En honor a la verdad

El que de veras ama la vida, y quiere vivir días dichosos, refrene su lengua del mal, y sus labios no se desplieguen en favor de la falsedad. Huya del mal, y obre el bien; busque la paz, y sígala. Porque Dios tiene puestos los ojos sobre los justos, y está pronto a oír sus súplicas: pero mira con enojo a los que obran mal. ¿ y quién habrá que os pueda hacer daño, si os empleáis en hacer el bien? Pero si sucede que padecéis algo por amor a la justicia, sois bienaventurados. -Lección de la Epístola del Apóstol S. Pedro: (3, 8-15)-

¿A cuento de qué abro con tan larga cita bíblica? Pues, aparte de porque ha sido la lectura del V Domingo después de Pentecostés en la Forma Extraordinaria, también porque uno se equivoca, comete errores, “se le calienta la boca” y dice cosas sin precisar lo deseable, lo cual incurre en uno o varios comentaristas cabreados. Y, hombre, en un caso en particular, me siento en deuda.

Por eso en este día, no voy a ensañarme con las palabras de Monseñor Tissier de Mallerais, en una entrevista concedida a la flor y nata de las revistas “catoliprogres” francesas, “La vie", antaño conocida como “La Vie Catholique". No es Golias, pero vaya si lo intenta. Los intereses de entrevistar a un obispo de la FSSPX son, sospecho, más que editoriales, pura venta: no los conocen ni en su casa a la hora de comer, y entrevistar al prelado les ha dado una fama efímera…

Lo dicho: No pienso comentar sus palabras. Se comentan solas.

Lo que sí tengo que hacer es entonar un mea culpa, porque ni todo es negro en la FSSPX, ni todo es de color rosa. Y lo del “vil metal” fue un abuso verbal por mi parte. De esos, en España no he conocido a ninguno. En Argentina… ¡Ay de los D.! ¡Ay de los A.! Ya os pedirán cuentas. Yo no me meto. En lo que, en cambio, hay que meterse y mucho es entre los cripto-sedevacantistas que tanto tiempo se han refugiado en el seno de la Hermandad, y que ahora se ven de patitas en la calle. Me refiero a los “muchachos” -aunque ya están un poco mayores para eso- de Radio Cristiandad, a los que el Superior en Argentina les ha dicho, sin muchos rodeos, que no vuelvan a pasarse por una de sus Misas.

Divisiones y quebrados
Dos “trincheras” según RC: los ‘recalcitrantes’, que son ellos, y los ‘acuerdistas’ que siguen a los superiores. Y entre medias, los más. Los mediopensionistas. Y encima, me ponen a D. Marcelo González, editor de Panorama Católico Digital en los ‘acuerdistas’. Ríanse ustedes de la guerra editorial de El Mundo contra El País. ¡Esto sí que es marejada!

Pero esa ciber-guerra lo único que demuestra es que hay diferencias de opinión en el seno de la FSSPX por estar tan cerca (o no) de obtener un estatuto jurídico de acuerdo a Derecho Canónico. Estar, en suma, “dentro” de la Iglesia como organización, con levantamiento de las suspensiones para sus cientos y cientos de sacerdotes.

El camino que emprende Monseñor Fellay es, sin duda, el correcto. Todo aquello que lleve a la Comunión con la Sede Apostólica, y aquí espero que coincidamos todos, es sin duda el camino a Cristo. Fuera de la Iglesia la FSSPX ha tenido escisiones hacia Roma (FSSP, IBP, Hijos del Santísimo Redentor, y un largo etc.) y hacia el sedevacantismo (Sociedad de San Pio V… porque el X era un masón infiltrado, supongo, ¿no?). En el seno de la Iglesia unos pueden ser Carmelitas Calzados y otros Descalzos. Unos Benedictinos del Císter y otros de Cluny, pero todos responden a la Comunión Apostólica (al menos en la teoría, oiga).

Fellay y el Papa, por lo que hemos podido leer en este mes y medio, están en sintonía; buscan la comunión. Y eso pese al intento de polemizar con las ordenaciones en Alemania, por parte del “frente Espirituvaticanista", que son los dinosaurios de siempre.

Mientras tanto, unos se quejan de las tenistas y otros conceden entrevistas a La Vie ” non-plus catholique” (ya no católica)… Pues no me lo explico. Sencillamente.

— Y Además —
Video de la Misa Pontifical del Cardenal Cañizares en Roma.
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Un favor al Father Z.