La Iglesia no ha comunicado bien
El gran paso dado por el Papa Benedicto XVI sobre la anulación de la
excomunión de los obispos miembros de la institución fundada por
monseñor Marcel Lefevre ha tenido una serie de circunstancias que han
tratado de emborronar la acción pastoral pontificia. La misión del
buen pastor siempre es salir en busca de la ovejas perdidas. Durante el
siglo pasado el único desgarrón sufrido por la Iglesia fue el cisma
creado por Lefevre y sus seguidores, a partir del año 1988. Ahora,
Benedicto XVI ha deseado abrir el redil para que estas ovejas perdidas
pudieran entrar en el rebaño eclesial.
Sin embargo, la decisión del Papa ha sido interpretada de varias
formas. La extrema izquierda, sale por los cerros de Úbeda indicando que el Papa va a producir un cisma. Un amigo personal del Papa, pega un trompetazo contra la vuelta de los seguidores de Lefevre. Un teologo holandes se va de la Iglesia por no aceptar esta decisión de Roma. Diversos sectores de alemanes tambien montan un gran cirio.
Dentro, incluso, del grupo de seguidores de monseñor Lefevre, existe
un obispo que es tan ciego que niega la existencia del holocausto judio
producido por Hitler durante la II Guerra Mundial. Este asunto hace
saltar por los aires a los altos rabinatos judios contra la decisión de
Benedicto XVI, quien tiene que afirmar publicamente en una audiencia
que negar este acontecimiento es una condición imprescindible para que
el decreto de levantamiento de la excomunión tenga validez canónica.
Los medios de comunicación lanzan sus huestes guerreras contra Roma,
acusando al Papa de posible cisma, de no saber nada de nada, de tener
un circulo de asesores que lo aconsejan malamente. Total, un verdadero
espectaculo que lleva en el candelero informativo varios dias.
Hoy es el mimo Padre Lombardi, director de la sala de prensa del
Vaticano, quien afirma que los canales de comunicación de la decisión
papal probablemente no se han utilizado bien, afirmando que tal vez, de
hecho, es mejor no hablar, pues una comunicacion muy abierta sobre todo
en relacion a un proceso de negociación así de complejo puede a veces
bloquearlo o desacreditarlo. Al ser preguntado por las lecciones
aprendidas tras el levantamiento de la excomunion a los cuatro obispos,
el padre Lombardi precisa que si las explicaciones de la nota de la
Secretaria de Estado del 4 de febrero hubieran sido conocidas desde la
publicacion del decreto nos habriamos ahorrado muchos dias de pasión,
sobre todo cuando se trata de temas candentes, es preferible preparar
bien las explicaciones.
A todo esto, mi opinión personal es que una vez más la parábola del
hijo prodigo se produce. El Papa acude a abrazar a las ovejas perdidas,
las encuentra, las perdona, las invita a la casa, y el hermano mayor
que era excelente hijo que no habia roto un plato se le suben los celos
a la cabeza montando una protesta sin ningun sentido, buscando su
justificación en su “fidelidad al padre durante toda su vida". Sin
embargo, el padre seguirá perdonando y alcanzando la unidad del rebaño
antes de que el paso del tiempo endurezca más las posturas de las dos
partes.
¿Cual es la opinión de los lectores?, ¿existen otros intereses
ocultos detrás de la campaña emprendida contra el Papa y su decisión?.
Puede escribir lo que cada uno desee con entera libertad.
Tomás de la Torre Lendínez