Predicar de la agenda 2030
Servidor mismo. Ayer sin ir más lejos.
Decía un servidor ayer en la homilía de la misa, misa que pueden encontrar perfectamente en mi perfil de Facebook, que eso de Isaías de la primera lectura, de ese mundo idílico donde puedan convivir el oso y el buey, el lobo y el cordero, en el que no haya daño y todo sea gozo y fraternidad, es algo que a todos nos entusiasma. ¿Quién será el que no se apunte a esa nueva realidad? ¿Quién de nosotros hará ascos a un mundo sin pobreza, en paz, donde se vivan la justicia y el amor universal? Un católico se apunta el primero y más aún cuando llegará una perfección plena en el cielo.
Decía que eso del mundo nuevo en justicia y paz era algo que hoy nos presentan los políticos y los grandes de este mundo bajo los auspicios de la ONU en un proyecto que se nos ofrece bajo la denominación “agenda 2030″. Hoy vemos políticos de casi todos los signos luciendo orgullosos en la solapa la insignia de este “maravilloso” proyecto.