Teologuillos de chichinabo
Día de todos los santos. Los cementerios, a tope. Ayer pude ausentarme de la parroquia por la tarde para acudir al cementerio del pueblo y rezar por mis padres y demás familiares. Es una sana y piadosa costumbre que aprendí de mi madre: ir alguna vez al cementerio y recorrer las sepulturas de los parientes y amigos para rezar un breve responso en cada una de ellas.
Cada año me sorprenden unos cuantos teólogos, pseudo teólogos, teologuillos y nadas con pretensiones, aclarándome esa bobada de rezar por los difuntos. Si es que la cosa, según ellos, es evidente. Dios es bueno y todos vamos al cielo desde el mismísimo instante de nuestra muerte, por tanto, lo más que se puede hacer son “homenajes” al difunto, misas de acción de gracias por su vida y celebración de su resurrección y llegada a la gloria eterna.
Uno tímidamente dice que no, que esto no es lo que enseña la Iglesia, que pueden consultar el catecismo sin ir más lejos. Pues tampoco, porque las cosas son así como ellos las ven y lo de las misas por los difuntos no es más que una forma de sacar dinero a la gente.
Hombre, proseguía un servidor, que son veinte siglos explicando los novísimos, que son veinte siglos de orar por los difuntos, que son siglos y siglos de ofrecer sufragios por sus almas. Nada. Nada que hacer. Sigues: pensad en la devoción a las ánimas del purgatorio, en la oración en los cementerios, en la tradición de la Iglesia. ¿Ni siquiera os hace dudar? Mirad que la doctrina de los padres de la Iglesia, el magisterio, los grandes teólogos es unánime.
Nada, todos equivocados menos el teólogo Fulanítez, tan profundo que lleva tres condenas de Roma, incluyendo una de ahora mismo, de tiempos de Francisco y que luce con especial orgullo: “tan claro en mis ideas que no me aguanta ni Francisco” (en realidad, dice por lo bajinis, no es Francisco, que sabe que está de acuerdo con él, sino ese tal Müller). También se muestra certera en lo suyo la hermana Trinidad, Trini, tanto que no han vuelto a encargar una misa por las hermanas difuntas de la congregación. Simplemente las homenajean con danza festivo – contemplativa. Cosas de los nuevos tiempos.
En la misma idea abundan Rafa y Marisol, que, aunque jamás estudiaron una línea de teología sistemática, en realidad no lo necesitan, mientras cuentan con orgullo que una vez estuvieron en una conferencia de González Fauss y tienen en casa un libro de José María Castillo. Incluso, refieren en voz baja, en sus tiempos mozos leyeron a un tal Boff, ¿se llamaba así, no? A Rafa y Marisol los vas a venir tú con cuentos chinos de funerales.
Para discutir con alguien tiene que partirse de un punto común. El problema es que con Fulanítez, Trini, Rafa y Marisol no existe. No aceptan la Escritura (o la aceptan iuxta modum), reniegan de la tradición (que suelen confundir con las costumbres de su pueblo), se sienten por encima de los santos padres y antes muertos -sin funeral, por supuesto- que aceptar la más mínima posibilidad de equivocación.
Hice un último esfuerzo. Desde el libro de los Macabeos a las misas por los difuntos celebradas por el papa Francisco o el arzobispo de Madrid. Es inútil: “tú tienes tu forma de verlo, yo tengo la mía”. Punto. La suya. Acertadísima, aunque se cisque en San Agustín, Santo Tomás, Trento y la praxis de dos mil años. Es la suya. El colofón es genial: Trento dirá, el papa dirá, yo digo. ¿Por qué tiene que ser lo de ellos correcto y lo mío no?
Pues servidor ayer predicó directamente de los novísimos, y ya he avisado que esta tarde les toca escuchar qué cosa sea esa del purgatorio. Como se enteren Fulanítez, Trini, Rafa y Marisol me excomulgan. Jorge, que ellos no creen en excomuniones. Depende.
37 comentarios
El ataque es contra la Divinidad de JESUCRISTO:
Si fuera verdad que "Dios es bueno y todos vamos al cielo desde el mismísimo instante de nuestra muerte" ¿Para que vino Jesús a la tierra? No había necesidad de redimir a nadie.... y si no vino a redimirnos, ¿Realmente es Dios verdadero o solo, en el mejor de los casos, un buen hombre y en el peor, un falso profeta?
Entiendo que los sacerdotes en los funerales no hablen del Purgatorio para intentar consolar a la familia del difunto, pero deberían recordar a sus fieles en alguna homilía la existencia del Purgatorio e incluso del Infierno. Ahora con el "Todo vale" veo que incluso católicos de misa diaria apenas se confiesan y ha crecido el número de los que lo hacen directamente con Dios. Aunque claro si se puede comulgar viviendo en Adulterio sin ningún propósito de enmienda cómo te vas a confesar de tener pensamientos impuros que es infinitamente menos y hoy día algo casi normal. ¿Qué caballero no se gira al ver una chica guapa con minifalda o con la ropa ajustada?,¿Quién cierra los ojos cuando en la TV aparece alguna escena de sexo?, y si los protagonistas son atractivos ellos y ellas quisieran estar en el lugar de la escena, pero eso ya es algo normal. Las relaciones sexuales están bien vistas hoy día y si es entre homosexuales con mayor motivo no te vayan a tachar de homófobo....Pero eso sí una vez muertos todos al Cielo.
Después me sorprendió que C:S.Lewis dijera prácticamente lo mismo.
Por eso rezo por las Almas del Purgatorio, por aquellos que esperan ser recibidos por Dios, como ayer recordé a Todos los Santos que ya gozan de su presencia.
Pues que me perdone Dios, que seguro que lo hace según este cura, pero yo a partir de hoy no voy a esforzarme lo más mínimo: ni misas, ni confesiones, ni propósito de enmienda, ni ser bueno, ni leches,.... Por muy sinvergüenza que yo consiga ser, nunca llegaré a ser lo suficiente para traicionar al Mesías y suicidarme como Judas, o provocar una guerra mundial y exterminar millones de judíos como Hitler. Así que tranquilo... El cielo lo tengo asegurado porque quiero a los míos.
"Si os queda algo de amor, de bondad,alguna chispa de caridad,algo de cristianismo en vuestros corazones, no dejéis que unos pocos enloquecidos, personas pestilentes para el sacerdocio y la fe cristiana quiten de vosotros el cuidado de vuestros parientes, destruyan toda la fuerza de una vieja amistad y todo el recuerdo de todas las almas cristianas.Recordad nuestra sed cuando os sentáis y bebéis;nuestra hambre cuando banqueteáis; nuestra pena honda y doliente cuando jugáis; nuestro fuego ardiente mientras gozáis y os distraéis;quiera Dios que vuestra descendencia se acuerde de vosotros (...) que Dios (...) os lleve pronto a esa dicha a la que nos conduce el amor de Nuestro Señor, a lo que nosotros también os ayudaremos (...)"
Lectura apropiada para el día.
Para evitar el Infierno está la Gracia y el libre albedrío. Después de la muerte el Infierno no tiene solución. Nadie trata de evitar los Novísimos, pero por los condenados no podemos hacer nada. El Día de los Difuntos es un día de recuerdos por los que estuvieron con nosotros y de esperanza en la Misericordia de Dios, pero el Infierno no deja por eso de existir.
Saludos cordiales.
Gracias. Al leer su artículo de hoy, también aumenta hoy mi fe en Él.
In Domino
LA IGLESIA LLAMA PURGATORIO A ESTA PURIFICACIÓN FINAL DE LOS ELEGIDOS QUE ES COMPLETAMENTE DISTINTA UN CASTIGO
La palabra PURGATORIO, trae a la mente de muchos algo así como un lugar de tormentos, una sala de espera donde los que ya están salvados, pero no son totalmente buenos, esperan su hora de entrar al cielo, y mientras tanto sufren toda clase de padecimientos, PERO ESOS PLANTEAMIENTOS SON ABSURDOS, porque el purgatorio no es un castigo sino un estado de espera. NO ES UNA CONDENA, PERO QUIENES EN ÉL SE ENCUENTRAN NO PUEDEN HACER NADA POR SI MISMOS, Y EN CAMBIO TODOS LOS CRISTIANOS CATÖLICOS ROMANOS QUE AÚN VIVAMOS EN LA TIERRA: SI.
COMO NO ES UN LUGAR, SINO UN ESTADO TRANSITORIO DE PURIFICACIÓN, como una característica de “LA COMUNION DE LOS SANTOS” (que recordamos en el credo) NOSOTROS, CON ORACIONES Y SACRIFICIO: SI PODEMOS AYUDAR A LOS DIFUNTOS A OBTENERLES DICHA PURIFICACION, mediante vincular específicamente para ello: Eucaristías que recibamos, participando nosotros en las misas haciéndolo a nombre y representación de ellos, recitando grupalmente: el rosario, coronillas de la misericordia, participando en su nombre y representación en Adoraciones al Santísimo (todo lo anterior inclusive hasta a través de la Televisión que es válido para quienes por circunstancias especificas no podamos para ello desplazarnos a los templos).así mismo por cada vez que leamos la Biblia durante por lo menos media hora, ASÍ MISMO ENCAUSÁNDOLES indulgencias plenarias y jubileos obtenidos por nosotros que CONTINUAMENTE EN CASOS ESPECIALES CONCEDE LA IGLESIA; y también ofreciendo por ellos perdón total en nuestro corazón a los que nos ofendieron u ofenden. Cuando ofrezcamos indulgencias obtenidas por conducto nuestro para que ellas sean aplicables a determinado ser querido, agreguemos en nuestra oración que si ya está en el cielo, se aplique al mas necesitado entre todos los demás seres queridos que estén esperando nuestra ayuda.
LA FE DE NUESTRA IGLESIA CATOLICA ENTIENDE POR PURGATORIO, EL ESTADO O CONDICIÓN TEMPORAL EN QUE QUIENES HAN SUFRIDO LA MUERTE PUEDEN ENCONTRARSE SOMETIDOS A PURIFICACIÓN, situación debida a que a ESE momento NO se hallen en estado de gracia SANTIFICANTE que se refleja por perdón completo recibido de Dios, y que permite después del juicio particular acceder directamente al cielo por encontrarse perfectamente limpios hasta de la mas simple impureza.
LAS PENAS DEL PURGATORIO
Para quien se encuentra en ese estado, SU SUFRIMIENTO, y que cada quien conoce y sabe que es muy grande, consiste en estar (así sea como lo es: temporalmente) sin gozar de la totalidad de dicha que tienen los ángeles y los ya justificados: de gozar la plenitud trinitaria de Dios. Su inmensa tristeza es llevada con paciencia porque dentro del “JUICIO PARTICULAR” ya conoce y ha hecho suya la justicia que implica la necesidad de ser poseedor de una pureza absoluta para entrar en la alegría completa del cielo.
¿POR QUÉ SE SUFRE EN EL PURGATORIO?
En el purgatorio se sufre por dos razones:
a) Se siente un gran dolor de uno verse defectuoso, manchado, no perfecto.
b) Allí se ama a Dios con un amor inmenso, lo que más se desea es unirse cuanto antes a El, pero uno se da cuenta de que aún por pequeñas manchas e imperfecciones no puede hacerlo todavía. Esta angustia, este sufrimiento es grandísimo, sin embargo al estar en ese estado transitorio, se está alegre porque se sabe que es seguro que se podrá entrar al cielo, aun cuando así mismo se sabe impuro, manchado necesitados de purificación. Por eso allí uno se alegra de sufrir para hacerse digno de Dios y del cielo.
Allí se tiene un amor ardiente a Dios, no siente el sacrificio, más aún, lo desea porque sabe que es un medio necesario para unirse al Amado.
Debemos dar gracias a Dios por este último regalo que es el final para poder entrar al cielo. El purgatorio es la última mirada de amor de Dios hacia un ser humano que va a su encuentro.
Nada manchado, así la mancha sea mínima. Por eso mismo muchos requieren y necesitan la etapa de purgatorio.
Dios ha querido que todos nos ayudemos unos a otros en el camino al cielo. Todos los seres que estén en etapa de purgatorio ya vimos que pueden ser ayudados apresurando su purificación, mediante nuestras oraciones, acciones, eucaristías y meritos que específicamente destinemos y/ó ofrezcamos para ello.
Quien tu llamas Francisco y yo llamo el Santo Padre, JAMAS HA PENSADO EN CAMBIAR EL DECALOGO. Mar bien dediquémonos a pararle bolas a lo que en los comentarios de este blog, nos exponen PALAS ATENEA y PG.
NESTOR
Sin FE no hay resurrección SINO CONDENACION DIRECTA…
Y PARA TODOS
Dios no condena a nadie al infierno. Al infierno van los autocondenados por haber desechado todas las misericordias CONCEDIDAS A ELLOS POR DIOS EN TODAS LAS DISTINTAS FORMAS POSIBLES, porque haber obrado así es pecado contra el Espíritu Santo, que es imperdonable.
Me refresca la mirada. Es así...nomás !
Mi justo vivirá por la fe, pero si vuelve atrás no pondré más en él mi complacencia.
.
¿Uno muere y automáticamente va derechito a la "casa" del Padre?
pues vaya regalazo, esta nueva "fe" y "religión".
En esta vida, te pegas la "gran vida", comes, bebes, ..disfrutas de todo lo habido y por haber, y si haces algo malo, Dios es misericordioso y automáticamente te perdona pues comprende tus "debilidades".
(lo de pecado, era cosa de los curas de antes, para meter miedo, igual que lo del infierno, condenación, purgatorio, demonio, ...era cosa de la antigua casta sacerdotal de la Iglesia, que con esas paparruchas, tenía atemorizado al pueblo y de paso les sacaba la pasta gansa, son supercherías de viejas, que ahora ya prácticamente ningún cura ni fraile las predica.)
El muerto, tachán...tachán..a la casa del Padre...
¡Y no veas que "casa"¡ un hotel de un lujazo impresionante,..donde estaremos gozando, del abrazo del Padre..
En cuanto al los vivos, como dice el refrán "el muerto a hoyo, (o al crematorio, mejor aún) y el vivo al bollo".
Y comer a beber, a robar a fornicar, ..a hacer lo que nos da la gana
que despues nos espera un gozo todavía mayor, en el hotel del Padre.
A ver quien es el majo que no se apunta...
Aunque un sacerdote me indicó que aparece una sola vez.
En la creencia del Purgatorio estoy más con los ortodoxos.
Y esto, en cuestiones de escatología, tanto como en otras del saber teológico.
Es cierto que algunos funerales se han convertido casi en "canonizaciones"; "celebramos que nuestro hermano difunto "x" ya ha resucitado y participa de la gloria" se oye decir al presbíterio celebrante; entonces, ¿para que rezar por él? El tendría que interceder por nosotros, ¿no?
Lo triste es que los sacerdotes en esto no tengan un mínimo de ideas claras, cuando dirigen la comunidad. Pero también es cierto que eso no les ocurre a todos.
Aunque un sacerdote me indicó que una vez. Muy poco me parece.
Estoy más en sintonía con los ortodoxos sobre este tema.
Dios no condena a nadie al infierno. "
FAlSO!
'…40Respondiendo el Rey, les dirá: ``En verdad os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos hermanos míos, aun a los más pequeños, a mí lo hicisteis. 41Entonces dirá también a los de su izquierda: ``Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno que ha sido preparado para el diablo y sus ángeles. 42``Porque tuve hambre, y no me disteis de comer, tuve sed, y no me disteis de beber;'
San Mateo; 25, 40-42.
'30Por tanto, habiendo pasado por alto los tiempos de ignorancia, Dios declara ahora a todos los hombres, en todas partes, que se arrepientan, 31porque El ha establecido un día en el cual JUZGARÁ al mundo en justicia, por medio de un Hombre a quien ha designado, habiendo presentado pruebas a todos los hombres al resucitarle de entre los muertos.…'
Hechos; 17, 30-31.
A lo que se llega por NEGAR que DIOS es JUEZ por lo tanto JUZGA con AUTORIDAD y PODER.
Le recomiendo este 'post' de Néstor Martínez: infocatolica.com/blog/praeclara.php/1609210513-title
Lo que dentro de este blog que nos ocupa, escribo, ES PORQUE SOY UN MODELO 32 Y POR LO TANTO MAS EN EL MAS ALLA QUE EN EL ACA, y escribo en este blog, PORQUE SE QUE LE ESTOY AYUDANDO AL MUY AMADO SACERDOTE QUE LO ENCAUSA Y SE QUE A EL LE VA A SERVIR EN SUS PREDICAS. Yo soy un laico común y corriente que en mis 85 años de vida y 61 de matrimonio, hace ocho meses perdí a mi esposa y me afané por conocer y poder explicarle a mis hijos y nietos, claramente lo de la otra vida y creo que lo he logrado. NO SOY TEOLOGO NI HE ESTUDIADO ABSOLUTAMENTE NADA DE TEOLOGIA pero miren:
“EL PAPA BENEDICTO XVI DESDE SU PONTIFICADO PIDIÓ EVANGELIZAR SOBRE LA REALIDAD DE LA MUERTE Y LA VIDA ETERNA PARA QUE LA VERDAD CRISTIANA NO SE MEZCLE CON "MITOLOGÍAS DE VARIOS GÉNEROS”.
LA EXISTENCIA DEL INFIERNO TAMBIÉN ES UN DOGMA DE FE, O SEA QUE DE NINGUNA MANERA PUEDE NEGARSE. El demonio ha tratado de hacerle decir a los distintos Papas, especialmente los dos últimos Benedicto XVI y Francisco, cosas que no han dicho nunca, desde que el infierno no existe, hasta que era tan sólo una metáfora. “SIN EMBARGO, QUE NOS QUEDE MUY CLARO QUE EL INFIERNO EXISTE Y ES DOCTRINA DE LA IGLESIA QUE NO CAMBIARÁ NI HOY NI NUNCA. en otras palabras, no es posible ser católico y a la vez negar el infierno.”
EXACTAMENTE MAS QUE UN LUGAR ES UNA SITUACIÓN DEFINITIVAMENTE ETERNA. Equivocadamente se tomo como lugar fundamentándose en el “descendió a los infiernos” frase del SÍMBOLO DE LOS APOSTOLES al referirse a que Jesucito después de muerto y antes de su resurrección estuvo con los fallecidos antes de la venida del Mesías. Para la cultura israelita infierno, Hades, Seol, Geena, no era un castigo sino un lugar estado de espera, que desapareció´ terminó por la presencia del MESIAS, que precisamente es JESUCRISTO.
Dios no nos manda al infierno. .Dios es un Dios de amor. Tanto ama al hombre que cuando lo creó le regaló la LIBERTAD, es decir que los seres humanos, podemos decidir por nosotros mismos lo que hacemos durante nuestra vida y por lo tanto nuestro destino final. Entonces quienes van al infierno es porque así lo decidieron. Tuvieron durante toda su vida y hasta el último instante antes de su muerte, la oportunidad de buscar el PERDON de Dios y decidieron no hacerlo.
VAN AL INFIERNO los que mueren en pecado mortal sin estar arrepentidos. Es decir las personas que no quisieron acoger el amor misericordioso mediante el perdón de Dios en la confesión. Mientras vivimos en la tierra todo ese tiempo es tiempo de la Misericordia Divina. Dios nos perdona todas nuestras faltas -hasta las más graves cometidas contra El- si nos arrepentimos, nos confesamos y recibamos la absolución. ESTAMOS EN TIEMPO DE MISERICORDIA, MIENTRAS ESTAMOS AQUÍ.
EL INFIERNO es un estado permanente en que los pecadores sufren estar definitivamente separados PARA SIEMPRE de Dios, Esto significa sufrir muchísimo y no poder ser felices nunca VIÉNDOSE PLENAMENTE CONCIENTES que estuvo en sus manos poder salvarse pero decidieron no hacerlo y ya no hay remedio alguno. Es un sitio de fuego, pero fuego distinto al que conocemos en la tierra, pues no destruye ni se extingue y por ningún motivo se atenúa, sino que es eterno y sin tregua, y por siempre, que se conserva y que penetra todo, horrores que no son para que pensemos ¡que Dios es malo! sino para darnos cuenta del horror que produce el pecado. Es un sitio de fuego, pero es un fuego distinto al que conocemos en la tierra, pues afectará nuestra alma y nuestro cuerpo, pero no nos destruirá. Es un fuego que no se extingue, ni extingue, sino que es eterno, sin descanso, sin tregua, sin fin ... para siempre ... funciona como la sal: e conservando y que penetrando todo.
El infierno es una posibilidad debido a que Dios nos hizo libres para amarlo o para rechazarlo. DIOS NO CONDENA A NADIE AL INFIERNO. NADIE, NI LA IGLESIA NI EL PAPA, ESTÁN EN LA CAPACIDAD DE AFIRMAR QUE ALGUIEN SE HA CONDENADO.
LOS HORRORES DEL INFIERNO NO SON PARA QUE PENSEMOS QUÉ DIOS ES MALO. SINO PARA DARNOS CUENTA DEL HORROR DEL PECADO. La más horrenda de las penas del Infierno es la pérdida definitiva y para siempre del fin para el cual hemos sido creados los seres humanos: la posesión y el gozo de Dios, viéndolo “cara a cara” Otro de los tormentos del Infierno es el sentido de eternidad..
1. El purgatorio:
Una noche, cuenta la santa, su Ángel de la Guarda le pidió que lo siguiera y de repente se vio en un lugar lleno de fuego y de almas sufrientes. Ellas estaban orando fervientemente por sí mismas, “pero no era válido, solamente nosotras podemos ayudarlas”, señaló Santa Faustina.
Ella preguntó a las almas lo que más las hacía sufrir y le contestaron que era el sentirse abandonadas por Dios. Luego vio a la Virgen María que visitaba a las almas del purgatorio, quienes la llamaban “Estrella del Mar”. Entonces su Ángel Guardián le pidió que regresaran y al salir de aquella prisión de sufrimiento, escuchó la voz del Señor que le dijo: “Mi Misericordia no quiere esto, pero lo pide mi Justicia”.
2. El infierno:
"Fui llevada por un Ángel al abismo del infierno. Es un sitio de gran tormento. ¡Cuán terriblemente grande y, extenso es! Las clases de torturas que vi: La primera es la privación de Dios; la segunda es el perpetuo remordimiento de conciencia; la tercera es que la condición de uno nunca cambiará; la cuarta es el fuego que penetra en el alma sin destruirla -un sufrimiento terrible, ya que es puramente fuego espiritual,-prendido por la ira de Dios”, describió la santa.
Asimismo, señaló que la quinta tortura es una oscuridad continua con un terrible olor sofocante y que a pesar de la oscuridad, las almas de los condenados se ven entre ellos.
“La sexta es la compañía constante de Satanás; la séptima es una angustia horrible, odio a Dios, palabras indecentes y blasfemia. Estos son los tormentos que sufren los condenados, pero no es el fin de los sufrimientos. Existen tormentos especiales destinados para almas en particular. Estos son los tormentos de los sentidos. Cada alma pasa por sufrimientos terribles e indescriptibles, relacionado con el tipo de pecado que ha cometido”.
Por otro lado indicó que hay cavernas y fosas de tortura donde cada forma de agonía difiere de la otra. “Yo hubiera fallecido a cada vista de las torturas – explicó Santa Faustina - si la Omnipotencia de Dios no me hubiera sostenido. Estoy escribiendo esto por orden de Dios, para que ninguna alma encuentre una excusa diciendo que no existe el infierno, o que nadie ha estado ahí y por lo tanto, nadie puede describirlo".
Prueba a decirle eso a cualquier cura, monja o frailes modernistas:
te dirán que son imaginaciones y temores de nuestro subconsciente, que lo de Santa Faustina Kowalska son revelaciones privadas, ..que nadie está obligado a creer en ellas...que hay que tener cuidado, porque psicólogos y psiquiatras de prestigio han "demostrado", que algunas personas padecen alucinaciones y "visiones", tal vez debidas a trastornos mentales...y bla...bla...bla...
Y si apoyas estas citas con la Biblia, donde se habla del infierno y la justicia divina te dirán que bueno, que algunos pasajes de la Biblia, son alegóricos, simbólicos, ..que lo importante no es la letra, ni lo que dice...sino lo que a cada persona le dice..que tal vez el traductor ..."quiso decir"..pero en realidad son "géneros literarios"...maneras de hablar de aquella época...superadas por Jesucristo, que ya ganó el cielo para todos....y bla...bla....bla...bla...
Con razón decía Jesucristo "no deis lo sano a los perros, ni arrojeis vuestras perlas a los puercos, no sea que se las pisoteen y revolviéndose os destrocen".
En la Misa a la que asistí el pasado 2 de Noviembre, el Sacerdote no hablaba de Purgatorio sino de "proceso".
Hay miedo de llamar las cosas por su nombre, utilizan un lenguaje diluido en el caldo del modernismo.
Bendiciones.
-Al morir como si nos pusieran un espejo ante los ojos, vemos nuestra sociedad, mentras somos atráidos irresistiblemente como partículas de hierro por un imán, por el AMOR DE DIOS.
-Al vernos sucios deseamos limpiarnos cuanto antes de toda suciedad para agradar plenamente a Dios, santidad infinita. El alma en esta situación busca su purificación o Purgatorio.
-Si éste no existiera HABRÍA QUE CREARLO pues lo NECESITAMOS TODOS.
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