Participo en “Lágrimas en la lluvia”
Ha pasado la lotería anual previa a la Navidad. Por esta vez ha ocurrido una lotería ministerial en el gobierno de España. Es el momento de felicitar a todos los lectores y amigos que ponen sus ojos en la pantalla del ordenador desde cualquier parte del mundo leyendo las reflexiones que cuelgo aquí. Deseo a todos una feliz y santa Navidad del Señor.
Como en las fechas navideñas se comparten las alegrías este año les anuncio lo siguiente: Participaré, Dios mediante, en la tertulia del programa Lágrimas en la lluvia, que dirige Juan Manuel de Prada y emite Intereconomía TV. Será el próximo día 25, domingo, fiesta de la Navidad del Señor. Estaré acompañado por tres personas muy amables y excelentes compañeros de un coloquio donde nadie discute con nadie, porque hablaremos de la Navidad, en su pasado y en su presente.
Aquí está la singularidad de Lágrimas en la lluvia. Su nivel es de altura intelectual y de intercambio de opiniones sobre el tema propuesto. Esta vez, al tratar el misterio navideño el calor del debate, se confunde con el calor que la mula y buey exhalan en el portal de Belén en el que nace el Hijo de Dios. Su fruto es un gran momento de expresión de experiencias personales dignas de verse en televisión.
En los 56 programas de Lágrimas en la lluvia, tanto su director como sus invitados, se ha promocionado como uno de los productos más apreciados de la televisión, que desea superar la medianía de sequedad y vacío material y moral que encuentra el espectador en la mayoría de los canales televisivos.
Con este número de emisiones Lágrimas en la lluvia ha conseguido entrar en los hogares españoles, en las tardes domingueras, para quedarse enseñando a los espectadores cómo con poco presupuesto, con un dignísimo equipo de profesionales, con una selecta elecciones de contertulios, y con el tesón de su director y subdirectora, que son marido y mujer felices en la vida real, se hace un gran programa educativo en grado sumo que pueden ver personas de 0 a 100 años, pues no atormenta a ningún espíritu, sino que lo enaltece con mucho valor y virtud.
Debo felicitar a todos los hombres y mujeres que hacen posible Lágrimas en la lluvia. Con ellos las tardes de los domingos son para ver una televisión llena de valores humanos, cristianos, espirituales y culturales, que no se encuentran en otras estaciones televisivas a la fecha presente.
Acabo invitando a todos los amigos lectores a ver el día 25, fiesta de la Navidad del Señor, a partir de las 4 de la tarde Lágrimas en la lluvia. La película que se exhibe se llama Qué bello es vivir, un clásico en los días navideños. Y en el cuarteto de dialogantes están personas de gran valía humana y cristiana. El que firma estas líneas solamente ocupo un lugar decorativo del espacio.
Feliz y santa Navidad a todos los amigos y lectores.
Tomás de la Torre Lendínez
13 comentarios
Bueno, yo pienso que tampoco es cuestión de hacer un panegírico. Las tertulias suelen ser interesantes pero no creo que sean para todos los públicos. Y algunas de las películas que emiten antes del programa no pasan los criterios morales que debería tener toda película que sea digna de verse, es decir, buena o al menos no mala. Léase por ejemplo las encíclicas Vigilanti Cura o Miranda Prorsus de Pío XI y Pío XII respectivamente. Me refiero obviamente a películas con contenidos inapropiados para todas clase de público: escenas eróticas, ideas anticristianas, blasfemias, violencia sin sentido, desnudos, etc. Algo muy común, por cierto, en muchos films.
«Culpable sería por tanto toda suerte de indulgencia para con cintas que, aunque ostenten méritos técnicos, ofenden, sin embargo el orden moral, o que respetando aparentemente las buenas costumbres, contienen elementos contrarios a la fe católica.» (Pío XII)
Feliz y santa Natividad
«Culpable sería por tanto toda suerte de indulgencia para con cintas que, aunque ostenten méritos técnicos, ofenden, sin embargo el orden moral, o que respetando aparentemente las buenas costumbres, contienen elementos contrarios a la fe católica.» (Pío XII)
Feliz y santa Natividad
22/12/11 8:02 PM
Respetable comentarista Felipe:
Por supuesto es un programa para adultos y gentes ilustradas, ya formadas y sin remilgos.
A mi me parece una verdadera FIESTA culta, altamente intelectual, con temas diversos siempre renovados, profundos y sorprendentes. Y siempre muy sinceros,descarnados y emotivos para pasar simplemente una tranquila tarde dominical.
Es un programa que se te sube al alma. Y de deja estupenda recordación.
Será un placer ver al Blogger Don Tomás, hablandonos de la Santa Navidad cristiana y todos avatares y complementos.
Lo esperamos con impaciencia.
¡ Feliz Navidad a todos ¡.
Por supuesto es un programa para adultos y gentes ilustradas, ya formadas y sin remilgos.
A mi me parece una verdadera FIESTA culta, altamente intelectual, con temas diversos siempre renovados, profundos y sorprendentes. Y siempre muy sinceros,descarnados y emotivos para pasar simplemente una tranquila tarde dominical.
Es un programa que se te sube al alma. Y de deja estupenda recordación.
Será un placer ver al Blogger Don Tomás, hablandonos de la Santa Navidad cristiana y todos avatares y complementos.
Lo esperamos con impaciencia.
¡ Feliz Navidad a todos ¡.
22/12/11 10:48 PM
Enhorabuena por poder participar en uno de los pocos programas de tv. que merecen la pena. Lo intentaré ver como siempre.
Todavía recuerdo con regocijo los fantásticos programas dedicados al Concilio Vaticano II (memorable como -casi- siempre, Ayuso) o a la ciencia (impresionante M. Carreira S.J.).
Es cierto que las películas son manifiestamente mejorables en algunos casos, pero no como se ha insinuado por el tema de la calificación moral -este programa afortunadamente sólo lo siguen gente seria y formada, que no creo que se ruboricen como ursulinas por ciertas escenas- sino porque se nota que tienen un presupuesto bastante reducido a la hora de elegir películas. Por la calidad, en definitiva, no por la moralidad.
Todavía recuerdo con regocijo los fantásticos programas dedicados al Concilio Vaticano II (memorable como -casi- siempre, Ayuso) o a la ciencia (impresionante M. Carreira S.J.).
Es cierto que las películas son manifiestamente mejorables en algunos casos, pero no como se ha insinuado por el tema de la calificación moral -este programa afortunadamente sólo lo siguen gente seria y formada, que no creo que se ruboricen como ursulinas por ciertas escenas- sino porque se nota que tienen un presupuesto bastante reducido a la hora de elegir películas. Por la calidad, en definitiva, no por la moralidad.
23/12/11 10:00 AM
Bueno, si el cansancio no me abate antes, estaré antento.
Feliz Navidad, P. Tomás.
Feliz Navidad, P. Tomás.
23/12/11 12:31 PM
Cuidado, Don Tomás. Es peligroso codearse con filolefebvristas. Y ya le hemos visto en ese programa sentado junto a alguno peor que Ayuso. Se cierran muchos blogs por aquí y por allá.
Feliz Navidad
Feliz Navidad
23/12/11 3:30 PM
Lagrimas en la lluvia. Lo mejor de Intereconomia,. Si no puedo verlo en directo, lo grabo. despues Esparza.Los clones, y nada más.Bueno ayer me entere que Pio Moa lo han fichado.Tampoco me lo perdere. Esta es la TV que veo.Feliz Navidad. Que el niño Dios nazca en nuestros corazones.
Cuidado con los polvorones qué empachan.
Cuidado con los polvorones qué empachan.
23/12/11 6:11 PM
Estoy de acuerdo con Vd. estimado Asclepio. Lo único que pido y así se lo he hecho saber a la dirección del programa vía email es que opten por película SANAS, verdaderamente edificantes y que enaltezcan valores humanos y religiosos. Por lo menos que no sean malas éticamente. Es evidente que han emitido películas que no son adecuadas para nadie por su contenidos deshonestos. Basta que un film contenga la proferencia de una blasfemia para ser reprobable, o solo una escena de sexo, etc.; no hace falta que reúna una serie de desordenes morales para que sea desaconsejable y dañina. También es cierto que también han televisado otras realmente buenas. Espero y deseo que sigan una línea coherente con la moral cristiana.
Feliz y santa Natividad
Feliz y santa Natividad
23/12/11 10:11 PM
Muy bien, Asclepio y Felipe, da gusto que haya católicos tan celosos copmo vosotros!!!!! Bravo, guardianes de la fe y la moral.
Y usted, don Tomás, ¡qué vergüenza que participe en un programa tan inmoral! ¿Es que no se ha dado usted cuenta de que Qué bello es vivir es una película inadmisible! ¡¡¡Si James Stewart besa a su novia antes de casarse con ella!!! ¡Qué inmoralidad!
En fin, es una pena que determinada gente, en lugar de empeñarse en ser católica y dejarnos a los demás católicos como mojigatos casposos ante el mundo, montaran una secta propia asclepiano-filipense.
¡Feliz Navidad, don Tomás! Estuvo usted maravilloso en su anterior aparición de Lágrimas en la lluvia y estoy seguro de que mañana volverá a estarlo.
Y usted, don Tomás, ¡qué vergüenza que participe en un programa tan inmoral! ¿Es que no se ha dado usted cuenta de que Qué bello es vivir es una película inadmisible! ¡¡¡Si James Stewart besa a su novia antes de casarse con ella!!! ¡Qué inmoralidad!
En fin, es una pena que determinada gente, en lugar de empeñarse en ser católica y dejarnos a los demás católicos como mojigatos casposos ante el mundo, montaran una secta propia asclepiano-filipense.
¡Feliz Navidad, don Tomás! Estuvo usted maravilloso en su anterior aparición de Lágrimas en la lluvia y estoy seguro de que mañana volverá a estarlo.
24/12/11 8:06 PM
Javier, no ha entendido NADA. Me pregunto si usted que tanta estima parece tener a D. Tomás de la Torre habrá leído un artículo suyo en el que denunciaba la emisión de cierta película en 13 Tv:
http://infocatolica.com/blog/elolivo.php/1102101213-13-tv-no-debe-exhibir-cierta
Me da la impresión de que Vd. no se ha leído las encíclicas que he citado anteriormente, porque yo no he dicho nada que no esté fundamentado implícita o explícitamente en los documentos del Magisterio de la Iglesia. A no ser que usted crea que la moral ha cambiado en el transcurrir del tiempo y lo que antes era NO ahora es SI. En fin, que tenga una feliz Natividad.
http://infocatolica.com/blog/elolivo.php/1102101213-13-tv-no-debe-exhibir-cierta
Me da la impresión de que Vd. no se ha leído las encíclicas que he citado anteriormente, porque yo no he dicho nada que no esté fundamentado implícita o explícitamente en los documentos del Magisterio de la Iglesia. A no ser que usted crea que la moral ha cambiado en el transcurrir del tiempo y lo que antes era NO ahora es SI. En fin, que tenga una feliz Natividad.
24/12/11 11:50 PM
Os he entendido perfectamente. Es fácil entenderos, de hecho. Os sabéis de memoria todo el magisterio de los papas hasta Juan XXIII y repudiáis el Concilio Vaticano II y TODO lo que ha venido después (que se repudien algunas no me parece mal, que conste). Incluso, sotto voce, habláis de sede vacante.
Aquella película que denunciaba don Tomás es película donde se ataca gravemente a la Iglesia. No lo compare con un beso o una tetilla vista de refilón, por favor.Aunque yo, por cierto, todavía no he visto tetillas de refilón en Lágrimas en la lluvia, desde que tiene horario vespertino. Una cosa es el orden moral objetivo del que hablan los Papas y otra estar enfermo y ser un obseso sexual. Si una película como "Una habitación von vistas", en la que se ve a unos hombres corretendando en un río con los pirindolos al aire, en plan risueño y lúdico,es contario al orden moral objetivo, entonces que empiecen por destruir cienbtos de cuadros y esculturas que yo he visto con estos ojitos en los Museos Vaticanos. ¡Por favor!
Desde luego, para que un programa como Lágrimas en la lluvia parezca inmoral hay que tener unos huevos como el caballo de Espartero.
O ser muy mezquino y muy perro del hortelano, porque no hay un programa como este en el que defienda de modo tan evidente la doctrina de la Iglesia.
A mí me gusta mucho. Estoy deseoso de ver su aparición, don Tomás.
Feliz y santa Navidad a todos.
25/12/11 10:40 AM
¡Qué yo repudio el Concilio Vaticano II! Entonces usted no me ha leído en este portal. Yo lo apoyo y lo acato plenamente. Pero no admito las falsas interpretaciones que le han dado algunos que han querido ver una nueva moral y una nueva fe, una "adaptación" al mundo moderno. No hay ni un solo punto en el Magisterio postconciliar que corrija la fe o moral preconciliar como si ésta fuera algo anticuado que hubiera que renovar. Esto es absolutamente falso.
Por otro lado usted está intentando hacerme decir lo que no he dicho. Pero ahora que trae a colación lo de esa película ya tengo claro que usted no solo no comprende lo que el Concilio Vaticano II dice cuando habla de "primacía absoluta del orden moral objetivo" en las relaciones entre arte y moral sino que incluso no comprende la moral católica. Si mostrar a unos señores en la pantalla con las verguenzas al aire es éticamente permisible ¿donde diantres queda el PUDOR?
Catecismo de la Iglesia: La pureza exige el pudor. Este es parte integrante de la templanza. El pudor preserva la intimidad de la persona. Designa el rechazo a mostrar lo que DEBE PERMANECER VELADO. Está ordenado a la castidad, cuya delicadeza proclama. Ordena las miradas y los gestos en conformidad con la dignidad de las personas y con la relación que existe entre ellas. El pudor es modestia; inspira la elección de la vestimenta. Mantiene silencio o reserva donde se adivina el riesgo de una curiosidad malsana; se convierte en discreción. Existe un pudor de los sentimientos como también un pudor del cuerpo. Este pudor rechaza, por ejemplo, los exhibicionismos del cuerpo humano propios de cierta publicidad o las incitaciones de algunos medios de comunicación a hacer pública toda confidencia íntima. El pudor inspira una manera de vivir que permite resistir a las solicitaciones de la moda y a la presión de las ideologías dominantes.
«Por último, la narración, la descripción o la representación del mal moral pueden ciertamente, con la ayuda de los medios de comunicación social, servir para conocer y explorar más profundamente al hombre, para manifestar y exaltar la magnificencia de la verdad y del bien, mediante la utilización de los oportunos efectos dramáticos; sin embargo, para que no produzcan más daño que utilidad a la almas, habrán de someterse completamente a las leyes morales, sobre todo si se trata de asuntos que exigen el debido respeto o que incitan más fácilmente al hombre, herido por la culpa original, a apetencias depravadas.» (Inter Mirifica)
«No podemos olvidar esto ni siquiera cuando se trata de la amplia esfera de la cultura artística, sobre todo la de carácter visivo y espectacular, como tampoco cuando se trata de la cultura de "masas", tan significativa para nuestros tiempos y vinculada con el uso de las técnicas de divulgación de la comunicación audiovisual. Se plantea un interrogante: cuándo y en qué caso esta esfera de actividad del hombre —desde el punto de vista del ethos del cuerpo— se pone bajo acusación de "pornovisión", así como la actividad literaria, a la que se acusaba y se acusa frecuentemente de "pornografía" (este segundo término es más antiguo). Lo uno y lo otro se realiza cuando se rebasa el límite de la vergüenza, o sea, de la sensibilidad personal respecto a lo que tiene conexión con el cuerpo humano, con su desnudez, cuando en la obra artística o mediante las técnicas de la reproducción audiovisual se viola el derecho a la intimidad del cuerpo en su masculinidad o feminidad, —y en último análisis— cuando se viola la profunda regularidad del don y del darse recíproco, que está inscrita en esa feminidad y masculinidad a través de toda la estructura del ser hombre. Esta inscripción profunda —mejor incisión— decide sobre el significado esponsalicio del cuerpo humano, es decir, sobre la llamada fundamental que éste recibe a formar la "comunión de las personas" y a participar en ella.» (Juan Pablo II, 22-4-1981)
Por cierto, aún después del Concilio Vaticano II la Iglesia siguió condenando o denunciando la inmoralidad de ciertas películas. Más adelante dejó de hacerlo NO porque las productoras cinematográficas dejaran de producir películas malas o inmorales, sino porque debido al avance cultural consideró que los fieles tenían medios suficientes para formarse e informarse antes de ver o asistir a determinados espéctaculos. Por ello el Magisterio cuando habla de estos temas casi siempre exhorta a hacer una recta elección:
«Efectivamente, se trata de un problema de gran trascendencia como es el de instruir, educar y formar la conciencia de los fieles de modo que seleccionen con criterio cristiano los espectáculos cinematográficos y se atengan con sentido de confianza y disciplina a los juicios morales emanados de aquellos que en cada Oficina Nacional están encargados de tal misión por la Autoridad Eclesiástica.» (Juan XVIII)
«25. Los comunicadores profesionales no son los únicos que tienen deberes éticos. También las audiencias —los usuarios— tienen obligaciones. Los comunicadores que se esfuerzan por afrontar sus responsabilidades merecen a su vez audiencias conscientes de las propias.
El primer deber de los usuarios de la comunicación social consiste en discernir y seleccionar. Deberían informarse acerca de los medios de comunicación —sus estructuras, su modo de actuar y sus contenidos— y hacer opciones responsables, de acuerdo con sólidos criterios éticos, sobre lo que conviene leer, ver o escuchar. Hoy todos necesitan alguna forma de formación permanente acerca de los medios de comunicación, sea mediante el estudio personal, sea mediante la participación en un programa organizado, sea con ambos. La educación en el uso de los medios de comunicación, más que enseñar algo acerca de las técnicas, ayuda a la gente a formarse criterios de buen gusto y juicios morales verdaderos, que constituyen un aspecto de la formación de la conciencia.» (Pontificio Consejo Comunicaciones Sociales, 4-7-2000)
P.D.: Y no me ponga como argumento lo de los cuadros o esculturas porque no es lo mismo un desnudo artístico honesto, no impúdico, que la representación de un desnudo humano al natural, esto lo explica muy bien Juan Pablo II en su Magisterio sobre el cuerpo humano y su representación artística.
Por otro lado usted está intentando hacerme decir lo que no he dicho. Pero ahora que trae a colación lo de esa película ya tengo claro que usted no solo no comprende lo que el Concilio Vaticano II dice cuando habla de "primacía absoluta del orden moral objetivo" en las relaciones entre arte y moral sino que incluso no comprende la moral católica. Si mostrar a unos señores en la pantalla con las verguenzas al aire es éticamente permisible ¿donde diantres queda el PUDOR?
Catecismo de la Iglesia: La pureza exige el pudor. Este es parte integrante de la templanza. El pudor preserva la intimidad de la persona. Designa el rechazo a mostrar lo que DEBE PERMANECER VELADO. Está ordenado a la castidad, cuya delicadeza proclama. Ordena las miradas y los gestos en conformidad con la dignidad de las personas y con la relación que existe entre ellas. El pudor es modestia; inspira la elección de la vestimenta. Mantiene silencio o reserva donde se adivina el riesgo de una curiosidad malsana; se convierte en discreción. Existe un pudor de los sentimientos como también un pudor del cuerpo. Este pudor rechaza, por ejemplo, los exhibicionismos del cuerpo humano propios de cierta publicidad o las incitaciones de algunos medios de comunicación a hacer pública toda confidencia íntima. El pudor inspira una manera de vivir que permite resistir a las solicitaciones de la moda y a la presión de las ideologías dominantes.
«Por último, la narración, la descripción o la representación del mal moral pueden ciertamente, con la ayuda de los medios de comunicación social, servir para conocer y explorar más profundamente al hombre, para manifestar y exaltar la magnificencia de la verdad y del bien, mediante la utilización de los oportunos efectos dramáticos; sin embargo, para que no produzcan más daño que utilidad a la almas, habrán de someterse completamente a las leyes morales, sobre todo si se trata de asuntos que exigen el debido respeto o que incitan más fácilmente al hombre, herido por la culpa original, a apetencias depravadas.» (Inter Mirifica)
«No podemos olvidar esto ni siquiera cuando se trata de la amplia esfera de la cultura artística, sobre todo la de carácter visivo y espectacular, como tampoco cuando se trata de la cultura de "masas", tan significativa para nuestros tiempos y vinculada con el uso de las técnicas de divulgación de la comunicación audiovisual. Se plantea un interrogante: cuándo y en qué caso esta esfera de actividad del hombre —desde el punto de vista del ethos del cuerpo— se pone bajo acusación de "pornovisión", así como la actividad literaria, a la que se acusaba y se acusa frecuentemente de "pornografía" (este segundo término es más antiguo). Lo uno y lo otro se realiza cuando se rebasa el límite de la vergüenza, o sea, de la sensibilidad personal respecto a lo que tiene conexión con el cuerpo humano, con su desnudez, cuando en la obra artística o mediante las técnicas de la reproducción audiovisual se viola el derecho a la intimidad del cuerpo en su masculinidad o feminidad, —y en último análisis— cuando se viola la profunda regularidad del don y del darse recíproco, que está inscrita en esa feminidad y masculinidad a través de toda la estructura del ser hombre. Esta inscripción profunda —mejor incisión— decide sobre el significado esponsalicio del cuerpo humano, es decir, sobre la llamada fundamental que éste recibe a formar la "comunión de las personas" y a participar en ella.» (Juan Pablo II, 22-4-1981)
Por cierto, aún después del Concilio Vaticano II la Iglesia siguió condenando o denunciando la inmoralidad de ciertas películas. Más adelante dejó de hacerlo NO porque las productoras cinematográficas dejaran de producir películas malas o inmorales, sino porque debido al avance cultural consideró que los fieles tenían medios suficientes para formarse e informarse antes de ver o asistir a determinados espéctaculos. Por ello el Magisterio cuando habla de estos temas casi siempre exhorta a hacer una recta elección:
«Efectivamente, se trata de un problema de gran trascendencia como es el de instruir, educar y formar la conciencia de los fieles de modo que seleccionen con criterio cristiano los espectáculos cinematográficos y se atengan con sentido de confianza y disciplina a los juicios morales emanados de aquellos que en cada Oficina Nacional están encargados de tal misión por la Autoridad Eclesiástica.» (Juan XVIII)
«25. Los comunicadores profesionales no son los únicos que tienen deberes éticos. También las audiencias —los usuarios— tienen obligaciones. Los comunicadores que se esfuerzan por afrontar sus responsabilidades merecen a su vez audiencias conscientes de las propias.
El primer deber de los usuarios de la comunicación social consiste en discernir y seleccionar. Deberían informarse acerca de los medios de comunicación —sus estructuras, su modo de actuar y sus contenidos— y hacer opciones responsables, de acuerdo con sólidos criterios éticos, sobre lo que conviene leer, ver o escuchar. Hoy todos necesitan alguna forma de formación permanente acerca de los medios de comunicación, sea mediante el estudio personal, sea mediante la participación en un programa organizado, sea con ambos. La educación en el uso de los medios de comunicación, más que enseñar algo acerca de las técnicas, ayuda a la gente a formarse criterios de buen gusto y juicios morales verdaderos, que constituyen un aspecto de la formación de la conciencia.» (Pontificio Consejo Comunicaciones Sociales, 4-7-2000)
P.D.: Y no me ponga como argumento lo de los cuadros o esculturas porque no es lo mismo un desnudo artístico honesto, no impúdico, que la representación de un desnudo humano al natural, esto lo explica muy bien Juan Pablo II en su Magisterio sobre el cuerpo humano y su representación artística.
25/12/11 9:47 PM
Aunque ya se ha propuesto anteriormente por otros seguidores del programa, quisiera insistir proponiendo el tema de la SANIDAD, más ahora que se han unificado los ministerios de Sanidad y Servicios Sociales.
Una película que podría servir para suscitar el debate quizás fuera LAMBARENE (Albert Schweitzer)dirigida por Gray Hofmeyer e interpretada,entre otros, por Andrew Davis.
Felicito al programa Lágrimas en la lluvia y a J.M.de Prada y a la encantadora Maria Cárcava.
Saludos.
Una película que podría servir para suscitar el debate quizás fuera LAMBARENE (Albert Schweitzer)dirigida por Gray Hofmeyer e interpretada,entre otros, por Andrew Davis.
Felicito al programa Lágrimas en la lluvia y a J.M.de Prada y a la encantadora Maria Cárcava.
Saludos.
26/12/11 5:27 PM
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