Revolución del cardenal de Viena: parroquias guiadas por laicos
El Papa Benedicto XVI ha dirigido unas palabras a varios obispos de Francia a los que les ha señalado la diferencia del sacerdocio común de los fieles y el sacerdocio ministerial como sacramento recibido por los sacerdotes.
La escasez de sacerdotes no puede ser alegada como excusa para que los obispos no cumplan con esa tarea. Sobre todo en una tierra como la francesa atravesada enteramente por un proceso imparable de secularización.
En Viena, entretanto, el cardenal Schönborn, persona discutible con salidas extrañas señaladas por los medios de comunicación social, acaba de idear un plan para diez años, en el cual se recogen las líneas maestras de ceder la responsabilidad de las comunidades parroquiales a los laicos, apoyado teológicamente en el sacerdocio común establecido por el Concilio Vaticano II, aunque con la responsabilidad última en los sacerdotes.
La crisis vocacional, el envejecimiento del clero y todo el proceso de secularización han llevado al cardenal de Viena a esta decisión.