La iglesia Costadoatiana, cada día más mundana
Tengo un gran cariño por Chile, donde viví un tiempo. Por eso me ha entristecido especialmente leer un nuevo artículo de un jesuita chileno, el P. Jorge Costadoat, SJ, lleno de afirmaciones absurdas y tonterías varias sobre los anticonceptivos, la moral sexual y, en general, la naturaleza del cristianismo y de la Iglesia. Este jesuita es tristemente célebre porque, después de no sé cuántos años de enseñanza en la Pontificia Universidad Católica de Chile, el cardenal Ezzati se hartó y no le renovó la misión canónica necesaria para dar clase. Por supuesto, con grandes protestas de multitud de sacerdotes y “teólogos” tan desorientados como el propio jesuita.
Lo más triste, claro está, es que alguien que (como se puede ver más abajo) no cree en nada ni siquiera ligeramente católico haya deformado durante años las mentes de los estudiantes de la Universidad Católica y siga siendo jesuita con el beneplácito de sus superiores. Como otras veces, el artículo del P. Costadoat va en negro y mis comentarios en rojo.
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La llegada del Papa Francisco al pontificado ha tenido un impacto evangélico enorme. Sus palabras y gestos indican de un modo inequívoco en qué consiste el Evangelio. Como latinoamericano celebro que haya apernado al más alto nivel la opción por los pobres que ha caracterizado a nuestra Iglesia. Pero temo que dentro de poco Francisco no podrá ya enfrentar asuntos decisivos, pendientes de resolver en la Iglesia universal. Me detengo en uno solo. [O, dicho de otro modo, parece que el Papa Francisco no va a instaurar la iglesia Costadoatiana como deseábamos. ¡Qué gran oportunidad perdida!]
Se cumplieron 50 años de la promulgación de Humanae vitae, la encíclica que prohibió la contracepción, y no pasó nada. [Llaman la atención la ignorancia o la omisión maliciosa de esta afirmación. La encíclica Humanae vitae no es “la encíclica que prohibió la contracepción”, es la encíclica que repitió lo que había dicho siempre la Iglesia sobre el tema. Empezando por el Concilio Vaticano II y siguiendo por Pío XII, Pío XI, Inocente VIII, Sixto V, Gregorio IX y una infinidad de Papas, Doctores de la Iglesia desde San Agustín a San Juan Crisóstomo, Padres de la Iglesia y teólogos. La condena del uso de anticonceptivos como intrínsecamente malo es una doctrina constante de la Iglesia. Nadie, ni siquiera un Papa, puede derogarla. Pero claro, si damos la falsa impresión de que solo fue una idea absurda de Pablo VI, que ese día sufría de indigestión, es más fácil negarla] La institución eclesiástica no ha innovado en su doctrina sobre la sexualidad en un punto decisivo para enseñar con autoridad. [El P. Costadoat se coloca aquí incluso más lejos de la verdad que los protestantes clásicos, que al menos eran conscientes (aunque no practicantes) de que no se puede innovar en doctrina, porque hemos recibido la revelación de Cristo y no podemos apartarnos de ella. Si en lugar de seguir lo revelado en Cristo y transmitido por la Tradición apostólica nos dejamos llevar por el “afán de novedades” que tanto condenó San Pablo y preferimos seguir lo que “innova” el P. Costadoat, seremos costadoatianos, costadoatillos, costadoateños o simplemente torpes, pero ya no tendremos derecho al noble nombre de cristianos] ¿No pasó nada? Sí pasó: se hizo aún más profunda la incomunicación entre la jerarquía y el pueblo de Dios. [Notemos la curiosa estrategia lingüística del jesuita chileno. Está hablando de los que no creen, de los que rechazan la moral de la Iglesia, de los que pecan y quieren seguir pecando y que todos pequen con ellos, pero en vez de llamarlos por su nombre, que en la Iglesia siempre ha sido el “Mundo”, uno de los tres enemigos del alma, los llama “pueblo de Dios”, aunque sean exactamente lo contrario. Con esta prestidigitación verbal, intenta dar una leve capa de pintura a algo muy feo, para esconder la podredumbre que hay debajo y que tenga un aspecto más agradable. Vienen inevitablemente a la memoria las palabras de Cristo: “sepulcros blanqueados”] Pues, imperceptiblemente, la desautorización de la jerarquía en materias de moral sexual es enorme. Hoy es total, o casi. [Porque lo dice el New York Times y, sobre todo, el P. Costadoat, que es el que autoriza y desautoriza a placer. Ya se sabe que el primer precepto de la iglesia Costadoatiana es que no hay tontería tan grande que, si la dice el P. Costadoat, no se convierta en un dogma genial, maravilloso e indudable… hasta que el P. Costadoat diga otra cosa, claro, no vayamos a ser rígidos]
Los últimos cuatro papas -saquemos a Juan Pablo I- han mantenido una doctrina que nadie puede decir que haya sido recibida o aceptada por el Pueblo de Dios [De nuevo las falsedades o ignorancias abismales. ¿Los últimos cuatro Papas? ¿Por qué no se menciona a todos los anteriores, que enseñaron igualmente que el uso de anticonceptivos es malo? ¿O a los innumerables teólogos morales, doctores de la Iglesia y Padres de la Iglesia que dijeron lo mismo? Quizá sea porque el P. Costadoat idolatra las mayorías y no le gusta ver que la inmensa mayoría de los católicos de la historia de la Iglesia le condenan junto con esos cuatro Papas que menciona]. Las informaciones previas al Sínodo sobre la familia (2015) indican que el 90 % de los católicos aproximadamente cree que se trata de una enseñanza equivocada. [¿Ven? Idolatría de las mayorías. También conocida como el “Mundo” por la teología católica clásica. Pero claro, el P. Costadoat es a la teología clásica como Dan Brown es a Cervantes. Los católicos, gracias a Dios, sabemos que el hecho de que la muchedumbre eligiera a Barrabás en lugar de a Jesús no convirtió al primero en el Mesías y que el hecho de que haya muchos pecadores no convierte el pecado en santidad. Cualquiera diría que el P. Costadoat tendría que haber estudiado esto en primer curso de teología o cuando hizo la primera Comunión, pero parece que no fue así o que el pobre tiene muy mala memoria] Algunos ni siquiera saben que existe y usan medios contraceptivos como quien toma decisiones responsables en su vida. En la actualidad los matrimonios no se complican con Humanae vitae. [¿Y de quién es la culpa? De los sacerdotes infieles como el propio P. Costadoat, que han negado y socavado la moral de la Iglesia durante medio siglo o, en el mejor de los casos, se han avergonzado de enseñarla. Que esos mismos sacerdotes infieles y sembradores de sal se atrevan ahora a alegar la descristianización como signo de que la doctrina católica debe cambiar es una muestra de una desvergüenza tal que no bastaría una galaxia para contenerla] No por esto debe olvidarse tan rápidamente el daño que esta encíclica produjo en las católicas los años siguientes a 1968. [Ay, Padre C., qué aficionado es usted a la suggestio falsi y supressio veri. Los años siguientes a 1968… y los mil novecientos años anteriores, porque la doctrina de la Iglesia sobre este tema siempre ha sido la misma] Esta doctrina dinamitó la capacidad de las mujeres de decidir en conciencia cómo podían ellas, con, y a menudo sin sus maridos, hacerse cargo de los niños que habrían de educar. [Otra vez la falsedad evidente. El hecho de que la Iglesia enseñe la verdad sobre la moral no impide que las personas decidan en conciencia; al revés, les permite hacerlo. ¿O es que el hecho de que la Iglesia enseñe que está mal explotar al débil o matar a los inocentes impide que los explotadores y los asesinos puedan tomar buenas decisiones en conciencia? Si no hay cosas que estén bien y cosas que estén mal independientemente de nuestra conciencia, esa conciencia no tiene ningún criterio para poder decir más allá de la apetencia, el instinto y el egoísmo, que parece ser, cuando se quitan las capas de pintura, lo que defiende el P. Costadoat] Muchas se fueron. Otras dejaron de confiar en el magisterio. [¿A nadie le recuerda esto al momento en que Jesús habló de que había que comer su cuerpo y beber su sangre y muchos se escandalizaron de Él? “Desde entonces, muchos de sus discípulos se echaron atrás y ya no andaban con Él”. Y Jesucristo nos sigue preguntando: “¿También vosotros queréis marcharos?”. El P. Costadoat responde: por supuesto que nos marchamos a hacer lo mismo que hace el mundo. Quizá, aunque no sea tan moderno, sería mejor imitar a Pedro y responder “Señor, ¿a quién iremos? Solo tú tienes palabras de vida eterna”]
Humanae vitae, además de constituir un problema irresuelto -como bien opina Charles Curran en un artículo reciente (Theological Studies 79 (3) 2018)- [Sí, claro, para los heterodoxos como el P. Curran la verdad siempre es un “problema”. Los demás creemos a Cristo: La Verdad os hará libres], constituye el dique que impide a la jerarquía eclesiástica cambiar su enseñanza a propósito de otros temas de moral sexual. [Aquí por fin se deja ver claramente la patita de lobo que asoma por debajo de la puerta. Lo que se busca no es solo aceptar el uso de anticonceptivos, sino cambiar toda la moral de la Iglesia para abrazar las locuras y perversiones del Mundo. Si uno aguza el oído, puede escuchar un murmullo sibilante: “Seréis como dioses” y decidiréis lo que es bueno y lo que es malo] Si la encíclica prohíbe el uso de preservativos dentro del matrimonio y solo acepta actos sexuales abiertos a la procreación, ¿cómo pudiera orientar la vida de personas homosexuales, de los jóvenes que no toman la decisión de casarse antes de convivir, de gente que eventualmente puede trasmitir el Sida y otras situaciones? [Señalemos lo curioso de esta nueva prestidigitación verbal. Habla de que la Iglesia “oriente” la vida de esas personas, pero lo que quiere decir es que deje de hacerlo. En efecto, la Iglesia orienta las vidas de sus fieles enseñándoles, como es su misión, lo que Dios ha revelado en materia de fe y de moral, plasmado en la Escritura y transmitido por la Tradición. En cambio, el P. Costadoat quiere que deje de enseñar eso y pase a reconocer que todo lo que haga el Mundo es bueno. Eso no es orientar sino lo contrario, es ser una mala madre que no educa a sus hijos, sino que les deja que hagan lo que les dé la gana para que no molesten. La orientación a los que pecan consiste en animarles a dejar de pecar, a encontrar en la gracia de Cristo la gracia para no hacerlo a acudir a la Confesión cuando caigan para que puedan levantarse. En cambio, la “orientación” del P. Costadoat consiste en dejar que el desorientado siga perdido y asegurarle que, aunque se encuentre en medio de Santiago, si él quiere estar en Villarrica entonces está en Villarrica digan lo que digan la Iglesia y el mapa. “Si un ciego guía a otro ciego, ambos caerán en el hoyo”] Hasta aquí ha sido pueril de parte de los obispos y sacerdotes dar autorizaciones ad casum o ad personam. Ellos se han atribuido a veces la responsabilidad de interpretar la encíclica o de saltársela simplemente, eximiendo a los católicos del deber que solo ellos tienen de discernir sus elecciones en conciencia. [Los obispos y sacerdotes que hayan hecho eso, en efecto, son igualmente infieles. Nadie, ni el Papa, puede eximir a un ser humano del cumplimiento de la ley moral o autorizarle a que haga algo intrínsecamente malo. Mucho menos aún, por supuesto, pueden hacer lo que pide el P. Costadoat, que es decir a los fieles que lo malo es bueno y la esclavitud del pecado es liberación. “Ay de los que llaman al bien mal y al mal bien, que tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas”]
¿Es posible que la Iglesia cambie su doctrina? Por supuesto que sí. Lo ha hecho. El Concilio Vaticano II innovó, por ejemplo, en materia de libertad religiosa. [Otra afirmación simplista, aparentemente incapaz de distinguir entre cuestiones prudenciales y doctrinales, entre principio y aplicación positiva, entre libertad individual y colectiva, ausencia de coacción y libertad plena, indiferentismo y tolerancia, entre premisa dogmática e hipótesis, etc.] Desde entonces la Iglesia ha tomado iniciativas de tolerancia en diversas partes del mundo, anunciando por doquier que Dios puede expresarse en las culturas y religiones más distintas, y que el cristianismo, en los hechos, no es mejor que ninguna. [Como se puede ver, este jesuita simplemente no es católico. Ni cristiano. Y o bien oculta conscientemente la verdad o bien no sabe absolutamente nada sobre los temas de los que habla. No sé cuál de las dos opciones es peor. Lo que anuncia la Iglesia por doquier es exactamente lo contrario. Por ejemplo, el Concilio Vaticano II: “esta Iglesia peregrina es necesaria para la salvación. Cristo, en efecto, es el único Mediador y camino de salvación que se nos hace presente en su Cuerpo, en la Iglesia” (LG 14). ¿Qué parte de “único Mediador y camino de salvación” no entiende el P. Costadoat? Lo de bueno que haya naturalmente en otras religiones, o filosofías, o en las matemáticas o en el parchís, es una “preparación al Evangelio” (LG 16) y no una vía alternativa a él. O veamos lo que dice la Palabra de Dios sobre Jesús: “bajo el cielo no se nos ha dado otro nombre que pueda salvarnos” (Hch 4, 12). Cualquier parecido con lo que enseña el P. Costadoat es pura coincidencia. Quien no cree que Cristo es el Hijo de Dios encarnado y el único que puede salvarnos no es cristiano. A confesión de parte no se necesitan pruebas] Los tiempos cambian y la doctrina debe ajustarse a las nuevas culturas pues, de lo contrario, no habrá cómo anunciarles el Evangelio. [Empiezo a pensar que el P. Costadoat es pariente del P. Spadaro y su 2+2=5. Si la Iglesia puede anunciar algo a las nuevas culturas es, necesariamente, porque tiene algo diferente que esas culturas no tienen. Si la Iglesia se “ajusta” a esas culturas abandonando lo que tiene de diferente, como la moral sexual, entonces por definición se queda sin nada nuevo para anunciarles, se queda sin buenas noticias, que en griego se dicen “Evangelio”. La adaptación de la fe y la moral al Mundo es la destrucción y disolución de la Iglesia. Como decía Chesterton, lo que necesitamos es una Iglesia que acierte precisamente cuando yo estoy equivocado]
¿Por dónde comenzar? Primero, habría que desenterrar las obras de los moralistas que en su momento fueron sancionados. [No, primero el P. Costadoat tendría que leer alguna cosa escrita antes de los años sesenta. Ya sabemos que la iglesia Costadoatiana se fundó en día del nacimiento del benemérito jesuita y todo lo anterior es irrelevante para ella, pero los católicos tenemos dos milenios de Tradición de la que aprender lo que nos reveló nuestro Señor Jesucristo] No se trata de rehabilitar sus nombres. Hicieron su trabajo intelectual por amor a la Iglesia y no por vanagloria. [Negar la doctrina de la Iglesia se hace por muchas razones, por odio, por necedad, por tentación del demonio o, en el mejor de los casos, por ignorancia, pero no por amor a la Iglesia. Lo que dice este jesuita es como decir que el abusador golpeaba a su mujer porque la quería mucho. ¡Ja!]
Segundo, habría que encontrar en la teología de los signos de los tiempos el fundamento teórico para entender que la revelación es histórica [Claro que la revelación es histórica: se produjo en un momento determinado de la historia, cuando Cristo se encarnó y, como enseña la Escritura, con su Palabra encarnada Dios ya dijo todo lo que tenía que decir y no va a revelar nada nuevo. Deducir de eso que cada semana Dios va a revelar algo nuevo es a) no cristiano, b) montanismo condenado ya en el siglo II y c) una solemne estupidez, porque si Dios es la Verdad no tiene sentido que hoy diga una cosa y mañana la contraria], lo cual obliga a escuchar el habla de Dios en los nuevos acontecimientos, especialmente en la experiencia de los católicos que asumen seriamente su vida afectivo-sexual [Que no, D. Jorge, que no. Que pecar mucho no hace que el pecado sea bueno, igual que el hecho de que usted repita muchas veces esas afirmaciones sin sentido no hace que sean menos absurdas]. La superación de Humanae vitae depende, ante todo, de que la institución eclesiástica aprenda de la Iglesia. [De nuevo, la prestidigitación verbal. Cuando dice “superar” quiere decir “negar”, cuando dice “institución eclesiástica” quiere decir la Iglesia y cuando dice la “Iglesia” quiere decir “yo, que soy muy listo y, además, jesuita”. En fin, como saben los lectores, en general soy partidario de escuchar con respeto las argumentaciones de los que no creen, porque nos ayudan a entender mejor lo que creemos y a profundizar en la verdad. En casos como este, sin embargo, en que la argumentación se limita a “soy muy moderno”, “somos mayoría” y “quiero hacer lo que me dé la gana”, no hay respeto posible. Se trata de puro ruido irracional, por no usar otra palabra más desagradable, y como tal solo merece el desprecio, la burla y el rechazo inmediato, especialmente cuando se apoya en falsedades evidentes. En cuanto a este pobre sacerdote sin fe, que odia a su Madre la Iglesia y ha dedicado su vida a destruir la fe que juró defender… recemos por él y por sus superiores, que tienen mayor culpa. Que Nuestra Señora interceda por él, para que encuentre de nuevo la fe que perdió hace tanto tiempo, y por nosotros, para que seamos fieles a ella].
130 comentarios
¡Aúpa Arrupe y esa Iglesia heredera De Tito Livio, Tácito, Suetonio, César y Ciceron!
Tengo que salir ahora y no puedo comentar esa sarta de disparates a la que cumplidamente ha respondido Bruno, pero hay un aspecto de este personaje que me inquieta y me causa desazón:
¿Por qué se ríe en la foto ?
Resumiendo sus "exposiciones", basta la intención de "continuar yendo a Misa" para que alguien en situación de adulterio pueda comulgar.
Para ellos Cristo es un gurú modélico de izquierda; la Iglesia, una ONG trasnacional; y la doctrina, una mezcla de marxismo y NOM, aderezada con merengue (Martin y Spadaro) o estricnina (Masiá y Costadoat) según y cuándo. Y todo aromatizado con bastante incienso y tabaco latino al Papa actual. ¡La Iglesia comenzó en 2013!
Y colocados en posiciones importantes del mundo educativo católico, y teniendo a su favor los medios de comunicación que han asumido más vivamente el color amarillo chillón, han propagado una nueva "fe" que ya casi no tiene nada ni de católica ni de cristiana, salvo algunos palabros aquí y allá.
Es un momento dramático para la Iglesia. Hay que denunciar estas cosas con firmeza y constancia, y orar mucho.
Solo el Señor puede impedir la victoria final de Satanás y sus huestes. Y a fe que lo hará cuando lo estime oportuno.
La Madre está hoy de nuevo camino del Calvario. Es la Iglesia quien está a punto de ser crucificada.
Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros
Si yo hoy tengo cinco hijos es porque en un momento de lucidez di la espalda al mundo y me volví al único que tenía palabras de vida eterna. Cuando me convertí en un bicho raro para todo el mundo pude liberarme de muchas ambiciones. Cuando dejé viajes y lujos por mantener muchas bocas encontré la belleza de la vida sobria. Cuando prácticamente pasé a vivir para atender a mis hijos empecé a liberarme de mi egoísmo. Sin mis niños no hubiera podido, estoy lejos de la santidad pero estoy muy seguro de que tener muchos hijos me ha acercado a Dios.
Cuando opté por este camino conocía la Humanae Vitae pero no la entendía bien, asumí esa enseñanza no por convencimiento sino por obediencia. Y Dios mío, ¡cuanta felicidad me ha traído! Años más tarde lo he entendido y hoy ya no cumplo por obediencia sino por amor. La Iglesia es sabia y el mundo es necio. Los mandatos de Dios son para nuestro bien, si no llegas a entenderlos simplemente sé humilde y obedece. Dios hace sabios a los obedientes.
Señores prelados y pastores de la Iglesia ¿no lo ven? Hay mucha necedad y mucha falta de fe entre vosotros los príncipes. Cobardes, tenéis tanto miedo al mundo que preferís darle la razón. Toda vuestra preocupación es evitar enfrentaros al mundo con relecturas, aggiormanientos, adaptacionesy cambios de paradigma. Qué pocos de curas encontré que me recomendaran seguir este camino tan seguro para vivir el evangelio, lo tuve que encontrar en Radio María y en Internet. Desde su trono el Altísimo se ríe de vosotros y vuestros doctorados en Teología Moral. Vuestros errores no os sobrevivirán, morirán con vosotros. Dentro de nada los católicos no serán los hijos evitados del P Costadoat SJ sino los hijos recibidos y amados de la Humanae Vitae. La Iglesia permanecerá hasta el final de los tiempos lo que Dios quiera y a vosotros solo se os recordará como una pesadilla.
En el caso de este troll, tras escribir esto haré click en "Eliminar los siguientes 108 comentarios". Desde uno con fecha 08.06.18 escrito a las 08:48:05 hasta el último, con fecha 04.01.19, escrito a las 09:27:43
Damos por hecho que volverá a escribir con distintos nicks, distintos emails, etc. Da igual. Ya sabemos cómo localizar sus entradas y una vez localizadas, serán borradas de la misma manera.
El paso siguiente, si todo sale como esperamos, será impedir que los trolls tengan acceso a InfoCatólica desde sus ordenadores habituales, tanto si cambian de IP o proveedor de internet como si no.
seguro que por eso se ríe
Y que Jesús como bueno y sabio líder de nuestra siempre viva vida social, tendrá su justo lugar de amor y fraternidad, donde unos con otros y otras con unos, sin distinción, se casarán y en su promiscuo amor se amarán.
Y no saben, estos necios, que antes de que Jesús vuelva a la Tierra por segunda vez, hasta las piedras tienen que ser examinadas y descontaminadas del pecado original.
Personalmente me he encontrado ya con muchos casos de personas, que sinceramente se creen católicos (algunos sacerdotes incluso), que luego hacen una serie de afirmaciones heréticas increíbles. Cuando les señalas su error, a veces titubean, y otras persisten con lo que yo llamo los "comodines del hereje", es decir te echan palabros como "misericordia", "piedad", "integrar al otro" "acogimiento"... y quieren que todo cuele.
En fin, estos son los tiempos. Antes al que decía bobadas o se le ignoraba, o se le enseñaba para que no persistiera en su error. Ahora, se le considera innovador de la doctrina. En fin...
"...porque lo que los hombres tienen por sublime, delante de Dios es abominación".Así que lo que manifiesta el Sr. Costadoat es sencillamente abominable.
Ahora tan abominable son las palabras y enseñanzas de este jesuita como la conducta de sus superiores que le permitieron —y le siguen permitiendo— una prédica que mata el alma de quien la escucha y la lleva a la práctica (se ve que ya se olvidaron lo enseñado por San Pablo en 1 Cor 5,9-13).
Se han metido en una camisa de once varas, en un callejón sin salida, de donde es muy difícil salir sin retroceder sobre sus pasos.
Y esa una opinión, tal como cualquier otra. Una visión de las cosas que no tiene por qué ser atacada solamente porque sí. La realidad, insisto, es que cuando hablamos de "pueblo de Dios" o "comunidad católica" o como queramos llamarnos al TODO al que pertenecemos estamos hablando tanto de los que siguen a rajatabla los preceptos (minoría) como a los que han decidido no atender a órdenes abstractas.
saludos
Gracias por su comentario.
"La mayoría abrumadora de los católicos se cuida con métodos anticonceptivos rechazados por la Iglesia Católica"
No. Los que no creen en la fe y la moral de la Iglesia no son católicos. Del mismo modo que los que se comen todos los días un buen solomillo de vaca no son vegetarianos. Afirmar lo contrario es, simplemente, vivir en un mundo imaginario en el que las palabras no significan nada.
Un caso muy diferente es el de los que saben y aceptan que el uso de anticonceptivos es inmoral y, aun así, por debilidad, los usan. Es decir, son pecadores como todo el mundo.
"No querer reconocer eso es poco sensato"
Es que usted quiere que "reconozcamos" que los que no creen en la fe y moral católica son católicos. Eso no es sensatez, es engañarse a uno mismo.
"Lo mismo que la aceptación de que existe amor verdadero entre personas de un mismo sexo, separado de lo que puede ser cualquier perversión (existente en cualquier grupo humano, incluidos heterosexuales católicos)"
Claro que existe amor verdadero: amor de amistad. El amor conyugal está reservado a un hombre y una mujer. De nuevo, mezcla usted las cosas sin orden ni concierto y el resultado es, inevitablemente, desconcierto y caos.
"Se han metido en una camisa de once varas, en un callejón sin salida, de donde es muy difícil salir sin retroceder sobre sus pasos"
Sí, eso mismo decían los perseguidores de todas las épocas a los católicos. ¿Y dónde están hoy los emperadores romanos, los revolucionarios franceses, los regímenes soviéticos? Son nada y menos que nada. Ellos quedaron derrotados; nosotros nos mantenemos en pie.
"Y esa una opinión, tal como cualquier otra"
Como comprenderá, su opinión nos importa poco, sobre todo cuando es contraria a la opinión de Dios.
"Una visión de las cosas que no tiene por qué ser atacada solamente porque sí"
No es atacada solamente porque sí. Es atacada porque es radicalmente contraria a la fe católica y a la verdad.
"La realidad, insisto, es que cuando hablamos de "pueblo de Dios" o "comunidad católica" o como queramos llamarnos al TODO al que pertenecemos estamos hablando tanto de los que siguen a rajatabla los preceptos (minoría) como a los que han decidido no atender a órdenes abstractas"
No. Llamar "pueblo de Dios" a quienes no siguen a Dios es absurdo y solo sirve para engañarse a uno mismo e intentar engañar a los demás. Si usted rechaza la Ley moral divina, ya puede decir lo que quiera, que no es usted católica. Así nos lo dijo nuestro Señor Jesucristo: si me amáis, guardaréis mis mandatos.
Esa es la realidad. Vivir fuera de la realidad no lleva a nada bueno.
Pero "la Iglesia católica cuenta como católicos a todos los bautizados en la Iglesia (o admitidos a la misma si lo piden y habían sido antes bautizados en otros grupos cristianos) con sus derechos y deberes, y que no hayan hecho acto formal de defección de ella. Para la Iglesia católica quien no practica como católico sigue formando parte de ella. Pero celebrar otros sacramentos no es lo que les hace católicos, sino el bautismo. También considera católicos a los que viven de modo imperfecto, como pecadores con posibilidad de conversión:
Jesús les dijo: «No son los sanos los que necesitan al médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores, para que se conviertan».
Lucas 5,31-32
"
La abrumadora mayoría de los católicos utiliza métodos anticonceptivos que la Iglesia Católica rechaza. Es una verdad indiscutible. Puede Ud. cambiar la definición de católico según le convenga. Para la Iglesia a la que Ud. dice pertenecer, católicos somos TODOS. Los homosexuales católicos y las familias católicas que utilizan métodos anticonceptivos todos los días.
saludos.
Me temo que ha vivido usted tanto tiempo en la contradicción que ya no la percibe.
Por supuesto que formalmente todo bautizado que no ha apostatado sigue siendo parte de la Iglesia. De modo análogo a como el que se come todos los días un solomillo de vaca puede seguir siendo miembro de la asociación vegana de su barrio.
Sin embargo, el que rechaza la fe católica y vive en pecado grave es un miembro muerto de la Iglesia, que no tiene fe ni caridad y, de hecho, vive en camino hacia el infierno. Materialmente ha apostatado, aunque formalmente no lo haya hecho. También los condenados que están en el infierno pueden ser bautizados y, sin embargo, hablar de que el "Pueblo de Dios" incluye a los condenados en el infierno en cualquier sentido que no sea el puramente formal sería ridículo.
Si se fija, la frase que ha puesto de Nuestro Señor se refiere a los pecadores. En cambio, usted ha hablado de los que afirman que no son pecadores (porque rechazan creer en lo que manda la Ley de Dios y niegan que sus pecados sean pecados). Para esos, Nuestro Señor tiene otras palabras: fariseos, sepulcros blanqueados, nidos de víboras, etc. Esos no se pueden convertir, porque creen que ya están convertidos, que no necesitan convertirse. Para que puedan convertirse primero Dios tendría que hacer el milagro de que crean como católicos. Que es justo lo que ya le he dicho.
"La abrumadora mayoría de los católicos utiliza métodos anticonceptivos que la Iglesia Católica rechaza. Es una verdad indiscutible"
Lejos de ser indiscutible, lo cierto es que es lógicamente absurda. Por definición, los católicos creen en la fe y la moral católica. Luego creen que los métodos anticonceptivos son gravemente pecaminosos. Si no lo creen es que no son católicos (más que formalmente).
Algo muy diferente, como ya le he dicho, es el caso de los que creen en la fe y la moral de la Iglesia pero pecan por debilidad. Y es muy diferente porque esos defienden (como defiende la Iglesia) que los anticonceptivos son gravemente inmorales, aunque por debilidad los usen, y lo mismo con el resto de la moral de la Iglesia.
Si usted niega la moral de la Iglesia, no está hablando como católica, sino como pagana. Parece mentira que haya que explicarle algo tan básico. Pero claro, tiene sentido que no lo entienda, porque usted rechaza la fe católica.
No le digo esto para condenarla o rechazarla, sino para que entienda la realidad, porque vive usted engañándose a sí misma y cerrándose a la salvación de Cristo. Si me amáis, guardaréis mis mandatos.
Vuelve usted a mostrar, me temo, que piensa como pagana y no como católica.
"A esta altura no parecen inmorales algunas cosas que hace antaño podrían serlo. Para mí el descuido de la Iglesia fue aferrarse a dogmas morales que son cambiantes con la época."
Esto no tiene el más mínimo sentido. Lo que es verdad hoy, lo fue ayer y lo será siempre. La verdad no depende de la fecha. Si algo es inmoral hoy, siempre lo ha sido y siempre lo será. El cielo y la tierra pasarán, más mis palabras no pasarán.
"En EEUU se permitió que una persona negra contrajera matrimonio ..."
¿Qué tiene eso que ver con la moral católica? En la América española y católica, inmediatamente después del descubrimiento, se hicieron las primeras leyes para regular el matrimonio entre españoles e indios.
"Una persona que se enamora realmente de alguien y ese alguien devuelve el amor y juntos acuerdan vivir en felicidad y mutuo cuidado... no debería ser considerado siempre bueno?"
¿De verdad pregunta esto? La respuesta evidentemente es no. Si fuera como usted dice, habría que aceptar el adulterio, la fornicación, el incesto, la pederastia, la poligamia, etc. Me temo que no tiene usted ni la más mínima idea de lo que son el catolicismo, el matrimonio o la ley natural. Por eso es tan absurdo que se presente como católica.
Usted cree que por el hecho de que la mayoría de los católicos en Occidente no sigan la moral de la Iglesia en estos asuntos, entonces la mayoría de los católicos en el resto del mundo tampoco la siguen. Pues resulta que en África y Asia sí.
Y no solo con este tema. La mayoría de los católicos en Occidente creen que la democracia liberal es un sistema legítimo y resulta que es un sistema perverso que niega la soberanía social de Cristo. Sin embargo, el grito ¡Viva Cristo Rey! es tan vigente hoy como hace un siglo.
Por tanto, el "casi todos" no vale un pimiento. Casi todos pidieron que Barrabás fuera liberado y Cristo crucificado. Casi todos abandonaron a Cristo a los pies de la cruz, y TODOS abandonaron a San Pablo cuando tuvo que presentarse por primera vez delante del César (2 Tim 4,16).
Si usted quiere estar con casi todos, es su problema. En el infierno hay sitio para todos ellos, para usted y para muchos más. Le aconsejo algo mejor. Conviértase y salve su alma. Quiera Dios concederle ese don.
confirma mi teoría... ¿es maldad o simple estulticia? :-)
Es tal la macedonia de creencias que la gente ya ni sabe que ser católico....
En ningún momento estoy haciendo un juicio de valor sobre mí misma ni sobre si yo soy o no soy católica. Eso lo hacen Usted Bruno y Luis Fernando.
Lo que digo es que no me parece tampoco tan descabellado plantear a debate una situación que es parte de la realidad católica: que casi todos sus bautizados no aceptan cumplir con algunas de las normas relacionadas a la reproducción responsable y a la aceptación de que parejas de personas que se aman verdaderamente, más allá de su condición de creyentes en Dios o de su color de piel o de su sexo biológico.
Como este artículo habla del artículo de un jesuita que habla de esos temas, no me parece prudente negarlos, ocultarlos como que son visiones erróneas: son realidades.
saludos
Pablo se equivoca al considerar que la opinión de Aljandra solo puede sermaldad o estulticia. Ella tiene razón en una cosa: su opinión es la de casi todos los católicos de nuestro entorno, y no creo que lo que haya que hacer es partir de la idea de que son tontos o malos.
Yo hablo desde mi experiencia. Durante mi juventud compartí algunas de esas ideas. En parte forman parte de nuestra cultura occidental actual y aunque nunca me aparté de la Iglesia la verdad es que hoy dentro de la misma se admiten y se toleran y pocos pastores se atreven a contradecirlas. Tienen miedo. Piensan que sólo mostrando que son más sociales, tolerantes y comprometidos que nadie el mundo les perdonará el pecado de ser curas. Así que en la difusión de estos errores la culpa está bastante repartida.
Nuestra cultura mantiene sus dogmas, afirmaciones que nadie discute aunque no tengan fundamento. Por ejemplo: si A y B se enamoran tienen derecho a casarse. Otro ejemplo: si A, B, C y D están de acuerdo y E en desacuerdo la opinión acertada es la de A, B, C y D. Cuesta mucho hacer abrir los ojos a la gente de que son ideas erróneas, porque las hemos mamado. Nos hemos criado en una cultura en la que la relación de pareja se ve como un fin en sí mismo, de manera que los hijos pueden evitarse si van a desplazar a la relación de pareja de su trono. Decir algo tan obvio como que los hijos son la finalidad de la pareja y no un daño colateral de la práctica del sexo es completamente contracultural, cuesta aceptarlo.
Alejandra, volviendo a mi experiencia, le aseguro que cuando uno examina las cosas racionalmente y cae uno solo de esos prejuicios contemporáneos empiezan a caer como fichas de dominó todas las demás y uno se empieza a liberar de viejas falacias. Entonces se ve que la realidad es al contrario de lo que usted piensa: La Iglesia acierta cuando mantiene lo que usted llama "dogmas morales" porque esa es precisamente la moral adecuada al ser humano. Si lo piensa bien buscar la verdad no es buscar lo que la mayoría de la gente opina y si la iglesia cambiara su moral según las épocas esa sería la prueba de su falsedad. ¿Busca usted la verdad o piensa que tan solo debe acomodarse a la opinión predominante?
La existencia de error y pecado entre los católicos siempre ha sido una "realidad católica", vaya un descubrimiento. Y por eso lglesia es madre y maestra, enseña y corrige a sus hijos. El debate sobre el concepto de católico es estéril, usted y yo podemos ser católicos e ir derechos al infierno. La cuestión es qué debemos hacer, lo que la Iglesia enseña o lo que la mayoría de los católicos piensan, ese es el tema.
Podemos hacer una encuesta y mostrar qué porcentaje de católicos no consideran inmoral la anticoncepción, y seguramente el resultado mostrará lo que usted afirma, pero ... ¿pretende presentar esa encuesta como pliego de descargo el día del Juicio?. No Alejandra, el juicio va a ir de otra cosa: de nuestro amor y nuestros pecados, no sobre qué hizo la mayoría.
Según usted y según el sabio y prudente P Costadoat SJ. bastaría un pecado sea muy extendido o que una opinión sea mayoritaria para que la Iglesia tenga que "plantear un debate..." Me temo que el debate lleva más de cincuenta años abierto, lo que usted quiere decir es que la Iglesia debe cambiar su doctrina. ¿Sabe usted que durante mucho tiempo y en contra de lo que enseñaba la Iglesia, la mayoría de los católicos pensaban que era lícito matar por venganza o batirse en duelo?. Según su argumento la Iglesia debió haber cambiado su doctrina al respecto en el siglo XVII cuando casi ningún bautizado pensaba lo contrario. ¿Qué nos dice a eso?
"El Derecho Canónico y el Magisterio de la Iglesia y todas las fuentes consultables estipulan que basta el bautizo para reconocer a alguien como católico. Punto. Incluso los que no practican ni 5 de los sacramentos, también son católicos"
Entiendo que alguien no tenga fe, pero no tiene sentido renunciar también a la razón. Pensar es distinguir. El señor de los solomillos diarios de ternera puede pertenecer formalmente a una asociación vegana porque no se ha molestado en darse de baja de ella, pero no tiene sentido afirmar que es realmente vegano. Eso, que es algo que usted sabe perfectamente en cualquier otra cuestión, lo niega en la Iglesia por prejuicios ideológicos extraños.
Del mismo modo, un bautizado, por mucho que esté bautizado, cuando niega la fe de la Iglesia no está actuando como católico, está actuando como pagano. Por eso la afirmación de que la mayoría de los católicos niegan la fe de la Iglesia es engañosa y, en el sentido en que usted la utiliza, absurda. Quizá sea cierto que la mayoría de los bautizados usan anticonceptivos y quizá sea cierto también (aunque es una cosa muy diferente) que la mayoría de ellos defienden que usarlos es algo bueno, pero cuando afirman eso no lo hacen como católicos, sino en cuanto apóstatas de la fe, que es lo contrario de ser católico.
Hablar del "pueblo de Dios" como formado en su mayor parte por los que no tienen la fe católica es ridículo. En cuanto que no tienen fe, no forman parte del pueblo de Dios, aunque formalmente lo sean. No se han molestado en hacer un acto de apostasía formal o canónico, pero de hecho han apostatado materialmente.
"En ningún momento estoy haciendo un juicio de valor sobre mí misma ni sobre si yo soy o no soy católica"
Claro que lo hace. Cuando afirma que rechaza la fe de la Iglesia está diciendo que no es católica (excepto nominalmente).
"Lo que digo es que no me parece tampoco tan descabellado plantear a debate una situación que es parte de la realidad católica: que casi todos sus bautizados no aceptan cumplir con algunas de las normas relacionadas a la reproducción responsable y a la aceptación de que parejas de personas que se aman verdaderamente, más allá de su condición de creyentes en Dios o de su color de piel o de su sexo biológico"
Según eso, no existiría ningún pecado, porque todos los pecados han sido cometidos infinidad de veces por católicos. Todos. Eso indica que su "argumento" no es más que una excusa, y una excusa pobrísima, para justificar el pecado. ¿Qué quiere que le diga? Es evidente que esa argumentación tiene como única y exclusiva finalidad, según los casos, o bien poder seguir pecando sin sentirse mal por ello o lograr que el Mundo nos acepte porque nos plegamos a sus errores.
Por otra parte, es muy significativo que no se haya molestado en contestar al hecho evidente de que su definición de "amor verdadero" incluye la poligamia, la pederastia, el incesto, la fornicación y el adulterio. Lo que indica que es una definición descabellada.
Siento que todo esto le moleste, pero no podemos decirle otra cosa. Es usted muy dueña de seguir engañándose todo lo que quiera, pero nuestro deber es señalarle que está renunciando a la Verdad (y a la razón).
El Derecho Canónico y el Magisterio de la Iglesia y todas las fuentes consultables estipulan que basta el bautizo para reconocer a alguien como católico. Punto.
LF:
O sea, Lutero fue católico toda su vida. Punto.
Mire, no pierdo más el tiempo con usted. No merece la pena.
Nunca deja de ver uno que estuvo en un seminario, como Stalin, las ventajas de la fe en la que creció. Cuando Hitler atacó la URSS Stalin sacó a los patriarcas que quedaban vivos del GULAG, los hizo desfilar con los turiferarios por delante, echó al vuelo las pocas campanas de los pocos monasterios que habían quedado en pie y llamó en su ayuda a la Santa Rusia.
Pues, aplíquese el cuento y vea con que bueyes tenemos que arar cuando un bautizado, dentro o fuera de la Iglesia, que no acepta la Ley de Dios, ni la Tradición se acuerda, de repente, ¡concho, si soy cristiano! a su perfecta conveniencia. El cristiano pecador sabe que es pecador, si niega el pecado que no diga que es cristiano ni se acuerde del cristianismo nunca jamás.
Con todo respeto por el disertísimo P. Costadito, creo que esta afirmación no es sostenible, habida cuenta de religiones no-coloniales, no-blancas, no-heteropatriarcales, no-falocéntricas que ostentan una clara superioridad.
No dejes de pasarte por aquí asiduamente.
Tanto si acabas de protagonista de los comentarios (como hoy) como si simplemente lees otras polémicas, no dejes de frecuentar el sitio.
Hazme caso. Y, dentro de unos meses, relee este post y sus comentarios.
Bruno:
No te ensañes: ella cree firmemente lo que ha escuchado desde la infancia en diversos ambientes, a muchos curas, quizá incluso en catequesis y en un colegio "católico" y a diversos comentaristas de las palabras del actual papa. Del mismo modo que repetir mil veces la mentira no la convierte en verdad, decirle mil veces que no es católica no será la manera de que caiga en la cuenta. Caerá en la cuenta, pero no así.
En cambio ahora muchos cristianos propagan la confusión entre los suyos huyendo de la fe y de la razón. El Catolicismo tiene un marco determinado fuera del cuál se diluye, sin ese marco todo es confusión. Yo he discutido con católicos tradicionales por tener distinta opinión...fuera del marco, pero no dentro de él. Saber distinguir si hablamos de cuestiones de fe, de política, de historia o de literatura es esencial. Un católico no puede acusar a otro de no serlo porque tengan una controversia sobre un partido político, una idea u otra de lo que fue el nazismo o el comunismo o una opinión distinta sobre Halloween porque eso es discrecional, no entra en el marco. Últimamente me veo a mi misma repitiendo el Credo muchísimas veces: cuando paseo, cuando espero en una consulta, etc...y, claro está, sobre el contenido del Credo no admito discusión, si un artículo del Credo dice: "Creo en el perdón de los pecados", no tengo opción para disminuir o anular lo que se considera pecado. Pero es que ni yo ni el Romano Pontífice.
Luego está el caso de Alejandra que sabe perfectamente que enseña la Iglesia y lo rechaza sin buscarse un cura que le diga lo contrario ni nada. Es rebelión pura y dura.
No queriendo desviar la atención del tema central del post, podrías recomendar alguna obra donde se profundice en este asunto de las cuestiones prudenciales, doctrinales, etc. Desde hace algún tiempo quiero conocer mejor en qué consiste el núcleo duro e inamovible de la doctrina de la Iglesia y qué puede ser opinable.
Gracias.
Un saludo.
El reconocerse como pecador pertinaz no te quita la condición de católico.
Me llama la atención que en Infocatólica muchas veces han puesto ejemplos de que se puede ser pecador pero no hereje, y por tanto seguir siendo católico.
El cura Jorge Guadalix se puso él mismo de ejemplo "Pecador más que nadie. Hereje nunca".
También, otros blogueros hablaron de la vida de Lope de Vega, poeta y sacerdote de vida licenciosa que llenó España de bastardos, pero que como buen católico español después de hartarse de pecar justo antes de morir pidió un cura para confesarse (y que le quiten lo bailao).
Ahora resulta que para ser considerado católico hay que llevar una vida ejemplar.
Miren, desde el momento que la Iglesia permite el método de Ogino o cualquier otro considerado "natural", es lógico que casi todas las católicas piensen que tampoco es tan grave combinar esos métodos con otros como el preservativo o el diafragma, porque ninguna mujer es un reloj que tenga el período exacto y cada mujer concreta necesita unos métodos personalizados.
Por eso y porque quieran o no admitirlo la mentalidad de las mujeres ha cambiado y no hay marcha atrás.
En todo el mundo, incluso en países islámicos como Turquía o Irán la natalidad se desploma.
Si la Iglesia no quiere admitir otros métodos, pues allá ella. Se pueden dar situaciones absurdas como que moralmente se permita a una mujer católica tomar la píldora para regular la menstruación o incluso combatir el acné, pero no para evitar el embarazo.
Pero igual las mujeres católicas seguirán acostándose con sus maridos y pecando, y confesándose creyentes.
De el mismo modo que muchos curas seguirán siendo fornicadores, pero nunca herejes.
Bruno y Luis Fernando:
El carácter que imprime el sacramento del Bautismo es indeleble: No se deja de ser católico ni siquiera apostatando, algo así como que Satanás no dejó de ser ángel, y como ángel fue juzgado, o como a un militar traidor, se le juzga según sus deberes "debidos" a la Patria como militar, y no como a un paisano. Lo que imprime carácter, lo imprime.
Eso no quita que como un mal católico esté constantemente atentando en el Cuerpo Místico de Cristo contra la Comunión de los Santos, por lo menos, y la Santidad de la Iglesia. En su juicio, ¿Judas fue juzgado como apóstol o como mero discípulo?. Las palabras de S. Pedro al requerir la sustitución de su sitio por S. Matías, parece indicar que no dejó de ser Apóstol en ningún momento, y tal vez ahora sea Apóstol condenado...
Y ahora, Dª Alejandra: Si en el juicio final, vamos a ser juzgados como católicos, quiere decir que todos los dones sacramentales y de Fe, Esperanza y Caridad que hemos recibido o despreciado, van a entrar también en juego.
Cuando en la contratacepción matrimonial, católica o no, se quiere prescindir de la fecundidad del acto sexual, se están devaluando el marido y la mujer individual y mutuamente, pues se descartan de algo tan fundamental para la Comunidad Cristiana y para la Sociedad, como es el fruto de los hijos. El "te quiero, pero con tu fecundidad amputada", se parece más al "me gusta lo que me gusta de ti" de prostíbulo, que al salmo aquel que canta, sí que canta " Como brotes de olivo en torno a tu mesa, Señor, .... tu mujer como viña fecunda alrededor de tu mesa... así son los hijos de la Iglesia" amputarle a Dios la paternidad delegada a un matrimonio católico -y no católico también- evitando qjue nazcan más posibles hijos redimidos que se sienten a Su Mesa, puede tener para esos católicos, infecundos artificialmente, algunos aromas a calenturienta chamusquina sulfurosa... salvo arrepentimiento firme, que quiera recibir la Misericordia.
En cuanto a que la doctrina sobre la homosexualidad debe cambiar en la Iglesia por ser estos otros tiempos, en lo único que -en mi opinión- debe cambiar la Iglesia es en cambiar la palabra "homosexualidad", porque es un contrasentido en sus mismos términos, dado que el concepto de sexualidad, implica absoluta y necesariamente dos sexos y éstos precisamente diferentes y complementarios. Que gramaticalmente se haya llegado a considerar como "sexo" a cada una de las dos manifestaciones anatómicas puede haber sido la vía a la que tan inmeditadamente se ha llegado para hablar de "homosexualidad", cuando debiera hablarse de "homogenitalidad", pues son idénticos genitales los que intervinen en tales actos. No hay -hablando con precisión- un acto "homosexual", y sí hay -hablando con precisión- un acto "homogenital". Salvo eso, la doctrina de la Iglesia sobre la sexualidad es intergérrima, sabia, amablemente amable, con perspectivas de futuro fecundo -y no amputado y reducido a algo periprostibulario- abierto a escuchar "papá y mamá" con los oídos del cuerpo, y sin las consecuencias de escuchar en los oídos de la frustración el "mamá, ¿porqué?"... "papá, ¿y yo...?, que late en tantos matrimonios tristes...
1° Por la Negrilla, respondiendo a la roja del P. Costadoat... "tan jesuítica"... aunque recuerdo a uno de mis alumnos que se fue al seminario y se quejaba, pues le correspondió clase con un Redentorista que HOY es Obispo -Colombia- gracias a sus "terribles" ideas... lo que prueba que no sólo los jesuítas... hay mucha teología barata...
2° Por la Paciencia frente a la "ceguedad" poco o medio ilustrada de Alejandra a quien le agradecería NO volver a portales CATÓLICOS de Verdad...
Por fa... son ancianita... y es triste encontrarse en este nuevo año que inicia con tanta terquedad!... Recuerdo que "descubrí" y opté por desecharlas, siendo joven en 1972 las malas enseñanzas del "aggiornamento" del Vat II en el ICLA en Manizales = que el de Santiago de Chile- Menos mal que acá el Cardenal de grata memoria Aníbal Muñoz Duque le puso el ojo (que mantenía torcido de nacimiento) y lo cerró..., como también mandó a recoger los libros de Catequesis con tales ideas que de allí salían y eran (autorizados por el Cardenal Castrillón quien terminó aplaudido y en el Vaticano). Una vez conté, que los del ELN - guerrilla- consultaban dicho libro...
De verdad que se necesita la Gracia de Dios y toda una vida... para conseguir la insobornable Fe que profesamos y mantenernos en nuestro CATECISMO de LA IGLESIA CATÓLICA ( del papa emérito Benedicto XVI), el cual recomiendo a Alejandra. NO basta con el sólo Bautismo... Debe haber muchos
batiendo la paila mocha en el Infierno.
No puedo poner enlaces pero si buscas en Google:
Derecho Canónico
Los grados del Magisterio de la Iglesia
Quizá te valga.
Enlace: Los grados del Magisterio de la Iglesia
Gracias por el comentario. Me cuesta creer que no le hayan explicado mil veces estas cosas, pero vamos a intentarlo otra vez.
"El reconocerse como pecador pertinaz no te quita la condición de católico"
Nadie ha dicho otra cosa. Alejandra se refería a algo muy distinto: no al que peca contra la Ley de Dios y lo sabe, porque acepta esa Ley de Dios, aunque por debilidad o porque le da la gana no la cumple o falla muchas veces al intentar cumplirla, sino al que niega esa Ley de Dios plasmada en la fe y la moral católicas. El primero es un católico pecador, el segundo rechaza conscientemente la fe católica y por lo tanto rechaza la Iglesia y el catolicismo. Es decir, materialmente no es católico, aunque siga estando bautizado. No ha apostatado formalmente, pero sí materialmente.
"Me llama la atención que en Infocatólica muchas veces han puesto ejemplos de que se puede ser pecador pero no hereje, y por tanto seguir siendo católico"
Bueno, "poder" no tiene mucho sentido en este caso, porque poder se puede ser cualquier cosa. No se debe ser hereje ni tampoco ser pecador. En cuanto a la gravedad, ambas cosas llevan de por sí al infierno (con las condiciones habituales, por supuesto, de materia grave, pleno conocimiento y consentimiento deliberado y pertinacia).
"El cura Jorge Guadalix se puso él mismo de ejemplo "Pecador más que nadie. Hereje nunca"."
Es que ahí hay que distinguir algo esencial. Hemos dicho que las dos cosas llevan de por sí al infierno siempre que haya pertinacia, es decir, falta de arrepentimiento. Pero D. Jorge da por supuesto algo que cualquier católico entiende: que él está hablando de arrepentimiento en la primera posibilidad (pecador en el sentido de quien comete pecados por debilidad pero después se arrepiente de ellos y pide el perdón de Dios) y ausencia de arrepentimiento en la segunda (porque un hereje arrepentido y convertido, lejos de ser algo malo, es algo estupendo: un converso). Es evidente que D. Jorge nunca diría de si mismo orgullosamente que es un "pecador que no quiere arrepentirse", porque eso es lo peor que se puede ser y, de hecho, incluye la herejía, que a fin de cuentas es un pecado más. Es decir, lo verdaderamente malo es la pertinacia en el pecado grave, entre ellos el de herejía. Hasta donde puedo ver, cualquier católico entiende, aunque sea de forma inconsciente, que eso es lo que quiere decir, pero comprendo que para quien no es católico pueda desorientar un poco.
"También, otros blogueros hablaron de la vida de Lope de Vega, poeta y sacerdote de vida licenciosa que llenó España de bastardos, pero que como buen católico español después de hartarse de pecar justo antes de morir pidió un cura para confesarse (y que le quiten lo bailao)"
Obviamente, a ningún bloguero le parecía bien la vida licenciosa de Lope. Pero a todos les parece muy bien que se arrepintiera. ¿O es que usted cree que es mejor seguir haciendo cosas malas que dejar de hacerlas? Y fíjese, quizá Dios se sirva del ejemplo de Lope para recordar a muchos, al final de su vida, que sea lo que sea lo que han hecho Dios está esperándoles como el Padre del hijo Pródigo y solo tienen que volverse a Él. Como dijo Cristo en la parábola de los jornaleros, ¿es que vamos a tener envidia porque Él es bueno?
"Ahora resulta que para ser considerado católico hay que llevar una vida ejemplar"
Como ya he explicado más arriba, nadie ha dicho eso.
"Miren, desde el momento que la Iglesia permite el método de Ogino o cualquier otro considerado "natural", es lógico que casi todas las católicas piensen que tampoco es tan grave combinar esos métodos con otros como el preservativo o el diafragma..."
Eso tiene tanto sentido como decir que, porque bebemos agua todos los días, es lógico que casi todos los seres humanos piensen que tampoco es tan grave combinar el agua con el veneno.
En cualquier caso, parece un poco temerario que nos dé lecciones sobre lo que es lógico que que piensen las católicas.
"Por eso y porque quieran o no admitirlo la mentalidad de las mujeres ha cambiado y no hay marcha atrás"
¡Vaya! No hay marcha atrás, porque lo dice Gringo. Sin ánimo de ofender, es una afirmación bastante temeraria. La mentalidad de la gente cambia constantemente de un lado a otro y del otro al uno. Basta leer cualquier libro de historia.
En cualquier caso, incluso aunque humanamente no hubiera marcha atrás (que no es cierto), la conversión, que es una gracia de Dios, significa precisamente eso en griego: cambio de mentalidad. Si Dios puede hacer que le amemos sobre todas las cosas y que amemos a nuestros enemigos, cambiar la mentalidad sobre cualquier otra cosa no es un problema.
"Se pueden dar situaciones absurdas como que moralmente se permita a una mujer católica tomar la píldora para regular la menstruación o incluso combatir el acné, pero no para evitar el embarazo"
Eso no tiene nada de absurdo. Puede no estar de acuerdo con ello, pero para decir que es absurdo es necesario no haberlo entendido. La Iglesia no tiene nada contra los productos químicos que forman la píldora. Lo que recuerda que no está bien es desnaturalizar el acto sexual, arrancándole su capacidad reproductiva. Por lo tanto, nada hay de absurdo en que una mujer católica pueda tomar la píldora por problemas de regulación de la menstruación, igual que un hombre católico puede usar un preservativo para hacer un globito sin que eso sea pecado.
"Pero igual las mujeres católicas seguirán acostándose con sus maridos y pecando, y confesándose creyentes"
Bueno, yo he conocido a un montón de mujeres que no usan métodos anticonceptivos y que aman a sus enemigos y dan la vida por sus maridos y que se esfuerzan por vivir como Dios quiere, así que su predicción no me da ni frío ni calor, la verdad.
"De el mismo modo que muchos curas seguirán siendo fornicadores, pero nunca herejes"
Esto es una insinuación maliciosa que, además, nada tiene que ver con lo que dijo D. Jorge, como ya le he mostrado. No siga por ese camino porque lleva a que borre sus comentarios.
Saludos.
El carácter que imprime el sacramento del Bautismo es indeleble: No se deja de ser católico ni siquiera apostatando
LF:
Lo primero lo sabemos Bruno y yo. Lo segundo es algo que conviene aclarar. Cuando nosotros decimos que alguien ha dejado de ser católico, no queremos decir que su bautismo ha quedado anulado ni cosa parecida. Simplemente constatamos que no profesa la fe, no vive conforme a la fe y, de hecho, suele creer y actuar en contra de dicha fe. Por tanto, no tiene sentido que se considere a sí mismo católico por mucho que se bautizara como tal.
Ahora bien, incluso el católico que ha apostatado está sujeto a la autoridad de la iglesia, que puede pasar de sancionarles o constatar su excomunión a recibirle de nuevo en la comunión si se convierte y recibe el sacramento de la confesión, que un no bautizado no puede recibir.
Con respecto a la cuadrilla de indeseables que no son católicos, pero que se dicen serlo, Luis Fernando también ha dicho algo que vale un doblón: "Empezaron perdiendo la fe y terminaron perdiendo la vergüenza".
El artículo del padre Costadoat parece sacado de los anales del marxismo cultural debido a las graves deficiencias desde el punto de vista de la ciencia histórica, la principal: parece ser que está deseoso de olvidar que la Iglesia empezó hace 2000 y no a partir del Concilio Vaticano II.
Con harta frecuencia se "construye la la verdad" con graves omisiones y abiertas falsedades, al no tener referencias a los primeros 19 siglos de la Iglesia, simplemente se "crea una nueva historia". Eso se llama no tener vergüenza.
Costadoat está sujeto a un voto de castidad.....así que es más consciente de la enorme p..... que implica decirle a alguien que se aguante y sufra su falta de afectividad para estar en consonancia con criterios desfasados.
La sexualidad en el siglo II no se entendía como la entendemos ahora. Hagamos abstraccion de Freud y sus sucesores y ya que estamos volvamos a la medicina de Galeno y a una vision del mundo ptolomeica.
"¿ Cuántos de los que critican a Costadoat están casados y con sus necesidades afectivas y sexuales cubiertas?"
¿Me puede aclarar qué entiende usted por necesidad sexual?. Esa es una de esas expresiones absurdas que se utilizan hoy en día para sacar conclusiones igualmente absurdas.
Una cosa es la necesidad y otra la apetencia. Nadie muere por no tener relaciones sexuales, en ningún caso son estrictamente necesarias salvo como forma de lograr la reproducción. La función reproductora sólo es necesaria en cuanto al mantenimiento de la especie, no lo es para el individuo.
Así que más bien usted quiere decir "¿quién tiene sus apetencias sexuales cubiertas?". Yo estoy casado y le aseguro que no las tengo, y me atrevo a decir que muy poca gente las tiene independientemente de la vida que haga. El apetito sexual es un instinto con el todos convivimos y que nos mueve a procurar relaciones sexuales. Mediante la virtud de la castidad mantenemos la práctica del sexo en su debido lugar y casi siempre por debajo de nuestras apetencias, unos mediante la abstención total (solteros, consagrados, etc) y otros, los casados, limitándola a su marco legítimo. Por eso los casados debemos vivir también la castidad, eso que se llama la castidad conyugal.
Lo que a mí me parece alucinante es que señores como el P Costadoat SJ que son capaces de privarse por completo de las relaciones sexuales no se crean que los casados seamos capaces de limitarlas y no se atrevan a predicar la castidad conyugal. Son cobardes que se avergüenzan de la doctrina de la Iglesia y temen el rechazo del mundo.
Quiero decir que en un momento puntual la biología ha de imponerse a la norma, es rídiculo decirle a la gente no os améis ni satisfagáis anhelos profundos que lo prohíben porque sí.
Gris Funcionario,
Freud decía que se puede subliminar el deseo sexual en un fin noble, pero no todo el mundo puede, urge comprension y apoyo a esas personas.
Necesidad sexual es que alguien te complemente a través del Eros y de esta forma no acabes en Tanatos, esto sí que es el Reino de las Tinieblas y no algún escarceo puntual y comprensible.
Qué elegante clasicismo el suyo.
Pero el paganismo clásico, con todas sus guirnaldas y sus picantes deidades silvestres, era en realidad muy triste, Tánatos tenía la victoria final siempre. Por eso a el mundo antiguo abrazó entusiasmado la Buena Noticia.
1.- Alguna forma de trascendencia, donde destacan Dios, Patria y Familia.
2.- Hedonismo, simplemente el placer.
En el mejor de los casos se puede decir que solamente los desvergonzados que aceptan la segunda corriente se atreven a comparar el tálamo con el prostíbulo, el adulterio y la fornicación con el sexo matrimonial, las anormalidades con la normalidad, reduciendo el sexo su función biológica intrascendente, la satisfacción del efímero placer. De ahí su justificante de los anticonceptivos, que defiende el padre Costadoat.
En el peor se puede hablar de que se busca justificar el asesinato mediante tres pasos:
a) Se acepta el uso de los anticonceptivos para obtener el "sexo seguro".
b) Pero como alguna vez fallan se da vía libre al aborto (es una de las razones de la sentencia de la suprema corte de justicia de los Estados Unidos que legaliza el asesinato de bebés no nacidos).
c) Y como existen sobrevivientes de intentos de abortos fallidos, se debe justificar el infanticidio del neonato.
"Freud nunca será superado. Las personas racionales lo ignoran y lo seguirán ignorando"
Muy buena frase.
Parece que no se le ha ocurrido pensar que todos los que estamos casados hemos estado antes solteros.
En cualquier caso, lo que usted defiende es la idea de que, al final, los seres humanos no somos más que animalitos irracionales, que no pueden contener sus instintos. Y lo que dice se puede aplicar igual a todos los instintos, desde el sexual, pasando por el de defecar en público, hasta el de matar (y en su caso, devorar) a los enemigos.
Lo gracioso es que plantee como un avance con respecto al siglo II lo que no es más que un retroceso de un par de millones de años a la época en la que no había seres humanos sobre la tierra.
Ánimo, hombre, que vale usted más que eso. Es un hijo de Dios y no un esclavo de la "biología" y de las bajas pasiones.
"Pero el paganismo clásico, con todas sus guirnaldas y sus picantes deidades silvestres, era en realidad muy triste, Tánatos tenía la victoria final siempre"
Sí. Siempre me ha parecido que el paganismo antiguo se parecía bastante, salvando las distancias, a las fiestas de nochevieja, en las que la gente se divierte "porque hay que divertirse", sin celebrar nada en realidad, y en las que siempre hay a flor de piel una corriente de profunda tristeza, apenas oculta por el ruido y, sobre todo, el alcohol.
"Por eso a el mundo antiguo abrazó entusiasmado la Buena Noticia"
Esa es nuestra esperanza. Si el mundo se está destruyendo a marchas forzadas, al menos eso irá haciendo que se caigan las caretas hasta que la gente no pueda seguir ocultándose a sí misma que está sedienta de Dios.
En sus "dos mil años" de historia, nuestra Iglesia Católica condenó como moralmente inaceptable, gravísimo de toda gravedad, que algunas personas tuviesen otro credo. Veinte siglos después del nacimiento de Jesús, cambia su moral y acepta que las personas sean libres de profesar el culto que desean.
Cambios de moral, según la época, en la Iglesia Católica. Ayer, hoy y mañana. Fuera del discurso de barricada, hay gente que no admite ni siquiera sentarse a debatir como gente adulta y pensante.
El aborto siempre fue condenado por los hombres de bien y considerado un asesinato, basta recordar el juramento de Hipócrates, unos 500 años Antes de Cristo, los seres humanos distinguimos, en principio, el bien y el mal incluso antes de la revelación divina, está en nuestro corazón.
Haga el favor de notar que habla de asesinato y a renglón seguido de aborto, dos caras de la misma moneda y, a su manera afirma que es un "pecado", esto es, una forma no santa ni pura de ejercer su arte.
Fragmento:
"Jamás daré a nadie medicamento mortal, por mucho que me soliciten, ni tomaré iniciativa alguna de este tipo; tampoco administraré abortivo a mujer alguna. Por el contrario, viviré y practicaré mi
arte de forma santa y pura."
Fuente: www.bioeticanet.info/documentos/JURHIP.pdf
Antes de decir esas cosas, conviene informarse un poco, porque no ha entendido nada de lo que está diciendo.
No es cierto que Santo Tomás de Aquino considerase "que el niño nacido no tenía alma hasta bastante después de concebido... unas 9 semanas aprox."
Lo que pensaban los científicos de la época (en los que se basa Santo Tomás de Aquino en el aspecto biológico de la cuestión) es que lo que hoy llamamos concepción, la aparición de un ser humano, no sucedía a las pocas horas de las relaciones conyugales, sino varias semanas después (porque su única forma de determinar si se había producido esa concepción era cuando las mujeres notaban que había movimiento en su interior). Los antiguos consideraban biológicamente la concepción como plantar una semilla en la tierra, que no germina inmediatamente, sino al cabo de días o semanas. Por eso semen significa, en latín, semilla y esperma, en griego, significa lo mismo.
Tanto en tiempos de Santo Tomás como hoy, se considera que matar al niño concebido y no nacido es un asesinato. La única diferencia es que la ciencia ha descubierto que la fecundación no tarda semanas en producirse, sino horas. Igual que en tiempos de Santo Tomás, la Iglesia hoy considera un pecado el hecho de interrumpir la fecundación antes de que haya un niño, pero no un homicidio sino algo menos grave (la anticoncepción, que es justo de lo que se habla en el artículo).
Es decir, la moral sigue diciendo lo mismo. Lo que ha cambiado es la ciencia del asunto. Si tiene alguna queja, diríjala a los científicos.
Tampoco ha entendido usted nada cuando dice "En sus "dos mil años" de historia, nuestra Iglesia Católica condenó como moralmente inaceptable, gravísimo de toda gravedad, que algunas personas tuviesen otro credo. Veinte siglos después del nacimiento de Jesús, cambia su moral y acepta que las personas sean libres de profesar el culto que desean"
Hoy sigue siendo "moralmente inaceptable, gravísimo de toda gravedad que algunas personas tengan otro credo".
Basta que lea usted el Catecismo o el Concilio Vaticano II, por ejemplo, y verá que "basado en la sagrada Escritura y en la Tradición, enseña que esta Iglesia peregrina es necesaria para la salvación. Cristo, en efecto, es el único Mediador y camino de salvación que se nos hace presente en su Cuerpo, en la Iglesia. Él, al inculcar con palabras, bien explícitas, la necesidad de la fe y del bautismo, confirmó al mismo tiempo la necesidad de la Iglesia, en la que entran los hombres por el Bautismo como por una puerta. Por eso, no podrían salvarse los que sabiendo que Dios fundó, por medio de Jesucristo, la Iglesia católica como necesaria para la salvación, sin embargo, no hubiesen querido entrar o perseverar en ella" (LG 14).
Fíjese si es grave que la Iglesia dice que, si usted sabe que el catolicismo es la religión verdadera que fundó el Hijo de Dios y, aún así, se va de la Iglesia o no quiere entrar en ella, no puede salvarse. Es decir, se va al infierno. Eso es la definición de "moralmente inaceptable y gravísimo de toda gravedad".
Otra cosa muy diferente, por supuesto, es lo que sucede con los que no han conocido la Iglesia o han conocido una versión deformada de ella (como la que presenta el P. Costadoat), etc. Esos creen algo erróneo, pero sin culpa subjetiva, como ya explicaba el propio Santo Tomás, por ejemplo.
Tampoco es cierto que la Iglesia "cambia su moral y acepta que las personas sean libres de profesar el culto que desean". Primero, la Iglesia siempre ha defendido que no se puede obligar a las personas a convertirse por la fuerza. Segundo, la Iglesia no dice que cada uno crea lo que quiere, sino que todo ser humano tiene la obligación de seguir la verdad una vez que la conoce. Por eso, una vez más, el que se da cuenta de que la Iglesia católica es la verdadera tiene una obligación moral grave de entrar en la Iglesia y permanecer en ella y, si no lo hace, no puede salvarse.
"Cambios de moral, según la época, en la Iglesia Católica. Ayer, hoy y mañana. Fuera del discurso de barricada, hay gente que no admite ni siquiera sentarse a debatir como gente adulta y pensante"
No quiero ofenderla, pero cada vez que ha hablado hasta ahora ha mostrado que no tenía los conocimientos suficientes para debatir como "gente adulta y pensante" sobre estos temas. No porque no sea adulta o no piense, sino porque se ha tragado hasta el fondo una formación errónea totalmente alejada de la realidad y apenas conoce lo más mínimo de lo que verdaderamente enseña y ha enseñado la Iglesia. Todo lo que ha dicho hasta ahora provenía de falsas ideas sobre lo que enseña la Iglesia. Todo.
Infórmese primero un poco mejor (procurando no sacar su información de páginas que odian a la Iglesia y que no tienen reparos en deformar la verdad si eso sirve para difamar a la Iglesia) o, si no sabe de algo, pregunte en vez de atacar y verá lo hermosa que es la verdad.
Saludos.
Así no funcionan las discusiones. Cuando se le ha mostrado que ha dicho usted cosas erróneas, lo primero es reconocer que eran erróneas (o, si algo no le convence, dígalo con argumentos). Si no lo hace, discutir no sirve de nada.
Por lo tanto, no es admisible que lo que haga sea cambiar de tema. Actúe primero como una persona racional y luego podrá plantear otro tema. De hecho, de ahí viene que se le tengan que explicar mil veces las mismas cosas, porque cuando descubre que sus argumentos son erróneos simplemente cambia de tema y se olvida de los errores cometidos... y vuelve a cometer los mismos un mes después.
El tiempo de todos los que participamos aquí es valioso, no tiene sentido desperdiciarlo en desahogos sin intención de conocer la verdad.
Bueh...
En sus "dos mil años" de historia, nuestra Iglesia Católica no vio en el aborto una cuestión moralmente tan grave equiparable al homicidio. Fue hace relativamente muy poquito, en 1869, que Pío IX lo declara moralmente inaceptable..."
Le cito la Didaché, documento cristiano de los siglos I o II:
"2:2 No matarás, no adulterarás, no corromperás a los menores, no fornicarás, no robarás, no practicarás la magia o la hechicería, no matarás el hijo en el seno materno, ni quitarás la vida al recién nacido. No codiciarás los bienes del prójimo. "
Como ve la enemistad de la Iglesia con el aborto viene de bastante antes del siglo XIX, no se de dónde ha sacado la idea de que fue invento de Pío IX, pero es muy fácil comprobar que no es así.
Hoy en día la información puede encontrarla fácilmente en internet, tanto la buena como la mala, no deje de buscar la verdad, invoque al Espíritu Santo y la asistirá.
"Bueh..."
Muy bien, claro que sí. Felicidades por no dejar que la molesta verdad ponga en peligro los propios prejuicios, que son tan cómodos y con los que se está tan a gusto.
"Bruno, entonces con más razón se puede debatir todavía"
Muy bien, eso sí que es un argumento interesante. Veámoslo.
"Si Ud. dice que depende de los avances científicos de cada época es que la Iglesia mejora su entendimiento de las cosas"
Bueno, lo que mejora es su entendimiento de las cosas científicas, que no son su ámbito de actuación, pero no cambia lo que enseña sobre lo que Dios nos ha revelado.
"podría suceder como ahora que a la luz de la psicología y la medicina y la antropología y otras ciencias resulte que ser homosexual no es más que una elección sexual y no una enfermedad"
La Iglesia no enseña que sea una enfermedad, porque eso no forma parte de su competencia, que está en el ámbito metafísico y no en el físico.
De hecho, precisamente lo que dice la Iglesia es que esa "elección sexual", es decir, su puesta en práctica, es inmoral , contraria a la naturaleza humana y contraria al plan de Dios. Eso no depende, hasta donde puedo ver, de lo que diga la ciencia. Igual que el hecho de que matar a un ser humano era inmoral no dependía de la ciencia en tiempos de Santo Tomás ni depende de la ciencia ahora.
La ciencia puede y debe estudiar cómo se produce la atracción homosexual, que puede ser genética, psicológica, etc. y será estupendo que se estudie más el tema. Pero de eso no depende en absoluto la calificación moral de los actos homosexuales, que, según la Revelación de Dios, son inmorales.
"ni una cosa intrínsecamente mala"
Bueno, es que la ciencia no dice absolutamente nada sobre eso. La ciencia solo se ocupa de lo que se puede medir (como el tiempo que pasa hasta la concepción), pero no de conceptos metafísicos como malo o bueno, lo moral o lo inmoral. Esos conceptos están fuera del ámbito de las ciencias experimentales.
"De un momento a otro, tal como le pasó a Santo Tomás, la realidad no sea que todas las personas que aman verdadera y genuinamente sean pervertidas y que incluso en las relaciones de pareja serias homosexuales se encuentre el amor verdadero, no?"
Como ya le he dicho, claro que puede haber amor entre dos personas homosexuales. Es el amor de amistad, que es lo que Dios les regala y lo que la inmoralidad en la que viven aún no ha podido destruir, aunque tienda a destruirlo. Igual que entre un señor casado y su secretaria puede haber amor de amistad, pero si pasan a acostarse juntos ese amor de amistad degenera en algo que no es bueno ni la voluntad de Dios. Es fácil de entender
Es algo revelado por el mismo Dios encarnado y por eso (además de por la recta razón) sabemos que es verdad. Y la verdad no cambia. Lo que hoy es malo lo era hace dos mil años y viceversa.
"Gracias por confirmar lo que pensaba, que la Iglesia va escuchando lo que se va entendiendo y con eso mejora su visión de la realidad humana"
En realidad, no he confirmado nada de eso. De hecho, he confirmado lo contrario. Que las ciencias sí van cambiando lo que saben sobre su ámbito de actuación, porque su método es el experimental, pero la Iglesia pertenece a otro ámbito y siempre enseñará lo mismo, porque lo que Dios nos ha revelado no cambia y la naturaleza humana tampoco.
Saludos.
la ley moral natural es muy sencilla: si algo mata, acorta la vida, daña o enferma se le llama "malo". Los católicos decimos que es "pecado". Los médicos la llaman "enfermedad"
La ciencia siempre ha venido en auxilio de la religión católica, simplemente vienen a confirmar lo que los teólogos ya sabían. En particular hablemos de su inquietud, existen ahora estadísticas médicas muy claras, el alcoholismo y la sodomía acorta la esperanza de vida aproximadamente lo mismo, 10 años.
¿Le duele que se les llamen pecado? ¿Le duele que las llamen enfermedad? ¿Que se diga que son malas? ¿La prefiere llamar elección personal?
Bueno, usted puede llamarla como quiera, pero cambiando de nombre no cambia su realidad, que mata: la primera principalmente a través de la cirrosis hepática, la segunda a través del Sida y la Hepatitis, esa es una verdad que no se puede negar.
"la ley moral natural es muy sencilla: si algo mata, acorta la vida, daña o enferma se le llama "malo". Los católicos decimos que es "pecado". Los médicos la llaman "enfermedad""
Eso es incorrecto. El pecado y la enfermedad son cosas completamente distintas. De hecho, si eso fuera cierto, no habría nada peor que el martirio, que además tendría que considerarse una enfermedad, porque no hay nada que "acorte la vida" más que el martirio.
Lo mismo con el contagio de enfermedades. Si las relaciones homosexuales fueran moralmente malas porque incrementan la probabilidad de contagiarse enfermedades, habría que condenar también a San Damián de Molokai, que se fue a vivir con los leprosos y se contagió de su enfermedad y murió de ella.
Es más complicado.
2. No mates, no adulteres, no corrompas a los menores, no forniques, no robes, no practiques la magia o la hechicería, no mates al hijo por aborto, ni quites la vida al recién nacido.
¿Que las ciencias han avanzado? No veo que la ciencia pueda corregir nada de este texto aunque sea del s. I, porque lo que se quiere suprimir son dos cosas: "no forniques" y "no mates al hijo por aborto", el resto se queda igual. ¿Desde cuándo la ciencia puede decir nada del robo o de la hechicería? si para eso no es competente es extraño que lo sea para lo demás, suena a conveniencia más que a ciencia.
aceptado el matiz.
Lo escribí para quienes que niegan la realidad espiritual, pensando en exclusiva en plano natural y biológico solamente.
Un saludo.
"Por experiencia sabemos que intentar rebatir las tonterías sin sentido y las ambigüedades sirve de muy poco, precisamente porque no tienen sustancia. Son como el agua, que no tiene forma propia y se cuela por cualquier rendija."
Pues a la Luz de eso, lo que nos cuentas de Chile es eso, tonterías sin sentido a las que se le dedica atención, al mismo tiempo que se ignora lo realmente grave que está pasa al costadito de Chile, en Argentina, en Río Gallegos para ser exacto.
El que tenga oído y quiera oir, que oiga
Gracias por tu comentario. Hasta donde puedo ver, lo del P. Costadoat no son ambigüedades ni tonterías sin sentido, son errores extendidísimos en la Iglesia, sin ninguna ambigüedad, y argumentados expresamente por el autor (aunque la argumentación sea de muy baja calidad). Es decir, una buena ocasión de rebatirlos. Lo que no se puede rebatir es una expresión ambigua y no argumentada, que probablemente no quiera decir nada, como la expresión que pediste que noticiásemos, si no recuerdo mal.
No sé nada de Río Gallegos. Lo he buscado ahora en Internet y veo que han nombrado un nuevo obispo de allí, supongo que te refieres a eso. Como no sé nada del obispo, no puedo comentar. No es que lo ignore intencionadamente, es que 1) no lo conocía y 2) no puedo decir nada del tema porque no tengo conocimientos para hacerlo. Si el nuevo obispo realiza declaraciones o hace algo que sea significativo y criticable, entonces podría criticarlo (aunque hay miles de obispos en la Iglesia y no puedo estar pendiente de lo que dicen todos ellos, ni es mi misión hacerlo), pero sobre la persona en sí no puedo decir nada.
Si, como pareces sugerir, es un nombramiento desafortunado, supongo que ya se pondrá de manifiesto con el tiempo, aunque, la verdad, ha habido tantos nombramientos episcopales desafortunados durante mi vida que no me llamaría mucho la atención uno más. En cualquier caso, desgraciadamente, tengo dos artículos entre manos sobre temas mucho más graves.
En sus "dos mil años" de historia, nuestra Iglesia Católica no vio en el aborto una cuestión moralmente tan grave equiparable al homicidio.
LF:
La ignorancia tiene estas cosas. Va alguien y suelta una barbaridad de ese calibre, que causa vergüenza ajena. Pero como una de las buenas obras es enseñar al que no sabe, ahí va:
Los primeros cristianos contra el aborto. Ejemplos para el cristiano del siglo XXI
Pues si no le conoces al nuevo Obispo, aquí está una de tantas https://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/soy/1-2608-2012-09-09.html
es el que sale en la foto, famoso por bautizar a los gemelos del actor Transgénero Flor de la V.
Y siendo Argentina, no se puede excusar la cosa alegando que "De Roma Vienen lo que a Roma Va". Este nombramiento tiene un responsable directo.
Supongo que se lo puedes sugerir a Virginia, que es la que sabe de asuntos argentinos. De hecho, fue ella la que escribió sobre el tema cuando le hicieron obispo hace dos años.
Ahora el que me tiene pasmada es Josafat. Pasmada y hasta avergonzada. ¿Cómo puede alguien -sin ruborizarse- presentarse a sí mismo como alguien esclavo de sus apetencias? A mí -si estuviera aquejada de ese mismo padecimiento, que, gracias a Dios, no es el caso- me daría muchísima vergúenza contarlo.
Que no, Josafat, que somos más que un cacho de carne. Tú también.
"No te ensañes ... Caerá en la cuenta, pero no así."
Gracias por el consejo/corrección. Es un tema complicado, porque los comentarios no los lee solo el destinatario, sino mucha gente más y las necesidades de comentarista y lectores no tienen que ser las mismas, quizá el primero necesita que le hablen con tacto y suavidad, pero quizá lo que necesitan los segundos es que quede meridianamente claro que las barbaridades son barbaridades, sin suavizamientos ni concesiones. O las mil variaciones posibles que no hace falta detallar.
Es un tema que nunca me planteé antes de escribir un blog, pero que desde que lo hago me ha dado muchos quebraderos de cabeza en multitud de ocasiones, porque no es nada fácil acertar en el punto adecuado: a quién borrar, a quién no borrar y por qué, dar razones o no, ser más suave o más duro y con quién, qué cosas hay que tomarse en serio y cuáles conviene simplemente ridiculizar, hasta dónde llega tener paciencia y dónde empieza el permitir que degenere el espacio de comentarios y perder inútilmente el tiempo... Desde luego, lo que daría menos trabajo sería simplemente cerrar los comentarios, pero a mí personalmente me parecen interesantes, a menudo más que el artículo inicial.
Dice Bruno que es igual que una mujer católica tome la píldora para regular la menstruación como que un hombre use un condón para hacer un globito...
Eeehhh pues no. Porque cuando una mujer toma la píldora queda esterilizada, y es un poco raro que se permita que la mujer quedar esterilizada para una cosa secundaria, pero no para el cometido principal para el que se inventó la píldora que es la propia esterilización.
Así una mujer podría desear tener una regla irregular o granos en la cara, para tener la excusa de poder usar la píldora.
Respecto a que "no hay marcha atrás" en lo que respecta a las mujeres y la anticoncepción, responde Bruno que la gente cambia muchas veces de opinión con las épocas, y es cierto como en el caso de la Iglesia y la esclavitud. Y yo me refería a que no hay marcha atrás en esta época, vamos al menos en unos cien años, porque a ciencia cierta nadie sabe lo que pensará la gente en el s.XXIV.
Sí, solo quería dejar claro el principio, pero por supuesto que nuestras pasiones a menudo nos llevan ciegamente a dañarnos también físicamente. El caso más claro es el del alcoholismo y la drogadicción, que son inmediatamente autodestructivos, pero también otros muchos pecados.
Si vuelve usted a dirigirse a mí en tercera persona, como si hablara de mí en lugar de dirigirse a mí, borraré definitivamente todos sus comentarios. Ya se lo he advertido en repetidas ocasiones. La descortesía intencionada me resulta especialmente desagradable y no tengo por qué soportarla en mi blog.
"Eeehhh pues no. Porque cuando una mujer toma la píldora queda esterilizada, y es un poco raro que se permita que la mujer quedar esterilizada para una cosa secundaria, pero no para el cometido principal para el que se inventó la píldora que es la propia esterilización".
Sabe usted perfectamente la respuesta a eso que dice. Los medicamentos a veces tienen efectos secundarios no buscados. Esos efectos secundarios no se buscan intencionadamente, sino que se soportan por algo más importante. Igual que usted no diría que es absurdo que el catolicismo prohíba matar inocentes y, sin embargo, permita que se realicen transplantes de corazón, sabiendo que las operaciones de transplante a veces causan la muerte del paciente inocente, tampoco puede considerar absurdo que los mismos productos químicos que se utilizan de forma inmoral cuando lo que se persigue es su uso como anticonceptivo puedan ser utilizados moralmente para otra cosa.
Por supuesto, habrá que ver si el resultado médico obtenido es suficientemente serio para soportar los efectos secundarios, si esos efectos secundarios no tienen importancia (por ejemplo, porque es una niña que no tiene relaciones sexuales), etc. Pero eso ya se ve caso por caso, igual que se ve caso por caso si conviene tener una operación o el resultado es frívolo en comparación con el riesgo.
Repito lo que dije: no tiene sentido decir que esa diferencia que señala la iglesia entre el uso de un producto químico como anticonceptivo y otros usos sea absurda. Sería como decir que es absurdo que la Iglesia diferencie entre el uso de un cuchillo para cortar el pan y para cortar el cuello de alguien. Es algo evidente y el que dice lo contrario muestra que le importa un bledo la verdad y solo quiere hacernos perder el tiempo.
Por eso, si usted no reconoce lo evidente, no tiene sentido seguir discutiendo sobre nada.
También pudiera ser que en s. XXV la corrupción fuera aceptada como práctica lícita, razón por la cual tampoco deberíamos ser muy severos con los corruptos, etc... Es decir la variabilidad sobre criterios morales es infinita por lo que es mejor tener una adaptada al siglo de cada cual. En ese caso tus muchas críticas hechas a conductas de gente de siglos anteriores carecen de fundamento.
¿No pretenderás que la pederastia sea mala por los siglos de los siglos cuando no hay nada inmutable?
Bueno, un poco exagerado el ejemplo.
El agua es necesaria para la vida y el veneno es lo contrario.
El método de Ogino y el diafragma son métodos anticonceptivos, salvo que uno es llamado "natural" y otro "artificial". Pero el objetivo de ambos es el mismo: ayudar a la mujer a mantener relaciones sexuales sin el riesgo de embarazo.
Tal vez sería entonces como permitir beber agua pero prohibir los zumos de fruta.
Puedo entender que tal vez se refiera a "veneno para el alma", porque los métodos artificiales se consideran pecado . Pero entonces volvemos a la cuestión ¿lo que ahora es pecado puede no serlo?.
Sí. Por poner un ejemplo que no sea de los de siempre, hasta Pío XII era pecado comulgar sin haber ayunado al menos doce horas, luego ese Papa redujo el ayuno a tres horas y después del Concilio se dejó en una hora.
Doy el pase porque puede que no haya leído mi comentario anterior. Si repite la descortesía, borraré sin escrúpulo.
"El método de Ogino y el diafragma son métodos anticonceptivos, salvo que uno es llamado "natural" y otro "artificial". Pero el objetivo de ambos es el mismo: ayudar a la mujer a mantener relaciones sexuales sin el riesgo de embarazo."
También sabe usted la respuesta a esto y es tedioso tener que repetir las cosas. Empiezo a pensar que se está burlando.
"Natural" y "artificial" en moral no significa lo mismo que en el lenguaje coloquial. Natural significa acorde con la naturaleza humana y artificial significa que deforma esa naturaleza humana. Además, conviene saber que la moralidad de una acción depende del fin pero también de los medios utilizados. Y, en este caso, la diferencia está en los medios, no necesariamente en los fines. Dos cosas pueden tener el mismo fin pero una de ellas ser inmoral (porque usa medios contrarios a la naturaleza humana) y otra moral (porque usa medios acordes con la naturaleza humana). Por ejemplo, digamos que dos personas buscan el fin de reducir la pobreza en un país, pero una crea empleo, servicios sociales estupendos, anima a las personas a ayudar a sus vecinos y mil cosas similares, mientras que la segunda manda a sus sicarios por las calles a que recojan a los pobres y los lleven a visitar una pintoresca cámara de gas. Da igual que el fin sea el mismo (disminuir la pobreza), porque hay medios adecuados y otros que son inmorales y no se pueden usar.
Eso, que a usted le parece evidente, es exactamente lo mismo que sucede con los anticonceptivos. La Iglesia enseña que el medio de privar a un acto sexual naturalmente fértil de esa fertilidad es una perversión del mismo, mientras que el medio de tener relaciones en los días en que el acto sexual es naturalmente infértil no tiene nada de malo. El primero deforma el acto sexual y el segundo no.
Usted, como es lógico, puede estar en desacuerdo con la calificación moral de uno de esos medios o de ambos, pero no tiene ningún sentido que llame absurdo al hecho de diferenciar entre un medio que se considera moral y uno que se considera inmoral, porque eso lo hace usted todos los días, como en los no sé cuántos ejemplos que le he puesto.
"Por poner un ejemplo que no sea de los de siempre, hasta Pío XII era pecado comulgar sin haber ayunado al menos doce horas, luego ese Papa redujo el ayuno a tres horas y después del Concilio se dejó en una hora"
Estoy casi seguro de que también sabe la respuesta a eso, porque no es tonto. En la primera época de Pío XII lo que era pecado no era comulgar sin haber ayunado ese tiempo, sino desobedecer a la Iglesia que mandaba ayunar ese tiempo antes de comulgar. Los mandamientos de la Iglesia, como sabe todo el mundo, no son de la misma naturaleza que los mandatos de Dios. Son normas positivas, que establece prudencialmente la Iglesia; no se refieren a cosas que estén intrínsecamente mal, sino a lo que la Iglesia considera conveniente en cada momento; no son pecados en sí, sino que el pecado que puede haber es el de desobediencia a la norma dada por la Iglesia. Por eso, la Iglesia puede dispensar a una persona de esas normas positivas que establece (por ejemplo, los enfermos están dispensados de ayunar antes de comulgar), pero no puede dispensar de la obligación de evitar las cosas que son malas en sí mismas (la Iglesia no puede dispensar de la obligación moral de evitar el pecado de adulterio o de aborto, por ejemplo).
Tanto en esa época como en la actual, el pecado sigue siendo el mismo (en este caso, desobedecer lo que manda la Iglesia).
En fin, creo que estas cosas ya se le han explicado varias veces.
Nota: En realidad no era ayunar doce horas, sino desde las doce horas de la noche anterior. Por eso la costumbre era que la Misa se celebrar muy temprano por la mañana.
"Freud decía que se puede subliminar el deseo sexual en un fin noble."
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Algunos dicen que esto es ciencia, en realidad suena a metafísica, y yo digo que es pura poesía a las flores.
No parece haber mejor ejemplo para demostrar que el fin NO justifica los medios.
Por otra parte, quisiera compartir el párrafo de la Humana Vitae que, en mi opinión, es la verdadera razón de tanta queja de la izquierda anticristiana.
"Reflexiónese también sobre el arma peligrosa que de este modo se llegaría a poner en las manos de autoridades públicas despreocupadas de las exigencias morales. ¿Quién podría reprochar a un gobierno el aplicar a la solución de los problemas de la colectividad lo que hubiera sido reconocido lícito a los cónyuges para la solución de un problema familiar? ¿Quién impediría a los gobernantes favorecer y hasta imponer a sus pueblos, si lo consideraran necesario, el método anticonceptivo que ellos juzgaren más eficaz? En tal modo los hombres, queriendo evitar las dificultades individuales, familiares o sociales que se
encuentran en el cumplimiento de la ley divina, llegarían a dejar a merced de la intervención de las autoridades públicas el sector más personal y más reservado de la intimidad conyugal."
Parece ser fuera de toda duda razonable que los gobiernos quieren favorecer e imponer el método anticonceptivo llamado homosexualidad.
Tal vez te pueda ayudar en la comprensión de algunos puntos de la visión católica que te han expuesto , las siguientes premisas.
- Los católicos creemos que Jesucristo es el Hijo de Dios y Dios mismo.
- Creer que Jesucristo es Hijo de Dios y Dios mismo conlleva obrar como Él nos ha enseñado. ¿Por qué? Porque Él mismo lo dijo.
- Entre las cosas que Cristo nos ha enseñado es que sus palabras son eternas, inmarcesibles, tan válidas hoy como dos mil años atrás, no sujetas a modas ni a cambios de ninguna especie ("el cielo y la tierra pasarán pero mis palabras no pasarán").
- También Cristo dijo: "No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el Reino de los cielos, sino el que hiciere la voluntad de mi Padre que está en los cielos". Con lo cual, cualquier bautizado según la fe católica, que no obre (y persista en ello) según la voluntad de Dios, que es la de Cristo, no entrará en su Reino. Por más hijo de la Iglesia que sea.
- También Cristo les dijo a sus apóstoles: "El que os recibe a vosotros, a mí me recibe; y el que a mí me recibe, recibe al que me envió". Y también: "Un siervo no es mayor que su señor. Si me persiguieron a mí, también os perseguirán a vosotros; si guardaron mi palabra, también guardarán la vuestra". Con lo cual, debemos entender las enseñanzas de los apóstoles como enseñanzas del mismo Jesús.
- Y el apóstol Pablo en su primera carta a los Corintios, en su capítulo 6 nos dice lo siguiente: "¿O no sabéis que los injustos no heredarán el Reino de Dios? No erréis, que ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones (homosexuales), ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el Reino de Dios".
De este modo Alejandra, nunca, pero nunca, la Iglesia podrá decir que pueden ser moralmente aceptables aquellas conductas que San Pablo dijo que privarían a los que las practiquen —y no se arrepientan de ello— de acceder al Reino de Dios. Podrá haber algún sacerdote (mal sacerdote) que pueda decir eso, pero el tal estará cometiendo una herejía, estará también escandalizando (incitando a otros al pecado) y a menos que se arrepienta, indefectiblemente condenará su alma al fuego eterno. ¿Entiendes ahora Alejandra porqué la homosexualidad, la fornicación, el adulterio, los demás pecados contra la pureza, el aborto, etc., etc. son conductas intrínsecamente malas? Porque lo dijo Dios. Y el que no lo cree así, el que no lo siente así, entonces mal puede llamarse católico (ni siquiera cristiano). Por más bautizado que esté; porque aunque no haya apostatado formalmente, lo ha realizado en los hechos. Y repito, la Iglesia jamás podrá decir que es aceptable aquello que Cristo y sus apóstoles dijeron que era malo.
Un cordial saludo.
Hic Rhodus. He aquí el problema. Realmente, descorazonador. ¿Cómo se va a poder admitir la herejía en gran escala en la Iglesia si no se la deja entrar ni un poquito? Así no se va a ninguna parte, del Infierno, digo.
¿Qué orientación va a poder dar la Iglesia si no da la que viene de la ley moral natural y evangélica? No es que la Iglesia no tenga orientación para dar, tiene kilos, lo que pasa es que cuando la da hay un montón de gente, como el P. Costadoat, por ejemplo, que saltan y gritan como si los hubieran quemado con aceite.
Como pasó con la Humanae Vitae, precisamente. "Queremos otra orientación distinta". Pero para eso no hace falta la Iglesia. Orientadores tiene el ,mundo que os orientarán. Hacia dónde, es otro tema.
Saludos cordiales.
"¿Dígame, para dónde queda el aeropuerto? - Para allá - Ah, no, a mí me gusta ir para aquel otro lado - Pues vaya por la sombra, y que no sea nada."
O como diría Obi Wan: "Que la Fuerza esté contigo".
¿Para qué toda una institución de "orientadores" en un mundo en que la orientación si no va de acuerdo con la que yo ya tengo no me sirve?
El progresista, en definitiva, si fuese coherente con su progresismo, dejaría la Iglesia y se haría ateo. Ése es el verdadero problema.
Saludos cordiales.
El progresismo es el mal, el progresismo es la muerte.
A Gringo le han traído adrenalina los Reyes Magos, por lo que veo.
Opinión Grosso modo: aunque es verdad que muchos católicos usan anticonceptivos, no creo que sea sólo por dejadez moral personal. Me parece que si hubiera más preocupación de la Iglesia por que conozcamos los métodos naturales, mucha más gente de la que pensamos los usaría.
Ogino sólo es un cálculo probabilitico, no tiene fiabilidad científica casi. Billings, sintotermico, etc, si son cientificos, pero requiere de personas bien cualificadas que lo enseñen.
Nosotros hemos hecho 2 veces el curso billings, porque tardas la porra en aprenderlo bien y hay qué llevar seguimiento con los monitores. Aquí, en toda la región de Murcia sólo hay un matrimonio que lo enseña!!!!!!
Es decir, que creo que la Iglesia debería hacer un esfuerzo pastoral es esto, que prácticamente no hace nada. Y al final hay que gente que se ve en situaciones difíciles o por desconocimiento o por lo que sea, usan anticoncepcion.
Siento haber tenido que borrar sus comentarios. Parecían interesantes, pero ya le indiqué el mínimo de cortesía que se requería.
Saludos
Fundamente todo lo que quiera. Hasta ahora lo que ha dicho, a mi juicio, no tiene sentido, pero puede que no lo haya entendido bien.
Por lo que has escrito, resulta evidente que has perdido el norte. Tú dices:
Es una maldad maligna de toda malignidad no comprender que el preservativo cuida a nuestros hijos e hijas de diversas enfermedades.Te has olvidado que Cristo vino a salvar nuestra alma no nuestro cuerpo. De que le vale al hombre ganar el mundo y perder su alma. Análogamente, de que le valdrían a tus hijos una supuesta (porque eso de que el preservativo evita todas las enfermedades, es falso) protección de enfermedades venereas (que no las tendrían si practicaran la castidad como Dios manda a las personas solteras) si al hacerlo están cometiendo un pecado mortal que lleva sus almas derechito al fuego eterno.
Te das cuenta entonces que tu esta otra afirmación:
Que no es mas diabólico su obstinado rechazo que su sana admisión!es lo verdaderamente diabólico, porque con ella no solo estás condendando el alma de los que te escuchan sino también la tuya propia al escandalizar (incitar al pecado a otros).
Y respecto a esto otro que escribiste:
Ustedes tendran uno o diez o cien argumentos de por qué hay que obedecer las milenarias enseñanzas, pero las familias católicas, nosotros esposas, nuestros maridos, nuestros hijos, no las ponemos en práctica y es triste que nuestra Iglesia no acompañe en tan importante debate.Pues te informo que no, que no eres católico ni siquiera cristiano. Y tomando las palabras de Bruno, te digo que eres tán católico como aquel que anuncia a los cuatro vientos que es vegetariano pero que al llegar a su casa se come sus buenos bistecs. Porque cristiano, es el que cree en Cristo, es aquel que guarda sus enseñanzas. Lo dijo Él. Deberías releer el Evangelio de San Juan para refrescar ese punto. Y la Iglesia si se quiere seguir llamando cristiana, seguirá escuchando las palabras de Jesús antes que el clamor del mundo al que te has plegado. Carlos Alberto, recuerda, por tanto, de dónde has caído y arrepiéntete, y haz las obras que hiciste al principio; si no, vendré a ti y quitaré tu candelabro de su lugar
Y para finalizar, un comentario sobre esta afirmación tuya:
Conste que solo estoy diciendo lo que pensamos millones, no lo que es correcto o incorrecto desde la Tradición. Estoy describiendo la realidad.Bueno, te arrogas la representación de millones. Pero supongamos que sea así; ¿y eso que prueba? En la época del arrianismo estaba practicamente solo San Atanasio contra el resto del clero. ¿Y por eso tenía razón este último? No la razón la tenía San Atanasio y tanto es así que la aparentemente imparable herejía arriana terminó aplastada. Te diré algo Carlos Alberto, Nuestro Señor se preguntó si cuando Él regresara por segunda vez hallaría fe en la tierra. Y San Pablo mismo profetizó la gran apostasía antes de la nueva venida de Cristo (que es lo que recepta el CIC en su artículo 675). Y dado que no todo aquel que le diga a Jesús, "Señor, Señor" entrará en el Reino de los Cielos sino solo aquellos que hagan Su voluntad, mucho me temo que en el Día del Juicio —a menos que cambies de opinión y tus actos— te dirá "nunca te conocí".
Arriba ha explicado Bruno en qué sentido se les llama naturales, que no es el sentido más elemental. En ese sentido vulgar, en efecto, no tiene nada de "natural" andar con calendarios, temperaturas, mocos cervicales y esa inseguridad de la irregularidad de los ciclos, porque se quitan las ganas. Pero es que no se llama natural porque sea sencillo y fiable, sino por ser conforme con la naturaleza del acto y con el hecho efectivo de que las mujeres tienen días infértiles.
También es difícil prescindir del hecho de que el fin perseguido es el mismo. Pero si nos resulta difícil es porque estamos demasiado imbuidos de la mundanidad que nos envuelve.
Dices:
Acerca de quiénes somos o no católicos, propongo como un ejemplo que muchos de nuestros bautizados solteros una y otra vez confiesan haber mantenido relaciones sexuales y pese a que son aconsejados por sus confesores continúan, cuando menos con su comportamiento sexual, con persistencia hasta la contumacia.Si en el momento de la confesión, saben que van a continuar con su comportamiento pecaminoso, es decir no tienen propósito de enmienda, su confesión es inválida, sacrílega y no solo retienen sus pecados, sino que los han aumentado con tal acto.
Otros consideran en su fuero íntimo que ante Dios no es un pecado mantener relaciones sexuales con la persona con la que están dispuestos a contraer matrimonio.Realmente importa poco si en su fuero íntimo consideran que no pecan; es pecado y punto. No lo digo yo, lo dicen las Escrituras. Porque cuando San Pablo dice "es preferible casarse que quemarse" está diciendo que cualquier relación sexual fuera del matrimonio conlleva el infierno. Ya ves Horacio como estás afirmando en este caso lo mismo que Amoris Laetitia respecto de la eucaristía para los que están en adulterio; si los adúlteros sienten que no están en pecado, entonces pueden comulgar.
No creo que dejen de ser católicos, el sacramento de la penitencia, en un caso, basta para entenderlo así; ni creo, en el otro, que sean herejes en el sentido estricto del término que es el que aquí vale.Me voy a tomar el atrevimiento de pegar aquí un trozo de un artículo que escribió Luis Fernando que viene más que a punto:
La humanidad está radicalmente dividida en dos: aquellos que creen en Cristo y han sido bautizados y aquellos que no. Unos son hijos de Dios -en el sentido de filiación sobrenatural-, otros no. Los que no creen en Cristo son solo hijos del primer Adán. Los que creen son hijos de Dios en el segundo Adán, que es Cristo (1 Cor 15,45). De ahí la absoluta necesidad de predicar el evangelio a todos los hombres.Sí, no dejan de ser católicos, porque han sido bautizados, pero serán condenados como si no lo fueran, porque están alejados de la gracia de Dios. El sacramento de la penitencia implica propósito de enmienda, dolor por la ofensa inferida a Dios. Si el que se va a confesar, no advierte su falta de dolor y/o ignora que tiene que tener propósito de enmienda, la confesión es nula; y si se confiesa a sabiendas de aquello, su confesión es sacrílega. En ambos casos, continúa en pecado, y si muere en estado, por más católico que se crea, se condenará. ¿Te olvidaste de lo que dice Mateo? No todo el que me dice: "Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos".
Entre los hijos de Dios también se puede establecer una división. Los que viven en pecado y los que viven en gracia. Se entiende que vivir en pecado no es pecar ocasionalmente, cosa que todos hacemos, sino pecar gravemente a conciencia -pecado mortal- y sin intención de arrepentirse y cambiar de vida. Si mueren en ese estado, aun siendo hijos de Dios su condenación es segura e incluso se puede decir que su situación será peor que la de aquellos que nunca creyeron porque nadie les predicó el evangelio.
No hay nada intrínsecamente malo en no realizar un acto en un momento determinado en el cual no hay obligación de realizarlo. No hay un mandamiento que diga que se debe tener relaciones sexuales tal día a tal hora.
Sí es intrínsecamente malo realizar ese acto impidiendo su finalidad natural.
Saludos cordiales.
¡Menuda costalada se ha pegado el tal Costadoat: se pensaba que por ser chileno -y jesuita- podía "echar las patas por alto" y que le iba a salir una bonita "chilena" a lo Hugo Sánchez, y se olvidó de que bajo los palos había un Moreno cancerbero de nombre Bruno que todo lo para adornándose con sus mejores argumentos!.
Confiemos -y recemos- por que no le sirva a nuestro portero para fichar por el equipo de los rigoristas.
Los jesuitas en el mundo son aproximadamente la mitad del máximo de miembros que tuvo en la época del Concilio Vaticano II. Debido a la edad de los sobrevivientes, mas de 70 años, quizás en unos 10 años quedará reducida a la cuarta parte de su máximo histórico.
¿Cuál es la razón? Parece mas que evidente que lo que denunció el Arzobispo Fulton John Sheen hace unos 50 años, debida a información directa de agente comunista convertido al catolicismo es absolutamente cierto: se realizó una infiltración de la Iglesia por sus enemigos.
Hoy vemos sacerdotes, obispos, arzobispos y cardenales homosexuales, defensores de los masones y del comunismo Ellos no ofrecen nada diferente a lo que les ofrece el mundo, por eso la ausencia de vocaciones.
La infiltración causó mucho daño a la Iglesia, pero ahora que ha sido descubierta solo resta luchar contra ella. Personalmente soy muy optimista al respecto, España está despertando junto con Europa. No creo que sea ésta la apostasía final, creo que solo nos resta seguir a San Ignacio: "Reza como si todo dependiera de Dios. Trabaja como si todo dependiera de ti".
Eso es el verdadero catolicismo y no lo que ofrecen los exegetas masones: rezar, llorar y aceptar lo que diga el gobierno mundial: que nuestros hijos sean violados por sodomitas como parte de su "derecho".
Santiago y cierra, España.
diversa, participativa e inclusiva" es el lema del recién finalizado Sínodo Laical, auto convocado, en recintos jesuitas y entusiastamente apoyado por el Sr. Costadoat. Sus proclamas enseñan que
se revisaron las "actitudes para enfrentar a la jerarquía y al clero" - lo que sea que eso llegue a significar - y la "diversidad teológica en que todas y todos fueron formados".
Trabajarán para obtener:
1. la modificación de la estructura de poder para incluir al laicado en especial a las mujeres (" democratizar" la Iglesia);
2. la formación (la parte mas temible) del pueblo de Dios; y
3. la erradicación de la cultura del abuso de poder, con justicia y reparación. Imagino que hablamos de dineros en grandes cantidades.
Avanzan.
Y con la Iglesia chilena aún en shock y en medio de procesos judiciales, continuarán haciéndolo.
Sigamos...
La esperanza es una virtud infusa.
"La esperanza es una virtud infusa"
Bien dicho. In te Domine speravi, non confundar in aeternum.
"La Iglesia quiere que el acto sexual vaya unido al amor y no a la violencia. Por eso una mujer que está en peligro de ser violada puede usar medios anticonceptivos no abortivos."
[Aquí Loring menciona a varios teólogos como Palazzini, Francesco Hürt y Lambruschini que están de acuerdo, y escribe un párrafo dando por ciertas las historias de monjas violadas en el Congo y Yugoslavia y que la Iglesia autorizó que tomaran anticonceptivos ].
"Comentando esta licitud el obispo de Segorbe-Castellón Juan Antonio Reig, presidente de la Comisión Familia y Vida de la Conferencia Episcopal Española dijo en rueda de prensa: 'esta licitud no se debe a un criterio de anticoncepción sino que es un acto de defensa personal ante una agresión sexual".
Ya hemos explicado eso varias veces. No tiene ningún misterio y parece mentira que haya que explicarlo: una violación no es una relación sexual, sino una agresión sexual. La mujer no participa, sino que sufre un ataque. No hay, pues, un acto sexual voluntario que se pueda desnaturalizar. Confundir la violación con una relación sexual es como confundir el canibalismo con gastronomía.
Dicho eso, como sabe perfectamente, no puede comentar aquí por descortesía manifiesta y contumaz. De nada vale camuflarlo en posts antiguos al final de muchos otros comentarios.
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