Informe de abusos clericales en Francia: el 80% fue contra varones, en la sociedad civil el 75% es contra niñas
Esta mañana, a las 9:00 hora francesa se ha publicado el «Informe Sauvé».
La Comisión Independiente sobre Abuso Sexual en la Iglesia (CIASE) entregó las conclusiones de su informe sobre los abusos sexuales cometidos por sacerdotes y religiosos sobre menores y adultos vulnerables desde la década de 1950. La comisión está presidida por Jean-Marc Sauvé, vicepresidente del Consejo de Estado francés y dio a conocer nuevas estimaciones sobre el número de víctimas y abordará una serie de 45 recomendaciones para luchar contra la pedofilia en la Iglesia.
Esta comisión independiente, solicitada por la Iglesia en Francia el 8 de febrero de 2019, estaba formada por una veintena de miembros que trabajaron durante casi 3 años para terminar este informe de 426 páginas y más de 2.000 páginas de anexos con testimonios de víctimas.
Es terrible. Con algunas diferencias y similitudes respecto al «Informe John Jay» encargado por los obispos en Estados Unidos o al de Alemania.
Aunque desde hace unos años mis tripas aguantan de todo, no sé si esto lo soportará. En cualquier caso, Sauvé ha desmenuzado a grandes rasgos los datos principales en la presentación. Un análisis a vuela pluma.
El número de sacerdotes y religiosos abusadores masculinos se estima entre 2.900 y 3.200
Sauvé al ser preguntado por el número de depredadores dijo que corresponde solo a hombres, aunque también religiosas han cometido actos de violencia. El número de víctimas por agresor masculino ascendería a 63 según los cálculos de Sauvé.
La cifra de víctimas asciende a 216.000 (son cifras estimadas, proyectadas), aunque si sumamos los perpetrados por «funcionarios» laicos de la Iglesia o voluntarios laicos asciende a 300.000. En el periodo la media sale a unos 3.100 por año.
El número para el mismo periodo en la escuela pública es menor, 141.000. El entorno en el que se comenten más abusos en Francia es el doméstico, como en todos los países, pero a diferencia de EEUU o Alemania el entorno eclesial en Francia es menos seguro que la escuela (no católica) o clubs de deporte o culturales.
De todas las víctimas de abusos vivas en Francia, 5,5 millones, el 96% se cometieron en la sociedad civil (intrafamiliar, colegios, institutos, campamentos) y el 4% en ambiente eclesiástico. Ojalá el resto de instituciones se tomen tan en serio este problema como lo hace la Iglesia.
Desconozco, porque no se aporta (o no lo he encontrado), en número de clérigos totales en esas siete décadas. Me parece un dato relevante para evaluar la dimensión del problema. Tres mil «alimañas» son muchas. Pero la inmensa-inmensa mayoría son unas personas extraordinarias, entregadas al Señor al servicio de las almas y, no tengo la menor duda, también víctimas de esta situación. A mi estos datos me mueven para dar gracias a Dios y rezar mucho por todos los sacerdotes que conozco.
Hay que huir de la sospecha generalizada o el «pánico moral».
De todas formas, el método con el que se ha llevado a cabo este estudio hace que no sea comparable a otros. El cálculo de víctimas se realiza a partir de un sondeo a 28 mil víctimas y un cuestionario y entrevistas a víctimas. Un sondeo on-line y por lo tanto son proyecciones, no datos reales. Es bueno recalcarlo: los datos no son reales, son estimaciones estadísticas.
«La curva se ha estabilizado», pero no ha desaparecido.
Jean-Marc Sauvé señaló que desde la década de 1950 «ha habido un descenso significativo del valor absoluto, pero la curva de esta violencia ha dejado de descender». «La mayor parte de la violencia sexual, el 56%, tuvo lugar entre los años 1950 y 1969. Luego cayó drásticamente en las décadas de 1970 y 1990 y se ha mantenido desde 1990»
Atribuye la disminución de casos tanto a la disminución de sacerdotes y religiosos como a la disminución de la práctica religiosa.
«Debemos deshacernos de la idea de que la violencia sexual en la Iglesia Católica ha sido erradicada, que el problema ha quedado atrás. Incluso si hay que admitirlo, en los últimos 30 años ha habido más abusos entre 1990 y 2000 que entre los 2000 y hoy»
A diferencia en este caso de EEUU, país pionero en medidas, que desde que se implantaron han casi erradicado la plaga.
Sería interesante comprobar el impacto de la revolución de «mayo del 68». A falta de acceso a las gráficas poco más que comentar.
Menos abusos en zonas más católicas
Preguntado por la distribución geográfica, Jean-Marc Sauvé señala que «paradójicamente» los ataques son proporcionalmente menos numerosos en las regiones donde la práctica religiosa era más fuerte. Plantea la hipótesis de que en estos lugares, el clero probablemente estaba más supervisado y tenía relaciones más saludables con los fieles.
Un abuso «menos grave» en la Iglesia que en la sociedad civil, pero más concentrado
Como siempre, en estos estudios el término «abuso» hay que definirlo, no siempre es abuso sexual. En algunos estudios se incluye violencia física o emocional («pegar con la regla», lenguaje intimidante, …). Este no es el caso.
Según relata Sauvé, la naturaleza del abuso sexual cometido en la Iglesia sería generalmente «menos grave» que en el resto de la sociedad, pero muy levemente: las violaciones representarían el 32% de las agresiones sexuales en la Iglesia contra el 38% «en otros círculos». Además, «la violencia sexual cometida por clérigos y religiosos es menos puntual y más duradera que los actos cometidos por otras personas». Jean-Marc Sauvé también insistió en la gravedad de sus consecuencias. «El 60% de los hombres y mujeres que han sufrido violencia sexual durante la infancia experimentan disturbios fuertes o muy fuertes en su vida sexual. Los disturbios también son reales en su vida familiar, profesional o social».
El 80% de los abusados son chicos, en la sociedad civil el 75% son chicas
En lo que sí está alineado el Informe Sauvé con los de EEUU o Alemania es que el abuso es abrumadoramente mayoritario de tipo homosexual o de efebofilia, en la presentación dijo:
«El abuso de clérigos afecta masivamente a los niños, el 80% de las víctimas, con una concentración muy alta entre 10 y 13. La proporción de niñas es del 20%, y más distribuidos por grupos de edad. En el resto de la sociedad, el 75% de los abusos afectan a las niñas y el 80% a la violencia intrafamiliar».
¿A nadie le extrañan los datos? En este punto, al análisis de Jean-Marc Sauvé le falta algo valentía, le falta llamar a las cosas por su nombre, algo que ha ido exigiendo durante toda la exposición.
Si bien es cierto, como dice, que podría explicarse en parte por un «efecto oportunidad» del hecho de que los sacerdotes estén «más en contacto con los niños», señala que «ciertamente esta no es la única causa»…, pero hasta ahí se atreve.
Realmente curioso que en este caso haya «efecto oportunidad» y cuando se trata de que hay menos incidencia en las zonas más católicas, o sea con «más oportunidad», Sauvé solo crea que es «paradójico». Paradójico es no enfrentarse a la relación de la homosexualidad con los abusos.
Una vez más el dato es minimizado y será relativizado. En EEUU, aplicaron (unos más y otros menos), la disposición de Benedicto XVI de no permitir la ordenación de personas con tendencias homosexuales. Muchas de las normas y salvaguardas que han funcionado han partido de la experiencia del desastre de EEUU.
Decir que todos los homosexuales son abusadores es una barbaridad. También es una barbaridad decir que no tiene nada que ver o minimizar el hecho.
Extrañas recomendaciones
En Informe Sauvé emite 45 recomendaciones. Algunas no solo extrañas, más bien desenfocadas.
Desde luego las que tienen que ver con «el reconocimiento de la responsabilidad de la institución, frente a las víctimas, frente a los fieles y la sociedad» son de cajón. «Reparar el daño que se ha hecho» implica «al menos para los delitos prescritos, el reconocimiento de la calidad de víctimas de las personas por una institución independiente creada por la Iglesia».
Y en su caso una debida indemnización.
A futuro se propusieron cuatro grandes recomendaciones:
1.- La Comisión plantea una reforma del «derecho de la Iglesia» y muy a la francesa ir dejando rastro escrito de las denuncias. Creo que con cumplir las normas que ya hay es suficiente. Pero habría que ver el detalle de la propuesta.
Vivimos en una época en la que se ha despreciado y se desprecia, al nivel más alto, el Derecho canónico. Creo que volver a tomárselo con diligencia ayudará mucho. También la presunción de inocencia, por cierto.
2.-La Comisión también examinó el secreto de la confesión. Pide su levantamiento en casos de abuso, ya que «no puede oponerse a la obligación de denunciar agresiones graves a menores y personas vulnerables, de conformidad con la ley de la República». «Medimos la sensibilidad de esta recomendación, y en conciencia y responsabilidad lo hacemos», dijo Jean-Marc Sauvé.
Gracias a Dios, el secreto de confesión no se tocará. Habrá que ver en detalle cuál es la propuesta, planteado como se dijo en la presentación no tiene ni pies ni cabeza.
3.- En tercer lugar, la Comisión invita a la Iglesia a «adaptar su formación y vigilar con especial atención al discernimiento vocacional». En particular, es necesario mantener un «marco de referencia» en cuanto a «enseñanzas impartidas», con «apoyo psicológico a los candidatos al sacerdocio», y también «abrir el perfil de los docentes».
No queda tampoco claro a qué se refiere. Las 45 recomendaciones van desde la verificación de antecedentes penales hasta el mapeo de riesgos a cuestionar el celibato sacerdotal. Como si al que le gustan los jovencitos tener una mujer al lado le fuese a solucionar la vida.
4.-La última recomendación se refiere a la teología y la eclesiología mismas, para evitar «desviaciones, desnaturalizaciones y perversiones a las que la teología y la eclesiología pueden haber sido sometidas en el contexto de abusos». De hecho, muchos abusadores han utilizado argumentos teológicos con sus víctimas para justificar sus acciones. Jean-Marc Sauvé advirtió contra una «hiperbolización de la autoridad del sacerdote», contra la desviación del «acompañamiento espiritual o el principio de obediencia [que] debe preservar la conciencia de cada uno», y la desviación del «sacramento de la penitencia», que sirvió de marco para ciertos casos de violencia sexual.
Esto vuelve a ser muy confuso, es como que estuviese pre-escrito. ¿No había dicho la comisión que un tercio de los abusos en la Iglesia están cometidos por laicos?
Al margen de cualquier otra consideración que la Conferencia episcopal haya encargado este estudio es meritorio. Un primer paso para el desagravio, para tomar cartas en el asunto.
Ojalá no se quede todo en la pamema habitual del clericalismo y bla, bla, bla.
Posteriormente, el informe fue entregado oficialmente al obispo Eric de Moulins-Beaufort, presidente de la Conferencia de Obispos de Francia (CEF) y a la hermana Véronique Margron, presidenta de la Conferencia de Religiosos y Religiosos de Francia (CoRREF).
62 comentarios
No entiendo esto, si había más práctica religiosa el número de personas susceptibles de ser víctimas sería también mayor y lo de la "supervisión" también es raro. ¿Quiere decir esto que los obispos de esas diócesis estaban más atentos o que eran los padres los que supervisaban?
No me parece mal, no es fácil saberlo, pero al menos decirlo.
Como católico laico estoy muy profundamente avergonzado de esta noticia.
.Y cualquier " estado de tensión " en los hijos al llegar el momento de asistir a la escuela debe ser motivo de alarma. Se supone que los niños disfrutan de la compañía de sus amigos y de jugar o relacionarse con ellos. Pero aparte de la gravedad del bullying, existe la gravedad del abuso físico por parte de los degenerados. En estos casos de apreciar tensión por el mero hecho de asistir a clase - repito - debe ser objeto de inmediata atención, y acudir al colegio o donde sea para descubrir el motivo, sin más espera. Lo mismo en ambientes religiosos. Los servicios de inspección de educación o la policía adquieren relevancia en cuanto a su intervención en estos casos. El abuso en el ámbito religioso debe ser puesto en conocimiento del Obispo, el cual dará respuesta inmediata y obligatoria .
. Y en cuanto al bullying , por ejemplo, o abuso de un grupo minoritario contra " el más débil ", suele desgraciadamente tener resultados - en algunos casos - " terribles".
No hay que olvidar que en el caso del abusador sexual este amenaza y abusa de su autoridad. En esos ambientes también debe ser objeto de inmediata atención. Informarse por otros compañeros no es difícil, y hablar con otras personas de ese ambiente - mayores- se logrará solidaridad. Hay que evitar ser alarmista, pero los malos resultados son una realidad, si se callan los Padres.
Hay que hacer lo que dice el Señor es "Palabra de Dios"
Hay que tirar a los pedrastras al fondo del mar, ni piedad ni perdon con esas basuras
No somos "buenistas"
Convendría también que hubiera un discernimiento en la selección de todos los que trabajan a la sombra de la Iglesia, sacerdotes, profesores, entrenadores, catequistas, porteros... sin olvidar a las mujeres. Y hacer hincapié en que no se relajen las costumbres de todos. Seguimos en época del todovale, en cualquier ámbito.
Vamos a ver, imaginemos un seminario o noviciado de tiempos pretéritos (y no tanto), donde los temas sexuales eran algo tabú, pecaminoso y prohibido. El candidato al sacerdocio tenía que ser casto y puro como un ángel, y esto no se discutía.........aunque el personaje en cuestión tuviera problemas afectivo-sexuales más acentuados o menos, que ocultaba, o si los manifestaba al confesor o director espiritual, rapapolvo que le caía o culpabilización desfasada. (quizá exagero algo, si). Cuando mas que problemas morales, eran cuestiones psicológicas de maduración personal y afectiva que muchos sufrían.
¿Qué pasó? Muchos llegaron a la ordenación ocultando estos problemas que se iban cociendo como una olla a presión, que o bien se sublimaron o resolvieron, o estallaron de la peor manera posible, llevando una esquizofrénica doble vida. Y esto, que no digo que fuera masivo, si que fue significativo cuantitativamente.
Y , luego, no perdamos de vista algo importante; el celibato por el Reino no es algo natural, que se conquista por ascesis y mortificaciones, porque esto es darse con la cabeza en una pared; o es un don carismático que Dios concede, o no hay manera alguna de vivirlo bien, y por su carácter extraordinario nunca será numeroso ni masivo.
¿Esto tiene relación con lo anterior? En parte sí y en parte no, pero mucho me temo que no se dieron procesos sólidos de discernimiento en muchos candidatos en este asunto.
Usted habla de tabú como si eso lo hubiera vivido. No, hijo no. Usted ha nacido en la guarrería, como yo y la mayoría. Las personas hace tiempo, muchísimo tiempo, que no consideran su cuerpo el Templo del Espíritu.
...
"El mayor asesino de niños de la Historia saldrá de la cárcel en Colombia" https://amp.elmundo.es/internacional/2021/09/03/6132690221efa016748b4656.html
Por lo demás, solo una reflexión. La pederastia y el incesto son elegeteberos, aunque sean heterosexuales. Los homosexuales son los líderes, ciertamente. Les damos la medalla de oro. Pero les vale la nuestra también. Todas las guarrerías son bienvenidas para ellos. No tardarán en poner esa P y esa I, como bien saben. Quieren la perversión de los menores. No la exclusividad homosexual. Les interesa más cargarse la exclusividad heterosexual entre adultos, la cual no consideran natural, por eso nuestra H nunca formará parte de su largo nombre. Ese chiringuito en la iglesia lo montaron los masones y elegeteberos, a medias. Los masones son una rama del protestantismo. No es de extrañar que tengan tirria al sacerdocio católico.
...
La reflexión sobre el sacerdocio católico debe hacerse con calidad, por favor. No desde mensajes con mala intención como el del señor antes mencionado, que obvia los miles de santos sacerdotes que hemos tenido y tenemos, y que está obsesionado con los homosexuales, incluso psicópatas, que se han escondido en la iglesia. Aunque los últimos casos del siglo XX creo que no son en su mayoría de homosexuales, ni personas con tendencia ninguna, sino simplemente de malos candidatos, muy malos, posteriormente homosexualizados y convencidos de lo chupi guay que llevaban el asunto y cómo iban así a cambiar la moral católica en tema sexual y sacerdotal. Aún estoy estudiando el tema. Es muy serio, porque las afirmaciones no son tales, son homosexualizaciones. Les hubiera podido pasar a cualquiera. Pero da miedo reconocerlo, verdad? Y lo de los seminarios, a otra escala, creo que ha sido similar. Quieren volver a Grecia, en cierto modo.
Estoy con el comentarista que denuncia que solo se lleven las manos a la cabeza por los abusos clericales. Los de fuera de la iglesia son abrumadoramente más, nos van a imponer la pederastia escolar, y nadie, salvo cuatro gatos aquí reunidos, dice nada. Es pura hipocresía.
La libertad sexual que afirmaba ese movimiento entró en los seminarios y conventos de la misma manera que entró en la sociedad y en los hogares y todavia perdura. ¿quien no conoce personajes dentro de la curia que todavia defienden las relaciones entre el mismo sexo, las relaciones prematrimoniales y demás gaitas...?
Es más, el fatidico sinodo aleman, opina que los temas del sexo deben salir de la moral catolica y... ¡sin que Roma lo haya condenado aún...!
¡Si no se hace nada, las cosas siguen su curso y para muestra, un botón!
Habla de "guarrerias", ¿que son guarrerias, según usted?
El problema de fondo es el siguiente: una persona adulta que busca relaciones sexuales con menores tiene un desajuste interno importante que precisa tratamiento clínico. Sea cura, bombero o albañil.
¿de donde saca que tomo a las personas por tontas? ¿que he nacido en la guarrería?, Todo invención suya que no se de donde procede. No entiendo estas interpretaciones que hace, que si los masones, los elegeteberos, la hipersexualización...........un tuti frutti donde se mezcla todo.
2. Todo sacerdote, laico y ciudadano sabe que el abuso a menores es pecado, inmoralidad y delito, como dicen las sagradas escrituras y tradición y el Magisterio de la Iglesia y el Código penal de cada país.
3. Hay dos contradicciones flagrantes:
a) hay menos abusos en zonas más católicas
b) hay menos abusos por la disminución de sacerdotes y religiosos y de la práctica religiosa
Es decir, la solución pasa por ser o bien supercatólico lefebriano o bien que la Iglesia desaparezca... pues vaya estudio... o no... quizás la Iglesia sólo tiene futuro en los lefebrianos y ninguno con los posconciliares y progresistas... deducciones curiosas...
a) hay menos abusos en zonas más católicas
Sería interesante de ver qué zonas geográficas de Francia son los más católicas, porque si resulta que coinciden con Bretaña, Normandía, Loira, Alsacia-Lorena, Aquitania, Lyon, Provenza, Costa Azul, Alpes, Norte y Paso de Calais, entonces coincide con la Francia tradicionalista y lefebriana...
En los Juzgados y Tribunales de Justicia, los peritos médicos forenses no lo consideran así: no se aplican ni eximentes ni siquiera atenuantes a tal fin. No sé qué dirá la ONU-OMS en "sus" manuales DSM sobre pedófilos y pederastas (en la homosexualidad pegó un gran cambio), El asunto va de "minoría de edad sexual", y punto
"entre 216.000 y 330.000 menores sufrieron abusos por parte de clérigos católicos desde 1950.
La cifra quita el aliento, realmente. Uno piensa -poniéndose en lo peor- en esos 330.000 niños que luego crecen con una comprensible aversión a todo lo que tenga que ver con la Iglesia Católica, y está por pensar que tres cuartas partes de las apostasías del último medio siglo largo se deben a los abusos.
Solo que la escandalosa cifra, sencillamente, no es real. Es una proyección, una estimación; al final, un número que se han sacado del bolsillo como podrían haber decidido cualquier otro. Lo incontrovertible, lo (aproximadamente) comprobable, es que de 115.000 sacerdotes franceses, entre 2.900 y 3.200 fueron denunciados como perpetradores de abusos a menores.
La cifra escandalosa que todo el mundo comenta es fruto de la mente calenturienta del juez Jean-Marc Sauvé, que es quien se ha ocupado de la investigación. Y Sauvé lo tiene todo en su historial para decantarse en lo posible en contra de los eclesiásticos. Él mismo lo fue durante dos años, jesuita por más señas, antes de hacerse socialista en los ochenta y convertirse desde entonces en leal servidor del pensamiento único."
Y aún con eso, lo escandaloso es que no se diga nada del 96% restante de abusos que no son siquiera atribuibles a la Iglesia.
[...] el celibato por el Reino no es algo natural, que se conquista por ascesis y mortificaciones, porque esto es darse con la cabeza en una pared; o es un don carismático que Dios concede, o no hay manera alguna de vivirlo bien, y por su carácter extraordinario nunca será numeroso ni masivo.
¿Esto tiene relación con lo anterior? En parte sí y en parte no, pero mucho me temo que no se dieron procesos sólidos de discernimiento en muchos candidatos en este asunto.
----------------------------------
Seguramente los procesos de discernimiento, entiendo que se refiere a discernimiento personal, hayan sido y sean algo defectusosos, en cualquier caso estaríamos hablando de sacerdotes. Imaginémonos que a un sacerdote ladrón le aplicásemos la misma reflexión. Tiendo mas a pensar en un clima favorable que muchos pederastas hayan podido encontrar. Muchos de estos probablemente sean lo que llamamos depredadores, gente que se impone con su personalidad. A veces se ha hablado de perfiles narcisistas.
Por otro lado, me alegro encontrar opiniones escépticas. A mi tambien me da que esas cifras están algo infladas. Lo cual no quita nada a lo terrible de estos crímenes y pecados gravísimos.
La Iglesia está siendo víctima de un ataque muy bien orquestado por el maligno.
Nos van a llover desgracias reales, irreales e inventadas a mogollón y no vamos a tener forma de separarlas.
Sí, Jordi. Eso es lo que escribí yo ayer y lo que pone el informe, por eso no he titulado con cifras de abusados como otros medios."
Me alegro, pero eso significa que los obispos franceses se han dejado engañar por una cifra que, ojo, me temo que convertirían a cualquier organización en una entidad criminal, pues además se ha hecho durante 70 años o así... ¿De dónde sacan a estos "redactores" de informes?
De manera que, si hemos de creer a estas cifras 'alegres', dichos clérigos dedicaban más horas de su vida a sus sesiones de pecado contra la castidad y el celibato que a oficiar la misa, administrar los sacramentos, predicar, orar, hacer penitencia, ir al baño, lavarse las manos y los dientes, dormir, comer etc. todo junto. Vaya, campeones interplanetarios de la lujuria.
https://lamurallacatolica.com/2021/10/06/no-estamos-contando-arvejas/
No se puede educar a una generación para que cargue contra los "relatos" y la historia, es decir contra sus propios antepasados, y esperar que se crean lo que ellos dicen ni siquiera envuelto en algo que parezca tan objetivo como una estadística. Si la objetividad no existe porque se la han cargado no queda otra medición que por palmos, es decir + o - según criterio de cada cual. Tampoco esperan que lo creamos pero siguen con su política de difama que algo queda.
Es imposible que la Iglesia lo haya hecho todo mal en el pasado, por lo que pedimos perdón, y todo mal en el presente. Un espantajo no dura 2.000 años. Hay que creer que ha habido abusos por los indicios que indican tal cosa, pero nunca cuántos porque ese dato no llegará jamás a nuestras manos.
Están cargando tanto la mano que los jóvenes más espabilados les van a aplicar a ellos el mismo metro-patrón que ellos quieren que se aplique a los demás y, de hecho, ya hay más de uno que lo está haciendo por lo que puedo ver.
Ingresos de Ana: 8.500 euros por mes. Ingresos de su esposo: 1.500. En promedio, el ingreso de cada uno es de 5.000.
Si un albañil levanta un muro en 60 minutos, 60 albañiles levantan el mismo muro en 1 minuto.
Si 2.900 abusadores cometieron 330.000 abusos en 70 años, cada uno cometió menos de 2 abusos en promedio.
Esas cifras escandalosas se parecen a las de las madres que mueren por abortos ilegales donde no hay leyes pro aborto, según los promotores de ese asesinato.
En la Carta del Dr. Bernard Nathanson, ex rey del aborto, confiesa que había entre 200 y 250 muertes/año de mujeres en abortos ilegales, pero la prensa decía 10.000.
Otros que le siguen el juego a la CIASE dicen: «1 solo abuso es mucho». Si Sauvé hubiera dicho: «En la Iglesia hubo 1 abuso entre 1950 y 2020», ¿cómo reaccionarían? ¿Con igual estupor?
Ese informe que lo archiven en el cesto de basura.
Si 2.900 abusadores cometieron 330.000 abusos en 70 años, cada uno cometió menos de 2 abusos/año en promedio.
Dejar un comentario
Últimos comentarios