Católicos en paises islámicos: ¿estar por estar?
Es una pregunta que me hago muchas veces. Si tiene sentido la presencia cristiana en países islámicos y en caso afirmativo, qué sentido.
Parto de las últimas palabras del maestro en el evangelio: “id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
y enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado”. Es decir, que con el evangelio en la mano, que hay que leerse enterito, y añadiendo el decreto conciliar “Ad gentes” que lo explica de forma convincente: “La misión, pues, de la Iglesia se realiza mediante la actividad por la cual, obediente al mandato de Cristo y movida por la caridad del Espíritu Santo, se hace plena y actualmente presente a todos los hombres y pueblos para conducirlos a la fe, la libertad y a la paz de Cristo por el ejemplo de la vida y de la predicación, por los sacramentos y demás medios de la gracia, de forma que se les descubra el camino libre y seguro para la plena participación del misterio de Cristo”, estamos entre no creyentes para que crean en Cristo, se bauticen y entren a formar parte de la Iglesia.
Entiendo que uno no puede ir por la vida con el crucifijo en la mano así, a lo bruto, sin más. Eso lo entiende un servidor y lo entiende la Iglesia, que en el mismo decreto “Ad gentes” pone como primer cauce de evangelización el testimonio de vida de cada uno de los files y de toda la comunidad.
No cabe duda de que acudir a tierras de misión ad gentes lleva a un primer trabajo, esencial, de testimonio de vida, caridad con todos, cercanía fraterna. Pero eso es solo el primer trabajo. Porque el mismo decreto “Ad gentes” afirma a continuación que “se requiere, además, el ministerio de la palabra, para que llegue a todos el Evangelio”. Es decir, testimonio de vida y anuncio explícito del evangelio a los no creyentes para que se conviertan.
Creo que en la misión ad gentes nos puede estar pasando lo que en otras formas de pastoral del pasado. Seguro que lo recuerdan: hicimos campeonatos de fútbol, teatro, cine fórum, rondallas, excursiones… pero no sé si además de eso fuimos capaces de anunciar el evangelio de forma explícita. No es sencillo. Es verdad que quedó gente que descubrió al sacerdote como alguien majete, pero eso se queda muy corto.
En el caso del islam es especialmente complejo el asunto. Lo de la caridad se puede y se debe hacer; el estar, siempre. Otro problema es el anuncio. Porque anunciar el evangelio de forma explícita a un musulmán supone jugar con pena de muerte para el predicador y para el posible converso. Así que caridad siempre y conversiones nunca. Para anunciar el evangelio expresamente hay que ser un Francisco de Asís y plantarse en jarras delante de quien sea. Era Francisco de Asís.
Y si a esta realidad sumamos las nuevas teologías según las cuales no tiene sentido anunciar el evangelio porque cada cual ya tiene su religion y su fe y todos nos encontraremos en el cielo, pues entonces la cosa se complica.
Al final uno acaba recordando la ya famosa frase: si hay que estar se está, pero estar por estar… Simples dudas que le surgen a uno.
20 comentarios
Pero es que pasa lo mismo con los judíos (porque son hermanos en la fe), todos los demás cristianos (los protestantes por ecumenismo, los ortodoxos porque son verdaderas iglesias particulares y por tanto son también vía de salvación)... Con los animistas, porque hay que respetar la cultura indígena y no colonizarla con valores occidentales. En la India no hay que hacer proselitismo, por el integrismo hindú... Me pregunto: ¿se puede evangelizar a alguien?
Digo más la verdad, incluso cuando la menospreciamos, ella, se hace la encontradiza.
Otra cosa es cuando pretendemos querer conocer la verdad para especular con ella.
La verdad, por sí sola, llega y se aposenta en cada cual en la medida que, cada cual, está llamado y por ende puede soportar la responsabilidad de su significado.
A la gran mayoría de mártires no los conocemos, eran gentes humildes, surgían del mismo pueblo, al que con su forma de asumir la vida llamaban su atención y porqué no decirlo, la envidia de su felicidad: "¡Miradles cómo se aman!".
Quizá a nosotros nos falta algo de eso. Recuerdo aquellas películas "de romanos" en las que arrojaban a los cristianos a los leones y estos cantaban , eso si en inglés, y no en latín. No es que se pregone la necesidad de ser mártir, sólo basta con ser consecuente con lo que dices ser y creer hasta el final, quien está en posesión de la Verdad de Cristo no está equivocado y ha de manifestarla frente al error y la mentira de las demás religiones que está muy bien respetar y conocer pero si alguien está equivocado es necesario ayudarle a encontrar la Verdad . Y esto es Evangelizar, aunque alguno se pregunte ¿quién le pone el cascabel al gato?, ¿podré yo?. Él está contigo y con eso nos debe bastar para perder el miedo y que Cristo hable por nosotros. Nadie ha dicho que el ser verdadero cristiano sea fácil.
Hoy día el problema de la traducción ya no existe, pero ciertamente hay muchas culturas que no escuchan el Evangelio en palabras que puedan comprender. Para algunos es el idioma de la caridad -allí tuvimos a la Madre Teresa- para otros es el idioma de los gestos -y como ejemplo, el Santo Padre- y para otros es el idioma de la Internet, en donde conocemos alguno que otro cura bloggero.
Pero con ciertos musulmanes, parece que estamos en un diálogo de sordos. Al menos, con las facciones más radicales que ni siquiera son verdaderos musulmanes. Con los auténticos en general nos llevamos muy bien.
Tratando de responder la pregunta del artículo, yo diría que mientras el Espíritu Santo no conceda el don de lenguas para hacernos entender con los que matan cristianos, sería más correcto salir. No dije fácil, dije correcto (Cf Mt 10,14). Quizás incluso eso es lo que pide el Espíritu Santo: darles su espacio, concederles su lugar, hasta que puedan abrir los ojos y los oídos a la Gracia. No lo sé. Lo único que me parece, es que la predicación "tradicional" del Evangelio no está llegando a donde quisiéramos. Habría que encontrar otro modo.
O hay reciprocidad o hay equidad o en Occidente frente al Islam, o nos estamos equivocando muy muy seriamente, entre otras cosas porque el Islam también se acabará imponiendo en los países "cristianos".
Buen artículo y muy bien el declararse abierto a la duda. Yo también lo estoy, pero quiero coincidir con Inmaculada y esperar que sean germen fecundo de nuevas conversiones y que ayuden a robustecer el tronco del árbol de Cristo.
Merecen todo nuestro apoyo y defensa.
Yo tengo mis dudas sobre la verdad de la frase de Tertuliano de "que la sangre de los mártires es semilla de cristianos" , pues en el Norte de Africa, Turquía etc , otrora patria de grandes santos y padres de la Iglesia, ya no quedan casi ninguno. El Islam es absolutamente intolerante, por mucho que a algunos políticos ( por ir contra el catolicismo), como Obama y Zapatero, se les llene la boca de la tolerancia que hubo en la Córdoba musulmana con los cristianos ( ¡que se lo pregunten a los numerosos mártires de Córdoba!).
De todas formas el mayor enemigo hoy de los cristianos en el mundo musulmán no es el Islam sino EEUU. Su invasión de Irak y el montaje de la rebelión suní en Siria está eliminando en 20 años a los 4 millones de cristianos que allí había y que habían soportado 1400 años de Islam. Los cristianos en esos paises ya no son sólo "politeistas asociadores" , como dice Mahoma, sino además ememigos políticos . como la "quinta columna de EEUU en ellos". La intervención en Libia no ha afectado mucho a los cristianos allí pues casi no los había pero ha destruido Libia.
Del ateo Mexico, en la época del PRI, se decía "¡pobre Mejico, tan lejos de Dios y tan cerca de EEUU!". Eso se puede decir de los cristianos en el mundo musulmán "favorecidos" por las intervenciones de EEUU.
El Evangelio para ellos (a diferencia de los paganos) no es una novedad sino una deformación, corregida por su Corán, que recupera la genuina fe abrahamnica (según ellos), con todas sus aberraciones (ojo por ojo, poligamia, uso de la violencia...)
Y es prácticamente imposible, por su fanatismo, convencerles de que -como dijo y bien Juan Pablo II en su libro "Cruzando el umbral de la esperanza"- la religión musulmana supone una profunda regresión no sólo frente a la religión cristiana sino también frente a lo mejor del judaísmo.
Pero al ser la última en aparecer, se cree con derecho a ser la definitiva, la más perfecta.
Hay un error que deberíamos superar, pensar, que EEUU, RU, Francia, son países cristianos; son países judeomasones, y los países de mayoría protestante también. Y por tanto, judíos y masones, sionistas todos, vigilan que los pocos católicos que hay evangelicen algo, pues los seguidores de Mahoma son muy útiles, se les puede llevar por donde a las sociedades secretas le interesa , sino, fígense en el llamado estado islámico que quiere hacer un califato. ¿A quien atacan? pues a otros mahometanos, pero para defender a Israel.
Don Jorge, me indigna que usted tenga dudas sobre el compromiso de los nuevos teólogos de las nuevas teologías en países de persecución. Vamos, yo los veo en China, en Irán, en Irak y otros países predicando sus "valores", la tolerancia, el diálogo, las prácticas homosexuales, la liberación de la mujer para que aborte y decida, etcétera. Usted sabe cuántos han dado su vida, vamos, decenas de miles, no paran de salir "voluntarios" (ya no se llaman evangelizadores, eso es muy preconciliar) que se apuntaron en Religión Digital para ir a estos países.
Permítaseme otra pregunta previa: ¿cómo se hace musulmán un musulmán?
Porque nosotros si sabemos cómo se hace cristiano un católico: a través de una ceremonia específica (nosotros le llamamos: recepción de un sacramento, el bautizo).
Un acto – que por motivos, espero sean conocidos por los estimados amigos comentaristas – se efectúa cuando uno es un bebé.
El punto es: no es lo mismo estar bautizado que estar evangelizado.
Y da pena y sonrojo decirlo, pero - al menos en mi país - la inmensa mayoría de católicos está bautizada, no así, evangelizada.
Y al no estar evangelizada, no vuelve vida su fe. La misma ha sido convertida en la celebración alegre, festiva, simpática, folklórica - pero totalmente intrascendente y aséptica – de una serie de ritos, costumbres y tradiciones. De este modo, nuestro catolicismo tiene poca o ninguna significación e impacto en la estructuración y marcha de la vida social de nuestros países.
Y entonces, somos miles, millones de “católicos” que “estamos por estar”.
Una última pregunta a modo de conclusión (y soy el primero que confieso no tener una respuesta objetiva, clara y contundente): ¿quiénes de nosotros podríamos afirmar: “por mi testimonio, por mis actitudes y por mi palabra, x persona se ha vuelto cristiana” (católica)?
Porque se está asesinando a más de 100.000 cristianos al año en todo el mundo por razón de su Fe, y evidentemente no son todos sacerdotes y misioneros sino que la mayoría son creyentes "de a pie":
infocatolica.com/?t=noticia&cod=22312
Hoy mismo se publica: "El Ejército Islámico decapita a 21 coptos para lanzar «un mensaje con sangre para el pueblo de la cruz»"
infocatolica.com/?t=noticia&cod=23279
Al mismo tiempo que los cristianos dan testimonio con su vida, los musulmanes dan testimonio de cómo tratan a los cristianos que dan testimonio con su vida.
Un saludo.
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