La vicepresidenta nos llama retrógados por defender la vida
De la Vega llama “retrógrados” a quienes se oponen a ampliar el aborto.
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha señalado en alusión a los que se oponen a la reforma de la ley del aborto que “siempre están al acecho” los “sectores más retrógados” que “creen tener la patente de la moral social”.
(Efe) “ De la Vega ha incluido estas declaraciones en su discurso de apertura del Foro Internacional sobre Salud Sexual y Reproductiva, que reúne hasta el miércoles a más de un centenar de representantes africanas y españolas. De la Vega ha señalado que 46 millones de mujeres de todo el mundo recurren al aborto, una realidad que “afecta a todos” y ante la que se puede “hacer algo, o ser hipócritas y mirar para otro lado".
En este contexto, ha asegurado que la reforma de la ley del aborto en España ha conducido a “discusiones que aparentemente estaban ya superadas” y ha agregado que “siempre estarán ahí los sectores” más “retrógrados” y “reaccionarios", que presentan como una imposición del Estado lo que es una “apertura de una vía digna para quien decide transitar por ella".
De la Vega ha subrayado que la igualdad entre hombres y mujeres será uno de los ejes de la presidencia española de la UE, el primer semestre de 2010, año en el que el encuentro de mujeres africanas y españolas tendrá lugar en Valencia e irá presidido por una reunión de ministras de la Mujer de la UE, ha anunciado.
La vicepresidenta ha recordado que en África ha habido en los últimos cincuenta años 186 golpes de Estado y veintisiete guerras, y que entre el 60 y el 80 por ciento de los alimentos los producen las mujeres.
También ha recalcado que los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres se abordan “meramente en función de su papel como madres” y ha abogado por que la capacidad femenina de procrear sea “el primer factor de igualdad". Por ello, ha defendido las políticas públicas de salud para las mujeres, de salud maternoinfantil, de planificación familiar y de prevención de las enfermedades de trasmisión sexual.”
Que la vicepresidenta no es muy lista, no hay que jurarlo. Pero no está de más señalar la debilidad de su “razonamiento". La moral no puede inventarse, porque la moral se deriva de la naturaleza humana. Negar la primera es negar la segunda. Y si se niega que hay una cosa llamada “naturaleza humana” todo está permitido, y de hecho el siglo XX es el siglo de las matanzas socialistas, amparadas precisamente en la negación de una naturaleza humana. Tanto es así que incluso la vicepresidenta no puede ofrecer moral alternativa alguna, sino simplemente la demolición de la moral que los que no estamos ciegos de ideología y odio como ella reconocemos en la naturaleza humana y admitimos. La moral que yo reconozco no es invento mío. Ella, si tuviese dos dedos de frente, podría adherirse también. En lugar de eso, ofrece su inmoralidad, o peor, su amoralidad. Por otra parte típica socialista.
La moral no la puede imponer nunca un Gobierno. Eso lo hizo Hitler y el régimen soviético con resultados que no deben ser olvidados nunca. Los políticos pasan, para eso está la democracia, para echarlos, pero la civilización cuesta mucho tiempo y esfuerzo mantenerla. Y estos progres parecen olvidar que nuestra actual civilización, que ahora parecen detestar porque les recuerda que hay principios morales mucho más valiosos que su mentecata ingeniería social, tiene sus sustento en los principios morales forjados por la cultura griega y la cristiana, de la cual el socialismo no ha resultado ser la mejor secuela sino la que más muertes y sufrimiento ha causado en el siglo XX, tanto en su versión nacionalsocialista como en su versión soviética.
Tomás de la Torre Lendínez