Don Jesús Blanco Zuloaga, uno de mis maestros

Me ha llegado una llamada de teléfono. Un amigo común me informa que uno de mis maestros presenta esta tarde un libro. La noticia es la siguiente:

Tras una intensa vida pastoral, que aún continúa, y dedicada al ámbito de los medios de comunicación, el sacerdote Don Jesús Blanco Zuloaga presenta hoy miércoles, 17 de marzo, el libro “Mis doscientos últimos artículos”, publicados en el Diario Ideal de Granada, del que ha sido colaborador durante muchos años desde que comenzara a escribir de forma fija en el año 1984.

El acto de presentación del libro tendrá lugar hoy a las 19:30 horas en el salón de actos del Centro Cultural Nuevo Inicio, del Arzobispado de Granada, en el Edificio de la Curia Metropolitana (Plaza Alonso Cano, s/n). La entrada es libre.

El volumen recoge los doscientos últimos artículos relacionados con la actualidad del momento de los últimos cuatro años, publicados en Ideal de Granada, que comprende un periodo desde el 8 de mayo de 2005 hasta el 5 de abril de 2009.

Don Jesús Blanco Zuloaga es uno de mis maestros. Lo conocí siendo estudiante en la Facultad de Teología de Cartuja en la ciudad de los cármenes. Era delegado diocesano de vocaciones del arzobispado de Granada. Más tarde llegó a ser delegado diocesano de medios de comunicación social.

Cuando el Papa Juan Pablo II llegó a Granada en el otoño de 1982, don Jesús dirigió y sirvió a toda la prensa acreditada para la visita. A la vez era el pastor de la parroquia de San Emilio donde está entregado de lleno.

Desde 1984 ha escrito, dominicalmente, un artículo de opinión en el diario Ideal, en la edición de Granada. Don Jesús a finales del año pasado tuvo un problema clínico en los ojos, y tras una operación quirúrgica el médico le ha quitado la lectura, y por consiguiente la opción de poder escribir.

No le gusta dictar a otra persona, ya que sus artículos los medita mucho, los perfecciona en la antigua preceptiva literaria estudiada en el Seminario granadino. Es valiente en sus afirmaciones, pero es parco en palabras. Es certero en sus juicios, pero con términos siempre muy respetuosos. Sus frases son lapidarias y dirigidas al lector medio del periódico Ideal.

Una vez me contaba la siguiente anécdota: La gente me para por la calle y me felicita por el artículo del domingo anterior, diciendo que lo ha leído de un tirón y con satisfacción. Don Jesús respondió: Claro, tu lees en poco rato, lo que a mí me cuesta mucho tiempo.


Este maestro mío, y buen amigo, ha estado haciendo radio en Radiocadena española, en Canal Sur radio, en Cope Granada, ha dirigido el Boletín Oficial de la Diócesis, y su amor más grande fue la fundación de la revista semanal de la archidiócesis titulada Fiesta, que aún sigue publicándose para las diócesis de Granada y Guadix.

Siempre he admirado en Don Jesús Blanco su amor por contar la verdad eclesial ante la serie de mentiras e insidias que se han vertido sobre la Iglesia del Señor en los últimos veinticinco años.

Ahora, hoy, presenta sus últimos doscientos artículos para gozo de sus lectores y amigos, que los tiene ganados por su cordialidad y sencillez de trato pastoral.

Y don Jesús aún tenía tiempo para revitalizar la Abadía del Sacromonte granadino cuando fue nombrado canónigo y director de la cátedra Andrés Manjón de aquella institución cultural y religiosa.

La Conferencia Episcopal Española, en su Comisión Episcopal de Medios de Comunicación, le concedió el premio Bravo con todo el merecimiento ganado a pulso.

Desde aquí le envío al maestro y amigo mis felicitaciones y mejores deseos para que siga sirviendo a la Iglesia del Señor muchos años.

Tomás de la Torre Lendínez