Lo que queda de España necesita un liderazgo moral
Lo que queda de España es ni los rabos. Por Cataluña una heroína se sube a las barricadas verbales invocando un proceso constituyente de la futura republica catalana. Está vestida de monja, supongo que cambiará el hábito por el mono de las milicianas republicanas del Estat Catalá.
Por Andalucía, con un cura como defensor del pueblo, se suben al bolchevismo más rancio, al populismo más bananero y al pisoteo del derecho de la propiedad privada individual y les bendice el consejo general del poder judicial y el presidente del tribunal superior de justicia en la tierra andaluza. Los socialistas y comunistas, en una reedición de frentepopulismo, van a expropiar casas si el dueño no la tiene habitada, sin pagar ni luz eléctrica y agua durante seis meses. Los beneficiados serán doscientos desahuciados.
El gobierno central madrileño, con su presidente Rajoy a la cabeza, ve cómo arde Roma y está tocando la lira como aquel Nerón nefasto para la historia de los cristianos a quienes inculpó del desastre incendiario.
Lo que queda de España necesita una inyección de ilusión y moralidad cívica.
Ayer se reúne el Comité Ejecutivo de la Conferencia Episcopal Española y de las sesudas cabezas episcopales sale, por lo menos que sepamos, una carta de adhesión al Papa Francisco, quien se ha quedado en ser el Obispo de Roma volviendo medio locos a los estudiosos de la nueva eclesiología que se avecina.
Desconocemos si los obispos españoles compartieron la crisis de valores morales y cívicos que vivimos estos meses en lo que queda de España. No sabemos si pensaron en escribir algún documento alentando a una sociedad católica desnortada, desanimada y buscadora de alguna puerta de esperanza y confianza.
Volvieron a sus diócesis a sumirse en el silencio más sepulcral y propio del valle de los callados post mortem.
Entretanto, los decibelios de los ruidos suben dentro de los parlamentos, en los acosos a los políticos en sus casas todos miembros del mismo partido, y la prensa sigue destapando casos de corrupción que afectan desde la cabeza a los pies de una sociedad necesitada de un liderazgo moral cuanto antes.
¿Podemos aguantar así mucho tiempo en lo que queda de España?. ¿Debemos exigir que se haga algo por parte de quien pueda presentarse como modelo incontaminado de toda la podredumbre que está escrita en los medios informativos? . ¿No vemos que el odio social está subiendo de grados por horas?. ¿Dónde se puede ver esto sin salir de casa?. Muy sencillo:
Abran el televisor, pasen de un canal a otro, observen las escenas, las tertulias, las intervenciones, las invitaciones…..siempre chorreando una acritud social y mostrando unos odios larvados impropios de una sociedad adulta y educada. Son propios de una sociedad enferma, sin amo y sin perro que ladre. Esto es lo que queda de España.
Gracias a Dios, los católicos seguimos orando y rezando al Altísimo por la inmensa cantidad de gente buena que aún tiene la gran nación española, esa que trabaja si puede, esa que educa y llora, esa que guarda y no gasta, esa que en su conciencia espera contra toda esperanza, esa que acude a Misa cada domingo, esa que se merece un grito y una invitación a la confianza más que un silencio de un dormitorio de muertos.
Con razón estamos en Pascua de Resurrección, amigos lectores, levantemos los corazones al Señor vivo para siempre.
Tomás de la Torre Lendínez
14 comentarios
¿Cómo se come eso?. Fácilmente. Siguiendo sencillamente su mensaje,apostando por la vida,trabajando honradamente,denunciando lo malo,luchando contra el mismo mal,a nuestro nivel.
Creo que la mejor forma de ser héroe es ser un ser humano.
Un abrazo,pater.
Firmo como propio su post de hoy.
Muchas gracias por ser vd. tan valiente.
Saludos
Un modelo de economía que ha conducido a desequilibrios que a su vez están favoreciendo las causas colectivistas, porque el individualismo económico hace que quien cae en una situación precaria se sienta desprotegido y solo. Esta necesidad la aprovechan quienes suelen usar argumentos emocionales, y muchas veces demagógica. ¿A quién no le motiva a la protesta una situación de injusticia?.
Pero como el individualismo ha promovido antes la autonomía moral salvo la que sale libremente del hombre, ¿con qué autoridad les dice a los colectivistas que no deben dejarse llevar por excesos saltándose las normas...?. Apenas la hay.
El único límite que proponen a los colectivistas son las normas y leyes vigentes, la constitución por ejemplo, pero se trata de un límite liviano, porque estas normas no se refieren tampoco a un orden moral superior, sólo a un acuerdo temporal entre hombres en teoría iguales que se ha alcanzado por mayoría. Y porque los colectivistas las consideran injustas y equivocadas en muchas cosas. Así los colectivistas no tienen ningún límite salvo la acción coercitiva de la ley, que intentan salvar cuando sienten que una parte de la población les apoya.
Debe es difícil convencer que se debe seguir una norma que se ha dicho antes que es la única que obliga, cuando hay quien considera (equivocadamente ó no) que permite situaciones injustas. Creo que ahora en pequeño estamos viendo como en situaciones más graves se gestaron las revoluciones.
Ante esto no se pierde el tiempo regenerando a los que no quieren ,se empieza con familias jóvenes que quieran niños ,que amen el campo y la Ecología, que no estén contaminados por lo antigüo que elimino a los niños indefensos, crear programas bonitos para estos jóvenes, que se asocien desde la realidad de pequeños fieles que sisfruten del campo, de los monumentos con sus hijos que salgan al campo en familias y que se les dé aire fresco cultural, sino volverán a engrosar este mal social, que morirá solo con la muerte de esta generación nefasta en la que estamos.
Eso si ,Padre siempre quedaron anawin fieles, que esperaban el Reino de Dios entre ellos ,María.
Ud y algunos más son los anawin de lo nuevo, olvidando lo viejo ,los no católicos es inútil, sólo cambiarán por un toque de Dios ,se ha hablado muchísimo y lo único que se ve es que fue en aumento el mal, así que olvidando esta historia que la gobiernan los poderes ocultos y pensemos en la limpieza y responsabilidad de la vida, en lo que hagamos y si es necesario que los religiosos entren en política creo que serán absorbidos por el sistema ,mejor crear asociaciones civiles bien fomentadas y cuando haya un buen movimiento presentarlo a elecciones, los cristianos moverán al mundo pero es necesario que tengan espacios de participación en la sociedad civil,la Iglesia y la tierra es nuestra Madre,volvamos a la ley natural y organicemos la vida desde algo nuevo.
El papa francisco como Obispo de Roma deja las bases sentadas para la UNIÓN de las Iglesias, el Ecumenismo y además nuestros 7 Concilios primeros están en Constantinopla y necesitamos unirnos y recuperar las raices cristianas de todos.
Europa destruyó sus raices y está bajo unos poderes que no sabemnos quién los maneja, pero la cristiandad desapareció. Con lo nuevo restauraremos las cenizas de lo que quedó Y todo volverá a florecer ya que SOMOS LA VIDA.
Me parece a mí que esto se solucionaba con oración y penitencia, lo demás vendrá despues.
Un saludo
No se trata de añorar se trata de una relación causa-efecto.
Cuando por ejemplo el concepto de familia, del derecho a la vida, la enseñanza.... se relativizan, ¿qué base moral le queda a la sociedad?, sólo el texto de las leyes. Y si alguien las considera injustas como ahora, la fuerza coercitiva. Y si se consigue el suficiente apoyo numérico se puede ni eso.
Creo que tenemos una sociedad que se ha centrado en conseguir el progreso material y económico, dejando a un lado por ejemplo el sentido de trascendencia (ya abren los comercios todos los días de fiestas religiosas incluida la Semana Santa) y cuando ha fallado lo material a la gente no le queda un objetivo.
Bueno, con su presidente Rajoy y antes su presidente Zapatero y antes Aznar y antes González y antes Calvo Sotelo y Suárez. Lamentablemente, avergonzarse de ser español es condición indispensable para ser algo en la política española
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