La nota de una Superiora General sobre una súbdita sancionada por Roma
Cuando veo y hablo con los padres de un alumno deduzco cómo será el hijo. Cuando me presentan a un cura observo cómo es el obispo a cuya diócesis pertenece. Cuando acudo a una comunidad contemplativa, la madre abadesa es el reflejo de sus hijas.
Cuando he leído el comunicado de las superiora general de las Hermanas de la Misericordia de las Américas me he quedado mudo, pensativo y he terminado rezando por esta congregación, en la cual una de las religiosas ha sido sancionada por la Congregación de la Doctrina de la Fe.
Esta religiosa, con más de cincuenta años de profesora en una universidad americana, ha publicado un libro con unos pensamientos totalmente en contra de la moral católica enseñada y mantenida por la Iglesia desde siempre.
La nota firmada por la superiora general no tiene desperdicio. Encuentro los siguientes puntos:
1.- La monja que ha escrito semejante libro sobre un libertinaje sexual exacerbado, podrá ser muy respetable como docente, pero ha perdido el juicio creyendo que en la Iglesia Católica la moral sexual está para ser pisada como una vereda real.
2.- La superiora general de la congregación no puede “justificar” a su díscola hija argumentando que es muy querida y respetada e invitada por un gran número de centros de estudios para impartir conferencias. El aplaudímetro de los espectadores de las conferencias no es criterio de fe dentro de la Iglesia Católica.
3.- La monja sancionada no puede justificar su réproba manera de pensar y escribir, ayudada por su superiora general, afirmando que tiene “en cuenta la audiencia ecuménica con la que a menudo dialoga”. Nunca el ecumenismo puede “rebajar” las exigencias morales de la Iglesia Católica presente en la religiosa reprobada.
Todo lo contrario, ante una selva de opciones morales sobre la sexualidad, la Iglesia debe mantener y presentar sus actitudes morales plenamente defendidas con claridad y caridad para quienes oyen o leen un libro sobre moral católica.
4.- A lo largo del escrito de la superiora general no aparece nunca las palabras: Dios, Cristo, Iglesia Católica, Magisterio de la Iglesia…….Habla nada más de su hija desobediente como si la congregación fuera un club de fans de las criadoras de la berenjena yanqui que está muy buena en la mala cocina norteamericana.
Por eso, la fotografía que está más arriba presenta a un grupo de aburridas “solteronas” vestidas sin ningún distintivo religioso. Esto no atrae a nuevas vocaciones y sospecho que cuando éstas vayan desfilando hacia el cementerio la congregación se pierda para siempre por la tragona más cercana de cualquier calle con número, como ocurre en las ciudades de América del Norte.
Si la superiora general tiene el nivel que presenta en su papelucho, la congregación está para ser dinamitada por las personas que la componen. Esto es lo han hecho ya.
Para saber más hagan clic aquí.
Tomás de la Torre Lendínez
12 comentarios
Hitler ganó las elecciones dos veces seguidas. Supongo que sería un gran tipo ¿verdad?
Si la superiora general, en lugar de ejercer su caridad y responsabilidad verdadera, se reboza en "argumentos" sentimentalistas, ¡qué se puede hacer!
Vaya espectáculo triste, penoso y ridículo.
Peor no lo pueden hacer. O si. Peor todavía es que esta hermanita se haya pasado años difundiendo esta doctrina aberante.
1.- Promover el desarrollo de la fe católica.
2.- Lograr una renovación moral de la vida cristiana de los fieles.
3.- Adaptar la disciplina eclesiástica a las necesidades y métodos de nuestro tiempo.
4.- Lograr la mejor interrelación con las demás religiones, principalmente las orientales.
Se pretendió que fuera una puesta al día de la Iglesia, renovando los elementos que más necesidad tuvieran de ello, revisando el fondo y la forma de todas sus actividades. También que fuera una apertura dialogante con el mundo moderno, actualizando la vida de la Iglesia sin definir ningún dogma, incluso con nuevo lenguaje conciliatorio frente a problemas actuales y antiguos.
También se preocupó de tratar la importancia de los medios de "Comunicación social", entonces no había tants avances.
(Este texto lo he orientado con la información de Wikipedia y de la Biblia que leo, publicada antes de que concluyera la CUARTA sesión.)
Juan XXIII fue el auténtico y después de él todos quedaremos colocados en el lugar que Dios nos tendrá reservado y lo hará en función de nuestro compromiso con su doctrina.
¿Se aplica el espíritu que lo inspiró y las directrices que nacieron de él?
Opino que, mientras no se unifique una línea única para que el clero proceda y para que así cesen las diversas interpretaciones, seguiremos dando palos de ciego en la calzada para caminar.
Las dos líneas que hay enfrentadas deben de leer la BIBLIA y dejarse de zarandajas, estas son las conclusiones a las que nos tenemos que ajustar y por su camino transitar.
¿Tiene justificación el tratar a esas señoras en clave despectiva por su atuendo externo?
Este podría ser uno de los puntos de unificación propuestos.
"I do not dispute the judgment that some of the positions contained within it are not in accord with current official Catholic teaching. In the end, I can only clarify that the book was not intended to be an expression of current official Catholic teaching, nor was it aimed specifically against this teaching. It is of a different genre altogether."
Traducción :
YO no disputo el juicio sobre algunas posicione que no estan deacuerdo con la enseñanzas oficiales Católicas. De todas maneras, lo que yo puedo aclarar es que el libro no intenta expresar las enseñanzas oficiales ACTUALES Catolicas, ni apunta especificamente encontra de tales enseñanzas.(el libro) Es de un género totalmente diferente.
Tomado de:
http://ncronline.org/news/vatican/statement-mercy-sister-margaret-farley
Osea que esas ensenañazas que ACTUALMENTE son parte del MAGISTERIO oficialmente en un futuro podrían 'cambiar.'
Lo que ocurre con estas monjas descarriadas es bochornoso.
Los comentarios están cerrados para esta publicación.
