba, de manera que hiciesen lo que no cumplía repletos de toda injusticia, perversidad, codicia, maldad, henchidos de envidia, homicidio, contienda, dolo, mala entraña, [siendo así] chismosos, detractores, abominadores de Dios, insolentes, altaneros, fanfarrones, inventores de maldades, desobedientes a los padres, desatinados, desleales, desamorados, despiadados. Quienes, conociendo el justo decreto de Dios, hacen tales cosas, son dignos de muerte, pues no solamente las hacen ellos, mas aún dan plácemes a los que las hacen." Y es tan palabra de Dios como el resto.
En esas circunstancias la presencia de San Pablo en el areópago no fue la de San Francisco Javier en Japón, precisamente. Por lo tanto el ejemplo no es válido para lo que se propone el Papa Francisco porque había una diferencia de religión, pero no de cultura. Los griegos tenían que convertirse a la luz de Cristo pero esa conversión alteraba más su concepto de Dios y del mundo y su moralidad que sus formas de cultura. No necesitaban dar un salto de una mentalidad mítica a otra racional, como los americanos o los africanos, necesitaban creer en la Revelación.
Aunque parezca raro la fidelidad a la doctrina no es cosa de pobres, es cosa de creyentes en general y algunos, que podrían haber adorado a Mammón no lo hicieron, lo cual es extraordinariamente meritorio y solo se descubre metiendo la nariz en los textos porque, en general, no se dice.
Matar a los que no se conviertan, y mientras se lo piensan, unos impuestos y unas restricciones de todo tipo que convierten a los no musulmanes, por ejemplo cristianos en países de regla islámica, en ciudadanos de tercera y los arruinan poco a poco. Hacer una denuncia falsa con falsos testigos y luego obligar al denunciado a convertirse es una práctica muy dulce y humana y, desde luego, no es proselitismo. es un puente.
Nada de proselitismo. Por eso, la declaración de Abu Dhabi es perfectamente conforme con el Corán y con la práctica islámica.
¡Que Dios me perdone! Pero más que "inculturación", todo esto huele a sincretismo!.
Para evangelizar no hay necesidad de "inculturar", un ejemplo la piñata. Nadie ha escrito la historia su oficial. pero se cree que fue una creación de los misioneros españoles, representa al demonio, y por eso originalmente tenía 7 picos, una por cada pecado capital, había que luchar contra él y por eso, se debía romper y, al hacerlo, se obtiene una recompensa, de ahí que estén llenas de frutas y golosinas.
.No se "inculturó" a los dioses aztecas, sino que se creo un elemento ajeno a la cultura autóctona para explicar el concepto. Fue tan exitoso, que aún hoy en día se siguen usando aunque ya perdió mucho del sentido original.
Usted sabe que tradicionalmente había dos metodos de atacar cualquier enfermedad, el alivio sintomático y luego el ir a por las causas de raiz del problema.
Cada vez mas se tiende a lo segundo a medida que avanza la ciencia y se conoce mas.
Usted elige una via elegante de atacar los sintomas. Es una via indirecta.
Estoy seguro de que si lo hace es porque lo considera mejor. Yo discrepo absolutamente, lo mismo que con el P. IRABURU. Creo que ya no se pueden poner mas paños calientes, ni esperar a que las vias indirectas sirvan de algo, yo creo que hay que plantarse. Es mas creo que por que muchos prelados no se han plantado a su debido tiempo hemos llegado a esta situación esquizofrenica y corrupta. Yo no se cual es la solución exacta, exacta, ni la mejor, pero creo que ante ciertos hechos es una exigencia moral, ser claros directos y plantar cara. Ya se que es facil de decir, y que además yo tampoco tengo perfectamente claro el como, pero la idea general si la tengo. No digo que lo que hace es malo, puesto que no lo es, pero creo que lo mejor es otra cosa aunque no sepa precisarla.
Así que la salvaguarda de la Fe ya no está en Occidente sino en Sudán, Uganda, Pakistán, Siria o China. Somos nosotros los que hemos desplazado a Jesucristo para ocuparnos de otras cosa, según noticias que llegan todos los días del Vaticano. Ellos son cristocéntricos.
Un puente va de un sitio a otro. No diciendo de donde a donde se quiere el puente lo convierte en flatus vocis. Existen puentes buenos y puentes malos. Es algo elemental.
Un día fue escuchado por el Papa contemporáneo pero con el actual, en el mejor de los casos, muy posiblemente correría la misma suerte que los cuatro cardenales que plantearon al líder la Dubia: No debate.
San Pablo tendería puentes, como opción prioritaria, desde Dios hacia el Estado del Vaticano. Grecia corre menos peligro, incluso tiene cristianismo como religión oficial en una Europa paganizada.
Oremos por la santidad del Papa (lo de "por sus intenciones"...lo dejaremos para el próximo misterio)
La razón para tan pintoresca exégesis es que él sostiene (en contra de la opinión general) que la evangelización fue mayoritariamente rural. Si algo no encaja en su teoría, lo elimina. Ergo todas las perícopas situadas en grandes ciudades son inventadas. Jerusalén, Damasco, Antioquía, Corinto, Atenas, Roma... Todo fuera. Nos quedamos sin NT.
Para qué dar más vueltas a las cosas: si la realidad no encaja con los prejuicios del biblista, tanto peor para la realidad.
Así que no hay nada que inculturar.
Alegraos
Alegraos con las flores que embriagan,
las que están en nuestras manos.
Que sean puestos ya
los collares de flores.
Nuestras flores del tiempo de lluvia,
fragantes flores,
abren ya sus corolas.
Por allí anda el ave,
parlotea y canta,
viene a conocer la casa del dios.
Sólo con nuestras flores
nos alegramos.
Sólo con nuestros cantos
perece vuestra tristeza.
Oh señores, con esto,
vuestro disgusto se disipa.
flores placenteras,
Las inventa el dador de la vida,
las ha hecho descender
el inventor de sí mismo,
con ellas vuestro disgusto se disipa.
"Las inventa el dador de la vida" (creación) "las ha hecho descender el inventor de sí mismo" (o Yo soy el que Soy)
Ya no estamos hablando con un politeísta, estamos hablando con alguien que se está acercando a la Verdad pero sin Revelación no puede alcanzarla. A este sí es posible tenderle un puente.
Esto supone un acercamiento al Dios Único que no está en los dioses tribales, lo que justifica que el Nican Mopohua diga lo siguiente:
"Sabe y ten entendido, tú el más pequeño de mis hijos, que yo soy la siempre Virgen Santa María, Madre del verdadero Dios por quien se vive; del Creador cabe quien está todo; Señor del cielo y de la tierra".
La traducción es antigua y emplea la preposición cabe ya en desuso, pero la frase náhuatl "In Tloque in Nahuaque" significa no sólo el espacio sino también el tiempo, lo cual quiere decir que para Dios todo está cerca y el tiempo siempre es presente porque Él es su Dueño. Una idea teológica de enorme profundidad.
Es decir, nada que ver con adoradores de la pachamama. Y la idea estaba más generalizada de lo que podemos pensar entre aquellos indios que se debatían entre grandes dudas existenciales.
No he estudiado esa cultura por casualidad sino porque había algo en ella que me sobrecogía.
Pero es un caso muy especial y eso justifica que la Virgen de Guadalupe apareciera con su mensaje solo diez años después de la Conquista de México.
A los demás no hay que presentarles a Dios conviviendo con dioses de la tierra, del fuego, del viento o del agua, sino desterrar esos dioses antes de evangelizarlos. De hecho en las poesías de Nezahualcóyotl no hay mención a otros dioses por lo que hay que suponer que él ya los había desechado.
Si no me equivoco, con ocasión del sínodo amazónico se ha producido un curioso reflujo en el uso de la metáfora de los puentes. Queda mal hablar de la naturaleza en el Amazonas y a la vez puente va, puente viene, que hace imaginar un sinfín de puentes absurdos enladrillando el curso del río. Si ha sido así el reflujo, da idea del uso viciado de la metáfora ingenieril de los puentes.
Peor aún es el uso por eclesiásticos de lo de los “puentes”. Que cuelan la palabra sin ton ni son, revelando un pedregoso páramo espiritual, sólo atento al carrerismo de hacerse el simpático al jefe. Usar las muletillas o tics de otro, por muy superior que sea, revela vacuidad, carrerismo y deseo insano de ocupar espacios.
Es tal la saturación del Papa Francisco con los “puentes” que creo que hay que plantearse a qué se debe. Si no estoy equivocado, la extenuación de la metáfora de los puentes es cosa de año y pico. Más o menos coincidente con el extraño derrumbe del puente de Génova, donde arriba quedó precisamente un camión con la marca “Vasko”.
Últimamente el uso de los “puentes” está tomando un cariz indebido. Cada vez más, se emplea para establecer un falso dilema, un maniqueísmo: los de los puentes, que se consideran los buenos, y a los que atribuyen difusamente los “muros”, que serían los malos. La creación de un falso dilema es desde la guillotina el método de los poderosos para engañar y manipular a los pueblos. Este truco, muy efectivo y sencillo, es ya conocido por muchos, especialmente por el consabido falso dilema “izquierda-derecha”, con el que llevan doscientos años tomándonos el pelo, el bolsillo y la vida. Esperemos que, aunque sólo sea pensando en el vergel amazónico, se olviden de los muros y los puentes, y cualquier otro falso dilema, antítesis relativas para dividir (y crear “muros”, si lo quieren expresado así)
La metáfora ingenieril también recuerda a los “ingenieros de almas”, a la “ingeniería social”.
Dada la difusion de los valientes dichos en Infocatolica de Mons. Aguer muchos estan entrando en los comentarios para denostarlo. Ruego no den paso a esos comentarios. Ya bastante la prensa argentino lo está lapidando. Cordialmente
Ojala hubieran abandonado a Cristo solo los poderosos, lo hemos abandonado la mayoría de una u otra manera. Asi nos va.
Las biografías de los mártires ingleses de 1535 a 1630, más o menos, indican que muy pocos de ellos fueron pobres, pobre podía considerarse a San Nicholas Owen, que era carpintero y lego, pero no muchos más teniendo en cuenta que las misas clandestinas se celebraban en mansiones y que las listas de recusantes incluyen a familias prominentes.
Es decir, cuando el ardor de la fe decae lo hace para todos, cuando la fe es ardiente lo es independientemente de la clase social.
Lo digo porque en la mente de todos hay una mezcla de pobre bueno y fiel y rico interesado e infiel pero la historia no confirma ese dato. Se puede adorar a Mammón desde cualquier estatus que ocupes en la sociedad.
A los pobres hay que ayudarles por su condición de pobres pero no hay por qué añadirles otros elementos adicionales como mayor fervor, mayor esperanza o mayor caridad.
Una prueba también es tomar el martirologio de los primeros siglos y apuntar la procedencia de los mártires y se ve claramente que había muchos que pertenecían a clases sociales desahogadas. También hubo mucho santo que renunció a su dinero, pero tener la opción de la renuncia y aceptarla ya es un plus, como el caso de San Francisco de Asís o San Roque.
Los que ostentan una posición alta en la sociedad y son fieles a Cristo tienen la importancia de no dejar solos a los pobres, los acompañan en su destino y eso es más importante de lo que parece.
Ahora la deserción afecta a todas las capas sociales pero no siempre fue así.
Para firmar al pié porque es muy cierto: Es de los modernistas el anotarles ciertos "zarcillos" que no son ciertos...
Lo mismo con La Iglesia ( de los pobres)...etc., con rostro ¿A.masónico?
Gracias, Bruno y gracias también a Fray Nelson Medina: muy certeros, dan en el Punto!
Gracias a todos los blogueros... es una dicha poder leerlos... luego de casi 24 horas (sin la Red) por una estampida de dos transformadores que traen la red por el oriente y por el occidente de la ciudad de Cúcuta, a uno de los conjuntos lejanos al centro de la ciudad... ¡Qué truenos! ¡Dios mío!
Es maravillosa la manera como usted cita el Texto de San Pablo para enseñarnos el verdadero sentido cristiano de “puente” y “cultura”. Tal como usted lo hace, es suficiente información para llevarnos a salir del asunto “noticioso” y conducirnos hacia la meditación del Texto Sagrado, extraer enseñanzas prácticas y dar Gracias a Dios.
¡Qué diferencia enorme entre este Artículo y las homilías diarias de los sacerdotes de mi región!. Aquellos que citan: “cómo dice el Papa Francisco” y enuncian una frase cualquiera y, acto seguido, como si fuera Palabra de Dios, se explayan en explicar lo que quizás tampoco entienden, sin ninguna misericordia con los que les escuchamos.
Qué El Espíritu Santo nos ilumine y nos fortalezca para ayudarnos a que, entre las frases y homilías de los “evangelizadores consagrados”, no nos hagan perder hasta el deseo de asistir al Santo Sacrificio de la Misa.
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