Obama, el iluminado de Estados Unidos
Un locutor de radio rabiosamente denostado por muchos, afirmaba una mañana desde su micrófono lo siguiente: “El presidente Obama es el Zapatero americano, pero en mulato”. Era el día que Zapatero se marchó a orar con él hasta Estados Unidos. El locutor de radio es Federico Jiménez Losantos, quien parece tener razón en esta equiparación.
En el desayuno de oración, celebrado hace dos días, el presidente americano se le ocurre sentirse un intérprete de la Biblia, y apunta que “Jesucristo subiría los impuestos a los ricos”.
Todo esto sucede en la atmósfera de ataque contra la libertad religiosa, especialmente contra los católicos, esgrimida por el presidente americano, que ha puesto en pie de guerra a todos los obispos católicos de Estados Unidos, apoyados por el Papa, defendiendo la vida contra el aborto. Donde obliga a las instituciones católicas a pagar a sus empleados seguros médicos que incluyan en su cobertura la práctica de abortos.
Algo que no sucedía en la moderna nación americana, donde al decir de César Vidal nunca la religión es freno del avance cultural y social de aquella democracia ideal, algo que sí ocurre en la vieja y caduca España, solar de dominio católico y carca.
Los obispos americanos están escribiendo, justificados de sobra, unas pastorales realmente incendiarias ante la campaña presidencial, donde han llegado a enviar a los católicos a la mismísima representación de los excrementos humanos.
Si este Zapatero mulato, al decir de Federico, rompe esa idílica atmosfera de convivencia de todas las religiones en Estados Unidos, no será menos si llega a la Casa Blanca el aspirante republicano que practica la corriente de los mormones.
Otro candidato del partido republicano se declara ser religiosamente de un conservadurismo excesivo. Hasta en su apellido lo lleva: Santorum.
Los meses que vienen por delante se presentan interesantes para la Iglesia Católica en el país yanqui. Allí existen obispos conservadores creativos. Son la nueva generación de prelados, conservadores porque permanecen fieles a la doctrina de la Iglesia, pero al mismo tiempo creativos, es decir, capaces de introducir la doctrina misma en la modernidad sin traiciones, sin abandonos de ninguna clase.
Es el magisterio que el Papa Benedicto XVI, teólogo y pastor quiere que sus obispos pongan en práctica: nada de cerrazones bajo pretexto ante los retos de la modernidad, sino aperturas valerosas y fieles a la enseñanza bimilenaria de la Iglesia misma.
Ocurra lo que sea en la fecha otoñal de la elección presidencial, los observadores de la vida americana aconsejan bajar esa tensión contra la Religión Católica y los propios creyentes. Porque el discurso de Obama rozó el populismo al interpretar el mensaje de Jesús en clave socialista, como si éste fuera coincidente con su particular programa electoral, algo inaudito en Estados Unidos.
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Tomás de la Torre Lendínez
8 comentarios
La criminal amenaza a la libertad religiosa en Estados Unidos no es ninguna una broma, ni, cuando se afirma eso, se está exagerando en nada. No se trata ya de que Obama esté llevando a cabo una política de apoyo económico a prácticas que católicos -y no sólo católicos- consideran criminales, como es el aborto.
Se vive una situación muy tensa en Estados Unidos a partir de unas declaraciones del Presidente Obama, pue prácticamente a mandado a los católicos a la m.ierda. El Gobierno USA obligará a las instituciones religiosas la cobertura obligada de anticonceptivos, fármacos abortivos y esterilizaciones para sus trabajadores y/o miembros. De forma forzada y contra sus creencias religiosas. Una brutal y salvaje imposición.
La administración de Obama anunció la semana pasada que desde agosto de este año, en los Estados Unidos, todos los seguros médicos para los trabajadores de una institución religiosa o empresa deberán incluir de manera obligatoria forzada la cobertura de anticonceptivos, de esterilizaciones y fármacos plenamente abortivos como la píldora post-coital.
Es que ahora quiere obligar a que esas prácticas sean subvencionadas desde las propias instituciones religiosas católicas. Y ahí es donde se entra de lleno en el ataque a la libertad religiosa ya los valores humanos.
Lo cual, ha llevado a la importante comunidad católica a poner el grito en el cielo.
Los obispos norteamericanos con el cardenal Dolan a su cabeza están dispuestos a oponerse hasta el final. Va a ser una guerra muy santa y muy dura.
El obispo de Pittsburgh, Pensilvania, David Zubik, ha expresado su hartazgo ante lo que califica la mayor "intrusión gubernamental en la libertad, no sólo religiosa" de la historia. El Prelado asegura en la misiva que la obligación de incluir la anticoncepción en los planes de seguro en Estados Unidos es como "una bofetada en la cara" que dice "¡a la m.ierda los católicos ( literal )!" y a su preclara y santa libertad religiosa.
"Este es el ataque del gobierno, por decreto, contra los derechos de todos: no solo de los católicos, no solo a la gente de todas las religiones", señala Zubik en la edición del 27 de enero del Pittsburgh Catholic.
Esta orden le dice a los católicos "no solo que violen sus creencias, sino que paguen directamente por esa violación" así como que "subsidien la imposición de una cultura anticonceptiva y de aborto para toda persona en Estados Unidos", denuncia el obispo de Pittsburgh.
Por último, el Prelado instó a los católicos de Estados Unidos a escribirle al Presidente Obama, a la secretaria del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE UU, Kathleen Sebelius, y a todos los senadores en el Congreso, para que tengan "noticias nuestras y escucharnos YA".
Los católicos siempre respetuosos, educados y pacíficos y con la CRuz en la mano: " In hoc signo vinces ".
Saludos a todos.
Una cosa no excluye la otra. No hay más que ver a los amigos millonarios del PCE y el PSOE (Roures, Garzón, Cebrián, Polanco...)
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