La caridad chachi guay
Hace unos días me vinieron a la parroquia unos chavales, quince o dieciséis años, no creo que más. Querían pedir permiso para vender en la puerta alguna cosa destinada a un proyecto solidario que estaban haciendo con personas de la calle. Como es natural me interesé por el proyecto, que se apresuraron a describir.
Fue ocurrencia de un profesor y consistía en salir por la ciudad, hablar con personas sin techo, preguntar qué necesitaban y comprárselo. Punto y final. Uno, que lleva en Cáritas su tiempo, solo hizo una pregunta: ¿esto lo coordina Cáritas, alguna ONG, hay algún profesional que os asesore…? No, me respondieron. Nosotros, lo que se nos ocurre, lo que nos han dicho…