Un doctorado de farándula
Reconozco ser un lector de Hans Küng hasta que le quitaron la venia docendi desde la Santa Sede. Sus obras tomaron un camino en el que nunca he deseado estar, ni estaré.
Hoy, en Madrid, en la UNED, lo van a investir doctor honoris causa. Estarán sus seguidores, y los palmeros políticos correspondientes, como el ministro Gabilondo, encargado de la cartera de Educación.
Cuando una persona, como Küng pegó el volantazo, que la Santa Sede, le paró en seco advertimos muchos, por entonces, que iría por la cuesta abajo y sin frenos. Y así ha sido.
En el encuentro mantenido con el Papa Benedicto XVI, ambos se guardaron bien el aire, puesto que se conocen de antaño. Los dos son inteligentes y la partida acabó en tablas. Incluso pactaron el comunicado enviado a los medios informativos.
Sinceramente mi opinión de este escritor es que su orgullo pudo más que el sentido de la obediencia a la Iglesia y su Magisterio, a cuya luz debe siempre trabajar el pensador, el teólogo, el escritor y el divulgador.
Admiro a la persona que sabe realizar una teología sentada y arrodillada. Es decir, quien lo que escribe lo ha pasado, antes o después, por la oración personal postrado de rodillas ante el Señor en el Sagrario. De estos teólogos existen muchos y buenos. A éstos leo. No deseo citar a ninguno para no olvidar a nadie.
El acto de hoy pasará sin pena ni gloria. Lo mismo que está en vía muerta el pensamiento que patrocina el acto. Y lo estará cada vez más.
Tomás de la Torre Lendínez
7 comentarios
¿Que le dan ahora doctorados y homenajes? "Ya recibió su recompensa", como dijo el Señor. Ojalá se arrepienta y pueda recibir la única recompensa que de verdad importa.
En fin, un honoris causa desperdiciado.
Teólogo no es a nuestro entender, pues Kuns ya ni es católico, sino apóstata y de tales no se puede decir que tengan conocimiento divino que es el que da la gracia y es la teología en su primera esencia.
Que le den a Kuns. Mientras no le den doctorados honoris causa en el sumum de la apostasía en una Universidad Católica, ni nos va ni nos viene (aunque cosas peores se han visto, desgraciadamente).
Hereje no es lo mismo que apóstata.
El apóstata renuncia a su religión completa. El hereje tiene una opinión distinta sobre algún punto de la doctrina.
El famoso cubanoamericano "padre Alberto", que se pasó a los episcopalianos es un apóstata.
Los católicos que no aceptan el Concilio Vaticano II y consideran que la Sede de Pedro está vacante después de Pío XII son herejes, pero no apóstatas.
Küng tiene sus ideas y opiniones, no puede enseñarlas en academias católicas, es un hereje, pero no ha dejado de ser católico. Verso suelto, pero católico.
Y ud. si es un buen católico está más cerca de Küng que de los sedevacantistas, veterocatólicos, lefebvrianos, y demás gente, a pesar de todo.
Respecto a Küng lo mismo me da que sea ortodox, hereje, apóstata o mediopensionista, pero como intelectual que es he leído un estudio muy bueno sobre el origen del antisemitismo en la sociedad europea medieval, que solo por eso merece un honoris causa.
Influyentes han sido los teólogos realmente creadores que abrieron brecha como lo fueron en sus tiempos Schamus, Rahner, De Lubac, Congar, etc. Hasta González y Boff han sido más "influyentes".
Y el Doctorado "Honoris Causa" es eso: "Honoris...", es decir, que ha dejado como legado al pensamiento algún bien significativo que lo honra. Pero claro, ahora se dan Doctorados "Horroris Causa", como se reparte Nobels, a sabe Dios quiénes y por qué.
_____________________________
No se ud. de donde se descarga sus películas, pero los "lefebvrianos" están en plena comunión con la Iglesia. Lo estaban como asociación incluso cuando tenía cuatro obispos excomulgados por causa estrictamente personal y disciplinar, más ahora que se han levantado dichas excomuniones.
Lefebvre tenía permiso para ordenar a un sucesor en el episcopado y ordenó a tres, y ya está. Se lo excomulgó pero nunca fue declarado un cisma. Que lo hayan usado de muñeco de paja todos los modernistas y liberales que manipulan la Iglesia en las últimas décadas no significa que ser un apóstata como Hans Kung sea preferible a pertenecer a la Fraternidad fundada por Lefebvre.
Venga con cuentos a otra parte.
Los comentarios están cerrados para esta publicación.
