Vida parroquial: al fondo hay sitio
Cada cual tiene su forma de entender una parroquia. Yo tengo la mía, y no es mejor ni peor, es simplemente la mía.
Lo básico no lo pone nadie en duda. La parroquia es lugar de encuentro de la comunidad cristiana donde se anuncia el evangelio, se celebra la fe, se ayuda a los pobres y se construye la comunidad en el seno de la Iglesia. Poco más que añadir.
Personalmente me encanta que la parroquia sea un lugar muy vivo, abierto a las necesidades de la Iglesia, y abierto al barrio como forma de llevar a los demás la buena nueva de Cristo.