13.10.09

Australia no desea ser "Euroarabia"

Anoche en Libertad Digital TV, en el programa de César Vidal, se proyectó un documental de siete minutos de duración, en el cual se hacía unas aproximaciones del tiempo en que el aumento de la población árabe, ante la bajísima natalidad europea y la practica generalización de los abortos, supondría la desaparición de la cultura cristiana en aras de la creación de estados árabes en toda Europa, dando como resultado otra nueva civilización: la “euroarabia".

Hoy recibo un correo electrónico. Me lo envía una madre cristiana y abuela de sus nietos, es el siguiente y está firmado por el primer ministro de Australia,Kevin Rudd:

“A los musulmanes que quieren vivir bajo la ley Islámica Sharia se les dijo el Miércoles que se vayan de Australia, cuyo gobierno ha emprendido una campaña contra los radicales en un esfuerzo para evitar potenciales ataques terroristas.

También Rudd despertó la furia de algunos musulmanes Australianos cuando declaró que él ha dado todo su apoyo a las agencias de contrainteligencia australianas para que espíen las mezquitas que hay en la nación.

Citamos: “SON LOS INMIGRANTES, NO LOS AUSTRALIANOS, LOS QUE DEBEN ADAPTARSE. O lo toman o lo dejan. Estoy harto de que esta nación tenga que preocuparse si estamos ofendiendo a otras culturas o a otros individuos. Desde los ataques terroristas en Bali, estamos experimentando un incremento del patriotismo en la mayoria de los Australianos.”

“Nuestra cultura se ha ido desarrollando durante dos siglos de luchas, tribulaciones y victorias por parte de millones de hombres y mujeres que buscaban libertad”

“Hablamos principalmente INGLÉS, no, Libanés, Árabe, Chino, Español Japonés, Ruso o cualquier otro idioma. De modo que si Usted quiere formar parte de nuestra sociedad, aprenda nuestro idioma.”

“La mayoría de los Australianos creen en Dios. Esto no es una posición Cristiana, política o de la extrema derecha. Esto en un hecho, porque hombres y mujeres cristianos, de principios cristianos, fundaron esta nación. Esto es históricamente comprobable. Y es ciertamente apropiado que esto aparezca en las paredes de nuestras escuelas. Si Dios le ofende a Usted, sugiero que considere vivir en otra parte del mundo, porque Dios es parte de nuestra cultura.”

“Aceptamos sus creencias y sin preguntar por qué. Todo lo que pedimos es que Usted acepte las nuestras, y viva en armonía y disfrute en paz con nosotros.”

“Éste es NUESTRO PAÍS, NUESTRA PATRIA y ESTAS SON NUESTRAS COSTUMBRES Y ESTILO DE VIDA y PERMITIREMOS QUE DISFRUTEN DE LO NUESTRO pero cuando dejen de quejarse, de lloriquear y de protestar contra nuestra Bandera, Nuestra lengua, nuestro compromiso nacionalista, Nuestras Creencias Cristianas o Nuestro modo de Vida, le animamos a que aproveche otra de nuestras grandes libertades Australianas, “EL DERECHO DE IRSE.”

“Si Usted no está contento aquí, entonces VÁYASE. Nosotros no le obligamos a venir aquí. Usted pidió emigrar aquí. Así que ya es hora de que acepten el país que les acogió.”

Tras la lectura, invitamos a dejar un comentario. Muchas gracias.

Tomás de la Torre Lendínez

12.10.09

El día en que militaré en la izquierda

La propia historia personal nos demuestra que la Iglesia en España sirvió para poner en circulación democrática a partidos políticos y sindicatos de clase. Varios obispos, bastantes sacerdotes y numerosas casas de religiosos sirvieron de nido para engendrar a los partidos, esencialmente de izquierdas. La Transición era el momento de salir a la luz pasado el largo tunel del gobierno del general Francisco Franco.

Con el paso del tiempo y con la ofensiva del laicismo militante de la izquierda contra la Iglesia Católica, ésta misma izquierda se ha dado cuenta que buena parte de su electorado es cristiano y le cuesta trabajo tragarse ruedas de molino como la ley del aborto que está en el telar del parlamento.

Durante el pasado fin de semana se han reunido en Córdoba el Congreso Internacional de socialistas religiosos, con la presencia de doscientas personas de 18 países. Ha habido diversas intervenciones de socialistas que son cristianos. Alguno de ellos les han dado unos cuantos puyazos a los obispos de España por defender la doctrina de la Iglesia sobre la vida humana desde la cuna a la tumba. La reunión ha sido preparada justamente una semana antes de la masiva manifestación a favor de la vida a celebrar en Madrid el sábado próximo. Algo que la izquierda siempre sabe hacer bien: contraprogramar.

Las conclusiones del congreso cordobés son un potage de ideas más propio de un programa electoral, hecho en dos tardes, que una seria reflexión de la relación entre cristianismo y socialismo.

Aquí están extraídas de Libertad Digital:

“Apuntan que la situación actual se debe a “una crisis de valores", ya que predomina el enriquecimiento rápido cuando “se necesita la espiritualidad para salir de la crisis global, la espiritualidad laica y religiosa".

Asimismo, el congreso piden políticas públicas de justicia global relacionadas con la condonación y renegociación externa, las nuevas reglas de comercio internacional, la restauración de la deuda ecológica, la redistribución internacional de la riqueza, el desarme para el desarrollo y la educación para la diversidad y la convivencia.

Se hizo un llamamiento a favor de que el mundo occidental, la Europa de la riqueza y el bienestar, incluida España, no cierre la puerta a los hombres y mujeres que salen de sus países para dejar atrás la pobreza y la miseria en busca de condiciones de mejores vida. De manera que se apueste por políticas de integración de los inmigrantes y a favor del reagrupamiento familiar y del arraigo.

Apuestan por la centralidad del trabajo en la sociedad, “por el valor del trabajo y por los intereses de los trabajadores, frente al patrono-capital, frente a la primacía del accionista y de los gestores en la economía neoliberal".

El congreso reflexionó sobre la necesidad de apostar por una economía sostenible, que defienda el medio ambiente, frente a la explotación desenfrenada de la naturaleza y en beneficio también de las generaciones futuras.

Por último, los reunidos en el congreso indicaron que la contribución fiscal es “un medio necesario para la distribución de la riqueza", ya que “el elogio de la reducción de impuestos es el arrodillamiento ante la cultura capitalista".”

Mi conclusión personal es la siguiente: Cuando la izquierda consiga la cuadratura del círculo que me llamen. Ese día militaré en la izquierda.

Tomás de la Torre Lendínez

12 de octubre: a los lectores

Leo en la página de la diócesis granadina:

“El día 12 de octubre de 1492 se abrió un horizonte inesperado a la misión evangelizadora de la Iglesia. Para Jesús, Señor de la historia, este hecho entraba, sin duda, en sus planes de salvación. Él había dicho: Id y predicar el Evangelio a todas las gentes.

Ahora se abría el camino del Evangelio a muchas de esas gentes, amadas por Dios y llamadas al conocimiento de Cristo. Granada debe celebrar este día tan significativo en la historia del mundo –historia de salvación- de manera especial, puesto que de aquí salio la iniciativa descubridora y aquí reposan los restos mortales de la Reina Isabel, cuya mente y corazón la impulsaron.

Los fieles granadinos, generación tras generación, han dado gracias a Dios por este acontecimiento. Un año más deben sentirse convocados a la Eucaristía y Tedeum, que tendrá lugar en la Capilla Real el próximo lunes día 12 de octubre, a las 11 horas.”

En el contador de este blog a las 11,30 hora española del 12 de octubre, encuentro que los países donde se lee El Olivo, son los siguientes:

“Spain
Mexico
Peru
Argentina
Colombia
United States
Chile
Germany
Venezuela
Bolivia
Ecuador
Uruguay
Guatemala
Puerto Rico
Costa Rica
Nicaragua
Italy
Dominican Republic
Switzerland
China
Brazil
Japan
El Salvador
Netherlands
Canada”

Entre ellos existen muchos hermanos hispanoamericanos, que escriben sus comentarios, o se dirigen a mí en la cuenta de correo personal escrita en el blog.

A ellos y a todos los lectores les deseo que sepan que los motivos pastorales que me impulsan a servir mis modestos artículos son para seguir sumando más ovejas al rebaño del Señor, único y eterno pastor, de la Iglesia Católica.

Muchas gracias a todos. Dios se lo pague.

Tomás de la Torre Lendínez

10.10.09

Tiempo de Santos

Mañana, en Roma, está celebrándose la elevación a los
altares de cinco nuevos santos de la Iglesia Católica: Juana Jugan, Damian de Veuster, Francisco Coll, y Rafael Arnaiz.

La definición clásica de canonización es aquella que nos dice que se
trata de un acto solemne mediante el cual se inscribe en el catálogo de
los santos a un siervo de Dios. El Papa Inocencio III, a comienzos del
siglo XIII, precisó que la decisión de canonizar a alguna persona se
basa en la comprobación de la práctica heroica de las virtudes
cristianas durante su vida y la obtención de milagros después de su
muerte.

Por lo tanto, es una determinación que necesita de rigurosas
verificaciones y que en ningún modo es un capricho del Papa. Los
procesos de beatificación y de canonización se rigen por unas normas
estrictas.

El Papa Benedicto XVI hará santo a uno muy especial:
a fray Rafael Arnaiz, quien soportó
con alegría maledicencias y una enfermedad muy dolorosa, que le abrió
las puertas del cielo cuando sólo tenía 27 años. En plenos años
convulsos para la vida de la Iglesia de España, como fue la década de
los treinta.

En aquellas fechas hubo muchos testigos de la fe en Cristo que
derramaron su sangre por defender la fe cristiana, que estaba siendo
perseguida por un afán de decretar la supresión de la Iglesia Católica
de los hombres y las tierras de España.

En el caso del hermano Rafael, no fue así. Aquellos revueltos años
trajeron, también, modelos de santidad escondidos, anónimos, valientes
y de extraordinarias repercusiones posteriores para la Iglesia del
Señor que peregrina en España.

Creo que estos años de persecución hacia todo lo religioso, en la
sociedad actual, está trayendo efectos de santidad, que aunque ahora no
conocemos, el futuro nos dará una larga serie de personas que durante
estos tiempos están siendo fieles a la llamada de Dios en la Iglesia de
nuestros días: existen padres ejemplares; se encuentran cristianos
valientes insertos en los grupos civiles que luchan por el derecho a la
vida desde la cuna a la tumba; conocemos a jóvenes valientes fieles a
su vocación laica, sacerdotal o religiosa que dejándolo todo se
entregan sin limites a la llamada de Cristo; y vemos a una multitud de
ancianos que viven solos en sus casas o en las residencias de la
tercera edad, que soportan sus limitaciones de salud de una forma
cristiana admirable.

Los santos existen siempre, pero en tiempo de persecución, de fríos
ataques a la fe, de sibilinos mensajes equívocos, de proclamación de
modelos de cartón piedra, de exaltación de valores de muerte sobre la
vida, es cuando el Señor encuentra a sus mejores servidores y
seguidores capaces de darlo todo por el evangelio de Cristo.

Tomás de la Torre Lendínez

9.10.09

Fuerte ración de esperanza

En estos tiempos de crisis, la mayor amenaza es la desesperanza; aquí los creyentes estamos llamados a ser testigos de la esperanza desde el compromiso en la existencia. La reflexión teológica sobre esta virtud hoy es más necesaria que nunca.

Existen dos modos de esperar, uno se refiere al futuro como realidad determinada de antemano a la vez que incierta, conduciendo al temor y a la inseguridad o a la indiferencia burguesa de lo seguro; otro mira el futuro en cuanto realidad abierta, desde una comprensión de la historia como espacio novedoso en el que se encuentran dos libertades, la humana y la divina.

El cristiano, que camina por la segunda versión de la espera, vive el futuro como esperanza, desde una serenidad y certeza que inquieta lo más profundo del ser humano para amar la historia y hacerla capaz de eternidad en el corazón de Dios, viviéndola como gracia a la luz de la promesa divina.

Nunca podrán quitarnos nuestra esperanza porque “nadie ni nada podrá separarnos del amor de Dios manifestado en Cristo-Jesús". La esperanza cristiana es la virtud que nos dinamiza, nos libera del miedo a la muerte, y nos hace adentrarnos en el corazón de la historia sabiendo que el único discurso creíble sobre la resurrección y la vida eterna es aquel que se articula en el lenguaje de las esperas humanas, como hizo Dios en Jesús de Nazaret, en el compromiso serio y real de la Iglesia, y en ella, de cada cristiano, a favor de los hombres en la búsqueda de la justicia, la libertad y la paz verdadera que anuncian y anticipan lo que creemos y esperamos, a veces sellado por el martirio.

A los creyentes nos queda la misión y el gozo de dar razón de nuestra esperanza, en la transparencia de una vida que camina ya desde lo que espera como definitivo: un reino de libertad, de justicia y de paz en el amor absoluto.

Tomás de la Torre Lendínez