Usted perdone, señor Montoya
Mire, es que he escuchado en la Cope las palabras del arzobispo de Mérida-Badajoz, Monseñor Santiago García Aracil, y claro, mi corazón se ha constreñido. He sido durísimo con usted. Y eso noooo es bueeeeeno, no. Tenemos que ser comediiiiidos, no vaya a ser que algunos nos llamen fanáticos intolerantes y talibanes fascistoides.
¿Sabe lo que me pasó? Pues que creí que eso de poner la otra mejilla es apropiado sólo cuando la ofensa es contra uno mismo y ahora resulta que no. Que si usted blasfema contra mi Dios, si representa a la madre de mi Señor en cueros en actitud pornográfica, si sugiere un Cristo con corona de espinas masturbándose….. yo tengo que reaccionar en plan beatífico, modosito y comedido.
Sí, ya sé que Cristo mismo se indignó tanto ante los que profanaban la casa de su Padre que los echó a latigazos. Ya sé que habrá cristianos que piensen que muchísimo peor que aquello es hacer pornografía con Cristo, su Madre, los santos y los ángeles. Pero NO, señores, NO. No debemos escandalizarnos. No debemos osar hacer una utilización política de cosas así, porque, ya lo sabemos, el hecho de que un gobierno financie la blasfemia no puede suponer, ni muchísimo menos, que los cristianos deban pensar si dar su voto al partido que sostiene dicho gobierno. Que ya ha dicho Monseñor Aracil que le preocupa esa utilización política de lo ocurrido. Vamos, faltaría más. ¿Se imagina usted, señor Montoya, que algún católico incauto decida no votar a quien ha prologado su obra? Vamos, eso sería una intolerable intromisión de la religión en la política.
Acabo ya, señor Montoya. Pero le voy a hacer una confesión. Así, entre usted y yo, y ahora que nadie nos lee, le diré que he decidido dirigirme a usted por una razón: si me dirijo a Monseñor Aracil, me temo que habría caído en aquello que, según San Pablo, no se puede caer. Si no sabe a qué me refiero, léase Hechos 23,3-5.
Así que nada, Montoya, pelillos a la mar. Tó er mundo é bueno. Y los critianos, má
Luis Fernando Pérez Bustamante
27 comentarios
El PP está en su perfecto derecho de denunciar el mal uso de los fondos públicos que haga el Gobierno de Extremadura.
Vamos, vamos.... qué poco post-conciliares sois algunos.
Señor, dame paciencia.... me hace mucha falta.
Vamos, es que me parto.... ja ja ja ja.
ja ja ja ja.... qué risa tiene todo esto.... jo jo jo jo.
Entonces Pablo le dijo: ¡Dios te golpeará a ti, pared blanqueada! ¿Estás tú sentado para juzgarme conforme a la ley, y quebrantando la ley me mandas golpear?
Los que estaban presentes dijeron: ¿Al sumo sacerdote de Dios injurias?
Pablo dijo: No sabía, hermanos, que era el sumo sacerdote; pues escrito está: No maldecirás a un príncipe de tu pueblo.
Supongo que también se aplica a los arzobispos de actitud beatífica ante la peor de las blasfemias.
ji ji ji
jo jo jo jo
Claro que, ahora que lo pienso, Montoya debe de estar asustadísimo ante la que le va a caer el viernes por la noche en La Linterna de la Iglesia. Restán y sus demoledores tertulianos le van a hacer un auto de fe en vivo y en directo.
Yendo a lo fundamental, creo que el problema subyacente es que la Iglesia tiene que separarse urgentemente del Estado, porque si no tenemos estas cosas: que no se es más contundente por miedo a perder las ayudas.
Una cosa es poner la mejilla de uno mismo y, otra, muy diferente...poner a escarnio público la figura de Jesús con semejantes infamias.
El Arzobispo, lo que tendría que hacer, es convocar en su catedral un acto de desagravio.
Así de claro.
Ah..y prohibir a los políticos que han cobijado dicha blasfemia, su asistencia a las procesiones.
¡Ya está bien!
La mejilla, entre otras cosas, antes de ponerla...hay que pedir razones de las ofensas recibidas.
El Señor, cuando fue abofeteado, se volvió y preguntó: "por qué me pegas".
Ya está bien de tanto merengue. Y el Prelado de Badajoz parece que tiene abundancia de este dulce.
Mucho me temo que los hechos evidencian lo que realmente le importa al señor García Aracil, hay que rezar más por él que por el sujeto apellidado Montoya.
Vamos, es que sería la leche.
Entonces por lo visto no le daba por reirse.
Hermenegildo, no me seas facha.
¿De dónde se saca usted que ejercer el derecho a la libertad de expresión...política es de fachas? Quizá su crítica es de bolcheviques. Ya cansan ustedes con este cuento infame de 'lo facha', sobre todo cuando los 'no fachas' son históricamente responsables del exterminio de 100.000.000 de seres humanos. Esa es la repugnante izquierda que antes mataba curas y ahora se mofa de lo católico, protegido por la ley penal. Por cierto, últimamente me gusta más cómo 'rezan' los musulmames cuando alguien blasfema contra el Islam. ¿También son fachas? Y ahora proceda a censurar mi mensaje.
No tenga usted ninguna duda de que según el razonamiento de la izquierda, yo también soy facha.
¿Orar por Monmierda? ¡Me voy a estar acordando de su familia todo el año!
De lo que se trata es de aplicar las leyes, o de endurecerlas, o de crearlas, si es que esto no es constitutivo de delito. Algo podremos hacer que no sea dar publicidad a las fotos y poner verde a los obispos.
El fotomatón ese debe estar supercontento de como le va la vida: mata varios pájaros de un tiro.
Es que ya pasó algo parecido con la obra "Me cago en ..." hace un par de años. Al final los únicos condenados fueron dos jóvenes que boicotearon la representación teatral. Que no digo que hicieran bien, claro. Pero que hayan sido los únicos que hayan pagado por lo ocurrido, manda huevos.
Esto es un vendaval anticatólico; y darle la espalda no va a evitar que nos lleve el viento.
Que insulten a su p... madre, si son tan iconoclastas.
En www.hazteoir.org hay ya un modelo de carta de protesta dirigido a Ibarra, a Francisco Muñoz y al autor de las fotos blasfemas, pornográficas y ofensivas.
Sólo hay que poner los datos y darle a "enviar".
Por favor, hagámoslo todos.
2) Exigir una retractación inmediata y pública, con arrepentimiento público y petición de perdón, del autor de esta blasfemia, de los que le han financiado y ayudado. Aplicarles una penitencia.
3) excomulgar inmediata y publicamente a todas las personas que han colaborado con la blasfemia si no se produce dicha retractación.
4) exhortar a todo el pueblo católico a no colaborar ni por acción ni por dejación con las actividades propósitos o negocios, de la índole que sea, de todas las personas implicadas en esta blasfemia pública. (Sí, incluyendo el asquerosito sufragio cuatrienal).
5) Rezar ante Dios para que perdone a las almas condenadas al infierno de los blasfemos públicos.
Esto es lo que hubieran hecho los obi...
Claro, que aquellos obispos no son los de ahora.
Si se atrevieran por una vez a ser verdaderos profetas, como Samuel, como Elías, como Isaías, descubrirían que les insultan muchos menos de los que pensaban, y de que les respetan muchos más de los que esperaban.
Es imposible que los ateos respeten a la Iglesia católica si los prelados y fieles de la misma no la respetan.
Dios también nos preguntará el día del Juicio qué hacíamos mientras a Él le volvían a insultar y a burlarse ante nuestros ojos.
Pero, Nachet, no creo que se merezcan los obispos tu comentario. En realidad, pueden haber querido, en su día, que pasara lo más desapercibido posible, precisamente para que la publicidad, y por tanto el daño sean mínimos. Ahora que todo el mundo lo sabe, es distinto. Yo insistiría mucho en el punto 4. Y tampoco tendría inconveniente, si la ley no nos protege, en utilizar ese mechero que dije antes, si sirviera de algo, pero no son lienzos, sino fotos: habría que cargarse los negativos. ¿No se puede conseguir que la ley le obligue a destruirlos?
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