Obama, ZP y la oración presidencial
No hay nada en este mundo, creo yo, que ser ex ministro de ZP. Alguno se acordará de Jordi Sevilla, que le explicó en “dos tardes” economía al actual inquilino de la Moncloa, que ha salido nuevamente a flote en su blog (al que ahora, como otros, dedica más tiempo), diciendo que es un error que Zapatero vaya a la oración con Obama. Argumenta el ex-ministro que eso no es la Alianza de Civilizaciones, y que ZP lo sabe… Craso error, Jordi, craso error.
Primero de todo, está claro que el único poder real que los socialistas pueden tener sobre la población es el aparato propagandístico-mediático, que controlan completamente en Televisión, y del que poseen abrumadora mayoría en resto de medios. La Alianza de Civilizaciones no es otra cosa que un bonito cintillo en El País y Público. Es decir, es un paripé en el que Zapatero suelta la cursilada de turno (lo de “la tierra es del viento” debería ser el epitafio. No se le va a ocurrir otra más cursi), se quedan tan contentos, y los medios afines ya tienen para dar un telediario, una tertulia, y un especial de la semana, juntando varios de estos acontecimientos.
El laicismo militante que profesa con mucho talante el presidente del Gobierno no es incompatible con estas cosas, ya se haga oración, o se desempolve el Culto a Baco. Si París “bien vale una misa", sacarse otra foto con Obama es algo por lo que mata Zapatero, y le da igual el fondo, porque eso es accidental. Lo importante es la foto, Jordi, no te equivoques. Además, considerando las enseñanzas que el inefable Reverendo Wright ha ido plantando en el cerebro del presidente Obama, mucho me temo que van a coincidir en que la oración se hace al Gran Arquitecto masónico. Cosas de una nación fundada con principios cristianos, pero a la que el barniz de lo políticamente correcto ha anestesiado, al menos en términos oficiales. Esto NO es laicidad positiva, desde luego.
Ahora, ahí donde los ven, EEUU sigue teniendo una vitalidad importante, incluso en política. Buena parte de ello es el no haber seguido a las democracias europeas en la imposición de una disciplina de partido. Así, hay Republicanos bien, Republicanos más malos y otros que son directamente para darles de comer aparte. Demócratas bien (los menos, me temo), demócratas ‘maricomplejines’ y la izquierda radical capitaneada por Barack y Missis Clinton Rodham.
Lo que no me explico es que la Iglesia en EEUU largo tiempo ha preferido a los Demócratas, al identificarse más los irlandeses e italianos (los católicos primigenios en esa nación), frente a los Republicanos (con un corte más, por así decirlo, protestante sincrético). Hoy las líneas se han desdibujado bastante, y por primera vez habíamos asistido a un desencuentro entre los obispos católicos norteamericanos y la Casa Blanca con motivo del plan sanitario en el que se iba a incluir aborto gratis para todos. Desencuentros que no suelen ocurrir con frecuencia, porque a pesar de ser técnicamente una minoría, los católicos hablaban con una sola voz (hasta que Ted Kennedy la lió), y muchas confesiones protestantes coincidían en los planteamientos morales de la Iglesia.
Los Republicanos, por su parte, buscan una nueva identidad para su partido, tras ver que el ‘abuelete simpático veterano’ no ha dado resultado. No sería estúpido intentar ganarse a los católicos, presentando entendimientos con los obispos y promoviendo iniciativas catholic-friendly con la que la población se pueda sentir identificada. Sería, desde luego, pescar en un caladero que no puede más que traer beneficios al partido de grandes presidentes americanos como Eisenhower o Reagan.
7 comentarios
Por último, habla usted de respeto a todas las confesiones. Bien, pues si hubiese un respeto auténtico, también respetarían a la católica, pero no es el caso. Se dedican a favorecer intereses "culturales" musulmanes creyendo que eso despegará aún más a los españoles de la Iglesia... Y me parece que están haciendo justo lo contrario.
Cariñosos Saludos Miguel.
Cariñosos Saludos ANA.
Legisla en contra cuando impone una ley de Memoria Histórica en la que la Iglesia queda poco menos que como cómplice del franquismo a todos los niveles
Legisla en contra cuando impone una ley del aborto, supuestamente destinada a acabar con los excesos de la normativa anterior y termina dejando poco menos que libertinaje abortista
Y fuera del parlamento, concediendo subvenciones a todo colectivo que por alguna u otra razón milite contra la Iglesia.
Por último, Zapatero se define como "laico". Solo correligionarios suyos, valga la paradoja, como Pepe Blanco o Pepe Bono dicen que son "católicos".
Como esto, se puede escribir un libro. Saludos.
No conozco ningún grupo que vaya contra la iglesia católica, tan solo se de grupos con ideologias diferentes o religiones diferentes a la iglesia católica pero en ningún caso, una militancia activa contra la iglesia católica.
El que una persona revele sus creencias personales ante una audiencia pública me parece de una valentía maravillosa.
Cariñosos Saludos Miguel.
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