Enero. Las intenciones de Rafaela
En mis pueblos cada tarde rosario y misa. Dos días en cada uno de ellos. El rosario siempre acaba igual: una salve por las intenciones del santo padre.
Un día andaba un servidor tomando café con Rafaela y Joaquina, ya saben, hablando de lo humano y lo divino, y sobre todo de lo eclesial. Joaquina es más discreta, pero Rafaela ya saben que no se corta un pelo como se suele decir.
- A mí, cura, lo de rezar por las intenciones del papa me da miedo, porque me acaba de llegar la lista de las intenciones de este año y tengo mis dudas.
- Mujer, rezamos para que las intenciones sean buenas y sus ideas se desarrollen según la doctrina de la Iglesia y el buen sentido del evangelio.
- Yo es para lo que rezo, para que sean buenas.