Tres misas en el miércoles de ceniza
Ayer lo anuncié en los tres pueblos. Pasado mañana es miércoles de ceniza y tendremos misa con imposición de ceniza a las 17 h. en La Serna, a las 18 h. en Piñuécar y a las 19 h. en Braojos. ¿Y acudirá gente? No lo sé. Mi obligación es celebrar y que vayan o no ya no es cosa mía. Yo doy la oportunidad.
Una vez más la pregunta de si merece la pena.
Llevamos años hablando de la opción por los pobres, la Iglesia en salida, la pastoral de los últimos, las periferias y demás gaitas. Mi periferia, mi opción por los últimos es que Juana, por ejemplo, que muy posiblemente sea la única feligresa de La Serna en la misa del miércoles, pueda celebrar el miércoles de ceniza con el mismo derecho y la misma liturgia cuidada que los fieles que vayan a la catedral de Santiago de Compostela, los feligreses de la Basílica de la Concepción de Madrid o las personas que acudan a cualquier parroquia de campanillas.
No sé si entre las tres parroquias acudirán a la misa quince o veinte personas. Lo que no puedo permitirme es declarar a la gente de La Serna, Piñuécar y Braojos feligreses de tercera, católicos de inferior división y gente por la que no merece la pena molestarse en decir una misa más el miércoles de ceniza. Total, para cuatro viejas.
Cuatro, tres o una, porque Juana es más que un despectivo “una vieja". Es una cristiana, católica convencida, que no tiene por qué ser atendida en inferioridad de condiciones que doña Rudegunda, señora de Pérez de la Muchapástez, simplemente porque doña Rudegunda vive en zona urbana y en parroquia de mucho culto y Juana, la señora Juana, en un pueblo que a muy duras penas llega a los cien habitantes.
Juana, y las demás Rafaelas, porque la mayoría son siempre mujeres aunque a veces llega algún hombre, no voy ahora a decir que son los preferidos de Dios ni nada que se lo parezca. Tampoco quieren privilegios ni aguntar tonterías. Se conforman con ser como una parroquia más, necesitan saber que son “normales", que tienen sus misas, sus cultos como cualquier parroquia.
Todos sabemos que lo de la opción por los pobres no es más que una cantinela tan cansina como falsa. Queda bien para la cosa del discurso, el documento o la entrevista en la tele, pero nada más.
Y todo esto lo cuento para que los sacerdotes nos demos cuenta del bien que podemos hacer y no nos desanimemos, y para que la gente de nuestras pequeñas parroquias nos alienten y sigan pidiendo algo tan simple como ser una parroquia normal.
40 comentarios
Sacerdotalmente, multiplicar el número de Misas es peligroso, corremos el riesgo de relativizar el culto a Dios. Pastoralmente, parece poco prudente, especialmente en días que no son de precepto, habida cuenta de la escasez de clero y las tristes previsiones de futuro (tanto respecto al clero, como respecto a la vida de las parroquias). Acostumbrar a la gente a ese ritmo es dejar un marrón a quien vaya después.
Entiendo y valoro su perspectiva, apunto esto para visibilizar que hay otros enfoques posibles, no siempre despreciables o progres.
1. Si el sacerdote se esfuerza en vivir con piedad y unción esas Misas, no hay peligro alguno.
2. Pastoralmente tiene todo el sentido del mundo. Precisamente, si no son días de precepto, ¿habrá mejor pastoral que dar a los fieles la oportunidad de asistir una vez más a la Santa Misa? Dice que falta clero. ¿Y? ¿Qué otra actividad debería hacer Don Jorge o cualquier sacerdote en su lugar?
3. A lo de "dejar un marrón a quien venga después": los Santos no hubieran llegado a Santos si hubiesen seguido esa lógica de "a lo mejor dejó mal al que me suceda". ¿Mejor la mediocridad? Ley del mínimo esfuerzo no sea que...
D. Jorge, su paga vendrá cuando Cristo le diga: "Ven, siervo bueno y fiel, pasa al banquete de tu Señor"
No podemos tener el mismo criterio para las celebraciones eclesiásticas que para las reuniones mundanas.
Lo más que tenemos es nuestra relación con Dios en todo tiempo y lugar.
¿Multiplicar el número de misas es peligroso?
¡En mi vida había oído nada así!
A veces he pensado que si solo se celebrarán misas en ocasiones especiales, la gente lo vería como extraordinario y acudiría para no perdérselo. Pero es que Dios es en todo tiempo y lugar para todo y para todos, lo necesitamos para vivir siempre no solo alguna vez.
Los sacerdotes son las manos, los pies, la voz de Dios aquí y ahora, por eso les llama a su servicio, todos no tienen otra cosa que hacer que hacérnoslo presente como está dispuesto, no es un marrón como dices, es un privilegio, si te parece que tienen mucho trabajo a lo mejor podrías ayudar, te ayudarías a ti, a los demás, necesitamos buenos sacerdotes y quienes les ayuden.
En mi caso, me las veo y me las deseo a veces para confesarme aquí en Cracovia, porque no hablo polaco. Y estoy muy agradecida a las parroquías que han añadido ciertas horas para dar la oportunidad en español, y en inglés. Puede parecer una bobada, pero no lo es, y yo se lo agradezco y mi alma más.
Siempre me reconforta y me anima leerle, padre. Mucho ánimo. Rezo por usted y por sus parroquias.
Ningún marrón para nadie. El marrón sería no recordárnoslo.
¡Ave María, padre!
No, señor Busoni. Sin Misa no puede haber vida cristiana. Llevar la Misa a esos pueblos es LLEVAR A CRISTO. Y no, Paolo. La Misa no depende de la fe de la gente (eso es puro donatismo). Depende del sacrificio de Cristo en el Calvario. Es Cristo quien se ofrece. Por eso aunque ni el cura ni los fieles tuviesen fe, la Misa seguiría siendo de un valor infinito.
Que gran valor la Santa Misa. Desde luego, padre Jorge, le veo en forma. Siga así de bien
AJ,
Una cosa será lo que diga Busoni y otra muy distinta lo que dice Paolo.
Tenga cuidado con sus citas, como ya le indiqué en el post anterior.
Si cita a Paolo cítelo bien, porque no ha dicho eso que usted entrecomilla de que la misa dependa de nada, sino que después de un punto dijo: "Igualmente, no cuenta el número, sino la fe de quienes participan."
En dónde dice que la misa dependa de eso? Lo que depende de la fe de quienes participan es la santificación de los que participan. De poco sirve que participen un número grande de personas si no participan con fe.
Y es que claro que la misa tiene un valor infinito siempre, y que su valor no depende de las personas que vayan; pero no nos santificará a cada uno de nosotros a menos que participemos con fe. Quien vaya sin fe o quien pase de ir, no se va a ver beneficiado por ese valor infinito que ha despreciado.
Ave María
Tampoco conocemos los caminos indirectos por los que puede acabar influyendo en quienes en principio no han creído en ese valor infinito de la misa; así que no podemos saber nunca los frutos que tiene una misa, pero sí sabemos que el camino de santificación personal pasa por creer en las verdades reveladas por Dios y aceptar la gracia que Dios nos ofrece gratuitamente. El Dios que te creó sin ti no te salvará sin ti.
Así que no creo que pueda endosarle lo que ud equivocadamente entendió, no sé por qué.
¿Qué futuro vamos a tener sin Misa? Quedaremos entonces reducidos a nuestra propia bondad natural que no puede personar a nuestros enemigos. Es imposible.
¿Recuerda usted los textos evangélicos de Mt XIV, 15-18; Mc VI, 35-38; Lc IX, 1-13 y Jn VI, 5-9? Usted hubiera dicho a Jesús que no se preocupase de los demás.
Igual hace usted ahora con D. Jorge y sus feligreses.
Parece usted no comprender el cristianismo, camino para la vida eterna.
En fin, confío reciba la luz y la gracia para cambiar.
Para D.. Jorge un abrazo virtual hasta que pueda pasar por allí y dárselo personalmente y, siempre, oración por sus parroquias, las cuatro, y por él mismo.
Ave María grátia plena, Dóminus tecum...
2. Es Jesucristo Nuestro Señor quien celebra la Santa Misa, por ello tiene que ser reflejo de la Liturgia celestial, el Novus Ordo no lo es porque en el Calvario está la Inmaculada Virgen María y el Sagrario no lo está al pie de la Cruz.
3. Es el Único Sacerdote santo y eterno quien se ofrece como Víctima y Ofrenda perfecta al Padre y Dios nuestro, ad Orientem, en latín: "et postquam venerunt in locum qui vocatur Calvariæ ibi crucifixerunt eum et latrones unum a dextris et alterum a sinistris." Lc 23,33.
4. A menudo se olvida que la Última Cena no es el Sacrificio mismo de la Cruz, sino su anticipo.
5. El Novus Ordo tiene como centro la Última Cena.
6. El Vetus Ordo tiene como centro el único Sacrificio eterno de la Cruz.
7. Tanto la Mesa Sagrada y el Calvario están en Oriente, en Tierra Santa. No en vano todas las Iglesias locales apuntan a Oriente en forma de Cruz. La Arquitectura sagrada también contradice al Novus Ordo, el Sacerdote de cara al pueblo. Así, ha perdido el norte. Y la participación activa no está tan clara como orienta el Novus Ordo. ¿Cómo se celebra el miércoles de ceniza en el Vetus Ordo? Tres semanas: Septuagésima, Sexagésima y Quincuagésima.
En su caso sería: "...y las viejecitas son evangelizadas".
Así es padre, si hay una "periferia" a cuidar en la España de hoy es la de la gente mayor, que además empiezan a ser mayoría. Sus almas son igual de importantes que la de cualquier otro hermano de cualquier edad (de bebé a jubilado), y en su caso son los más próximos, los más "prójimos". Su experiencia, su sabiduría y su mayor conciencia de la finitud de la vida y de los temas que son importantes les acercan más a Dios. Ya han currado mucho, y siguen currando de muchas maneras, y la mayoría ya han sacado adelante familias muy bonitas que ya vuelan solas y tienen a su vez nietos y nuevas familias.
El alma siempre es joven, somos los mismos sólo que con metas y objetivos diferentes, según la fase de vida en la que estés y las responsabilidades de estado que toquen.
Decía el devocionario carlista en la guerra civil (en realidad una cruzada contra el odio izquierdista a la Iglesia de Cristo y a España como tierra de María y del Corazón de Jesús) que para Dios no hay héroe anónimo... tampoco para Dios hay feligrés anónimo, por muy pocos que sean (en la última cena eran doce y el Maestro). Así que ánimo y para adelante con la ayuda de Dios.
No leer sus desvaríos porque mezcla siempre verdades en las que todos creemos con desbarres que no tienen nada que ver. Pero lo que dice de la misa novus ordo es un disparate sin sentido.
No blasfeme contra el Espíritu Santo.
§ 2. Si hay escasez de sacerdotes, el Ordinario del lugar puede conceder que, con causa justa, celebren dos veces al día, e incluso, cuando lo exige una necesidad pastoral, tres veces los domingos y fiestas de precepto.” (Código de Derecho Canónico)
Esta norma, dada por S. Juan Pablo II, y todo el derecho precedente insisten en que un sacerdote no celebren más de in Misa diaria, salvo que haya causas muy justificadas. Vemos, por ejemplo, que no más de dos fuera de días de precepto.
Pongo esto porque parece que uno desvaría o lo hace por no trabajar, como se ha dicho. Mi comentario anterior, sin pretender faltar al respeto a D. Jorge, lo hacía planteando un problema real, que es la proliferación de culto al mismo tiempo que escasea el clero. Mantenemos el mismo número de parroquias que cuando había más de el doble de sacerdotes de los que somos ahora. D. Jorge atiende tres parroquias, y no sé si eso es corriente en su diócesis. En la mía la media es de 6 parroquias por cura. En alguna de las vecinas conozco compañeros con hasta 25. Quizá algunos piensen que son malos curas si no celebran 25 Miércoles de Ceniza. El futuro, si Dios no lo remedia, es que quedemos progresivamente menos cura y más mayores, no creo que sea una falta de celo ser previsores.
Y valorar a los sacerdotes, a los que son excelentes y a los que somos mediocres. Muchos de los comentaristas seguro que nunca han tenido que celebrar tres o más misas en un día (porque uno programa tres, pero luego se muere gente y hay que enterrarla y hay que asumir esas celebraciones extra). Con los desplazamientos correspondientes si son en parroquias distintas. Y el ambiente en las parroquias no siempre es bueno, la acogida no es siempre con los brazos abiertos. Y uno llega y la gente no se pone de rodillas en la consagración y comulgan mal. Y muchos no se confiesan nunca. Y se les dice, muchas veces, no es falta de eso. ¡Claro que si celebramos todas las Misas con unción nos ayudan! Pero los curas somos hombres y también tenemos nuestras limitaciones.
D. Jorge, mis disculpas si le he ofendido con mis palabras. Sólo pretendía animar un poco el debate, no juzgar su praxis sacerdotal. Un saludo.
Rezamos por usted, sabiendo que usted también lo hace por nosotros. Su Ave María, padre.
Tienen razón, comprendí mal lo escrito. Mis disculpas a Paolo y al resto de los comentaristas por mi torpeza
non tangerentur nisi a ministris."
En español: "se establece que los misterios de la fe no sean tocados salvo por los ministros."
El hecho de que la Iglesia fue retirando poco a poco luchando contra la comunión en la mano es claro. Hasta hacerlo desaparecer. Pero vamos, que no la voy a convencer y no es el propósito de este artículo. La bibliografía por si a alguien le interesa:
Cfr. “Liber Pontificalis”, op. cit. tomo I,
p. 57; Mansi I,653; cfr. también “Regesta
Pontificum Romanorum” op. cit. p. 919.
Todos nos equivocamos de vez en cuando; pero su actitud al reconocerlo le honra.
Paz y Bien
El 905 contiene dos términos de complejo armado, "escasez de sacerdotes" y "justa causa".
Qué mayor justa causa puede haber que la escasez de sacerdotes.
Es que la realidad supera a la ficción y muchas veces una norma limitativa -cuyo origen original no es demasiado preciso- queda superada y su estricta aplicación carecería de sentido católico.
Si el Obispo conoce su Diócesis el tema se resolverá sin líos legales ni "ilicitudes".
Le rezo su Avemaría.
919 § 1. Quien vaya a recibir la santísima Eucaristía, ha de abstenerse de tomar cualquier alimento y bebida al menos desde una hora antes de la sagrada comunión, a excepción sólo del agua y de las medicinas.
2. La Iglesia quiere ser fiel al mandato del Señor, que indicó que “vendrán días en que les será arrebatado el esposo y entonces ayunarán” (Mt, 9, 15). Por eso ha establecido tiempos y días de penitencia que incluyen el ayuno y la abstinencia, obligatorios para toda la Iglesia de rito latino.
Canon 1249: Todos los fieles, cada uno a su modo, están obligados por ley divina a hacer penitencia; sin embargo, para que todos se unan en alguna práctica común de penitencia, se han fijado unos días penitenciales, en los que se dediquen los fieles de manera especial a la oración, realicen obras de piedad y de caridad y se nieguen a sí mismos, cumpliendo con mayor fidelidad sus propias obligaciones y, sobre todo, observando el ayuno y la abstinencia, a tenor de los cánones que siguen.
3. Estas son las prácticas de penitencia que indica el derecho canónico:
Canon 1251: Todos los viernes, a no ser que coincidan con una solemnidad, debe guardarse la abstinencia de carne, o de otro alimento que haya determinado la Conferencia Episcopal; ayuno y abstinencia se guardarán el miércoles de Ceniza y el Viernes Santo.
Canon 1252: La ley de la abstinencia obliga a los que han cumplido catorce años; la del ayuno, a todos los mayores de edad, hasta que hayan cumplido cincuenta y nueve años. Cuiden sin embargo los pastores de almas y los padres de que también se formen en un auténtico espíritu de penitencia quienes, por no haber alcanzado la edad, no están obligados al ayuno o a la abstinencia.
4. Cara sofia, arguya en lugar de dar bofetadas, como dice Nuestro Señor Jesucristo, si he hablamo mal dime en qué ha sido, pero si no por qué me golpeas.
La Cena del Señor, o Misa, es la sacra synaxis, o asamblea del pueblo de Dios reunido bajo la presidencia del sacerdote para celebrar el memorial del Señor. (Institutio Generalis, §7, 1969)
No abofeteo, sólo describo lo que UD hace y le aconsejo que no lo haga. Sus comentarios están mejor cuando no incluye ataques ilegítimos a liturgia y normas legítimas. Pero no merece la pena seguir discutiendo eso
En cuanto a otro comentario suyo, me ha extrañado que según las normas de ayuno que ud nos ha facilitado están exentos los mayores de 59 años. Sigue vigente eso? Yo creía que era a partir de 65 y hoy alguien me ha dicho que lo han cambiado a 75 años. No tengo ni idea de dónde consultarlo.
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