¿Mi ánimo con lo de la renuncia del Papa?

La foto es impresionante y me identifico con ella.
Creo que perdemos a UNO DE LOS MEJORES PAPAS DE LA HISTORIA. ¿Cómo no llorar?

Gracias, Carlos. Totalmente de acuerdo.

Verdaderamente impresionante esta foto...

Es una foto que como ya se ha dicho, habla por sí sola. Estamos viviendo estos días, tristes y llorosos, con pena, pero también con alegría, pues después de leer las noticias sobre la frágil salud del Santo Padre, es necesario que tenga reposo, que descanse, seguirá siendo para muchos de nosotros, aunque ya no sea Papa, nuestro guía espiritual, el mejor que tenemos en estos tiempos tan difíciles.

La serenidad, la humildad, la fortaleza espiritual, aunque en su carne débil por la enfermedad, pero también ha sufrido por las divisiones de la Santa Madre Iglesia Católica.

Ya retirado trabajará mucho mejor sin que le interrumpan en la oración y contemplación.

Bueno es, que recemos por el próximo Papa, dejándolo siempre en manos de Dios, de quién podrá ser. Sin hacer caso a las estadísticas, es mucho más provechoso y más espiritual.

Con su permiso, comparto artículo y foto, Muchas gracias Juanjo,

Nuestros amados sacerdotes...lloramos con ustedes. Espíritu Santo Consolador derrama tus dones sobre Tu Iglesia

El monseñor terminó calmándose.
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Yo sospecho que Marini (seguro que era de los conocedores de "la bomba") lloró la noche que se enteró, a solas en su habitación.

Y muchas de mis esperanzas están puestas en él. Que el nuevo Papa no cambie de Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias y que se deje guiar por hombre tan sabio y entendido.

Por último una bonita foto que ilustra el final del pontificado de BXVI
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Benedicto nunca fue "nuestro", siempre fue y es de El.
Creo, (y perdón por mi ignorancia)que es el mensaje del Santo Padre, para que lo imitemos.
Una Gran Lección!! Ánimo!!

Grande, Benedicto!!
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Cuando se ama a la Iglesia, se ama todo lo que ella representa.

Alguien por favor que me explique esto:
EL ORDEN SAGRADO, es uno de los siete sacramentos de nuestra iglesia católica, junto con la EUCARISTIA fue instituído por Cristo en la última cena.La Eucaristía era posible porque existía el primero.Los que basamos bien o mal nuestra vida en esta creencia y en tratar de permanecer dentro de los demás estados sacranentales que elegimos sea como bautizados, confirmados,casados, según el yugo que nos imponen nuestros pastores, y no medimos fatigas físicas,psíquicas, ni espirituales para mantener la promesa hecha a DIOS en el momento de recibir esos sacramentos, confiados en que a pesar de nuestro parecer, debíamos acatar la infalibilidad papal. Ahora con que nos van a conformar si el pastor abandonó a sus ovejas?

Susana- el pastor no ha abandonado a sus ovejas, porque ante todo -como lo ha dicho el papa- es Cristo nuestro pastor. Y el sacramento que recibió Benedicto XVI es para siempre -ministro del sacerdocio de Cristo- y él no ha renunciado a él, es decir, él es obispo por simpre, "solamente" ha renunciado al ministerio de papa.
En ocaciones dar un paso al costado para que otro tome la posta es el mayor acto de amor y preocupacion por la grey.
Y por último hay que tener en cuenta que como sacerdote el ofrecer oraciones por el pueblo es una de las mayores "funciones" que puede realizar.
No desvaloricemos a la oracion y caigamos en el activismo solamente. ("Marta, Marta...")

Una foto magnífica que expresa el estado de ánimo en el que nos encontramos algunos. Tiene usted buen ojo para las imágenes, don Juanjo, no es la primera vez que resume una entrada con una imagen.

Además al amor Cristo en la sagrada Liturgía y a la Iglesia, su forma humilde trabajador de la viña del Señor, como pastor, siempre será recordado.

Se extrañara al Papa Benedicto XVI..

Muchas gracias a todos.

rojobilbao, no conocía las fotos, pongo la última.

Eva, un millón de gracias.

Aún está, como Papa. No dejemos de dedicarle cada día nuestras oraciones "por sus intenciones", que deben ser tremendamente intensas. Sumemos voces al Coro de la Comunión de los Santos, además de lágrimas, que lo uno no se riñe con lo otro. Claro que se puede llorar, aunque se esté lleno de esperanza y alegría confiada en que la Barca está segura. Creo que falta redescubrir lo hermoso y grande de esta comunión que se nos da en las lágrimas a tantos, tantos católicos del mundo, que no nos conocemos las caras, y sin embargo, en estos momentos ardemos por el mismo "calor de nuestros corazones", por nuestra Santa Madre Iglesia, y su Vicario. Bendita sea por siempre la Comunión de los Santos. Claro que no estamos solos, y mucho menos abandonados.

Una buena amiga me hace saber que el que se tapa la cara es Vincenzo Peroni.

Estoy totalmente de acuerdo con Susana. Y difiero completamente de lo dicho por Carlos. Si fuese uno de los mejores Papas de la historia no hubiese renunciado a serlo, es así de claro. Creo que con esto está dicho todo. Pensadlo. - Pero no es solo esto. Es que precisamente podría habernos ahorrado todo este dolor y esta desolación que estamos sintiendo, si hubiese seguido en su puesto. Sin embargo, a nosotros nos deja tristes y abandonados y llorando, como puede verse en la foto, y los enemigos de la Iglesia lo están celebrando. Menuda decisión, ¿eh? Yo siempre he estado pendiente de lo que ha dicho Benedicto XVI (he absorbido con deleite todas sus audiencias y homilías de estos siete años suyos de pontificado) porque he visto una gran coherencia entre su vida-fe-obra. Pero ahora, con su renuncia (un Papa puede, pero no debe renunciar, no es el jefe de una empresa, es el Vicario de Cristo en la Tierra, por Dios), ha perdido toda, absolutamente toda la credibilidad para mí. Sus alocuciones de estos días atrás ya me parecen palabras huecas, vacías, porque se ha roto, se ha quebrado esa coherencia. Ya da igual lo que diga, se ha ido del huerto de los olivos y no ha apurado el cáliz hasta el final, ha huido de la cruz. Esta es la verdad que muchos de vosotros no sois capaces de afrontar, por más que os duela. Pero en el fondo sabéis que es así. En estos días atrás, yo he dado una serie amplia de argumentos a lo largo y ancho de este blog con los que he explicado porqué me ha parecido muy mal que el Papa renuncie, lo que no quita las infinitas virtudes del Santo Padre, que siempre he elogiado. Una cosa no quita la otra. Un Papa no es Dios, y solo en infalible en materia de fe. ¿O es que, pongamos por caso, y no lo estoy ni mucho menos comparando, solo pongo un ejemplo, un católico no puede admitir que hubo Papas no muy buenos...? ¿Nos suena Alejandro VI, los Borgia y demás...? Pero, en fin, aquí parece que haga lo que haga un Papa está bien, aunque haga algo mal. Y no estoy ni muchísimo menos solo en esta opinión. En todo el ámbito católico en el que me muevo, que es bastante amplio, hay mucha indignación y mucha desolación. Nos sentimos traicionados. Ese es el ánimo de muchos católicos, Juanjo, para tu información: nos sentimos decepcionados y abatidos, defraudados y engañados. Y le pedimos a DIOS que una cosa así no se vuelva a repetir nunca más en el futuro.

Javiergo:
1.- El papado no es orden sagrado.
2.- En mi entrada del otro día explicaba que el fundamento del cariño filial al Pontifice no reside en su valía humana.
3.- Puedes mantener la opinión que estimes oportuna respecto a la renuncia. Sólo advertirte que no tienes todos los datos (yo tampoco)
4.- ¿Engañados, defraudados? No cuentes conmigo.

Por descontado, Juanjo. Cada uno es muy libre de sentirse en su ánimo de un modo u otro ante esta renuncia. Solo quiero dejar constancia, para quienes viven en los mundos de yuppi, que somos muchos católicos los que nos sentimos así, tal y como he explicado. No sé la cifra, obviamente, y eso no puede contarse, pero haberlos, haylos, te lo aseguro. Y lo que dice Susana tiene bastante fundamento. Creo firmemente que se ha dado un mal ejemplo y se ha sentado un peor precedente. Ojala me equivoque, te lo digo de corazón, ojala me equivoque, pero esta renuncia va a traer muchos problemas que eran totalmente innecesarios.

Para mi tambien la noticia de la renuncia de Benedicto XVI ha sido un duro golpe. No voy a mentir, mi primera reaccion fue la de sentirme decepcionada, y despues, triste. Pero con los dias he llegado a comprender las razones del Papa, porque es cierto, para dirgir la Iglesia se necesita tener energias. Benedicto XVI ya no se siente con fuerzas y cree que su permanencia en el Papado va a perjudicar a la Iglesia, por lo que su decision es mas que respetable y creo que sera para bien. Al menos en mi, ya esta produciendo buenos frutos. Me explico: nosotros nos sentiamos muy seguros y confiados porque contabamos con un Papa como Benedicto XVI y su brillante Magisterio. Muchos de nosotros nos apoyabamos enteramente en el. Yo particularmente, leia con mas ansias sus homilias, discursos y catequesis que el mismo Evangelio. Consideraba al Papa Benedicto mi guia espiritual pero me olvidaba que Otro es el verdadero Pastor de mi vida. Y ahora que Dios me ha quitado a mi "soporte" espiritual, no me queda otra opcion que volver a El. Creo que esta renuncia es un llamado de Dios para que depositemos nuestra confianza solo en El, quien es nuestro verdadero Guia.

-Pues para mi la noticia no ha sido triste ni mucho menos.

Sino más bien un: " gracias a Dios", por fin algo se mueve hacia donde debe moverse.


-Ahora por lo que viene para no caer en tentación: vigilia atenta y constante.

Estimado Juanjo:

Permíteme desarrollar un poco más tu respuesta a Susana. El sacramento del orden tiene tres grados: diaconado, presbiterado y episcopado. El papado no es un cuarto grado del orden sagrado. El Papa es un Obispo, el Obispo de Roma; lo cual no significa que sea sólo "el primero entre pares", porque a él y sólo a él le ha confiado Jesucristo la misión del primado.

A mí me sorprendió la renuncia y no me cabe duda de la honestidad y santidad del Papa. Pero en mi círculo es cierto que muchos corazones sencillos han sentido como un abandono o soledad.
Tampoco seamos duros con ellos, pues tenían un pastor que les ha dejado. No les importaba si estaba viejo o enfermo, lo amaban como al abuelo que no quieren perder por nada sea cual sea su estado.

Nadie vea crítica en esto, sino otra cosa a meditar que en el marasmo de las luchas intestinas quizás se haya perdido de vista: el amor y seguridad simple y sencillo de almas más pequeñinas que se han sentido como ovejas sin pastor.

Amor al Santo Padre y caridad y apoyo con las ovejitas un tanto perdidas.

Rezad mucho a Dios por el próximo cónclave que hace falta.

"... Claro que se puede llorar, aunque se esté lleno de esperanza y alegría confiada en que la Barca está segura..." (Bernardita)

Es lo que recuerda el último dolor de la devoción de los Siete Dolores de la SiempreVirgen María.

Esta claro que todos hemos reaccionado de distinta manera y seria absurdo discutir por eso o imponer a los demas nuestros sentimiento. Yo lo tome tranquila, quizas es mi forma de ser, y comprendo a quien se siente triste o decepcionado, lo que si le pido a javiergo que no nos incluya en su pensamiento. Aca cada uno comenta a titulo personal.

Benedicto XVI con 86 años, agotado de fuerzas que sólo van disminuyendo con el tiempo, renuncia al cargo porque no dispone de las condiciones necesarias para desempeñarlo.
Juan Pablo II con 85 años, muere, tras unos años en que fue perdiendo su fortaleza física. Apuró el cáliz hasta el final.
Ambos disponían de la infabilidad pontificia en materia de moral y costumbres. Ambos tomaron una decisión moral -respecto a si mismos y su responsabilidad- cara a Dios y dotados del don de la infabilidad.
Dos soluciones opuestas para la misma situación: cargo, responsabilidad, exigencias, edad, mala salud.
¿Son ambas morales? Es decir, en la Presencia de Dios, ambas soluciones ¿son "justas", "buenas" "agradables al Señor"?
¿Puede ser que la decisión de Juan Pablo II sea "heroica", mientras que la de Benedicto XVI se queda en una decisión "buena" (un grado menor de bondad)?
Esta es mi duda.
los cristianos cercanos al Opus Dei consideran acertada la decisión de Juan Pablo II y criticable la de Benedicto XVI.
Los cristianos cercanos a los jesuitas -cuyo general Hans Kolvenbach dimitió de su cargo a los 81 años- consideran que es acertada la decisión de Benedicto XVI.
En mi opinión, no segura, con el margen de la duda irresoluble, ambas decisiones son buenas moralmente. Pero la de Juan Pablo II fue heroica en su bondad, mientras que la de Benedicto XVI se ha quedado sólo en buena, a un nivel inferior a la otra.
El Papa pudo quedarse en el Vaticano, sin viajar, reduciendo toda actividad pública, quedandose a publicar homilías... pero no lo hizo. Pudo esperar a la muerte, que en breve, le llegará dada su avanzada edad.
Sólo si su mente ya comenzaba a no funcionar, podría aceptarse la renuncia. Pues entonces no sólo el cuerpo sino la mente de Benedicto XVI sería incapaz de asumir su función de Vicario de Cristo.
Faltan datos.
Pero con la poca información dada por el Papa no podemos analizar más(¿porqué no una Carta explicando con detalles sus motivos, dirigida a toda la Iglesia como en su día, por otro motivo, dirigió una carta a la Iglesia de Irlanda?)
Me quedo con la impresión de que Juan Pablo II fue heroico, y Benedicto XVI se ha quedado en bueno. Grados distintos de santidad.

Uno de los mejores pontífices que ha tenido la Iglesia, ¿Cómo no causó tristeza su dimisión? Miedo da pensar en quién se confiará la dirección terrenal de la Iglesia, cuando justamente no parece haber luz en el camino. La nave está siendo revolcada por olas cada vez más grandes, que amenazan hundirla. Sin embargo, aún en medio de la peor tormenta, el cielo siempre será azul, y el sol siempre iluminará el camino de la Iglesia.

Carpeto, así es, Benedicto XVI se trata de uno de los mejores pontífices que ha tenido la Iglesia. Por eso los creyentes de verdad le lloramos y nos duele su renuncia, no como los ateos, los progres, los paganos, y muchos cristianos, que aplauden que se vaya y dicen maravillas de su equivocada decisión. ¿Equivocada por qué? Tú mismo lo has dicho, Carpeto: "Miedo da pensar en quién se confiará la dirección terrenal de la Iglesia, cuando justamente no parece haber luz en el camino..." Nada de esto pasaría si el Papa se hubiese quedado en su puesto, máxime cuando no lo eligió él, sino que fue elegido por Dios para ese puesto. Sobre el origen de cada uno, sobre la fe que le sustenta y sobre la responsabilidad que nos es dada, no se puede desertar. Quien lo hace, pierde toda nuestra confianza. Solo resta orar para que el siguiente Papa no huya de los lobos ni abandonde a sus ovejas a su suerte. Necesitamos un Papa valiente y leal, que no anteponga su salud ni ningún interés personal a su ministerio; un Papa que no huya de las dificultades ni se arredre por las tormentas que amenazan a la Iglesia; un Papa, en fin, que confíe plenamente en Dios y que no se esconda por meras conjeturas sobre su futuro, que sólo Dios sabe; un Papa que viva el hoy, instante a instante, pues cada día tiene su afán, como nos dice el Señor.

Escribe Rastri: "Pues para mi la noticia no ha sido triste ni mucho menos. Sino más bien un: " gracias a Dios", por fin algo se mueve hacia donde debe moverse..." ¿Ah, sí? Hay algo que me intriga y no me puedo dejar de preguntar cuando os leo: ¿por qué, tras vuestras lágrimas (las de algunos, claro), os alegráis tanto de la decisión del Papa? Porque esto ya huele a sospechoso... ¿Tantas ganas tenías de que se fuera Benedicto XVI que aplaudís a rabiar su "heroica" renuncia? ¿Os dais cuenta que vuestro aplauso es el mismo que el de los ateos? ¿Sois conscientes de esto? Otra cosa: no hace falta esperar, ni perspectiva alguna. La Historia ya lo ha juzgado, al menos intraeclesialmente hablando. ¿Habéis estudiado a fondo cómo se trabaja en la causa de los santos, cómo se mira todo - hasta el más nimio detalle - con lupa? Hasta tres sacerdotes, que han estado en Roma, y conocen bien el asunto, me han mencionado personalmente que un acto como éste de la renuncia del Santo Padre - sean cuáles sean las causas que lo motivan, e independientemente de las consecuencias que se deriven - es per se una horrorosa e imborrable mancha en su carrera y en su vida. Una mancha, además, descomunal. Con razón, en uno de los Salmos se dice que no alabes a nadie mientras viva pues no sabes qué hará hasta el final...

La noticia de la renuncia del Papa no la esperaba, y aunque vi la pagina de un periodico digital ya por la mañana en el trabajo.
Tuve un momento de incredulidad y llame a mi esposo para que pudiese comprobarlo en otros periodicos digitales.
Pero mi sentimiento fue de tranquilidad y de comprensión, pues e el Papa tendrá sabias razones para renunciar. Eso si me fui a rezar a la Catedral al acabar el trabajo, y sali mas tranquila todavia. Muy "blandita" pero tranquila.
Tal vez comprendo la renuncia muy bien por tener unos padres de un edad similar a la del Papa. Se que a esas edades se tienen un monton de pequeñas dolencias que hacen que hasta caminar suponga un gran esfuerzo, y que hay un gran riesgo deterioros rapidos y repentinos por ictus, accidentes cardiovasculares ...
Creo que el Papa ha sido valiente, lo mas comodo era no hacer nada .
Creo que el Papa ha considerado su propio deterioro, que si llegase a no estar en plenas facultades, no seria bueno para la Iglesia.
Tambien habra considerado el desconcierto que podria producir en algunos.
Todo lo habra sopesado y ha adoptado una decisión orada, meditada y sabia. Ahora con la silla vacante, esta el principio de que nada se puede innovar y se puede hacer un Conclave con tranquilidad y sin pasos atras.
Los juicios negativos al Papa que se han expuesto me parecen muy atrevidos y soberbios.
La comparación con la actitud de Juan Pablo II es inadecuada ¿ es que la secularización es la misma? ¿Es que los ataques a la Iglesia no son ahora mayores? Juan Pablo II sin duda podia estar tranquilo cuando estaba enfermo, que el Cardenal Raztinger estaba muy cerca . ¿ No lo vimos que Ratzinger oficiaba los oficios de Semana Santa y hacia el Viacrucis mientras que Juan Pablo II lo seguia en TV.?

Jabiergo

-En este mundo la impaciencia porque los acontecimientos previstos se precipiten lo antes posible es el síntoma del hombre prevenido y avisado. En algunos, yo diría, mejor de hombres justos.

- En aquel día de la última cena y a pesar de saber lo que después se le venía, Jesús, le dice a Judas: -" Lo que tengas que hacer hazlo pronto".

-

El articulo de Messori me confirma que Dios ha puesto en el corazon y la conciencia del Papa que la Iglesia necesita de nuevos operarios.

Me llama poderosamete la atención la actitud de quienes elogian todas las medidas tomadas por Benedicto XVI, menos presisamente la última.
Porque no les ha gustado.
Incoherencia pura y dura.
Si el Papa todo lo ha hecho AMDG, ¿por qué suponer que su último gesto no tuviese la misma inspiración? Porque ojo, Juanjo lo ha dicho certeramente : no tenemos todos los datos. Juzgamos por lo que nos duele, entonces juzgamos mal.

Pero si mal me parecen esos juicios temerarios, peor lucen quienes manifiestan "miedo" por lo que pueda suceder luego del cónclave. ¿Miedo a qué? ¿O acaso olvidan que antees y detrás del futuro Papa estará simpre el Espíritu Santo? ¿O acaso olvidan las proféticas primeras palabras de JPII, tan apropiadas para estos momentos :"NO TENGAIS MIEDO"?

San Juan Bosco decía con entera razón que “el principio de todo vicio es la soberbia”. El libro de los Proverbios dice: “Yahvéh destruye la casa de los soberbios, y mantiene en pie los linderos de la viuda” (15, 25). Ya en el Nuevo Testamento, la Santísima Virgen María canta: “Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios de corazón. Derribó a los potentados de los tronos y exaltó a los humildes” (Lc 1, 51-52). Y Santiago ratifica: “Dios resiste a los soberbios y da su gracia a los humildes” (Sant 4, 6). Santo Tomás de Aquino, confirmando la opinión de san Gregorio, consideraba a la soberbia como la reina de todos los vicios, entendiendo que es esa estructura mental en la cual un hombre, a través del amor a la propia valía, aspira a alejarse de la sujeción a Dios Todopoderoso. San Agustín afirmó lo siguiente: “La soberbia no es grandeza sino hinchazón; y lo que está hinchado parece grande pero no está sano”. San Jerónimo comentó: “No se le acusa en la Sagrada Escritura (al rico Epulón) de poseer sus riquezas inicuamente, ni que derrochó con meretrices, ni de ser homicida o de haber cometido cualquier otro crimen, sino que, si examinas lo que está escrito en el Evangelio, verás que su mayor pecado, entre todos los pecados, fue la soberbia: en su hartura y abundancia no tuvo conmiseración con aquel que yacía ante sus puertas cubierto de úlceras”. - El Catecismo de la Iglesia Católica, nº 1866, nos sitúa la soberbia como el primero de los pecados capitales: “Los vicios pueden ser catalogados según las virtudes a que se oponen, o también pueden ser comprendidos en los pecados capitales que la experiencia cristiana ha distinguido siguiendo a S. Juan Casiano y a S. Gregorio Magno. Son llamados capitales porque generan otros pecados, otros vicios. Entre ellos soberbia, avaricia, envidia, ira, lujuria, gula, pereza”. Más adelante señala a la soberbia como fuente de otros pecados: “El odio a Dios tienen su origen en el orgullo; se opone al amor de Dios cuya bondad niega o lo maldice porque condena el pecado e inflige penas” (nº 2094); “La envidia procede con frecuencia del orgullo” (nº 2540). Como ves, Mª Pilar, este es, sucintamente, un resumen sobre el pecado de soberbia. También lo he buscado en el diccionario; y, en fin, que por más que se mire por cualquier lado, no hay razón ninguna, Mª Pilar, para que afirmes esto: "Los juicios negativos al Papa que se han expuesto me parecen muy atrevidos y soberbios". Hablar de soberbia es hablar de palabras mayores, oye. Se me podrá acusar de cualquier cosa, menos de soberbia por haberme opuesto a la renuncia del Papa. Creo que la suya ha sido una decisión equivocada y afirmar esto no es 'soberbia', ¡por Dios!, sino libertad de expresión, sí, libertad de expresión, a la que los españoles no estamos nada acostumbrados y a la que respondemos con descalificaciones desmesuradas y completamente injustificadas.

Ricardo, no le des más vueltas. Al final de hasta la vida más 'perfecta', se puede comenter un error. Y hasta cometer pecados gravísimos, como le sucedió a Salomón, que terminó cayendo en la idolatría. Y, al revés, después de una vida de pecado y de ruindad, se puede uno convertir y hacer el bien. 'No alabes nunca a nadie, porque no sabes cómo será su final', dice un Salmo.

Creo que no estamos respetando suficientemente el criterio del Papa para renunciar. Ni tampoco estamos atendiendo suficientemente a la explicación que ha dado. Es clarísima y no se refiere a su estado físico y psicológico en abstracto, sino en concreto: en función del digno cumplimiento de su misión. ¡Está siempre pensando en la Iglesia!
Creo que el último editorial de la Civiltá Cattolica lo ha dicho muy bien: en el momento actual de la Iglesia, y ante lo que se avecina (eso sí lo ve el Papa mejor que nosotros), no se considera con la suficiente fuerza física y mental.
Pensando, pues, en su misión (no en su persona solamente) considera conveniente hacerse a un lado, y dar oportunidad para que otro Papa pueda hacerlo mejor que él. Y él dedicarse a apuntalarlo espiritualmente con su oración y dolor (el que sea).
Lo que tenemos que hacer nosotros es respetar, agradecer, orar por él. Y por el que venga.
Y no marear más la perdiz, sobre todo con algunos juicios que aparecen aquí, que me parecen descaminados.

Yo sentí tristeza, porque un gran Papa deja de guiarnos. Nunca sentí decepción porque creo que su decisión de renunciar es voluntad de Dios. Por eso también siento esperanza pues el Espiritu Santo dará a la Iglesia el Papa que necesitemos.

Igual que veíamos a un santo en Juan Pablo II por su heroismo, veo otro santo en Benedicto XVI por su generosidad y por dejarse en manos de Dios. Compararlos es como comparar a dos santos cualesquiera ¿quién es más santo: San Esteban, San Agustín, San Lorenzo o Santa Teresa? Sólo Dios lo sabe y no me siento capaz ni de especular con ello ya que estaría juzgando (yo que no llego ni a buena persona) a todo un auténtico santo.

JAviergo, te respondo con las palabras de Percival(gracias). Son ajustadísimas.
Por supuesto que nadie está excento de un desliz, de una claudicación, de un renuncio o de un error. Pero oye, no hay absolutamente ningún indicio de que ése sea el caso de la decisión papal, tomada con estudiada meditación y conciente él de la gravedad de lo que hacía. Además vamos, que basta mirar las últimas fotografía para darse cuenta que como hombre estaba cansadísimo, agotado.
El esquema de tu argumentación puede resumirse así:"Siento ésto, luego 'razono' en consecuencia."
Reléete y verás que es así.

Nos ha dejado grandes lecciones, porque sentirse tristes, al contrario, EL va a seguir orando por nosotros, la Iglesia.

Alfredo, quiero decirte algo. Juan Pablo II ya ha sido beatificado, y no cabe duda sobre su santidad. De nadie vivo puede decirse que es 'santo' (no solo me refiero a Benedicto XVI, sino a cualquier cristiano del mundo) o bien lo somos todos, en el sentido que le daba San Pablo a los hermanos/as en la fe pues todos estamos llamados a la santidad. Sentado esto, decir de Benedicto XVI, a título individual, que es un "auténtico santo" es mucho decir, también equivale a juzgar. No es un santo ni lo contrario, sino un Papa que ha renunciado a serlo. Unos lo admiran por ello (estáis en vuestro derecho), a otros nos causa escándalo y estupor (también estamos en nuestro derecho). Por cierto, en puridad, tal y como rezamos en el Confiteor, sólo Dios es santo.

Al menos, Ricardo, admitirás algo en lo que creo, por todo lo que he leído, que estamos todos absolutamente de acuerdo. Tanto los que han visto bien la decisión de Benedicto XVI como los que no. Me refiero al HECHO de que esta renuncia ha sido algo completamente excepcional (¡no había sucedido algo así desde hace 500 años, que se dice pronto!). Una renuncia papal es algo anómalo y extraño, habida cuenta que el 99% de los Papas mueren como Papas, que es lo normal y lo natural en toda la Historia de la Cristiandad, ¿o no? Como sabemos TODOS que es de esta manera, que no me venga nadie entonces queriendo manipular la realidad, intentando convencernos de que todo esto que estamos viendo es maravilloso, porque no es así. Es algo que no debiera pasar nunca, pues una renuncia no es lo normal. A no ser que seamos como Hans Küng y otros herejes que piden la jubilación de los Papas a los 75 años, o que lo sean temporalmente. Esto ya sería un cachondeo, y restaría enormemente el prestigio y la credibilidad de la figura del Sumo Pontífice. Seamos serios. Por último, yo procuro de verdad ser objetivo. Lo que no me parece objetivo es que porque nos caiga muy bien alguien (lo cual es totalmente legítimo) ya, haga lo que haga, esté bien. Pues va a ser que no. Yo he elogiado el 98% de las cosas que ha hecho Benedicto XVI, porque considero que las ha hecho bien o muy bien, pero lo he criticado cuando he creído que tenía que hacerlo, como cuando, por ejemplo, en su viaje a Cuba se entrevistó el el tirano de Fidel Castro y sin embargo no recibió a las Damas de Blanco ni a nadie de la oposición al régimen comunista. De esto se habló en este blog. Yo soy objetivo, pero muchos de vosotros no, porque os negáis a ver los matices de las cosas. Os creéis memeces increíbles como que criticar la actuación concreta y puntual de un Papa es "soberbia", "pecado" y tonterías por el estilo, como si fuéramos niños sin juicio. ¡Si hasta San Pablo le echó una 'bronca' a San Pedro! ¿Y diremos algo contra San Pablo también? Un poco de seriedad, Ricardo y cía.

JAviergo, tu estilo vehemente hace pensar en una persona joven, pero tus argumentaciones son de un conservadurismo esclerotizado: ya que no sucedió antes, está mal que suceda ahora.

A ver, ¿también estás en desacuerdo que los obispos renuncien a los 75 años, y los cardenales a los 80, porque eso no pasó antes jamás entre Pentecostés y el siglo XX?

Sobre la excepcionalidad de la renuncia, y tomando como referencia la de Celestino V, podría recordarse que éste fue canonizado escaso veinte años después de su fallecimiento.

Con esto, lo que quiero decir es que las comparaciones... no sirven, y que cada situación es la que es. Y si la renuncia está prevista, es porque pueden concurrir circunstancias extremas que la hagan conveniente e incluso necesaria.

Y por el discurso del Papa (del que se hace caso omiso), todo apunta a esas circunstancias extremas, actuales o futuras.

Javiergo, Dios no elige al Papa. Lo eligen los cardenales y el Espíritu Santo garantiza las gracias necesarias al elegido para cumplir su misión.

Como dijo una vez con cierto humor el entonces Card. Ratzinger: "El Espíritu Santo no elige al Papa, más bien procura que la elección no sea un desastre".

Su decisión sólo será comprensible en el futuro. Algunos dice que da miedo quién salga elegido. Aunque no hubiera renunciado Benedicto, por su edad en pocos años habría que haber elegido otro Papa. Es decir, ese temor siempre iba a estar ahí, dado el estado actual de la Iglesia.

En todo caso, creo que Benedicto XVI no ha abandonado el barco porque sí, como si simplemente se jubilara, sino porque ve que no es capaz de gobernar una nave en la que cada uno hace lo que quiere. Él mismo dijo que lo hace por el bien de la Iglesia.

Por cierto, Benedicto XVI ha nombrado durante su Pontificado a muchos cardenales electores. Cabe pensar que no escogió a los peores, sino a los que mejor puedan servir a la Iglesia y salvaguardar su mensaje y su Tradición.

Del próximo Cónclave no temo nada, eso sí que lo digo. Estoy convencido de que todo marchará bien. Y entiendo también que, después de su decisión, Benedicto XVI quiera - en palabras suyas - retirarse del mundo. Es lo mejor que puede hacer después de la renuncia, pues no tendría sentido retirarse e inmiscuirse al mismo tiempo en las decisiones del próximo Papa, porque para eso mejor que no hubiera renunciado. Benedicto XVI es un hombre muy discreto y muy prudente, amén de inteligente, de modo que estoy seguro que se refugiará en la vida contemplativa. Orará por todos. Espero poder entender y aceptar algún día su renuncia, aunque lo dudo, porque me sigue pareciendo una claudicación impropia de una persona tan íntegra y tan fiel como él. Es que no le pega nada lo que ha hecho, y me sigue sin caber en la cabeza. Yo creo, tal y como insinuó Juanjo, que nos faltan datos... Un saludo en Cristo Jesús

Benedicto XVI decide renunciar al papado el miércoles de ceniza y con ello nos propone una reflexión sobre el significado de la cuaresma. "Convertíos y creed en el Evangelio" es el grito del miércoles de ceniza y va dirigido a todos, a todos, también a sus compañeros obispos y cardenales, también a los fieles laicos. Son 3 las tentaciones de Jesús, como 3 los presentes que recibe en el pesebre, como 3 las personas de la Divinidad. El cuerpo (el hambre), la mente (el poder, el orgullo), el alma (la soberbia). Rey, sacerdote, profeta.
Una reflexión sobre nuestros pecados, sobre la necesidad de la penitencia.

Ricardo, no soy joven - ¡qué más quisiera yo! :) -, tengo casi 50 años, estoy casado y mi mujer y yo tenemos dos niñas preciosas. Mi vehemencia proviene de la educación católica que he recibido, de las personas de fe de las que me he rodeado, incluyendo el que fue mi director espiritual durante más de veinte años, un extraordinario sacerdote que murió el año pasado a los 90 años de edad. He recibido una educación y una formación en la que siempre me han quedado claros (entre otros muchos aspectos de nuestra fe, claro está) los dos pilares fundamentales del cristiano: que no podemos nada, que todo es Gracia; y el amor a la Cruz redentora. Y que un cristiano íntegro y leal muere con las botas puestas en el lugar que Dios lo haya puesto, ya puedan soplar huracanes y mil rayos, porque Él nunca nos abandona. No soporto las deserciones, por muy explicadas y justificadas que se quieran poner. ¿Has visto la película producida por Gibson titulada 'El hombre que hacía milagros', realizada con muñecos de látex, que versa sobre la vida de Jesús? Yo la vi en el cine en el año 2000, y desde entonces ha circulado por todas las parroquias de España pues es sumamente didáctica para las catequesis. En un momento dado de la película, que es extraordinaria, se ve el instante crucial en el que Jesús gotea sangre mientras reza en el Huerto de los Olivos. Pues bien, hay una imagen que nunca olvidaré. Cuando nuestro Señor Jesucristo está pidiendo al Padre que aparte de él ese cáliz, aparece de repente un viento que mueve unos árboles y Jesús percibe, durante unos segundos, como un camino de salida, de escapada, para poder marcharse del huerto y de su destino sin ser visto. Es una tentación más del Enemigo, como aquellas del desierto. Como sabemos, Jesús rehusó tal salida y afrontó el Vía Crucis. Pues bien, todos los santos y los mártires han tenido en un momento crucial de sus vidas esa 'ventolera', ese camino de salida. Recuerda, Ricardo, a Santo Tomás Moro. ¡Era aparentemente tan sencillo, solo tenía que estampar una firma y saldría en libertad! ¡Era solo una firma, como su misma familia le decía! Era también su camino de salida, el viento entre los árboles, pero Santo Tomás Moro no firmó jamás el acta de divorcio de Enrique VIII y fue por ello decapitado. ¡Santo Tomás fue fiel y leal al Señor y a su Iglesia hasta el final! Ecce Homo... También el Beato Diego Ventaja Milán, el Obispo Mártir de Almería, tuvo esa oportunidad de escapar en julio de 1936, cuando le propusieron que se marchara para salvar la vida en un barco estadounidense que estaba atracado en el puerto de Almería. Él también miraría de reojo ese viento entre los árboles, pero no cogió el barco, se quedó con sus ovejas como buen pastor, y dio la vida por ellas, pues fue detenido y fusilado por los comunistas un mes después... En fin, Ricardo, ¡hay tantos casos de lealtad hasta la muerte! ¿Te imaginas a estos santos y mártires, y a otros muchos, reparando en que si su salud física y psíquica, que si no pueden porque están cansados, que si esto y lo otro...? ¿Qué me dices ahora, te parece bien que Benedicto XVI haya escogido ese camino entre los árboles? ¿Es esto mío vehemencia o coherencia? Pase lo que pase, o pueda pasar, no se puede desertar, y no me haréis ni a mí ni a otros muchos católicos ver lo blanco como negro. Lo que lamento de veras es que no lo veáis vosotros también así, con lo claro está. O sencillamente tenéis una capacidad increíble para engañaros a vosotros mismos. Sea como fuere, en el fondo admiro vuestra inocencia.

He tenido la paciencia de leerme todas las entradas de este blog, cosa que nunca hago, sobre todo por las manifestaciones de Javiergo. Estoy con usted,señor Javiergo, y desde luego, como usted asegura somos muchos los que opinamos como usted. Tiene usted, a mi entender, muchísima razón y defiende sus argumentos con vehemencia y con fe. Las dos cosas son necesarias hoy en esta nuestra Iglesia adocenada, acomodada y muy insuficientemente instruida.Yo también he sentido fervor por el Santo Padre B.XVI a lo largo de su pontificado, pero se ha ido de Getsemaní. Es muy evidente. Mi admiración y mi respeto por él continúan, pero disminuidos. Lo que ha hecho, la abdicación, abre un campo de consecuencias incalculables, y no positivas, para los siguientes pontificados; y positivas para los enemigos de la Iglesia.

Es evidente que faltan datos y porque no pensar que esos datos que faltan son los que han llevado a Benedicto XVI a tomar esa decisión,y no empezar a decir cosas como deserción,huida de la cruz, que se ha ido corriendo de Getsemanì y bobadas varias. El Papa conoce mejor que nadie la situación de la Iglesia, no creo que vaya a hacer nada para perjudicarla.

Es evidente que nosotros no tenemos todos los datos del asunto, y que si alguien como Benedicto XVI ha decidido nada menos que renunciar al Papado, es porque ha sido movido por razones para nada despreciables. Tal vez ha temido que se aprovechase alguna debilidad física o intelectual suya para querer hacer entrar a la Iglesia por un camino equivocado. Fijémonos todas las cosas "raras" que han pasado en estos días tras anunciarse su renuncia y que aquí figuran muchas en la sección de noticias.

Estoy convencido de que el motivo de la renuncia del Papa ha sido el que expone Néstor: tiene miedo a que alguien se aproveche de su creciente debilidad física o intelectual para manejarle a él o al gobierno de la Iglesia. Y en ese caso me parecería prudente dejar paso a alguien que tenga sus fuerzas intactas para no sólo para llevar los asuntos de la Iglesia, sino para llevar al mundo entero la palabra de Cristo, que es algo que han hecho los últimos Papas y es algo que produce un gran desgaste que él ya no puede asumir.

Le invito a Javiergo que se vaya y le eche en cara a Benedicto XVI todo lo que viene hablando en este y otros blogs. Que sea valiente y pida una audiencia privada. ¡Ya está bien!

Aun no terminamos de comprender lo que pasa.
Es una estrategia brillante de un hombre brillante inspirado, creo yo, por el Espíritu Santo, para remover y exponer a la Iglesia ante si misma: O somos Iglesia - Pueblo de Dios - o una institución humana al servicio de intereses terrenales. Si ésto lo ligamos a la resaturación de los 2/3 para elegir Papa, lo que se elija esta vez va a definir trascendentalmente el futuro de los cristianos católicos.
Por eso, no lloro. Mi corazón se alegra esperanzado.

No seamos niños.
Un niño juzga a su padre por el castigo recibido porque aun no comprende la mente del padre, que está viendo su futuro, lo cual comprendemos recien cuando ya somos adultos con nuestros propios hijos.

Es evidente que nosotros no tenemos todos los datos del asunto, y que si alguien como Benedicto XVI ha decidido nada menos que renunciar al Papado, es porque ha sido movido por razones para nada despreciables
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A ver si infocatolica y Luis Fernando entran en razón y asumen esto mismo, porque todo el mundo se pregunta qué hay detrás de esta decisión mientras en este medio se asume de manera artificiosamente normal, como su fuese la jubilación de un funcionario.

Lez, no tendría el más mínimo problema en hablar con Benedicto XVI sobre este asunto. Pero hay dos problemas que son completamente ajenos a mi voluntad. Uno, que conseguir una audiencia privada con el Papa es dificilísimo; y, en segundo lugar, que como eso lleva su tiempo, si me la 'concediera' ya sería tarde, pues estaría retirado en el convento. Ahora bien, si su renuncia la hubiese anunciado con tres o más meses de antelación, no dudes que hubiese solicitado tal audiencia. Lo que lamento y mucho es que no haya tenido buenos consejeros a su alrededor que le hayan disuadido de una decisión tan lamentable. Igual que Natán reprendió a David - valga la comparación - ojalá alguien del entorno del Santo Padre le hubiese advertido de que tal decisión no era la correcta ni la propia de un Papa, menos en los turbulentos tiempos que vivimos. Pero bueno, ha pasado lo que ha pasado, y la historia juzgará, aunque lo más importante es el Juicio de Dios. Ahí obviamente, ni yo ni nadie en este mundo, puede entrar. Uno solo opina y critica lo que cree que debe criticar en conciencia.

La falsa informacion sobre que el Papa aprobo la pildora del dia siguiente nos ayuda a reflexionar sobre tal posibilidad. Si faltando diez dias para que el Papa deje de serlo sacan esto aprovechando la confusion que ha generado esta renuncia ¿que pasaria si esta falsa informacion se da con el Papa postrado en una cama? nos quedaria la duda si la sangre no le irriga bien el cerebro o si lo dijo concientemente. Creo que Benedicto sabe algo que nosotros no sabemos y no nos lo han comunicado. Si esto hubiera ocurrido con Juan Pablo II, el cardenal Ratzinger hubiera salido a desmentir esa falsa informacion y a nadie le hubiera quedado alguna duda porque el ex Prefecto no solo era el guardian de la fe sino su intimo amigo y confidente. Hoy de quien se puede decir lo mismo? Ganswein?

Juanjo
Pruebe a decir lo mismo sin blasfemias. Gracias.

Vaya por Dios, nos entró un troll evangélico con los tópicos manidos de siempre y las mentiras luteranas de turno, para repetir como un papagayo las sandeces que les pregonan sus heréticos pastores un día sí y otro también. Deja de odiar a la Iglesia Católica, pues ofenderla como tú has hecho es ofender al mismo Cristo, y además esto es intolerable en un blog católico. Ya te he denunciado al dueño del blog y al dueño de este post para que borren tus gravísimos insultos al Papa y a la Iglesia.

jajaja, sí, es un troll evangélico. Se equivocó de lugar, hay foros protestantes donde pueden descargar todo ese veneno.

Ruego a Dios para que el próximo Papa pueda ejercer su Autoridad Apostólica y sea obedecido por cardenales, obispos y movimientos eclesiales. A Benedicto XVI le han tomado por el pito del sereno desde los Obispos (todavía no han incluido la traducción del 'pro multis' en la Consagración) a los movimientos (los kikos han pasado olímpicamente de ajustar su liturgia a las instrucciones del Papa). Eso por no hablar de los cardenales que en la Curia han hecho y deshecho a su antojo bajo cuerda.

Que el Señor nos permita un Papado con orden y obediencia.

Se habla aquí de que una posibilidad de explicación de la abdicación del Papa haya sido el evitar verse un día dominado y manipulado por una camarilla de indeseables que gobiernen la Iglesia contra su voluntad, una vez enfermo y disminuido física y mentalmente. A lo peor resulta que también B.XVI ha podido tener parte de responsabilidad en esa hipotética situación por no haber depurado la curia cuando pudo hacerlo. No hay más que ver a quien ha mantenido y a quien ha nombrado.

Adoretur. La explicación de la renuncia del Santo Padre la ha dado el mismo, de modo claro y explícito, y no hay que buscarla en otro sitio o al margen de la fe.

Le sugiero que deje de insultar y difamar sin fundamento a las personas que sirven a Cristo y Su Iglesia en al Curia Romana.

La explicación que ha dado Adoretur como posible causa de la abdicación del Papa no es descabellada. Puede que sea ése el motivo. Y decir tal cosa, como afirmar además que "B.XVI ha podido tener parte de responsabilidad en esa hipotética situación" no es, ni mucho menos, un insulto ni una difamación, sino una opinión respetable. Chimo Vice es ese tipo de persona a la que le molesta mucho la libertad de expresión. Si alguien no opina como él, la opinión del otro es una "blasfemia", una "injuria" e incluso un "pecado", etc. '¡¡Quien no piensa como yo, está en pecado!!', tal es el lema de muchos que se llaman católicos y que más parecen seguidores de Mussolini que de Cristo. A Chimo, como a otros, le molesta que haya católicos como Adoretur y como yo, que nos haya parecido mal la renuncia del Papa, como si oponerse a ella fuese contravenir un dogma de fe. Fijémonos hasta qué punto además ha sido una decisión equivocada, que ya se está viendo por sus frutos inmediatos: la profunda división que ha creado entre los católicos que están a favor y en contra de tan controvertida e inusual renuncia.

Lo fácil es renunciar, claudicar, abandonar, tirar la toalla... Yo no tengo buena salud, y temo además perderla, estoy viejo y muy cansado (un bostezo), y prefiero retirarme a un convento a rezar y a escribir, que estaré más a gusto, alejado de las responsabilidades del Papado para el que fui elegido por el colegio cardenalicio y que me fue conferido por Dios. Que otro cargue ahora con este 'marrón'. Aquí tenéis, traducida literalmente, la verdad de la posición de Benedicto XVI, la que hemos visto todos los que todavía tenemos ojos para ver y no somos dados a la adulación ni al autoengaño. Los que agasajáis al Papa renunciante no habéis meditado lo suficiente - y eso que estamos en Cuaresma - en los argumentos más que sólidos y fundamentados que he dado, sobre todo el último sobre los mártires. - Algo está claro, clarísimo como el agua de un manantial, el Papa Benedicto XVI no ha escogido el camino angosto, sino el amplio. Ha hecho justo lo contrario de lo que aconsejaba un gran santo y Doctor de la Iglesia:

Para venir a gustarlo todo

no quieras tener gusto en nada.

Para venir a saberlo todo

no quieras saber algo en nada.

Para venir a poseerlo todo

no quieras poseer algo en nada.

Para venir a serlo todo

no quieras ser algo en nada.

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Para venir a lo que gustas

has de ir por donde no gustas.

Para venir a lo que no sabes

has de ir por donde no sabes.

Para venir a poseer lo que no posees

has de ir por donde no posees.

Para venir a lo que no eres

has de ir por donde no eres.

________________________________

Cuando reparas en algo

dejas de arrojarte al todo.

Para venir del todo al todo

has de dejarte del todo en todo,

y cuando lo vengas del todo a tener

has de tenerlo sin nada querer.

________________________________

En esta desnudez halla el

espíritu su descanso, porque no

comunicando nada, nada le fatiga hacia

arriba, y nada le oprime

hacia abajo, porque está en

el centro de su humildad.

Es que no hay necesidad de la agresividad de Adoretur.

Podría haber dicho,que una posibilidad de explicación de la abdicación del Papa haya sido el evitar verse un día utilizado por un conjunto de bienintencionados miembros de la curia romana, que gobiernen la Iglesia sin conocer su voluntad, la que no podrá expresar claramente, por estar tan enfermo y disminuido física y mentalmente.

Y me resulta curioso, que haya necesidad de la hipótesis de una "camarilla de indeseables", para aceptar lo que ya dijo Benedicto XVI, a saber que veía en el una disminución física y mental, que no lo hacía apto para seguir siendo Papa.
Así estuviera, rodeado de los más santos varones, estos deberían decidir, con el tiempo, entre adivinar su voluntad o declararlo incapaz, y seguramente eligirían lo segundo.
En definitiva Benedicto XVI, ha avizorado su futura incapacidad, cuando aún era (es) capaz de asumirla.

No tengo ni qué decir que los poemas anteriores son de San Juan de la Cruz. Fijémonos en estos versos:

Para venir a lo que gustas
has de ir por donde no gustas.

Usted quiere la paz y la tranquilidad de un convento, pero no la va a encontrar ahí, pues el Espíritu Santo lo eligió para ser Papa e ir por donde no le gusta, pues siempre un cristiano escoge el camino más desabrido y no el de su propia comodidad.

Cuando reparas en algo
dejas de arrojarte al todo.

¿Y si me da otro ictus? ¿Y si tengo otro accidente cardiovascular? ¿Y si no puedo ejercer mi ministerio? ¿Y si...? Reparar en tantas cosas no es propio de un Papa, ni siquiera del último cristiano de a pie sea cual sea su estado. Cada día tiene su afán y hay que entregarse en las manos de Dios hasta el último suspiro, a imitación de Cristo, no reparando en salud ni en beneficio alguno propio, arrojándose al todo, confiando plenamente en Dios. NADA de esto ha hecho el Papa, que con un solo acto ha borrado de un plumazo toda su vida de servicio a Dios y a la Iglesia, dándonos a todos los fieles el ejemplo claro y nítido de lo que nunca se debe hacer. Más claro, imposible

Pero ¡qué rayos nos pasa! Si Juan Pablo II no renunciaba a pesar de sus dolencias, decían que debería renunciar. Si Benedicto XVI renuncia por sus dolencias, dicen que no debió renunciar. Malo si sí, malo si no. Benedicto renunció porque no quiere que otros lo manejen, de pronto yerren y la grey se desoriente en lo doctrinal. Su entereza no es entendida. "Yo soy el Papa. Yo debo tener el control. Eso les da seguridad a los católicos. Si mi declive físico y psicológico me impide tener el control y debo delegarlo asumiendo la responsabilidad final de algo que otros hicieron, prefiero renunciar para bien de los católicos y de la Iglesia". ¿Eso no se puede entender?

"Se alteraron mis lecturas escritas en libros sagrados de NEGOCIOS OSCUROS, LAS MANCHAS DE SANGRE DE SUS HERMANOS QUE DESTRUYERON SU FISICO POR ORDEN DE UN NEGOCIO DE ARMAS PARA UNA GUERRA ENTRE HERMANOS, ESOS SON LIBROS ESCRITOS CON SANGRE, ESE NO SOY YO, ESE NO ES MI LIBRO ESCRITO, ESE ES EL LIBRO DE LA OSCURIDAD. Doy mi señal de la cruz bendita para el que desea escucharme, tengo el placer de estar entre ustedes, todos los días de un año serán mi caminar junto a ustedes, se abrirán puertas cerradas con doble llave, se caerán muros y se volaran los techos donde se falsifican mi PALABRA."- MAESTRO JESÚS

"Aprendan que hay humanos ignorantes que imparten bendiciones con sus manos y dedos señalando una cruz que aún no cargo y por esa cruz se le juzgara ya mismo sobre la tierra sin llegar al tiempo del último día en la tierra portando un físico. Todo aquel que imparta bendiciones en mi nombre serán JUZGADOS ANTE LA DIVINIDAD EN ESTE MISMO LUGAR Y TIEMPO PUBLICAMENTE Y CAERAN DE RODILLAS EN SUS PUESTOS DE TRABAJO OSCUROS EN DONDE ME NOMBRAN Y HACE DE MI NOMBRE FORTUNAS DE PODER PARA DESTRUIR MI HUMANIDAD.(...)Dejen de ignorar que ya estoy pisando tierra y transmito desde la tierra misma, dejen de ignorarme y dejen de escuchar mentiras, traten de ser sensatos a la hora de escuchar, traten de hablar y tomar conciencia, escuchar y tomar conciencia, estudiar y tomar conciencia, no crean nada sin tener la TEORIA Y PRACTICA DIVINA." - MAESTRO JESÚS

¡Dios mío, otro troll! Esta vez parece que pertenece al Curso de Milagros, a Samuel An Weor o algo así, por el estilo a la Nueva Era, y que nos viene con sus mensajes astrales que nada tienen que ver con el tema de este post, sea dicho de paso. En cuanto a Ene Roa, pues vale, lo que tú digas, pero piénsalo bien: por esa regla de tres, todos los próximos Papas - hasta el fin de la historia - renunciarán a su pontificado antes de morir, convirtiéndose por tanto lo que es un hecho puntual y excepcional (la renuncia de Benedicto XVI) en una costumbre, en algo habitual. ¿Te imaginas el enorme desprestigio que conllevaría tal cosa a la figura del Papado? ¿Has medido las consecuencias de tal actitud? Es lo que nos faltaba. Mira, visto lo visto, diré algo: estoy deseando, pero lo que se dice deseando que lleguen las 20 horas del 28 de febrero, y se acabó. Que se retire ya de una vez quien no ha querido seguir donde le corresponde. Además, se le ve tan contento al Papa, con esa sonrisa de quien está deseando largarse y eludir sus responsabilidades, acelerando todo el proceso del cónclave. ¡En fin, que le vaya bien, Santo Padre, se lo digo de corazón! No tenemos ni idea de cómo le juzgará la historia y menos aún, claro está, de cómo le juzgará Dios, pero muchos, muchísimos católicos sabemos a qué atenernos en nuestra opinión con respecto a su persona.

Cordial saludo. En primer lugar quiero recordar a todos los fieles que los errores de los hombres dentro de una institución no deben afectar nuestra Fe que es en Dios, quien es Santo, Santo, Santo, y es el centro y la razón de ser del pueblo Cristiano, entendamos que la iglesia la conformamos todos los creyentes y como hombres cometemos errores y faltas, que finalmente si nos arrepentimos Dios por su inmensa Gracia y Misericordia nos perdonará, es por esto que no debemos emitir ningún juicio.

Con la renuncia el Papa Benedicto nos da una grande enseñanza de honestidad y valentía, esto es algo que hace historia. La sabiduría y la coherencia del Papa respecto a lo que es la voluntad de Dios y está escrito en las escrituras lo obliga a renunciar porque de otra forma estaría en complicidad con lo incorrecto que Dios aborrece.

Benedicto XVI, es el mejor teólogo de la iglesia y quien se ha inspirado y regido por las escrituras para dirigirse a la iglesia, y presentar a CRISTO, como el centro. Me pareció sabio que propusiera que en la Homilía se predicara sobre Jesucristo.

No juzguemos ni nos demos golpes de pecho, pensemos que esto es necesario y pidámosle a Dios que desde su retiro el Papa pueda seguir influyendo en la iglesia en donde no pudo seguir por que es luz en las tinieblas, como lo dijo el Apostol Pablo: 2 Corintios 6:14 No estéis unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues ¿qué asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas?.

En lugar de lamentarnos empecemos a orar porque el poder de la oración es el que hace que Dios obre y la iglesia sea limpia y sin mancha como la novia de Jesucristo.

A los hermanos "evangélicos" "cristianos" les pido opinar coherencia respecto al evangelio de Cristo...porque es muy claro que el saber tanto de Biblia no ha transformado sus corazones cuando aprovechan esta oportunidad para atacar a "bibliazos" y juzgar a los que creemos en un mismo Dios. DEN TESTIMONIO DE CRISTO y no denigren a su denominación con comentarios que no son la voluntad de Dios.
Acaso no han leído esto? Juan 1:6 a 1:8

1:6 Hubo un hombre enviado por Dios, el cual se llamaba Juan.
1:7 Este vino como TESTIGO, PARA DAR TESTIMONIO DE LA LUZ para que todos creyeran por medio de él.
1:8 Él no era la luz, sino un testigo de la luz. SON TESTIGOS DE LA LUZ?, recuerden que Jesús dijo "YO SOY LA LUZ DEL MUNDO", a quien están representando y testimoniando en sus comentarios?

Para todos, independiente de la denominación de sus iglesias. LA ETICA CRISTIANA ESTA EN EL SERMON DEL MONTE, por favor lean "espiritualmente", no literalmente el evangelio de San Mateo 5,6,7 y van a entender la vida que Nuestro Señor Jesucristo quiere que llevemos... sin esto es imposible agradar a Dios!.

Tuve la gran suerte de participar en la organización de la JMJ en Madrid. El Sacerdote que consuela en la foto de la noticia es Mons. Guido Marini, máximo responsable de la liturgia en los actos presididos por el Santo Padre. El sacerdote "consolado" es uno de los tres sacerdotes que ayudan a Mons. Marini. Los tres demostraron un amor y una dedicación expectaculares durante la preparación de los actos de la JMJ. Tuve muy buena relación con ellos. Nos enseñaron muchas cosas y la forma de trabajar fue envidiable.
Entiendo la gran pena. Es mucho el trabajo y la vida compartida. El Señor les bendiga.

Un saludo

Porque gastar tantas palabras sin razon? En la foto primera nadie està llorando. El maestro de las ceremonias pontificias està haciendo ensayos por alguna celebraciòn en la basilica de San Pedro. La prueba es que ninguno de los sacerdotes tiene traje de ceremonia y la silla del Papa està vacia. Aqui està la mala intenciòn de quièn ha publicado esa foto. Los enemigos de la Iglesia toman pretexto de todo!

Yosicreo, todo lo que diga ya el Papa no tiene fuerza, ni espíritu, ni vida, es palabra hueca, porque nace de la dejación, de la incoherencia, de esa sonrisa que muestra tan alegre por haber salido disparado del Huerto de los Olivos. Benedicto XVI ha escapado de la Cruz y se dirige a una vida más acomodada a sus gustos, no a lo que Dios había elegido para él. Fíjate hasta qué punto no podemos apoyar bajo ningún concepto su renuncia, y menos aún elogiar a su persona, que hasta la gente que le quiere, que le sigue admirando, que le apoya en su decisión, admite que es algo tan inusual y tan fuera de lugar lo que ha hecho, teniendo que remontarnos siete siglos atrás para ver algo parecido, que por ello se está improvisando qué titulos va a ostentar a partir del momento de su renuncia. Es un auténtico lío. Que nos quede claro pues lo evidente: esto ha sido un hecho excepcional, no es lo normal, no es lo idóneo, no es lo natural, no es pues digno de elogio. Se nos exige a todos los cristianos unos enormes sacrificios de por vida, cada cual en su estado, que llevemos la cruz de cada día, y lo hacemos con Su Gracia y con Su Amor, el de Dios, claro está, y vamos tirando pese a tantos sufrimientos, desengaños y desencantos soportados a lo largo de la existencia, y luego, vemos que ni más ni menos que el más alto dignatario de la Iglesia, el Papa, renuncia y se larga, ¡venga ya! ¿Predicando con el ejemplo, eh? Y resulta que uno de sus títulos es el de "Siervo de los siervos de Dios", cuando únicamente ha servido, el Papa actual, a su salud, a su beneficio personal, en base a conjeturas sobre su futuro. Es siervo de sus intereses personales. ¿O también me vas a negar esto, pero qué clase de cristianos sois, que aceptáis hasta lo reprobable y lo inaceptable? No te quepa la menor duda, yosicreo, de que en su diálogo con el Señor, lo último que Benedicto XVI oyó de Éste fue: "Lo que tengas que hacer hazlo pronto". Que te quede muy claro, yosicreo, y deja de engañarte más a ti mismo, por favor. Tú y todos los demás, porque es una vergüenza la imagen que tenéis de lo que es el Papado, alabando el peor de los ejemplos posibles, que es el de Joseph Ratzinger, a secas, que no merece - ¡ni él mismo quiere! - otro tratamiento distinto a partir del 28 de febrero. Hasta ese día le seguiré llamando Benedicto XVI, porque sigue siendo el Papa, pero después del 28 de febrero, deberíamos llamarle por su nombre de pila y mucho es. Firmado: un cristiano coherente que ama la figura del Papado pero que si hay un mal Papa, lo dice, como debe ser. Mirad como jamás he criticado al Beato Juan Pablo II, ni a San Pío X, etc, etc.

Juanjo
Javiergo, creo que te estás haciendo daño con las vueltas que le estás dando al asunto. Sin datos estás llegando a unas conclusiones erróneas, como mínimo es juicio temerario, que también es un pecado contra el octavo mandamiento.

Juanjo, me he limitado a hacer un inventario de lo que he visto. Y he afirmado, utilizando argumentos, lo que me ha parecido la renuncia. Siempre he pensado (y olvido ya al Papa por un momento) que la conversación, el debate, la controversia, el argumentar y contra-argumentar es un afrodisíaco para la inteligencia; mientras que la unanimidad es la muerte del espíritu. Un paisaje gris y monótono, incluso tedioso, preside los ámbitos donde todo el mundo piensa y dice lo mismo, con una más que sospechosa uniformidad. Al menos en los temas que son opinables y que no constituyen un dogma de fe. No es lo mismo recitar todos los días el Credo, que es algo sumamente edificante y que aconsejo, algo que te ilumina por dentro y te da la vida; no es lo mismo esto, que oir todos los días las mismas opiniones, con ligerísimas variaciones entre ellas. La voz discordante suena mejor, y puede parecer a veces 'desquiciada' porque nos saca de nuestros clichés y nuestros lugares comunes, de nuestro adormecimiento general. Es más, tanta opinión favorable sobre un mismo asunto, al menos en la forma en que se expresan algunos, huele por completo a adulación. Regresando al Papa [y no volviendo a opinar a partir de ahora en el blog sobre este asunto], hay imágenes que valen más que mil palabras: el helicóptero sobrevolando el Vaticano es la imagen de un Papa que huye, que se va, que abandona, esto nadie lo puede negar. No es una visión agradable, ni deseable ni digna de alabanza, a no ser que los católicos queramos ver como 'normal' lo que es una situación completamente anormal y triste a más no poder. Eso sí, tal y como he expuesto en el post de Eleuterio, algo que he de admitir en reconocimiento de Benedicto XVI es que ha cumplido con el deber primordial de todo Papa que es el de guardar y preservar el Depósito de la Fe. Esto es lo realmente importante, que Benedicto XVI no se ha desviado ni un ápice de la ortodoxia. Sobre lo demás, será Dios y solo Dios quién le juzgue, no nosotros.

Benedicto XVI ha renunciado libremente, como él dijo, y se va feliz. Si fuéramos católicos fieles debiéramos alegrarnos con él y por él, y hacer nuestra su dicha. Si se ha ido habrá sido por algo. Todos tenemos la sensación de que nos faltan datos, que hay alguna pieza que no encaja, que todo ha sido demasiado rápido (sin esperar a que termine el Año de la Fe ni a que llegue la Semana Santa), y que más allá de los motivos de su salud quebrada, que no ponemos en duda, hay cuestiones más graves detrás de esta inusual y excepcional decisión que ha dejado al mundo entero perplejo. Creo firmemente que ha dicho la verdad, pero no toda la verdad. Quizá sea mejor así, no se lo reprocho. No podemos saberlo todo. Quizá, pese a lo mucho que le he reprochado su renuncia, haya sido mejor así. Si se ha ido de esta forma es porque no estaba a la altura de la dignidad que le había sido confiada por el Altísimo. Siempre habló de su debilidad, y a la vista está que es un hombre débil, que huye y se retira a un convento porque no puede más. A los hechos me remito: no debe confiar demasiado en lo que nos dice la Palabra: que nos basta Su Gracia. Cualquier creyente, laico, consagrado, presbítero, obispo, cardenal, o Papa, en un momento determinado de su vida, o a través de todo un proceso (que es lo más lógico) puede perder la fe, del mismo modo que un ateo puede convertirse. Ambos caminos inversos son posibles. Yo pienso, estudiando todos los síntomas de lo acaecido en estos últimos meses, que Benedicto XVI ha perdido la fe. No sería el primer Papa al que le ha pasado tal cosa. Hay que saber leer mucho más allá de sus palabras, que ya no son más que mera y pura retórica pues no casan en absoluto con los hechos, con todo lo que hemos visto. Estudiar demasiado, saber demasiado, leer demasiado, meditar demasiado, profundizar demasiado, puede ser sumamente peligroso... Ha sucedido a veces. El mismo Goethe, en sus conversaciones con Eckermann, afirmaba su recelo sobre los estudios protestantes de su época empeñados en viviseccionar las Sagradas Escrituras, y advertía que meterse demasiado a fondo en esas cuestiones podía poner en serio peligro la fe. Así fue, porque es un hecho y una verdad indiscutible que el conocimiento arruina el amor, y que cuanto más se sabe, menos se ama. Es la contraposición eterna entre el Árbol del Conocimiento y el Árbol de la Vida... - No puedo, lógicamente, demostrar mi tesis, pero creo firmemente que Benedicto XVI ha perdido la fe (y se retira al convento para 'volver a encontrarla'). Por eso, ahora sí, apruebo su marcha, porque ahora sí sería plenamente coherente. El Papa emérito ha visto demasiado como para creer, se va asqueado de intrigas y escándalos, no ha podido más y se ha marchado. No hay motivo, de nuestra parte, para las lágrimas ni para la dicha. Simplemente ha hecho lo que debía y le respeto, porque yo he pasado por la trágica y desabrida experiencia de lo que es una noche oscura y sé lo duro que es eso. En esos momentos, lo mejor es retirarse del mundo. No haré nunca leña del árbol caído. He visto las imágenes de hoy y he sentido compasión por un hombre anciano y débil, que ha perdido la fe y la fuerza que se deriva de ella, y que se va rendido y desencantado, con una enorme tristeza dibujada tras el rictus de su forzada y cansada sonrisa. No es ni será, como aquí se ha dicho, el Papa más santo ni el más sabio, nunca será canonizado ni declarado Doctor de la Iglesia. Se le olvidará pronto cuando todavía estaremos acordándonos de Juan Pablo II. Benedicto XVI ha pasado como una sombra, esa es la verdad. Ha sido y es un hombre tímido, un hombre de cátedra, no un líder de masas, no cae simpático ni tampoco lo pretende, y por eso me agrada. Va a desaparecer entre las brumas, posiblemente lleno de dudas sobre casi todo, y precisamente por ello le admiro en el fondo por encima de cualquier otro hombre. Le he dicho de todo aquí, en este blog, he estado muy despechado, lo reconozco, y me ha pasado bastante con él, pero creo que empiezo a entenderle quizá mejor que otros que lo creen tener todo muy claro. Nunca le olvidaré, Benedicto XVI

En la entrevista que se ha puesto en este blog hecha al Cardenal Bertone, éste afirma, con entera razón, que Benedicto XVI será recordado por múltiples motivos, siendo uno de ellos su ejemplar magisterio. Como he dicho, estoy completamente de acuerdo. Cuando, en la misma pregunta, se le habla de la renuncia, contesta Bertone: "Y también será recordado por su renuncia, que ha mostrado al mundo el abandono sirviendo siempre a Dios de un Papa que a lo largo de toda su vida –y no sólo como Pontífice – ha pretendido ser un siervo más en la viña del Señor". Como sabemos todos, Beato Juan Pablo II es recordado con sumo cariño y afecto, entre otras muchas razones, porque no renunció y murió como un mártir siendo Papa. No se bajó de la Cruz. Bien, y según Bertone, Benedicto XVI también dejará un grato recuerdo por hacer justo lo contrario. Dos finales no solo distintos sino contrapuestos, y los dos magníficos, maravillosos,olé. Esto es la cuadratura del círculo. ¿Hasta cuándo nos tomarán (la jerarquía) por tontos a los fieles? Ahora todo es muy reciente y solo oímos los aplausos, pero ya empiezan a oírse también los silbidos que irán en aumento conforme se vaya acercando el Cónclave. Así, por ejemplo, el Cardenal australiano George Pell declaró ayer mismo que la renuncia de Benedicto era "levemente desestabilizadora". Y esto es solo el comienzo... Por si alguien duda de la noticia:

http://www.wapa.tv/noticias/internacionales/entrevista-ap--pell-espera-no-se-repita-renuncia_20130301111315.html

Bruno, en este blog, Sofronio ha escrito algo con lo que estoy completamente de acuerdo y que me gustaría compartir contigo, en tu post, luego verás por qué. Dice Sofronio: "Para nauseas, este sentimentalismo manifiesto nada viril ni católico y tan alejado de la verdadera doctrina de la Iglesia. Se trata al ocupante de la Cátedra de Pedro, más como un líder, o como el último actor que ha conseguido un Óscar o un cantante que llena estadios y enloquece a sus fans, que al Vicario de Cristo infalible en las condiciones que señala el Concilio Vaticano I y falible en otras muchas donde no compromete aquella; se ha exagerado tanto en el orden mundano, que se ha querido hacer indefectibles ( Y eso es culto idolátrico,), hasta el punto de que cualquiera que no esté de acuerdo con una línea de su gobierno o de su magisterio no revestido de infalibilidad, es considerado por la mayoría, desconocedora de lo más esencial de la doctrina católica según palabras del mismo Benedicto,como un apestado..." - Hasta aquí, un fragmento de lo que ha escrito Sofronio. Mira, Bruno, hablemos como las personas civilizadas que somos, y precisamente por eso como los hermanos en Cristo que somos, lo cual no es poco. Tú sabes bien el esfuerzo enorme que hah hecho todos los últimos Papas por conciliar Fe y Razón. Recordarás incluso la magnífica Encíclica de Beato Juan Pablo II titulada "Fides et ratio".

Pues bien, desde la razón, y como persona de fe, quiero reclamar el derecho legítimo que tenemos aquellos católicos - entre los que me incluyo - que criticamos la renuncia de Benedicto XVI porque no nos ha parecido bien. Tenemos el derecho elemental a ser oídos y a no ser censurados por ello. Tenemos el derecho a no aplaudir su decisión. Como bien dice Sofronio, no somos unos apestados por eso. Pedimos solo respeto.

En la entrevista que se ha puesto en este blog hecha al Cardenal Bertone, éste afirma, con entera razón, que Benedicto XVI será recordado por múltiples motivos, siendo uno de ellos su ejemplar magisterio. Como he dicho, estoy completamente de acuerdo. Cuando, en la misma pregunta, se le habla de la renuncia, contesta Bertone: "Y también será recordado por su renuncia, que ha mostrado al mundo el abandono sirviendo siempre a Dios de un Papa que a lo largo de toda su vida –y no sólo como Pontífice – ha pretendido ser un siervo más en la viña del Señor". Como sabemos todos, Beato Juan Pablo II es recordado con sumo cariño y afecto, entre otras muchas razones, porque no renunció y murió como un mártir siendo Papa. No se bajó de la Cruz. Bien, y según Bertone, Benedicto XVI también dejará un grato recuerdo por hacer justo lo contrario. Dos finales no solo distintos sino contrapuestos, y los dos magníficos, maravillosos,olé. Esto es la cuadratura del círculo.

¿Hasta cuándo nos tomarán (la jerarquía) por tontos a los fieles? Ahora todo es muy reciente y solo oímos los aplausos, pero ya empiezan a oírse también los silbidos que irán en aumento conforme se vaya acercando el Cónclave. Así, por ejemplo, el Cardenal australiano George Pell declaró ayer mismo, entre otras cosas, que la renuncia de Benedicto ha sido "levemente desestabilizadora". Y esto es solo el comienzo... Por si alguien duda de la noticia:

http://www.wapa.tv/noticias/internacionales/entrevista-ap--pell-espera-no-se-repita-renuncia_20130301111315.html

Perdona, Juanjo, pero como ves he colocado aquí, en mi último comentario, algo que iba dirigido al post de Bruno, y que ya he puesto después allí. Disculpa el error :) - Un saludo en Cristo Jesús

Javiergo, un abrazo ;-), ya lo supuse.

Es el mejor Papa que he conocido (el 5ª) y la verdad lo echo de menos por su grandeza, sus luminosas encíclicas, sus maravillosas homilías, sus gestos mesurados y humildes, nada de populismo, como quien dice: ´"mírenme, aquí estoy", sino "Cristo es el importante".